17.6.10

PROPIEDAD PATRIA

El Comandante Chávez ensaya el concepto Propiedad Patria, superior al concepto Propiedad Social, lo engloba y le imprime sentimiento, lo hace más humano, más entendible, lo acerca al alma de los pueblos.

La Propiedad Patria debe ser, así lo indica su nombre, Propiedad de toda la Patria. No hay lugar a dudas ni a interpretaciones, lo que resta por dilucidar es hasta dónde se extiende el concepto, qué abarca, quién administra.

Es importante discutir la idea:

Es imprescindible para el Socialismo la Propiedad Patria de los medios de producción, y esa propiedad sólo tendrá esa dimensión si es administrada por el Estado. Sólo entrelazada con esa Propiedad se podrá construir la Conciencia de Patria que requiere el Socialismo, es decir, rescatar el sentimiento de pertenencia a ella.

Por otra parte, hay que recalcar que el concepto de Patria no es un concepto que está por encima de las clases sociales. Así, la patria del capitalista es su capital, su ganancia: si ve alguna dificultad emigra sin botar una lágrima, para él es lo mismo instalarse en Caracas, en Miami, Bogotá, Pekín o en Atenas, dependiendo de los dictados de su capital. El capitalista no duda en aliarse con el señor de las moscas, si esa alianza le garantiza seguir explotando a los pueblos del mundo.

El capitalista, con la misma falta de escrúpulo, le roba el trabajo a un obrero gringo, a un trabajador chino o brasileño. Con la misma desfachatez, contamina el Golfo de México o el Mar del Norte, deforesta la amazonía o los bosques africanos, contamina el Mar Caribe o el de Japón. Si hay ganancia todo es válido. Su patria es la chequera, el depósito bancario.

El concepto de Patria que pertenece a los pueblos desposeídos es diferente al del capitalismo. El sentido de solidaridad es vivo, hay arraigo con el territorio, pero más fuerte es el arraigo con el humano. La solidaridad de los pueblos humildes ha resistido todos los embates de la manipulación capitalista, el egoísmo lucha por instalarse en el alma de los pueblos, pero sólo consigue hacerlo a medias, no ha podido desterrar del corazón popular la fraternidad.

Fue así que entendió el llamado del Libertador para liberar el continente, supo con facilidad que La Patria es la América ”.

Los humildes incorporan a su concepto de Patria, la idea de Humanidad, acompañan el sentimiento de Martí cuando nos dice La Patria es la Humanidad", o la conducta del Che, cuando tiembla de indignación ante una injusticia cometida en cualquier lugar del mundo.

Es así, hoy el concepto de Patria Socialista abarca a toda la Humanidad , sabe que el destino de su terruño está ligado al resto del planeta, que no hay soluciones aisladas. El Libertador amaba a Caracas, pero sabía que la Patria llegaba hasta los confines de su mundo.

El concepto de Propiedad Patria Socialista, debe entenderse como propiedad de la Patria de los siempre desposeídos.

¡Viva la Patria de los Pobres de la Tierra , Viva Chávez!

16.6.10

CONTROL DE LA CLASE OBRERA

Los obreros se constituyen en Clase Obrera cuando superan su interés inmediato y consiguen unirlo concientemente con el interés estratégico: la liberación de la sociedad toda, la superación del capitalismo, la construcción del Socialismo. Es una respuesta de toda la clase, no de un fragmento de ella.
El Control de la Clase Obrera se diferencia y se enfrenta al Control Obrero en que surge y se ancla en una visión social de los problemas, se toma conciencia de que la solución no está en la fábrica sino en la transformación de la sociedad, en la revolución, y esa es su prioridad. En este instante la Clase Obrera hasta ahora comparsa del capitalismo se eleva para ser la rectora del cambio, de la Revolución. Se hace clase revolucionaria.
Aquí vale la pena recordar las palabras de Georg Lukács, cuando dice: …“que una clase está llamada a dominar significa que desde sus intereses de clase, desde su consciencia de clase, es posible organizar la totalidad de la sociedad de acuerdo a esos intereses. La cuestión que decide en última instancia acerca de toda lucha de clases es: ¿Qué clase dispone, en el momento dado de esa capacidad, de esa consciencia de clase?”
El Control de la Clase Obrera significa, entonces, la solución de los problemas de los obreros dentro de la visión más general y más profunda de la solución de los problemas de la sociedad. Es decir, la sustitución del capitalismo.
Así, la Clase Obrera constituida en clase rectora del cambio y de la construcción del Socialismo, toma control del proceso revolucionario a través del Estado que la representa. Y con su ejemplo, con su acción, conduce el proceso.
Su principal tarea es su transformación en Clase Obrera Conciente, entiende la primerísima importancia de la defensa de la Revolución, del Gobierno Revolucionario, del Comandante Chávez. Entiende que es la oportunidad, de en la práctica, unir sus intereses particulares con los intereses generales de toda la sociedad.
El ejemplo del Control de la Clase Obrera lo encontramos en la Costa Oriental del Lago, allí los obreros tomaron conciencia de su papel histórico. Partiendo de la visión general, de sociedad, se encontraron y asumieron su compromiso de clase, se hicieron internacionalistas, solidarios, defensores del proceso revolucionario.
Se entrelazan en un solo esfuerzo con los directivos de PDVSA, a través de los Comités de Gestión, los gerentes dejan de ser enemigos de la clase y se transforman, como decía Gramsci, en intelectuales orgánicos.
Y, lo que es más importante, consiguieron en el Trabajo Colectivo Voluntario el instrumento concientizador para ellos y para la sociedad, la manera para llevar a toda la sociedad la conciencia proletaria.
En Resumen, el camino hacia el Socialismo pasa por el Control de la Clase Obrera. Sólo con él podremos superar la mezquindad de las propuestas pequeño burguesas, y podrán elevarse los obreros a Clase Obrera, a Clase Revolucionaria.
¡Sin Chávez no hay Socialismo!

15.6.10

¿CONTROL OBRERO, O CONTROL DE LA CLASE OBRERA?

Para dar respuestas al asunto es necesario revisar la historia de la participación obrera en la Revolución Bolivariana.
En las primeras etapas de la Revolución los obreros lo hicieron sin conciencia de clase, es decir, no tenían metas propias, proyecto propio, no se habían encontrado con su papel histórico. Sólo ahora los obreros encontrados con su ideología pueden esbozar un proyecto nacional.
Esto trae como consecuencia una feroz lucha por la conducción de los obreros, por sus propuestas en relación al Socialismo. Allí, se perfilan dos corrientes principales: El Control Obrero, y el Control de la Clase Obrera.
Para estudiarlos son imprescindibles algunas precisiones teóricas. Es necesaria una definición de Socialismo, sólo conociendo la meta podremos evaluar las propuestas. Veamos.
Socialismo es en esencia la integración social, la recomposición de la sociedad que fue fragmentada por el capitalismo. Es el rescate del sentido de pertenencia a la sociedad, de la Conciencia del Deber Social. Todas las acciones revolucionarias tienen ese fin, o mejor, una acción sólo será revolucionaria si tiene ese fin.
En contraste, la esencia del capitalismo es la desintegración de la sociedad, la pérdida del sentido social, la elevación del individualismo, la guerra de todos contra todos. Todas las acciones capitalistas tienen ese fin, sobre ese egoísmo se sostiene.
Es en la Revolución Cubana, con el Che y Fidel, que se llega a la completa comprensión del Salto Revolucionario. Oigamos a Fidel en el célebre discurso en la Universidad de La Habana en 2005:
“Hubo quienes creyeron que con métodos capitalistas iban a construir el socialismo. Es uno de los grandes errores históricos. No quiero hablar de eso, no quiero teorizar; pero tengo infinidad de ejemplos de que no se dio pie con bola en muchas cosas que se hicieron, quienes se suponían teóricos, que se habían empanfletado hasta el tuétano de los huesos en los libros de Marx, Engels, Lenin y todos los demás.
Fue por eso que dije aquella palabra de que uno de nuestros mayores errores al principio, y muchas veces a lo largo de la Revolución, fue creer que alguien sabía cómo se construía el socialismo.”
Es claro, Fidel se deslindó de los dogmáticos y de los reformistas, y ese rompimiento le permitió alcanzar escalones superiores en el pensamiento revolucionario, romper con las coyundas de la Unión Soviética de Stalin, y desligarse de las fórmulas capitalistas que ofrecían atajos para resolver los problemas sociales.
Fidel encierra toda la idea en un párrafo histórico:
“Y nosotros no debemos traducir el dinero o la riqueza en conciencia. Nosotros debemos traducir la conciencia en riqueza. Estimular a un hombre para que cumpla más con su deber es adquirir conciencia con dinero. Darle a un hombre más riquezas colectivamente porque cumple su deber y produce más y crea más para la sociedad, es convertir la conciencia en riqueza.”
Sólo desde este piso teórico estaremos en condiciones de estudiar el dilema del Control Obrero, o de Control de la Clase Obrera.
¡Sin Chávez no hay Socialismo!

14.6.10

LA NUEVA MORAL SOCIALISTA

La Moral Socialista es indispensable para vencer el asedio capitalista y para crear al Socialismo. Ahora bien ¿cómo imbuir al pueblo de esa nueva moral, cómo educarlo y derrotar la moral, la ética del capitalismo?
La base material de la Moral Socialista es la hegemonía de la Propiedad Social de los Medios de Producción administrados por el Estado, sólo esta forma de propiedad puede soportarla.
El proceso ha avanzado en la fundación de esta hegemonía material: las nacionalizaciones de tierras, de empresas, el control de cambio, todos son pasos importantes en este camino. Ahora debemos completar el cuadro con la consolidación espiritual, es decir, el establecimiento de la nueva moral, de la nueva cultura.
La generalización, la Socialización de la Moral Socialista , es una batalla frontal contra la moral egoísta con siglos de colonización del alma colectiva. Dependerá de muchos factores, algunos, y no en orden de importancia, serían:
Uno, el ejemplo de los dirigentes. Los dirigentes lo son, principalmente, porque son creadores de opinión, paradigmas morales, ejemplos a imitar. De allí que su conducta tiene un papel importantísimo en la educación de la masa. Lo que ellos hagan será visto como guía.
Lo mismo vale para las instituciones: lo que ellas avalen, como se comporten, influirá en el espíritu de las masas.
Dos, los medios, televisión, prensa, cine, etc., son poderosísimos instrumentos de educación, llegan a rincones del alma colectiva que difícilmente son tocados por otras vías. Tienen la capacidad de crear ficciones que sustituyen a la realidad. Los medios tienen tanto poder que no pueden ser frente de batalla dejado a la improvisación, al descuido, la Revolución debe usarlos con mucho rigor.
Lo anterior es muy importante para la formación de la nueva moral, pero por sobre todo está la educación del hombre. Ésta sólo se consigue haciendo, construyendo, transformando su entorno. Aquí cobra importancia fundamental la movilización alrededor de objetivos políticos altruistas.
De la masa así movilizada, en la calle, juntos, alegres, brota desde lo hondo un espíritu de fraternidad inexplorado en situaciones normales. El hombre y la masa reconocen su verdadera esencia amorosa, se abren vías para el encuentro, los desconocidos se hermanan, se olvidan rencillas pequeñas, se esfuman rencores sin sentido. Se prefiguran las relaciones de la nueva sociedad. La movilización es una incomparable escuela.
El Trabajo Colectivo Voluntario es el otro pilar de la formación de la nueva moral, del nuevo espíritu, de la nueva relación entre los humanos.
Es el Trabajo Colectivo Voluntario el ejercicio de la nueva relación entre los humanos, allí la labor común es terreno para la realización plena de la individualidad. Es el reencuentro del hombre con el fruto de su trabajo, es la superación de la enajenación. El producto del trabajo colectivo voluntario es utilidad social y no mercancía.
La labor de elevar la Moral Socialista es de vida o muerte, sólo con ella podremos enfrentar con éxito los formidables embates del capitalismo.
¡Sin Chávez no hay Socialismo!

13.6.10

LA JUSTICIA REVOLUCIONARIA

La justicia es un asunto vital para una Revolución, ella es reflejo y a la vez se refleja en toda la estructura revolucionaria y social, es parte esencial de su espiritualidad.

Debe dar seguridad de ser superior a la justicia burguesa, de defender a la sociedad y al individuo, siempre protegiendo el humanismo rescatado.

Así debe ser desde el inicio de la gesta revolucionaria. Recordemos los partidos que ejercieron el fusilamiento a la ligera, esos desaparecieron como revolucionarios, fueron a inflar las filas del enemigo.

En contraste, la Revolución Cubana triunfante debe su éxito al humanismo, al respeto al ser humano que demostró desde su nacimiento. Es representativo el rescate al combatiente del Granma que cayó al Golfo de México, y el trato a los prisioneros en la Sierra Maestra.

Esa revolución ha sido muy dura en su defensa, pero no ha trasgredido nunca, aun cuando ha considerado fusilar, el respeto por el humanismo que construye. Por eso es ejemplo y guía para el mundo.

Otra actitud fue la de la cuarta república, recordemos la orden de rómulo: disparen primero averigüen después”. Allí está resumida la doctrina del oligarca, no hay presunción de inocencia, no hay juicio. Basta parecer que daña los intereses de la burguesía para ser condenado y aplicada la pena máxima.

Ahora gran revuelo ha causado el aparecimiento de unos contenedores que los medios oligarcas denuncian como podridos. De ellos es comprensible, deforman la realidad, se apoyan en nuestros errores para crear tolvaneras, alharacas, ponen a correr rumores, falsifican. Aprovechan todo para favorecer su causa infame: truncar a la Revolución. Condenaron a diestra y siniestra, pidieron guillotina, se portaron como manda rómulo, dispararon y ni se importaron por averiguar.

Lo que es incomprensible es la jauría de revolucionarios que se precipitó a juzgar el hecho y acusar a destajo, a pedir pena máxima. Contribuyeron con la matriz de opinión de los oligarcas. Algunos voceros destacados perdieron la mesura, fueron más audaces y se lanzan a llamarlos: forajidos sin moral alguna”, los acusan de forajidos, y sentencian que los contenedores fueron desviados y ocultados con el objeto de robar su contenido, o sabotear la política de soberanía alimentaria.

Todos dispararon primero y todavía no averiguan.

Ya eso es una actitud contrarrevolucionaria, romulera, muy dañina. Pero lo peor es el precedente de justicia oligarca, de irresponsabilidad para con los involucrados en el hecho, y con la necesaria construcción de otra justicia, dura, implacable, pero humana, sensata.

El asunto no pasaría de una escaramuza con unos atorados de inquisición, y si no contribuyera con la oscura estrategia enemiga, no merecería respuesta sino fuese porque lesiona en lo profundo algo que esta Revolución ha ido construyendo: la magnanimidad, el humanismo que guía su accionar.

Uno de los pilares de esta Revolución, de cualquier Revolución verdadera, es que la gente se sienta protegida por ella, se sienta querida, respetada, que esté segura de estar amparada por otra justicia, durísima pero humana.

¡Sin Chávez no hay Socialismo!

¡Derrotar las maniobras oligarcas, y los espasmos inquisidores!

12.6.10

¡LUIS PULIDO ES INOCENTE!

El linchamiento que los medios y opinadores enemigos, y asombrosamente también algunos nuestros, hacen de Luis Pulido, llama a reflexión. No se puede entender lo que eso significa sin ubicarlo en un paisaje ideológico. Veamos
La Revolución Bolivariana llega a una fase de definición, la lucha de clases se agudiza y alcanza niveles definitivos, la batalla por la hegemonía de la sociedad se torna muy cruenta, se agrupan los bandos, se desentierran las hachas de la guerra infame.
Ahora las fuerzas tienden a agruparse en dos bandos principales: El capitalismo, enfrentado a la posibilidad Socialista. Ya no hay lugar para "terceras vías", el choque se ha profundizado de tal manera que determina todas las acciones, no hay forma de escaparse de este dilema, es el principal signo de la crisis.
Es en esta situación donde ocurre el episodio de los contenedores con alimentos vencidos (que no es lo mismo que podridos). Es en esas circunstancias que se detiene a Luis Pulido para averiguaciones. Inmediatamente la gavilla mediática enfila sus ponzoñas en contra de PDVSA, PDVAL, y sus cuadros. La manipulación mediática intenta instalar en la opinión pública tres aberraciones. Veamos.
Una, Pulido es condenado, es culpable de antemano: se le califica de forajido, sobre él se vierte el odio de la canalla. Se comete una violación de sus derechos más elementales.
Dos, en estas condiciones, quien defienda a Pulido, quien pida siquiera el beneficio de la duda, será acusado de encubrir la corrupción. De esta manera privan a Pulido del derecho a la defensa.
Tres, todo lo que tocó, todo lo que tuvo contacto con él, también es "culpable". Así, aparecen en la prensa listas que son sentencias irresponsables, la lepra de la sospecha infundada se riega como excremento. Afinan así la agresión por mampuesto hacia objetivos superiores: el linchamiento de cuadros, debilitar a la Revolución.
Pero, surge una pregunta ¿Cuál debe ser la actitud de los Revolucionarios, de los Socialistas?
Existe un hecho que debe ser investigado, esas investigaciones deben ir al fondo, y dictaminar a los culpables, sólo después se les debe condenar. Esto no es otra cosa que el principio de justicia que señala: "todos somos inocentes hasta que se demuestre lo contrario".
No hacerlo así, violar este fundamento jurídico, abre camino a una conducta que haría mucho daño a la Revolución, se instalaría la peligrosa "cacería de brujas", sentaríamos el precedente del "dispara primero y averigua después", minaríamos el humanismo revolucionario. Y no olvidemos que el Socialismo es, en esencia, humanismo.
La Revolución Bolivariana ha dado muestras de una alta magnanimidad, de un alto humanismo, esta es su principal fortaleza. Siempre en sus actuaciones ha preservado el respeto al humano. La mayor enseñanza que una Revolución puede dar a su pueblo, es la de resolver sus asuntos, sus diferencias con rigor, pero siempre preservando el respeto por el ser humano. Esa es la única garantía de su permanencia.
¡Sin Chávez no hay Socialismo!
¡Luis Pulido es inocente hasta que se demuestre lo contrario!

11.6.10

¿POR QUÉ PASA LO QUE PASA?

El análisis político es la ciencia ¿o el arte? de identificar lo que hay tras las apariencias, los móviles de los móviles o, dicho más directamente, averiguar ¿por qué pasa lo que pasa?
La primera consideración del análisis es que no hay pieza suelta, nada sucede aislado, todo tiene relación con todo.
Así, la basura en un barrio, aunque parezca lejano, tiene relación con las decisiones que se tomen en Wall Street. Las disposiciones del gobierno japonés tienen relación con la gestión del alcalde de Achaguas. Las noticias de primera plana de los periódicos escuálidos tienen relación con las futuras agresiones de los gringos.
La segunda consideración, es que en el comportamiento oligarca un alto porcentaje de lo que parece ser…no es. Por ejemplo, fedecámaras nos dice que no conspira, esa es la imagen que ellos quieren que tengamos, lo que parezca. Entonces podemos deducir que detrás de esa imagen, fedecamaras está conspirando.
La tercera consideración, es que la historia es un valioso elemento de análisis. Cuando los gringos dicen que un gobierno es terrorista, tiene armas escondidas, es narco, no respeta los derechos humanos, etc., entonces por la historia de los gringos podemos deducir que detrás de esas acusaciones hay la intención de invasión.
Si Fidel dice algo, por su historia, es necesario creerle.
Pensar que los escuálidos si pierden unas elecciones respetarán los resultados, no cantarán fraude, eso no es compatible con su historia, siempre están preparados para desconocer los resultados, transitar otras vías.
La cuarta consideración es la coherencia de los hechos. Si Santos, el de Colombia, dice que buscará diálogo con Chávez, y que se portará bien con sus vecinos, eso es lo que aparenta, pero no es coherente con las bases militares gringas, las declaraciones de los voceros del comando sur gringo, su comportamiento anterior, entonces estamos obligados a ir más allá de esa apariencia falsa.
Quinta consideración, y más importante: la base ideológica de los actores. Estudiando esta base ideológica, ubicando a los protagonistas en su corriente ideológica, podremos deducir su comportamiento.
Podemos afirmar que “primero Justicia”, por su ideología capitalista, siempre, y más allá de las apariencias, estará a favor de los poseedores y contra el pueblo humilde.
Se puede esperar del ppt, de henri falcon, por su política pequeño burguesa oportunista, a pesar de todo el disimulo, cualquier brinco, siempre a la derecha, siempre pragmático, siempre buscando indulgencia de los amos del valle.
El paisaje político venezolano está muy enrarecido, es necesario echar mano de toda nuestra capacidad de análisis. Las apariencias pueden confundirnos, es necesario ahondar, hacer ejercicio de buceo, ir más allá de la superficie.
Todos los analistas de fino olfato lo dicen, estamos en medio de la preparación de una embestida del imperio, de un golpe, hay una conspiración en marcha. En estas condiciones es necesario afinar el arte del análisis, desentrañar los engaños enemigos. No hay lugar para respuestas apresuradas, para reaccionar a las apariencias.
¡Sin Chávez no hay Socialismo!

10.6.10

LA ESTRATEGIA ENEMIGA

El objetivo del capitalismo internacional es conocido: terminar con Chávez, aplastar la Esperanza Socialista.

¿Cuáles son las estrategias que utilizan?

El estudio del asunto es de vital importancia, conociendo sus mañas podremos derrotarlos.

El centro de su estrategia es arrancar a Chávez del corazón popular
, usan todos sus instrumentos de manipulación con este fin, se cuelan por las grietas que dejan nuestros errores. Veamos.

El periódico “El Universal“ le obsequia la primera pagina del día lunes 7 de junio a una “entrevista“ que muestra gran parte de su estrategia. Recordemos que este periódico es vocero oficial oligarca, lo que allí se publique, y más en primera página, es instrucción para sus conmilitones.

La entrevista es a una líder de Petare. Estudiemos el mensaje.

Lo primero es que la líder se presenta como Chavista, pero también es partidaria, trabaja con Ocaríz, de éste opina:

…“tiene disposición a trabajar, vamos a dejarlo, independientemente del color o del partido al que pertenece”.


El mensaje es peligrosísimo: aísla a la comunidad del resto de la sociedad, de esta manera puede ser simpatizante de Chávez y simultáneamente de sus enemigos. Puede querer favorecer al barrio, pero ayuda al sistema capitalista que lo condena a la miseria. En resumen, es una posición que se confina al mezquino entorno.

Más adelante suelta otro misil, dice: …“yo me he mantenido alejada de la parte política; he trabajado en beneficio de las comunidades”.

Promueven la idea de que la política es algo separado de la suerte de la comunidad, del barrio, que lo parcial es separado de lo nacional. Siendo así, se podría votar por un candidato a diputado oligarca, antiChávez, y seguir siendo revolucionario, chavista.

Los explotadores siempre convocan a los expoliados para que libren las batallas por sus intereses. Los oligarcas manipulan a los humildes para que se conviertan en sus propios verdugos.

Ahora desarrollan esta fina estrategia: manipular a los humildes para que sean ellos mismos los que entierren sus esperanzas de redención. La maniobra no es nueva, ya la usaron contra el Libertador.

¿Cómo enfrentarla?

Debemos detectar los errores nuestros que contribuyen a la fragmentación, a que los humildes se conviertan en sus propios verdugos.


Es necesario impulsar la Conciencia del Deber Social, la idea de que lo nacional, lo general, se entrelaza con lo particular, el barrio, la comuna, el consejo comunal. Que no puede haber solución en el barrio sin solución en lo nacional, que sin Revolución no habrá redención de los humildes, que los enemigos de los humildes en lo nacional, los que saquean las riquezas sociales, son sus enemigos en el barrio.

Sembrar hondo en el alma popular que el apoyo a Chávez no es un asunto ligero, que se puede dar una vez sí y otra no, de acuerdo a como amanezcamos… ¡No! Se trata de aferrarse con pasión a la última y única oportunidad de construir un mundo viable y feliz. Que sin Chávez todo se va por el barranco del desamparo.

¡Sin Chávez no hay Esperanza!

9.6.10

LA CONCIENCIA NO ES ESPONTÁNEA

La relación entre la conciencia y la existencia es objeto de discusión entre los revolucionarios. El asunto es muy importante, de la respuesta depende el éxito de una Revolución. Estudiemos.

Lo primero que encontramos es que la relación entre existencia y conciencia no es directa, significa que una existencia miserable no determina una conciencia revolucionaria de manera automática.

Lo segundo, observamos que la conciencia, la ideología de las clases dominantes, migra hacia las clases explotadas. Es así que las conseguimos colonizadas por la ética, la moral de la dominación. Dentro de la clase social explotada, las relaciones entre los individuos son regidas por los patrones de conducta de la dominación.

Esta capacidad de impregnar con su ideología, con su conciencia al resto de la sociedad, es lo que la hace dominante. Una clase social es hegemónica cuando sus valores, sus creencias, impregnan y conducen a toda la sociedad. En el caso del capitalismo lo dominante es el egoísmo, la fragmentación, el individualismo, la visión confinada al mezquino entorno, el beneficio inmediato, la falta de sentido de sociedad.

Esa es la principal fuerza de la clase dominante, del sistema capitalista, sobre esa fuerza se sostiene. Sucede así la paradoja de víctimas defendiendo a sus verdugos, sosteniendo el sistema que llena de miseria a la Humanidad.

Entonces, la Revolución es el cambio radical de esa conciencia, de esa ética, de esa ideología, en resumen, el cambio de la cultura de sumisión-dominación, por la conciencia, la cultura de la liberación. No es posible una Revolución, no es pensable la liberación del humano sin ese cambio de conciencia, de ética, de ideología, de cultura.

Podemos medir el avance, el éxito de una Revolución, midiendo el avance en esta sustitución cultural, todas las acciones de los revolucionarios deben tener como objetivo central esa sustitución cultural.

Esta sustitución no es espontánea, así como no es espontánea la dominación.
Los capitalistas mantienen un costosísimo aparato de manipulación para sostener su dominio sobre el alma social. La televisión, radio, prensa, las universidades, la escuela, la iglesia, la cultura, todo al servicio de la colonización de la conciencia, de instalarla, perpetuarla, reproducir la cultura de la dominación-sumisión.

Saben que es en el espíritu donde se sostiene la dominación, y que es allí donde ocurre la principal batalla por la hegemonía social.

La Revolución debe construir mecanismos de desintoxicación espiritual que hagan frente a la manipulación capitalista.

El ejemplo de la vanguardia es uno fundamental. La épica de la vanguardia abre caminos hacia lo profundo del alma social. La austeridad, la fraternidad, la disciplina, la lealtad, la entrega a la causa social, tienen su principal cátedra en la conducta de la vanguardia. Estos valores son fundamento de la batalla contra el imperio.

Los próceres pudieron dirigir a la sociedad en la Revolución de la Independencia, porque se hicieron leyenda soportada en sus valores, conducta, entrega a la hora del combate contra el imperio.

¡Sin Chávez no hay Socialismo!

8.6.10

ROMPER EL ASEDIO FORTALECIENDO LA MORAL

La Revolución Bolivariana es víctima de un inteligente asedio imperial. No es convencional, se fundamenta más en nuestras debilidades que en la fortaleza del enemigo oligarca.
Ellos tienen mucho tiempo aprovechando y estimulando nuestros errores: minan nuestras bases espirituales, impiden su consolidación. Veamos.
La fragmentación social es la base cultural del capitalismo, allí se asienta una moral, una ética que lo defiende, impide el avance del Socialismo.
El capitalismo se caracteriza por altos grados de agresividad individual, es lo que los clásicos llaman la “guerra de todos contra todos” o “el hombre lobo del hombre”.
Esta violencia intrasocial está en todas partes, y hace que el signo de los tiempos sea la división, la falta de fraternidad, el egoísmo, el individualismo en todas las manifestaciones de la vida social.
Todas las relaciones humanas, en mayor o menor grado, están signadas por esta violencia. Se manifiesta en el tráfico de las ciudades, en el metro, en los barrios, en la clase obrera, en la vida de los partidos políticos y en la familia.
En resumen, la agresividad, la violencia, la autodestrucción de las instituciones sociales, surgen con asombrosa facilidad. Ante algún problema, una adversidad, una incomodidad, la reacción inmediata, inconciente, es la agresión, destruir la fuente del obstáculo, sea este un humano o una cosa. Este comportamiento es cotidiano.
La cultura hegemónica está al servicio de la desunión: estimula, soporta al egoísmo que ya tiene su base económica en la propiedad nosocial. La desunión es la más importante línea de defensa del capitalismo, se sitúa en los pilares del alma colectiva, actúa de manera espontánea, automática.
Basta recordar que la superación del capitalismo será, tiene que ser, una tarea colectiva de UNIÓN de los humanos, y que la construcción del Socialismo, esencialmente, es la creación de esa fraternidad para darnos cuenta de las barreras formidables que son la ética y la cultura egoísta del capitalismo.
Es labor de la vanguardia, de los dirigentes revolucionarios, educar al pueblo humilde en la nueva Cultura de la Fraternidad Socialista. Sin ella no será posible la UNIÓN , y sin unión no puede haber Revolución.
Si frente a una adversidad, una falla, una equivocación, ejercemos la lógica capitalista, si inmediatamente empuñamos la espada del verdugo e invocamos cortes de cabeza, nos comportamos como el destripador, estaremos inevitablemente estableciendo relaciones de canibalismo entre nosotros, cacerías de brujas, debilitando la fraternidad que es debilitar el hecho revolucionario en sus raíces.
Una de las más importantes características de esta Revolución es su magnanimidad: aquí no se ha perseguido a nadie, no hay guillotinas, ni físicas ni morales, al contrario, quizá se ha perdonado en exceso. Esa es una de las fortalezas de la Revolución: ha cuidado de sus hijos, a todos, hasta los malos hijos.
Así debe ser, firmes con el enemigo, con los saboteos, con la corrupción, pero evitar los linchamientos ligeros, el canibalismo alimentado por la lógica y la moral capitalistas.
¡Sin Chávez no hay Socialismo!

7.6.10

¿SON NECESARIOS LOS RICOS?

Cuando una Revolución llega a etapas de definición, de lo profundo de la sociedad afloran las cadenas psíquicas más fuertes. En época de ruptura se desvelan los mecanismos más sutiles de la dominación.
Los mecanismos de dominación más importantes son los espirituales, los psíquicos. Estos se expresan en prejuicios, convicciones, creencias, refranes, frases hechas, dichos de la abuela, tradiciones, chistes, rumores, símbolos de poder. Todos desencadenan conductas sumisas.
Es así como se ancla en el alma de una sociedad la diferencia entre los estamentos sociales, la necesidad de ella, lo natural de su existencia. Se instala así en el alma de la sociedad la convicción de la necesidad de la clase dominante, de que sin ella no es posible que funcione la sociedad y, simultáneamente, se inocula en el espíritu social la incapacidad de los dominados para dirigir. Este dogma es el pilar maestro de la dominación.
Una de las tareas principalísimas de una Revolución es sustituir los mecanismos espirituales de dominación por los mecanismos liberadores, en otras palabras, una Revolución Cultural, un cambio de fe.
Una tarea fundamental consiste en instalar en el espíritu social, la idea de la capacidad de los desposeídos dominados para aprender a dirigir el Estado, la tolerancia con los errores que ese aprendizaje supone, y la valorización en este empeño de la capacidad de estudio, de la disciplina.
Todo el aparato del Estado Revolucionario debe estar al servicio de esta meta, las masas deben estar informadas de los pasos que se dan, involucrarse en ellos. Y deben entender que siempre serán mejores las soluciones socialistas, que las soluciones capitalistas, aunque en lo inmediato parezca lo contrario. Más valen los errores de los desposeídos en el camino a su redención, que los aciertos capitalistas en el empeño de esclavizarlos.
Hoy la Revolución Bolivariana está sometida a una ofensiva de la oligarquía: desabastecimiento, especulación, encarecimiento artificial del dólar. Son las manifestaciones materiales del ataque. Pero lo más importante de la batalla es la utilización de esta situación para reactivar la idea de que la Revolución, el pueblo humilde, son incapaces de dirigir, que es necesario llamar a los ricos, oligarcas, y llamarlos rápido, antes de que se acabe el país.
De allí que a la par de las respuestas económicas del gobierno, es necesario respuestas dirigidas al espíritu social. Demostrar que obtenemos triunfos que sólo una Revolución puede conseguir, porque sólo una Revolución rescata el amor del pueblo, su autoestima.
Que este Estado nuestro es mejor que cualquier otro Estado que hayamos conocido, porque es el único que está guiado por sentimientos de amor hacia el pueblo que es su origen, y no protege a los oligarcas en su intención de explotación y saqueo de la nación.
¡Los ricos no son necesarios! Ellos tienen capacidades y conocimientos para explotar, saquear, nunca para construir a favor de los humildes. La tarea del Socialismo es tarea de los humildes encontrados con el conocimiento universal y la teoría revolucionaria.
¡Sin Chávez no hay Socialismo!

6.6.10

¡SIN ESTADO NO HAY SOCIALISMO!

Las corrientes anarcoides dentro de la revolución coinciden con los capitalistas en la negación del Estado. Los primeros, por una visión pequeño burguesa de la Revolución. Los otros, por una necesidad de violar todo control.
Para los capitalistas el Estado debe proteger sus intereses y dejar libres sus manos para las tropelías necesarias a la acumulación del capital, razón central de su existencia. Lo requieren represivo contra los expoliados, y permisivo con el capital.
El caso de los anarcoides pequeños burgueses es distinto. Esa ideología, que es la de una clase que oscila entre los desposeídos y los poseedores, es estridente en la retórica contra el capitalismo, pero mojigata en la construcción del Socialismo. Se avergüenza de saberse incapaz del salto revolucionario, y esconde su ineptitud con proposiciones que aparentan radicalismo, cuando en realidad son medidas capitalistas en estuche de revolucionarismo destemplado.
En esta Revolución actúan los dos bandos antiEstado:
Los capitalistas quieren retomar la conducción del Estado para ponerlo a su servicio, reducirlo a su función policial, privatizarlo todo, desatender la función social.
Los anarcoides pequeños burgueses, so pretexto de destruir el Estado burgués, impulsan la fragmentación de la sociedad en partículas aisladas que sólo se importan por su entorno. Egoístas, impiden la integración, empañan la visión de sociedad, obstaculizan así la construcción del Estado Revolucionario, en definitiva, favorecen al capitalismo.
Al sabotear la consolidación del verdadero Estado Socialista, dejan a la Revolución inerme frente a los Estados oligarcas internacionales, frente a la oposición interna. Además, y muy importante, dejan a la sociedad sin conducción integradora. Contribuyen así a una gran debilidad de la Revolución que conduce a su defenestración.
El Socialismo es en esencia la integración de la sociedad, y esa nueva totalidad, esa integración de la Nueva Sociedad, no es posible sin un Estado Nacional que la administre, que la coordine, la planifique, la defienda.
Las dos tendencias antiEstado son contrarrevolucionarias, pero la anarcoide es muchísimo más peligrosa: se mimetiza, confunde, engaña, es más difícil de identificar y por tanto de combatir.
El combate a este taimado enemigo anarcoide hace necesario la elevación del nivel de formación teórica de la dirigencia y de la masa, la construcción de una poderosa Conciencia del Deber Social, del sentido de sociedad. Es necesario que abordemos los problemas desde la visión de la sociedad, que nos organicemos formando tejidos sociales que vayan desde lo capilar hasta lo nacional, y no en fragmentos disociantes.
Los obreros, antes de todo, deben rescatar su sentido de clase rectora de la sociedad, luchar por encima de todo por la liberación de la sociedad, que es la única manera de liberar a la clase obrera.
Sólo de esta manera podremos derrotar las posiciones que desde el interior de la Revolución únicamente buscan el beneficio individual, grupal, o de segmentos de la sociedad, quitándole así el contenido social a la batalla, y necesariamente se enfrentan al Estado Revolucionario, se apartan del proceso socialista, lesionan el liderazgo de Chávez.
¡Sin Chávez no hay Socialismo!

5.6.10

EL DEBER DE EQUIVOCARSE

La Revolución siempre es un proceso inédito que necesariamente supone errores. Esto es verdad para cualquier Revolución, pero si es un proceso pacífico entonces las posibilidades de error se multiplican.
En la Revolución el tratamiento del error, de la equivocación, es vital. De este trato depende el futuro del proceso. Veamos.
Existen conductas que traen consecuencias sistémicas, generales. Por ejemplo, el trato a los prisioneros en una guerra revolucionaria decide su rumbo: si hay atropello, las fuerzas enemigas lucharan con tesón, si hay buen trato, la tropa enemiga se desmoraliza, pierde razones para resistir.
De igual importancia es la relación de la Revolución con las equivocaciones. Expliquemos.
Se deben reconocer, evitarlas, diferenciarlas de la negligencia, el saboteo, y por sobre todo es vital la actitud de la Revolución frente a los responsables.
Si a las equivocaciones las sometemos al escarnio, entonces las consecuencias generales serán la reducción de la capacidad de riesgo, nadie querrá salir de la seguridad de la parálisis, nadie hará nada que no sea seguro. En otras palabras, el espíritu revolucionario, de cambio, se reducirá a cero, la Revolución se apagará en el refugio de la inercia.
El riesgo, esencia revolucionaria, se refugiará en la máxima del filósofo que decía: El único hombre que no se equivoca es el que nunca hace nada.
Si somos concientes de encontrarnos en una situación de alta peligrosidad, en medio de una guerra pacífica que cada día se intensifica, si entendemos que nos enfrentamos a un enemigo inteligente, con recursos, mañoso, entonces sabremos que el trato a las equivocaciones será vital para nuestro futuro.
¿Cómo tratar las equivocaciones?
El Comandante Chávez dictó cátedra cuando se refiere al hallazgo de los alimentos deteriorados de PDVAL. Aprendimos.
Lo primero es no ocultarlas, que la masa nuestra entienda que son parte del camino hacia el Socialismo. Eso nos educa a todos: aceptar las imperfecciones como parte del proceso, parte de la acción humana, nos evitará muchos extravíos.
Explicar las circunstancias donde ocurren, por ejemplo: en una emergencia, para enfrentar un ataque enemigo, tal como aprovechar la sequía para desestabilizar, entonces, la compra ¡urgente! de plantas eléctricas, aunque se aumente el margen normal de error, es la defensa a esa embestida.
No se puede permitir que el enemigo nos agreda y después venga a juzgar la calidad de nuestra defensa. Si eso permitimos, ellos tendrán el triunfo seguro: o ganan porque la arremetida fue exitosa, o ganan porque en las acciones de protección a su ataque perdemos oficiales valiosos, juzgados por su jauría mediática.
Establecer las causas, investigar las intenciones de la acción, penalizar lo que haya que penalizar, nunca someter al escarnio a nuestros oficiales de primera línea de combate, de operaciones riesgosas. Al contrario, debemos reconocer su labor, darle mérito a su entrega y a su compromiso por la Revolución.
Sólo así mantendremos alta la moral de combate en esta guerra pacífica, llena de celadas.
¡Sin Chávez no hay Socialismo!
¡Honor a los que corren riesgo por la Revolución !

4.6.10

LA PASIÓN REVOLUCIONARIA Y LA CAUTELA

La revolución reclama pasión, audacia, sólo así es posible romper con las costumbres que nos atan al pasado, fundar un nuevo mundo.
La turbulencia revolucionaria no admite cautela, ésta es propia de acomodados, de rebaños, nunca del rompimiento.
Pensemos en el Libertador, su vida fue un rompimiento: lo hace con la monarquía, aquello fue un salto hacia la incertidumbre de un mundo que sólo en la imaginación de los escogidos parecía posible… precisaba pasión. El Decreto de Liberación de Esclavos suponía una ruptura con su propia alma, una fractura honda en sus costumbres. El Decreto de Guerra a Muerte necesitaba pasión, no cautela.
La Revolución de Independencia fue un desbordamiento de vida, de pasión, un estallido del viejo mundo, y un irrumpir violentísimo del mundo de la independencia, surgió con el ímpetu de la lava volcánica.
Las leyes, las costumbres estallaron. En la confrontación surgió una nueva legalidad llevada de la mano y la audacia de la pasión revolucionaria. Los dos mundos no podían convivir, sus leyes, sus costumbres, su ética, eran antagónicas. ¿Cómo juzgar el Decreto de Guerra a Muerte con las leyes coloniales? ¿Cómo pedirle cuentas, por ejemplo, a Ricaurte por volar el polvorín de San Mateo, usando la legislación burocrática de la época? ¿Cómo él podía explicarle a un administrador formado en las costumbres de la monarquía, la pérdida “inútil” de tanto pertrecho?
Es que la Revolución tiene nuevas leyes que aún no están escritas, pero son indispensables para avanzar, ya se encargarán los juristas de poner orden en lo que la erupción volcánica ha creado. La guerra revolucionaria aclara el panorama: a nadie se le ocurriría pedirle cuenta al General Zuhkov por las bajas en la defensa de Stalingrado, o a Bolívar por las pérdidas en El Paso de Los Andes.
Es así, la guerra revolucionaria tiene sus leyes y contempla las bajas, eso está en los libros, son muchas las experiencias de la Guerra Revolucionaria.
Ahora bien, si la Revolución es pacífica muchas de sus leyes aún están por descubrir, por escribirse, muchas de las características de esta Guerra pacífica están por develarse, por identificar cómo son los combates, cuáles son las bajas, qué determina los triunfos.
Hoy la prensa oligarca se regodea con la detección de unos alimentos que se encontraban almacenados y requerirían tratamiento para ser consumidos, los publicitan como podridos. Es mentira. El hecho merece estudio por parte de los revolucionarios.
Primero, debemos colocarlo en el marco donde ocurre: La oligarquía ensayaba y aún ensaya un desabastecimiento contra la Revolución, es un arma propia de la “Guerra Pacífica Revolucionaria” ¿Cómo defendernos? La estrategia exigía pasión, no cautela: había que adquirir alimentos en tal cantidad que garantizara la alimentación, y un inventario que posibilitara resistir el embate oligarca.
La operación se hizo, se enfrentó al enemigo. En la batalla hubo bajas: esos containers son unas de ellas, así son las bajas de la nueva guerra, donde los soldados revolucionarios son bisoños, pero apasionados, cometen errores, pero resuelven la batalla. Honor a los que corren riesgos en la defensa de la Revolución.
¡Sin Chávez no hay Socialismo!

3.6.10

LA BATALLA DECISIVA

¿Cuál es la preocupación de las clases sociales en Venezuela?
Si revisamos las declaraciones y acciones de sus voceros tendremos una aproximación aceptable a las preocupaciones de las diversas clases sociales. Veamos.
Los oligarcas, en lo económico, se importan por el control de cambio y por las expropiaciones, rechazan estas medidas, les irrita cualquier control del Estado, así demuestran su ideología, sus verdaderas intenciones: un Estado permisivo, cuya única función sería protegerlos, y que mantenga abiertos los canales por donde fluya la renta petrolera directamente a sus bolsillos.
En lo político conspiran para truncar a la Revolución , para salir de Chávez, todos sus movimientos tienen esta meta.
Los oligarcas son una clase con sus objetivos claros: la hegemonía no tiene discusión, es el capitalismo. Y aquellos partidos y personalidades, que con vergüenza se les acercan, tienen que aceptar sus principios.
La pequeña burguesía, en todas sus variantes opositoras, no tiene proposición económica propia, clara, se pliega a las premisas burguesas. Su mayor actividad es en la política, allí pujan por ser voceros de los intereses capitalistas, ese es el centro de su lucha.
En el interior de la Revolución la lucha es fuerte y decisiva: se busca el camino del Socialismo. La discusión y la práctica han sido abundantes, de todo se ha dicho y de todo se ha hecho. Sin dudas se ha avanzado, y ahora que somos más maduros, conocemos más, los fracasos nos han enseñado, los aciertos nos han reforzado.
Tenemos el mérito de no haber perdido la posibilidad de seguir en el camino, de enmendar entuertos, no hemos castrado la posibilidad socialista.
Las posiciones se han despejado, los campos se han definido, la batalla decisiva sucede en el interior de la Clase Obrera. Allí se perfilan dos posiciones principales.
Una, que con su práctica y acción mantiene a la Clase Obrera sumergida en la lógica capitalista, no se percatan del cambio de los tiempos, de la oportunidad histórica de redención que significa la Revolución Bolivariana y el liderazgo del Comandante Chávez. Sus acciones se limitan a la negociación, más o menos exitosa, de su mercancía: su fuerza de trabajo.
Cuando se trata de “negociar” con el gobierno revolucionario, llegan a exigencias absurdas. Así construyen la paradoja de que los principales enemigos del proceso de redención de la clase obrera, del Socialismo…sean estos obreros. De esta manera el Sistema Capitalista no corre peligro, al contrario tiene garantizada su perpetuidad.
La otra posición obrera, es la que entiende que está destinada a dirigir con su ejemplo el gran cambio social que liberará a la Sociedad del capitalismo y traerá la redención de los obreros. Rompe con la lógica del capitalismo, construye una nueva forma de relación entre ellos, y de ellos con la sociedad. Trasciende el ámbito de la fábrica y adquiere visión universal. Sabe que la tarea de autotransformación de la Clase Obrera, zafarse de la lógica capitalista, es indispensable para la fundación de la nueva sociedad.
¡Sin Chávez no hay Socialismo!
¡Sin Socialismo no hay Patria!

2.6.10

LA CONCIENCIA NO ES ESPONTÁNEA

La relación entre la conciencia y la existencia es objeto de discusión entre los revolucionarios. El asunto es muy importante, de la respuesta depende el éxito de una Revolución. Estudiemos.
Lo primero que encontramos es que la relación entre existencia y conciencia no es directa, significa que una existencia miserable no determina una conciencia revolucionaria de manera automática.
Lo segundo, observamos que la conciencia, la ideología de las clases dominantes, migra hacia las clases explotadas. Es así que las conseguimos colonizadas por la ética, la moral de la dominación. Dentro de la clase social explotada, las relaciones entre los individuos son regidas por los patrones de conducta de la dominación.
Esta capacidad de impregnar con su ideología, con su conciencia al resto de la sociedad, es lo que la hace dominante. Una clase social es hegemónica cuando sus valores, sus creencias, impregnan y conducen a toda la sociedad. En el caso del capitalismo lo dominante es el egoísmo, la fragmentación, el individualismo, la visión confinada al mezquino entorno, el beneficio inmediato, la falta de sentido de sociedad.
Esa es la principal fuerza de la clase dominante, del sistema capitalista, sobre esa fuerza se sostiene. Sucede así la paradoja de víctimas defendiendo a sus verdugos, sosteniendo el sistema que llena de miseria a la Humanidad.
Entonces, la Revolución es el cambio radical de esa conciencia, de esa ética, de esa ideología, en resumen, el cambio de la cultura de sumisión-dominación, por la conciencia, la cultura de la liberación. No es posible una Revolución, no es pensable la liberación del humano sin ese cambio de conciencia, de ética, de ideología, de cultura.
Podemos medir el avance, el éxito de una Revolución, midiendo el avance en esta sustitución cultural, todas las acciones de los revolucionarios deben tener como objetivo central esa sustitución cultural.
Esta sustitución no es espontánea, así como no es espontánea la dominación. Los capitalistas mantienen un costosísimo aparato de manipulación para sostener su dominio sobre el alma social. La televisión, radio, prensa, las universidades, la escuela, la iglesia, la cultura, todo al servicio de la colonización de la conciencia, de instalarla, perpetuarla, reproducir la cultura de la dominación-sumisión.
Saben que es en el espíritu donde se sostiene la dominación, y que es allí donde ocurre la principal batalla por la hegemonía social.
La Revolución debe construir mecanismos de desintoxicación espiritual que hagan frente a la manipulación capitalista.
El ejemplo de la vanguardia es uno fundamental. La épica de la vanguardia abre caminos hacia lo profundo del alma social. La austeridad, la fraternidad, la disciplina, la lealtad, la entrega a la causa social, tienen su principal cátedra en la conducta de la vanguardia. Estos valores son fundamento de la batalla contra el imperio.
Los próceres pudieron dirigir a la sociedad en la Revolución de la Independencia, porque se hicieron leyenda soportada en sus valores, conducta, entrega a la hora del combate contra el imperio.
¡Sin Chávez no hay Socialismo!

1.6.10

TRABAJADORES DE LA POLAR … ¡ABUSAN DE VUESTRA CREDULIDAD!

Venezuela hoy es cátedra de la lucha de clases: aquí se pueden estudiar los feroces enfrentamientos de las clases poseedoras y las clases humildes que buscan los caminos de redención.
Lo que era teoría, lo que se veía sólo en los libros, se hizo realidad y es la mejor enseñanza.
Ahora, a la luz del presente, podemos comprender el pasado, analizar a la Revolución de la Independencia , entender cómo Boves reunió pueblo contra su propia liberación, razonar con más profundidad las palabras de Bolívar: “Pueblo, han abusado de vuestra credulidad”. Responder las preguntas: ¿Quién abusó? ¿Qué clases sociales? ¿Por medio de cuáles mecanismos consiguieron aislar al Libertador?
Hoy la realidad nos enseña y nos alerta. Veamos.
La Revolución avanza con su ritmo y velocidad propia. Unas veces el avance se da en lo económico, otras en lo político, lo social, lo ideológico. Es frecuente que algún flanco quede rezagado, y se note su falla, la Revolución lo atiende y lo nivela.
Así avanza esta Revolución y despierta el entusiasmo en pueblos del mundo, la ira de los oligarcas que olfatean los peligros verdaderos, y la incomprensión e ingratitud de izquierdistas agotados.
La batalla más importante de esta Revolución sucede dentro de la Clase Obrera , allí se enfrentan dos corrientes principales, del resultado de esa contienda dependerá de manera definitiva el destino de la Revolución.
La Revolución espera la consolidación de los obreros transformados en clase revolucionaria, esto es, encontrados con su ideología, sirviendo de ejemplo al resto de la sociedad, conduciéndola, ganando la batalla cultural.
La cultura capitalista que coloniza sectores de la clase obrera, hace su labor, consigue ponerlos al servicio de sus verdugos, a defender el capital. Asistimos así a la paradoja de obreros antisocialistas.
Es el caso de los obreros de la Polar, empresa de Lorenzo Mendoza, un burgués de abolengo, de familia rancia, ocupa puesto de honor en la lista Forbes de las mayores fortunas del mundo.
La Empresa Polar, una de las más importantes del país, se ha topado con un gobierno que le pone ciertos controles, eso fue detonante de una guerra contra el Estado, la lucha de clases quedó al descubierto: los oligarcas se enfrentan a la Revolución que les pone coto.
Pero ¡sorpresa! son los obreros de la Polar quienes dan la batalla por los oligarcas: el presidente del sindicato de esa empresa se transmutó en adalid del capitalismo. Los obreros defienden a sus verdugos, lesionan a la posibilidad socialista con la excusa de que defendiendo a la empresa protegen los intereses obreros. Declaran que sólo les importa su trabajo y el contrato colectivo, lo demás es basura…
Es una muestra de manipulación, colonización de conciencia, abuso de la credulidad de esos obreros. Es señal clara de una falla nuestra en la batalla ideológica. Es la misma batalla que perdió el Libertador. Debemos enfrentarla donde se origina, en la ideología, en la conciencia.
¡Sin Chávez no hay Socialismo!
¡San Pedro Alejandrino no se repetirá!

31.5.10

EL CONCEPTO PUEBLO-REVOLUCIÓN EN EL LIBERTADOR

Si estudiamos el concepto Pueblo-Revolución en el Libertador, encontraremos como rasgo principal que no es estático. Él creía, y eso subyace en su obra, que el pueblo se educa, aprende, a medida que la lucha por crear un nuevo mundo se desarrolla, y de ese aprendizaje debe depender la relación Pueblo-Revolución.
En el Manifiesto de Cartagena en 1812, expone El Libertador:
“¿Qué país del mundo, por morigerado y republicano que sea, podrá, en medio de las facciones intestinas y de una guerra exterior, regirse por un gobierno tan complicado y débil como el federal?.... Es preciso que el Gobierno se identifique, por decirlo así, al carácter de las circunstancias, de los tiempos y de los hombres que lo rodean. Si éstos son prósperos y serenos, él debe ser dulce y protector; pero si son calamitosos y turbulentos, él debe mostrarse terrible y armarse de una firmeza igual a los peligros, sin atender a leyes, ni constituciones, ínterin no se restablece la felicidad y la paz”.
Temprano desarrollaba su concepto de la relación Pueblo-Revolución adaptada a las circunstancias. En otras palabras, un profundo “sentido del momento histórico”.
En el Congreso de Angostura, 1819, precisa su concepto:
“Uncido el pueblo americano al triple yugo de la ignorancia, de la tiranía y del vicio, no hemos podido adquirir ni saber, ni poder, ni virtud. Discípulos de tan perniciosos maestros, las lecciones que hemos recibido, y los ejemplos que hemos estudiado, son los más destructores. Por el engaño se nos ha dominado más que por la fuerza; y por el vicio se nos ha degradado más bien que por la superstición. La esclavitud es la hija de las tinieblas; un pueblo ignorante es un instrumento ciego de su propia destrucción; la ambición, la intriga, abusan de la credulidad y de la inexperiencia de hombres ajenos de todo conocimiento político, económico o civil; adoptan como realidades las que son puras ilusiones; toman la licencia por la libertad, la traición por el patriotismo, la venganza por la justicia… La libertad, dice Rousseau, es un alimento suculento pero de difícil digestión. Nuestros débiles conciudadanos tendrán que enrobustecer su espíritu mucho antes que logren digerir el saludable nutritivo de la libertad”…
Después de Junín y Ayacucho, cuando ya la América era libre, entonces, Simón Bolívar nos alecciona... Y el 10 de febrero de 1825, en Lima, devuelve al Congreso del Perú los poderes dictatoriales que éste le había conferido el año anterior, cuando la existencia de la República estaba en juego.
En Santa Marta, 1830, se lamenta de un pueblo que, víctima de la ambición, la intriga y la inmadurez, lo derrotó, asesinó la esperanza.
La enseñanza es clara: la tarea de la Revolución es conducir al pueblo, sacarlo de las tinieblas, de la ignorancia, de la esclavitud. Si comete el error de “no identificarse, al carácter de las circunstancias, de los tiempos y de los hombres que lo rodean”, padecerá en medio de un pueblo abusado en su credulidad.
¡San Pedro Alejandrino no se repetirá!

30.5.10

OPERACIÓN NORIEGA

La operación está en marcha. Se trata de acusar a Chávez de lavado de dólares y juzgarlo en los Estados Unidos. El Comandante nos alerta cuando advierte que los gringos pueden estar preparando una orden de detención en su contra y señala a la juez Joan Lenard (la misma que condenó a los 5 Héroes Cubanos) como la encargada de la operación.
La jauría mediática internacional y nacional hace coro a esta intención imperial. Veamos.
Manuel Malaver, plumífero oligarca, escribe un artículo donde desarrolla la equivalencia de Chávez y Noriega, deduciendo la similitud del desenlace.
Diego Arria emprendió una gira por el mundo (¿quién la paga?) para denunciar a Chávez en Europa, incluyendo acciones por las cuales el mandatario podría ser eventualmente juzgado. Su tarea es preparar la opinión pública para la “operación Noriega”. Europa oirá sus diatribas.
El periódico de poleo titula en primera página la misma patraña ordenada por el imperio: relacionar a Chávez con Noriega.
La conjura no se detiene aquí, la lluvia de desinformación no cesa, los pasos de la dirigencia del imperio siguen un guión muy bien escrito, todos los días abonan la imagen de un Chávez que merece ser tumbado, de una Revolución que merece ser truncada. Su objetivo es que el plan macabro que ejecutan sea aceptado por la opinión pública de los países imperiales.
No hay dudas, vienen por Chávez y por la Revolución, no aceptan un pueblo y a su líder buscando su propio destino con la audacia de no aceptar ordenes imperiales.
La situación nos muestra el verdadero carácter de la oposición: son vende patrias, están involucrados en la intervención gringa, es más: claman por ella, se alegran de que sean los gringos la solución a sus problemas y les devuelvan sus privilegios groseros.
Los campos se definen cada día más: ahora sabemos que los capitalistas son internacionales, cuando ven en peligro sus intereses se confabulan para defenderse, para extirpar la amenaza.
¿Qué debemos hacer los bolivarianos?
Lo primero es entender que ahora la discusión, la disputa, no es un simple asunto político interno, está en juego la Patria, y nada puede estar por encima de ella. Ya sabemos que la contienda es entre patriotas y vendepatrias. Es el mismo dilema que viene desde la independencia: los imperios contra los pueblos de la América.
La batalla por la patria tiene su primer combate en las elecciones de septiembre, allí la Revolución, el Comandante no pueden salir debilitados, debemos ganar con la mayor ventaja posible.
El éxito en esta batalla depende, así lo demuestra la historia, de la capacidad que tengamos de organizarnos, elevar la conciencia patriótica y revolucionaria, afinar nuestra capacidad de combate. En resumen, que el imperio sienta, que si se atreve, el costo en pérdidas humanas y materiales será insoportable por su opinión pública. Que entienda que el pueblo de Bolívar cuando de defender a la patria se trata es indómito, que si se atreven no quedará piedra sobre piedra.
¡Si se atreven seremos millones de Chávez!

29.5.10

LA CONDUCCIÓN DE LA CLASE OBRERA

La esencia del Socialismo es el rescate de la Conciencia de pertenencia a la sociedad, la Conciencia del deber con la sociedad, la convicción de que la suerte del individuo está entrelazada con la suerte de la sociedad. En pocas palabras, la recomposición de la sociedad, su integración, la sanación de la fragmentación brutal a que la ha sometido el capitalismo.
La Clase Obrera es la clase que por su relación con el trabajo, por su existencia, lo realiza necesariamente en colectivo, en cooperación, lleva en su seno el germen del Socialismo. Entiende que la suerte del todo depende de la suerte de cada uno, y el bienestar del individuo depende del bienestar social. No es posible la realización del individuo, el desarrollo pleno de sus potencialidades, en solitario.
Por esas cualidades es la Clase Obrera la llamada a transformarse en rectora del gran cambio social que es el Socialismo, llevar esa conciencia y esa práctica al resto de la sociedad, a transformarse en clase revolucionaria.
Por esas cualidades la Clase Obrera puede dejar de ser una clase integrada al capitalismo y transformarse en una clase revolucionaria. Para esto es necesario que se encuentre con la ideología que emana de su existencia.
Se extravían los que confunden las tareas de la Clase Obrera con la actividad confinada de un grupo de obreros en una fábrica.
La Clase Obrera tiene tareas sociales que abarcan a toda la sociedad, le dan respuesta a sus problemas. Los obreros confinados material y espiritualmente a una fábrica reducen su visión a esa fábrica, pierden la noción de sociedad. Entonces, por más éxito que tengan en el funcionamiento de su fábrica, necesariamente, se enfrentarán con los intereses de la sociedad toda. Se da así la paradoja de obreros antisocialistas.
Surgen unas preguntas: ¿Qué hacer con los segmentos, las clases sociales que no tienen la existencia obrera? ¿Cómo incorporarlos a la esencia del Socialismo? ¿Cómo socializarlos? ¿Cuál es la proposición de la Clase Obrera, encontrada con su ideología, para dirigir esos segmentos sociales? La respuesta es el Trabajo Colectivo Voluntario.
Esa es la manera de llevar la existencia y la conciencia de la Clase Obrera Revolucionaria al resto de la sociedad, es la clave para el éxito de la Revolución en países de poco desarrollo del capitalismo y del proletariado.
Es la Conciencia, el espíritu tomando cuenta del proceso revolucionario, guiando los cambios materiales. Estudiemos sus características.
Tiene como objetivo central el rescate del sentido de pertenencia a la sociedad, el convencimiento de que sólo a través de la sociedad se puede realizar plenamente el individuo, que la suerte del individuo y de la sociedad está entrelazada, se influyen mutuamente. Para los no obreros es una recreación de la comunidad de la fábrica, además, un ejercicio de entrega vital a la sociedad. Para los obreros es una acción que les permite elevarse y encontrarse con su función social, encontrarse con el reto histórico, cambiar ellos cambiando a la sociedad.
¡Sin Chávez no hay Socialismo!

28.5.10

LOS CANDIDATOS DE CHÁVEZ

Después de un inédito y largo proceso, ya tenemos los candidatos para las próximas elecciones parlamentarias, son los candidatos del PSUV, los convocados a garantizar la permanencia de la Revolución, del camino al Socialismo, vale decir, son los candidatos de Chávez, los llamados a garantizar su permanencia, a enfrentar la arremetida que los oligarcas asoman.
Los oligarcas, no hay dudas, van a las elecciones a debilitar a Chávez, esas son sus intenciones, y lo declaran con descaro. En el fondo de todas sus acciones se vislumbra esa intención.
Preparan un golpe, lo anuncian con subterfugios que no consiguen ocultar el planteamiento. Algunos como álvarez paz y poleo son más directos, y pasan la raya de la legalidad. Otros desde su guarimba en el exterior vociferan y crean opinión adversa al proceso y al Comandante. Y los cobardones de adentro declaran con sordinas, ponen obstáculos, crean desabastecimientos, sabotean.
Los gringos atacan al Comandante, piden a su congreso colocar a Venezuela en la lista de países colaboradores con el terrorismo. Eso se acerca mucho a una declaración de guerra. Después las relaciones con nosotros quedarán en manos de los halcones, preparan a su opinión pública para el ataque inminente. No son creativos, es el mismo guión que aplicaron a Saddan Hussein.
Alrededor de septiembre giran todos los planes oligarcas. Amenazan con lanzarse antes, aunque algunos proponen el 27 como fecha para la confrontación, todos se saben perdidos, desde ya anuncian fraude, manipulan… se curan en salud.
Cumplimos la etapa de escogencia de candidatos, fue un trabajo donde prevaleció lo interno de la organización, escogimos candidatos, votamos por ellos, etc., ahora debemos ir al pueblo a estimularlo a votar, convocarlo a la batalla.
Debemos tocar el alma de ese electorado, y eso solo se consigue alertándolo del peligro que corren la Revolución y el Comandante Chávez. Explicando que no se trata de una elección normal, sino del preámbulo al enfrentamiento que plantean los oligarcas: si salimos débiles de este primer encuentro la arremetida será brutal.
Al votar por los candidatos que hoy se nos proponen, estamos votando por la permanencia de Chávez, mandándole un mensaje claro a los gringos, diciéndoles en la práctica que somos un pueblo dispuesto a defender sus conquistas y, sobre todo, el derecho a dirigir su propio rumbo.
Sabemos que esa lista de candidatos tendrá defectos, que seguramente tendremos críticas, nunca se podrá construir una lista que nos agrade a todos, siempre habrá divergencias, lo que no es aceptable es que por esas divergencias entreguemos al Comandante a las fauces de los gringos.
No hay excusas para dejar de votar por los candidatos de Chávez, el que no vote por esos candidatos no es chavista, está trabajando para el enemigo oligarca extranjero, entregando la patria a los que la llenaron de oprobio, de miseria material y espiritual.
A las elecciones debemos ir con la alegría del que funda un mundo más feliz, más justo para sus hijos y los hijos de sus hijos.
¡Sin Chávez no hay Socialismo!

27.5.10

TODO CAPITALISTA ES LADRÓN

Aunque suene duro, la sentencia es verídica: todo capitalista es ladrón, el capitalismo es un robo de magnitud planetaria. Expliquemos.
El capitalista se enriquece a partir de la apropiación de trabajo humano, de la vida de los obreros, esa es la base del sistema. Y esa fechoría es posible porque es aceptada por la sociedad como algo natural. Para la sociedad capitalista, tal como antes lo fue para la sociedad esclavista, es natural, es ético que unos pocos se apropien de la vida, del tiempo de muchos.
Es así, la humanidad es dirigida por unos pocos capitalistas que deciden el rumbo de todos de acuerdo a su único interés: acumular capital. Es una demencia universal.
Ahora bien, el capital se muestra con un ropaje de dignidad: flux gris, corbata de franjas azules y rojas, lentes con monturas doradas, buenos modales, vivienda de alto lujo, buen vocabulario. Desprecio por los humildes, alto abolengo.
Pero tras ese tinglado de “seriedad” se esconde un matón redomado. El capitalismo acumula su capital más que por la vía “legal”, por la vía del pillaje. Su afán de riqueza no puede esperar la marcha lenta del trabajo, el capitalista tiene compulsión de fortuna, y para eso viola la legalidad que él mismo creó.
La historia del capitalismo está llena de crímenes. Son históricos los genocidios a los indios, las masacres de poblaciones enteras en el África. Legendarias son las bandas rompe huelgas. Persiguió con saña a quien se opuso a sus designios de explotación, la ley siempre amañada estaba a su servicio, asesinó impunemente a líderes sindicales, encarceló y llevó a la horca a luchadores sociales. Aún retumba en la indignación de la Humanidad el asesinato de Sacco y Vanzetti.
En Venezuela la historia ha sido idéntica: “los amos del valle” acumularon fortunas cobrando las deudas de la revolución de la independencia. Asesinaron líderes que se oponían al pillaje, practicaron magnicidio, golpes de Estado y abrieron camino a la acumulación expedita de la riqueza petrolera.
La oligarquía venezolana se formó a partir del fraude, y siempre se nutre de lo ilícito, lo mismo roba en grande que roba chiquito, con la misma experticia se apodera de tierras sin títulos, engorda vehículos en los propios jardines de su hogar, echando por tierra la “buena reputación de los Zuluoagas”. O crea bancos de mentira para robar en masa, después huyen como aquel celebre “Empresario Socialista”. Y con la misma dignidad del traje gris lava dinero del narco, o especula con los dólares.
En las entrañas del monstruo la situación es más dramática: el imperio invade países, bombardea pueblos, comete genocidios, magnicidios, miente, asesina…todo para buscar mercados, energía, para seguir acumulando, para saciar su demencia.
Entonces no nos engañemos, los robos y fraudes oligarcas son la esencia del capitalismo, no se trata de algunos que se salieron de cauce, ¡no! Esa es la naturaleza del capital.
Mientras exista capitalismo habrá dolos de todo tipo.
¡Sin Chávez no hay Socialismo!

26.5.10

LLEGARON LAS LLUVIAS ¿RAZONAMIENTO O RACIONAMIENTO?

Llegaron las lluvias, el Guri subió el nivel, se aleja el temido colapso, pasó el susto. ¿Ahora qué hacemos? La respuesta determinará en gran medida el rumbo de la Revolución. Veamos.
Podemos volver a la llamada “normalidad” seguir consumiendo, olvidarnos del percance. Los escuálidos se entristecerán porque perdieron una bandera para desarrollar su ofensiva. Nosotros respiraremos tranquilos porque superamos la emergencia.
Al cabo de algunos meses volverá la realidad a tocar la puerta, vendrá necesariamente otra crisis producto del deterioro ecológico, y nos encontrará desprevenidos, con una sociedad incapaz de sacrificio, sin conciencia de la grave crisis que atraviesa la Humanidad, desprotegida, débil.
Entonces buscará culpables de su desdicha, buscará quien le prometa placidez, y así seguiremos el camino al infierno que nos propone el capitalismo.
O podemos, en condiciones óptimas, sin la presión de la crisis, profundizar la concientización, el Razonamiento de los problemas que confronta el mundo producto de la voracidad capitalista. Sembrar conciencia ecológica, alertar el camino a la extinción que llevamos por el uso antinatural de la tecnología capitalista, que se selecciona de acuerdo al rendimiento, al capital, que no tiene consideración con la naturaleza. Hoy la tecnología tomó partido por el capital suicida y cada día más se enfrenta a la naturaleza, la devasta.
Sobre esa explicación y elevación de la conciencia asentar un ahorro de energía, un coto al consumismo, modificar las necesidades y la manera como las satisfacemos, fundar una nueva visión, un mundo viable.
Si optamos por volver al pasado, olvidar la advertencia de la naturaleza, si regresamos el destino de la Humanidad estará sellado, será extinción, por tanto, es necesario entender que la humanidad supera la visión capitalista de la vida, o perece. Ese es el principal reto de esta Revolución.
La Revolución debe siempre decir la verdad, es necesario divulgar nuestra posición en Copenhague, cuando junto a Bolivia denunciamos el peligro de extinción de la especie humana y de la vida. Ahora las amenazas en lugar de aminorar aumentan aceleradamente, basta mencionar el desastre ecológico del Golfo de México que aún no cesa y amenaza con destrozar las condiciones para la vida en todo el Caribe.
Debemos alertar a nuestra sociedad de la catástrofe que ya empezamos a padecer, el clima descontrolado es el primer aviso. La extinción de especies es premonición de nuestro futuro. Ya existen países que prevén los daños que sufrirán por las inundaciones marítimas. Algunos desaparecerán.
Debemos decirle a nuestra sociedad que la única manera de tener esperanza de sobrevivir a la debacle es siendo un pueblo capaz de modificar sus necesidades, hacerlas naturales, sólo de esta manera podremos enfrentar los cambios que la naturaleza nos impondrá.
Los estudios ya están hechos: sólo pueblos que regresen a la agricultura natural, sin fertilizantes que matan el suelo, que se transporten sin gasto de energía fósil, que resuelvan sus problemas en conjunto, vale decir, sólo las sociedades socialistas tendrán posibilidades de sobrevivir…
O Razonamos o el Racionamiento no los impondrá la naturaleza.
¡Sin Chávez no hay Socialismo!

25.5.10

ESTABLECER LA NUEVA HEGEMONÍA

La tarea esencial de una Revolución es construir la hegemonía de la conciencia y la cultura socialista, de la ideología proletaria que sustituya a la hegemonía capitalista.
Cómo se construye esa hegemonía en países de poco desarrollo del proletariado, es una discusión que deben atender los revolucionarios. Veamos.
La clave está en el Trabajo Voluntario, que es en esencia la extensión de la conciencia de la vanguardia revolucionaria al resto de la sociedad. Es trabajo que no tiene más recompensa que la satisfacción del deber cumplido en beneficio de todos.
El trabajador voluntario más destacado fue el Libertador ¿Quién y qué podía pagar sus servicios a la patria?… Sólo la gloria, el reconocimiento como hombre entregado a la causa social.
Lo mismo podemos decir de Zamora. O de Fabricio, que cambió las comodidades del parlamento por las miasmas del campamento, sin pedir nada a cambio. O de Fidel, del Che y los apóstoles del Granma, que fundaron mundos de dignidad con trabajo voluntario. O de Chávez, que lo arriesgó todo por servir a su pueblo.
Es así, el Trabajo Voluntario en la lucha contra el capitalismo gobernante debe necesariamente adquirir las características del combate contra la infamia, es el trabajo de la vanguardia que busca elevar la conciencia y la combatividad en las masas manipuladas y conducirlas en la toma del poder.
Después de conquistado el poder político por la Revolución , entonces el Trabajo Voluntario toma otras características, otra importancia.
Ahora el reto para los revolucionarios es crear conciencia proletaria, del deber social, en una sociedad de poco desarrollo económico, con un proletariado débil desde el punto de vista ideológico y numérico, escenario en su interior de una profunda lucha ideológica. Estudiemos el asunto.
La Conciencia de Clase es el conocimiento de la ubicación en la sociedad que tiene esa clase, de las tareas y la conducta que se desprende de esa ubicación. Postulan los clásicos que esa conciencia emana de la existencia, en última instancia, es decir, la conciencia tiene una estrecha relación con la existencia, esencialmente con la manera como una clase se gana la vida.
Una lectura dogmática, y por tanto reaccionaria de los clásicos, nos dice que habría que esperar que el capitalismo se desarrolle en el país a liberar. De esa manera, el proletariado así formado creará las condiciones para la conciencia revolucionaria. Escamotean la Revolución.
Otra desviación de la vía revolucionaria es confundir las tareas históricas de la clase obrera, con el supuesto beneficio de segmentos de ella que son colonizados por la lógica capitalista. Se comportan como propietarios capitalistas, explotan a sus compañeros, drenan la renta nacional, y de obreros sólo conservan el nombre.
Los revolucionarios que entienden, como dijo Fidel, que su deber es hacer la Revolución , han encontrado en el Trabajo Colectivo Voluntario la conexión entre existencia proletaria y Conciencia del Deber Social. Esta conexión es capaz de recrear las condiciones de existencia proletaria, universalizar la conciencia proletaria, hacerla dominante.
¡Sin Chávez no hay Socialismo!

LA CLASE OBRERA REVOLUCIONARIA

Una Revolución necesita una Clase Obrera Revolucionaria que participe en la construcción práctica y teórica del Socialismo, que guíe al resto de la sociedad con su ejemplo.
El cambio de una Clase Obrera que participa en la lógica del capital, a una Clase Obrera liberadora de la sociedad, es el más importante de los que deben suceder en una Revolución. Sobre esta autotransformación se edifica la nueva relación social, sin ella todo esfuerzo se desvanece en las veleidades de la ideología pequeño burguesa.
En la Revolución Bolivariana la batalla por ese cambio sucede feroz. Es muy esperanzador que ya emerge con fuerza un poderoso sector de la Clase Obrera que supera los extravíos y emprende el camino de su madurez.
Primero dio muestras importantes de su vocación unitaria, desechando mezquindades logró la unidad para las elecciones de la Federación Petrolera , supo dar a sus organismos de dirección sindical la tarea del reto histórico que engloba lo reivindicativo. Entendió la necesidad de dar organización a esa Unidad y fundó un instrumento político: Vanguardia Obrera Socialista.
Ahora, elevándose en la comprensión teórica de su papel, ha dado pasos concretos en la construcción de la referencia socialista.
La Clase Obrera petrolera en los muelles nacionalizados de PDVSA, en la Costa Oriental del Lago de Maracaibo, es protagonista de un salto ideológico, allí van asumiendo la visión de sociedad y se yerguen sobre el economicismo mezquino.
Utilizan el Trabajo Colectivo Voluntario como instrumento concientizador de la masa obrera. Las jornadas de Trabajo Voluntario dan sus frutos materiales: ya han recuperado equipos petroleros, locales, han construido bibliotecas, refaccionado clínicas. Así refuerzan su organización y elevan su conciencia.
Consiguieron hilvanar las luchas reivindicativas, propias de la clase, con las luchas por los objetivos superiores de la sociedad. De esta manera se colocan a la vanguardia del proceso revolucionario, se hacen políticos.
Entienden que es Chávez el líder que resume los anhelos liberadores de la sociedad, y lo apoyan por encima de cualquier otra consideración, corren su misma suerte, sienten que en Venezuela el Socialismo se hace con Chávez o no se hace.
Asumen las tareas internacionalistas del Socialismo, y transformaron ese internacionalismo en acciones concretas: piden la libertad de los Cinco Héroes Cubanos secuestrados por el imperio, que desprecia y persigue a los patriotas y a los humanistas.
Hay razones para tener esperanzas: la Clase Obrera ha encontrado el camino para el verdadero combate por el Socialismo, ha entrado en acción con su ejemplo, contra el economicismo y las desviaciones infantiles. Ahora existe una clase vanguardia de la Revolución Socialista , una Clase Obrera que encontrada con su ideología es capaz de dirigir a la sociedad en la construcción del Socialismo.
Ese es el verdadero control obrero, el poder obrero y del pueblo: construir una nueva sociedad.
Este importante nacimiento de un núcleo de vanguardia merece todo el apoyo de los revolucionarios, será un baluarte importante en la construcción de la teoría y la práctica Socialista.
¡Sin Chávez no hay Socialismo!

23.5.10

EL DESLINDE ELECTORAL

Las próximas elecciones parlamentarias son ocasión para el deslinde definitivo de posiciones ideológicas. Las decisiones que exige el avance de la Revolución producen necesariamente definiciones en todos los campos, y es en la política que se manifiestan con toda claridad.
En Venezuela ocurre una feroz lucha entre la posibilidad socialista y la restauración capitalista. Un enfrentamiento entre dos campos bien definidos. Veamos.
Uno, el campo socialista, que como es de esperar lleva en su seno importantes rasgos y partículas del capitalismo que quiere superar.
Este campo avanza con el liderazgo del Comandante Chávez a través de una tupida selva de contradicciones, errores, aciertos, búsquedas y discusiones, como corresponde a una verdadera Revolución. Pero siempre con la convicción de que el capitalismo debe ser superado, que el Socialismo es la única manera de salvar al planeta, que no hay futuro para la sociedad venezolana dentro del capitalismo.
El intento socialista venezolano ha conmovido al continente y al planeta, ha devuelto la esperanza a multitudes de excluidos, ha vigorizado las luchas justas. El decidido enfrentamiento a la hegemonía gringa trocó la geopolítica de la América. La ALBA, y UNASUR, son emblemas de la nueva situación.
Por supuesto que un proceso como la Revolución Bolivariana necesariamente despierta la ira de los oligarcas y del imperio gringo. Ya decretaron: ¡el ejemplo debe ser aplastado! ¡Chávez debe ser eliminado! Le temen por lo que ya hizo, pero más, mucho más, por lo que saben puede hacer. La Revolución debe ser guillotinada.
El otro campo es el antisocialista. Aquí se agrupan toda una fauna de agentes, politiquillos, oportunistas, partidos indefinidos, en mezcla con voceros imperiales, partidos de la cuarta, sifrinitos fascistas, los une un odio profundo a Chávez y a su accionar a favor de los desposeídos del mundo.
Tienen muchas formas de disfrazarse, de engañar, tienen un discurso construido para la ocasión electoral, hablan de muchas tonterías que todos sabemos son pura retórica, en el fondo se trata de debilitar a Chávez para truncar la esperanza, posponer una vez más el sueño.
Los campos están nítidos, las intenciones definidas: en las elecciones de septiembre se decide la suerte de la Revolución Bolivariana que encarna el Comandante Chávez. No son unas elecciones comunes, se trata de un enfrentamiento con los oligarcas internacionales y sus franquicias nacionales. Un enfrentamiento definitivo entre Chavistas contra antichavistas representantes de la muerte.
Ese es el carácter del choque brutal de septiembre, que nadie se engañe, que nadie se pierda en consideraciones superficiales, en estas elecciones sólo hay dos posibilidades: o se está con Chávez, con la Revolución, el Socialismo, el futuro de la Humanidad, o se está contra Chávez, contra la Revolución, se está por el capitalismo, por los gringos, por la muerte.
Los chavistas tenemos el deber de votar por los candidatos del PSUV, esos son los candidatos de Chávez, los que garantizan su permanencia, no hay excusas, nada que justifique no hacerlo. El pueblo debe mostrar disciplina y conciencia política.
¡Sin Chávez no hay Socialismo!
¡Sin Socialismo no hay Patria!