28.3.09

HABLEMOS DE PRIVILEGIOS

Bien buena la discusión que se desarrolla en la sociedad venezolana, los privilegios son un asunto central en cualquier Revolución, o mejor, de la relación con los privilegios trata la Revolución.
En el capitalismo los privilegios groseros los tienen los capitalistas que succionan el sudor y la sangre del pueblo desposeído. Si revisamos la historia encontraremos esta relación entre privilegios y expropiación de la vida de los humildes, así fue en el esclavismo, en el feudalismo, y así es en el capitalismo.
Los privilegios son mecanismos, símbolos de poder de las clases dominantes. Es así, “una camionetota” no sólo es cómoda, denota también el poder del que va sentado atrás. Siempre han existido estos símbolos de poder: en la colonia la manta y la peineta, de uso exclusivo, dio nombre a una clase social, a los mantuanos.
Ahora bien, ¿qué busca la Revolución?
La Revolución Socialista busca acabar con esos privilegios, los de verdad, los de los capitalistas, los que están en la lista de los hombres con más fortuna del planeta, como cisneros y mendoza, o los privilegios de los gómez cigala, de los que viven y vivieron en el country y ahora privilegian en la lagunita, esos son los privilegios que surgen de la injusticia social, allí no hay sueldo, no los necesitan, sus fortunas son tan grandes que no pueden ser falsificadas, esos son los verdaderos privilegios.
Lo primero que hay que decir es que son privilegios aislados de algunas manchas, es un fenómeno comprensible, recordemos que estamos sumergidos en una profunda lucha de clases, en una guerra por instalar una nueva conciencia, por fundar una sociedad donde el hombre se valorice por lo que es y no por lo que tiene, pero sobre todo, estamos empeñados en cambiar las relaciones sociales que permiten que unos hombres se apropien del trabajo de otros hombres, es decir, en acabar con el capitalismo, que es la fuente real de todo privilegio.
La guerra contra la oligarquía es en todo terreno. Ahora nos lanzan una ofensiva con la engañifa de los sueldos, de las camionetas, las escoltas, evitan así que el pueblo mire sus privilegios groseros producto del despojo, que el Socialismo siga poniendo orden en la sociedad, acabando con las causas profundas del privilegio de ellos y de los extraviados bolivarianos.
Entonces qué hacer:
Primero, los bolivarianos extraviados intentan prestigiarse con privilegios, y vinieron a depredar a la Revolución, deben ser execrados. Y, al mismo tiempo, los revolucionarios honestos, los que trabajan duro y no se prestigian con privilegios, deben ser publicitados.
Segundo, la lista de las fortunas de los grandes capitalistas como cisneros, mendoza, cigala, los feo, etc., deben ser publicitadas, sus casas, las de aquí y las de afuera, divulgadas, sus aviones, sus caballos, sus carros, todo divulgado y divulgado su origen.
Tercero, debemos explicar cómo la Revolución va a acabar con esos privilegios de los oligarcas y con el coletazo moral de ellos, que se infiltra en la Revolución.
¡Socialismo es acabar con todos los privilegios!
¡Chávez es Socialismo!

27.3.09

CRISIS Y CAMPO DE BATALLA

La crisis que azota al mundo nadie la niega, la maquinaria capitalista dejó de girar, los crujidos del frenazo se escuchan en todo el planeta, las consecuencias son dramáticas e inevitables.
En Venezuela la Revolución Bolivariana hace esfuerzos por minimizar el impacto de la crisis sobre la sociedad. Hasta ahora hemos tenido éxito, el impacto es pequeño.
Hace poco el Comandante le comunicó al país una serie de medidas de ajustes que tienen como filosofía respetar el llamado gasto social y proteger a los humildes, esta actitud contrasta con la de los gobiernos oligarcas que ante las crisis transferían las cargas a los humildes y protegían los intereses burgueses y de sus amos del norte.
Las medidas marcan, sin duda, un rumbo y una intención: la Revolución en cualquier circunstancia estará al lado de la sociedad desposeída, esa es su naturaleza.
Las medidas son un paso muy importante, por allí se debe seguir y se debe profundizar. Veamos.
La crisis del capitalismo es global, abarca todos los aspectos de la vida: desde lo social hasta lo económico, pasando por lo ecológico. Pero su eje es el espíritu, y es desde allí que debe buscarse su solución. En otras palabras, si la solución no transforma el espíritu de la humanidad, si nos sigue guiando el paradigma, la cultura del capitalismo, esa solución será ficticia, simple quimera.
Siendo así, las soluciones no serán soluciones reales, serán meros paliativos efímeros. Si se mantienen dentro de los paradigmas y cultura del capitalismo, si tienden a mantener la misma visión del mundo que nos propone el capitalismo, esto es, si tienen la intención de mantener los niveles y la calidad de consumo y producción capitalista, por ese camino, temprano nos tropezaremos con una terrible crisis, porque las crisis son de la cultura capitalista.
El mundo tiene suficiente alimento para alimentar a toda la humanidad, hay suficiente riqueza para resolver el problema de la vivienda, fábricas para vestir a todos, medicinas, universidades para formar médicos. ¿Entonces, dónde está la crisis? La crisis es del modo de vida capitalista, es una crisis de distribución y de relación de los humanos entre sí y con la naturaleza. Ya es hora de fundar una nueva manera de ver el mundo, dejar atrás al capitalismo y construir el Socialismo. Sólo si conseguimos cambiar profundamente la espiritualidad solucionaremos la crisis.
Ahora bien, el Socialismo se construye con sacrificio, y el principal sacrificio es que la sociedad renuncie a vivir cada uno buscando soluciones individuales, egoístas, y se convenza de las soluciones sociales. De esta manera la producción social deja de ser un medio para enriquecer a unos pocos y pasa a ser fuente de satisfacción de todos.
Un pueblo que cambie su espiritualidad será el único capaz de enfrentar las crisis del capitalismo, de servir de guía para otros pueblos, de marcar el rumbo de la salvación de la humanidad. Hacia allá debemos ir con Chávez y el Estado Revolucionario.
¡Con Chávez profundizaremos!

26.3.09

LA PATRIA HERIDA DE IMPERIO

Se engañan los que piensan que el intento separatista de la camarilla que usurpa la zulianidad, es simplemente un capricho o un alarde de Rosales. ¡No! Es algo muy serio, que no se puede resolver con dos chistes o alguna declaración apresurada. Estamos frente a una operación inteligente del imperio, la misma que desmembró la Gran Colombia y condenó al Libertador a la ingratitud de San Pedro Alejandrino. Veamos.
El capital no tiene patria, en el momento en que peligran sus intereses pasa por encima de todo, de la madre y de la madre patria. La defensa del capitalismo es lo que está en el fondo de la operación separatista.
Los oligarcas internacionales no toleran un gobierno como el de Chávez, que está del lado de los desposeídos, que los ama y por ellos es amado, que en ese amor se hace fuerte y toma medidas para avanzar hacia el Socialismo, que no es otra cosa que acabar con la injusticia capitalista y redimir a los desposeídos.
Contra este gobierno han intentado de todo, y todo se ha estrellado en la formidable barrera del amor del pueblo.
Ahora nos lanzan una ofensiva de mayores proporciones, tan fuerte es la jugada que son capaces de sacrificar, en el intento ruín de tumbar al gobierno de los desposeídos, a un partido nacional como Un Nuevo Tiempo, a un líder nacional, candidato presidencial, como Rosales, los ponen de frente contra la patria y los reducen a ser cabecillas de una agresión mezquina contra todos los venezolanos, a renunciar a ser líderes de todo el país, los queman.
Ellos, rosales y UNT, mostraron su vocación de llegar a todo, de vender todo, con tal de defender el capital internacional.
Es una operación contra la Patria, la Revolución, contra Chávez, en defensa del capitalismo internacional, es una operación montada por los yanquis, no olvidemos los consulados y las visitas del embajador a Maracaibo.
Los revolucionarios, el pueblo desposeído, debemos estar alertas y claros para defender la patria, que es defender al Socialismo.
La Patria tiene derecho de protegerse, nada, ni siquiera las leyes en boca de leguleyos, pueden estar por encima de la integridad de la Madre Patria. No hay ley que valga, no hay referéndum leguleyo, nada justifica desmembrar la Patria.
Si los oligarcas lacayos, manipulando los sentimientos regionales, pretenden torcerlos para ponerlos al servicio de los capitalistas imperiales y entregar al Zulia a los gringos nuevamente, entonces, se estrellarán contra el muro de los patriotas nacidos en cualquier parte del territorio nacional, se estrellarán contra el espíritu de Urdaneta, de Sucre, de Brión, de Baralt, de Bolívar.
Los trabajadores, los venezolanos, debemos en este momento crucial unirnos en el objetivo de defender la integridad de la patria, rechazar los intentos de desmembrarla para entregar pedazos a los gringos. Debemos cerrar filas alrededor del Comandante Chávez y de la Revolución, hacer un llamado a los trabajadores del mundo para rechazar las pretensiones del imperio.
¡Chávez es Patria!
¡Patria es Socialismo!

25.3.09

¿CONTRA QUÉ LUCHAMOS?

Las medidas tomadas por el gobierno para enfrentar la crisis provocaron sulfuración en la oposición oligarca. Los revolucionarios debemos estudiar el modus operandi de los políticos oligarcas para enfrentar sus ataques.
Lo primero que hacen es escamotear el fondo de la discusión, que es la incapacidad del sistema capitalista para producir bienestar a la sociedad, al contrario, produce miseria espiritual y material, exclusión y crisis periódicas que cada vez son más catastróficas y globales. Lo que se discute, lo que está en juego es Socialismo o capitalismo, barbarie, extinción.
Después, los voceros oligarcas se deslastran del pasado, tal es el caso de roberto giusti, que ahora hasta despotrica de carlos andrés pérez, de cuyo gobierno fue ejecutivo.
Lo mismo hace teodoro el pusilánime, quiere dictar cátedra de economía revolucionaria, olvidando que entregó las prestaciones, y que ha traicionado los ideales que lo movían en los días que era prometedor líder estudiantil en la ucv.
ledezma, carlos blanco y demás plumíferos no se quedan atrás. Hoy no se consigue un vocero capitalista de la cuarta, todos empiezan la historia desde Chávez, atrás no existió nada. De esta manera piensan acreditarse para derrocar a la Revolución y volver al camino de capitalismo franco.
Es necesario que los revolucionarios y el pueblo desposeído entendamos la calidad de la batalla: estamos en feroz lucha contra el sistema capitalista y sus vicios morales y éticos. Contra eso luchamos.
Esa lucha contra la bestia milenaria es difícil, compleja, llena de meandros, los vicios están por todos lados, están aquí, conviven con la Revolución, también dentro de nosotros los revolucionarios.
La batalla es difícil. Se trata de fundar, con hombres formados en la cultura del pasado, del egoísmo, un futuro diferente, otra cultura, la de la fraternidad, la del sentido de pertenencia a la sociedad. Eso requiere un esfuerzo espiritual de primera magnitud.
Siendo así, no es de extrañar que la Revolución esté llena de comportamientos, de conductas de la cuarta, del capitalismo, que anden por allí “revolucionarios” que tengan alma de capitalistas, que aprovechen los puestos para desplegar sus vicios.
La lucha contra esas manchas es parte de la batalla. Parafraseando a un clásico podríamos decir: “el camino al socialismo está lleno de incomprensiones, de retrocesos, de equivocaciones, sacrificios, pero es el camino, el único camino.” Sólo por allí podemos realmente superar los problemas y los vicios de hoy.
La Revolución lucha contra esos vicios atacando a su origen que es el capitalismo. Los males del capitalismo no se resuelven dentro del sistema que les dio origen. Quien quiera enfrentar la crisis tiene primero que declararse socialista y anticapitalista, en caso contrario es un pescador en río revuelto.
Las medidas que tomó la Revolución son señal clara de un gobierno que se coloca al lado de la sociedad desposeída.
Las mentiras de los oligarcas que se oponen a todo lo que haga la Revolución, que manipulan para amedrentar a la población, no deben engañar a nadie.
¡Con Chávez venceremos la crisis construyendo Socialismo!

24.3.09

CRISIS DE ESPIRITUALIDAD

Toda Revolución es precedida por un corrientazo que estremece la espiritualidad imperante, eso fue el Moncada para la Revolución Cubana, y eso fue el 4 de febrero para la Revolución Bolivariana. Esta Revolución comenzó (con el perdón de los que se sientan aludidos) el 4 de febrero.
Ese corrientazo permite establecer una conexión diferente con el espíritu de la sociedad, distinta a la conexión hasta entonces dominante. En ese instante se da inicio a los cambios profundos que reclaman esos tiempos. Se abre el alma de los pueblos y es posible fecundarla con nuevas ideas, conducirla hacia el cambio profundo, hacia la Revolución. Estos corrientazos no son únicos, se repiten de tiempo en tiempo acicateando a las revoluciones, despertándolas.
El 4 de febrero logró dar ese corrientazo previo en el alma de la patria, que volteó la mirada y entregó simpatía hacia el asombro que fue esta gesta. Con ese empuje hemos llegado hasta aquí.
Hoy atravesamos por la prueba más dura de esta Revolución, una crisis global de inmensas y desconocidas proporciones. El capitalismo está en crisis, todo el planeta se estremece bajo los escombros del sistema.
Los gobiernos buscan las soluciones sólo en el área económica, apoyan a los capitalistas y desamparan a sus víctimas, por ese camino se condenan a crisis periódicas que poco a poco irán escalando en gravedad y desgastando al sistema.
Una Revolución como la nuestra no puede confinar las soluciones al área económica, la verdadera solución a la crisis está en el cambio de espiritualidad, es necesario dar un salto inmenso en la espiritualidad hegemónica de la sociedad, sustituir la cultura egoísta por la cultura amorosa social, el capitalismo por el Socialismo.
Estamos en condiciones inmejorables para avanzar, pero es necesario un nuevo corrientazo, un 4 de febrero espiritual.
¿Cómo hacerlo?
No son suficientes las medidas convencionales, es necesario medidas de alto impacto sobre el alma de la patria, una demostración de que esta Revolución quiere y puede romper con la cultura del pasado. Veamos un ejemplo.
Si se produce un decreto del ejecutivo, legal para unos y moral para otros, que limite los sueldos de los Ministros, los altos Magistrados, los Rectores del CNE, los altos funcionarios de las empresas administradas por el Estado, etc., digamos a cinco o seis mil bolivares con derecho sólo a dos meses de bonos.
Si además se reducen las escoltas a la mitad, la dotación de carros de esos funcionarios a la mitad…
Si además se aplican las medidas que Chávez anunció…
Si se hace un levantamiento del gasto de gasolina de los Ministerios y empresas administradas por el Estado, y se reduce a un tercio…
Si junto a eso publicitamos los bienes de los altos funcionarios y sus familiares…
Ese decreto sería un corrientazo, que colocaría al gobierno en una posición de alta fuerza moral, su ejemplo sería preparación a grandes cambios. Se fortalecería la conexión pueblo-gobierno, empezaríamos a fundar la nueva espíritualidad.
¡La más poderosa arma anticrisis es el espíritu!
¡Chávez es Socialismo!

23.3.09

LA CONFRONTACIÓN

¿Cómo es la confrontación en una Revolución Pacífica? ¿Cuáles son las características del enfrentamiento entre lo nuevo y lo viejo, entre la burguesía oligarca y las fuerzas revolucionarias? La respuesta es difícil, necesita esfuerzo intelectual.
La Revolución pacífica es inédita, no hay antecedentes triunfantes, eso exige de la dirigencia de esta Revolución Bolivariana, que es pacífica, una poderosa mezcla de conocimiento y de arte, de imaginación y análisis riguroso de la realidad, de estudio serio y de inventiva.
El primer elemento del análisis, son las características propias de Venezuela: somos un país rentista, tenemos una clase media extendida y una marginalidad copiosa, y es por medio de esa ideología que la clase burguesa oligarca garantiza su dominación.
Todas las clases subordinadas están impregnadas de esta ideología, caracterizada por un individualismo, un egoísmo rotundo. El principal objetivo para esta ideología es el beneficio individual y egoísta, no importa a costa de qué ni de quién, es mercenaria, inconsecuente, retrocede a la menor dificultad, no corre riesgos, oportunista, siempre trabaja con red de seguridad, con plan de escape, o mejor, de salto de talanquera.
Esta ideología se manifiesta en el tránsito, en el caminar por la calle, en el trabajo, tiñe a toda actividad humana, impregna la conducta de todos, y por supuesto se manifiesta con fuerza en la política. Aquí funciona como una válvula de seguridad, las líneas políticas, las organizaciones, las acciones están impregnadas de individualismo y egoísmo, es una formidable barrera para el avance de la espiritualidad revolucionaria y para la construcción de una política revolucionaria, sabotea la formación de organización y también la elaboración de teoría revolucionaria. Allí da cabriolas para dejar un resquicio a su individualismo. Hay que hacer un esfuerzo para identificarla y combatirla, deslastrarse de ella, es como una hiedra.
En este ambiente de Revolución Pacífica, que ocurre en condiciones de alta impregnación de la ideología individualista y egoísta, propia de la pequeña burguesía y los marginales, es que se produce el enfrentamiento entre lo nuevo y lo viejo. Veamos.
En estas condiciones se le presentan a la Revolución varias dificultades, la principal es el impedimento para centrar una teoría Revolucionaria que marque el azimut. La Revolución con suma facilidad se extravía en las marañas teóricas de la ideología egoísta.
Al no haber un sólido piso teórico, al haber ambigüedad teórica, hay ambigüedad en todos los campos, he allí la causa de nuestra principal debilidad.
La Revolución Pacífica sólo se puede enfrentar a la oligarquía desde posiciones teóricas sólidas, bien diferenciadas, argumentadas y defendidas, que el pueblo las entienda, al punto de saber que en ellas les va la vida, que son sagradas, que vale la pena luchar por ellas.
Esta falla origina una carencia: la falta de cuadros revolucionarios. Es necesario un núcleo que irradie ejemplo extremo de conducta y ética revolucionaria al resto de la Revolución y a la sociedad, que sea ejemplo de lo que queremos construir, que contraste con los oligarcas y los desviados internos.
¡Socialismo es Teoría Revolucionaria!
¡Chávez es Socialismo!

22.3.09

LA UNIDAD, EL LÍDER, LA REVOLUCIÓN

La unidad es un fenómeno revolucionario, el proceso unitario es esencia del proceso revolucionario. La división es un fenómeno contrarrevolucionario, el proceso divisionista es esencia del proceso contrarrevolucionario. Unidad y División yacen en el fondo de Revolución y Contrarrevolución.
Si la división, si la fragmentación social es la base del capitalismo, justo es pensar que es la base de su acción política. Si observamos con detenimiento detectaremos los fenómenos fragmentarios en toda la política de la dominación. Revisemos algunos.
Niega la organización social, sus partidos son “maquinarias electorales”, simples instrumentos de comercialización de candidatos que se escogen en una cúpula, escena de feroces peleas a cuchillo. El acto electoral, la votación, fragmenta, y cada fragmento es un ciudadano náufrago tras un biombo. El acto electoral es un acto de soledad, a él vamos solitarios y de él salimos íngrimos, sin conexión con nadie, anónimos. Es un acto lleno de tristeza, de soledad.
El líder en el capitalismo no es un conductor, es un buen candidato, y un buen candidato es, tiene que ser, una buena mercancía. Las ideas, los proyectos, el rumbo, no entra en consideración en la política capitalista, eso es un “añadido” que lo ponen los especialistas, los técnicos.
Toda la cultura capitalista tiene como fin la fragmentación, justificar la división, perpetuarla, profundizarla. En resumen, el hombre del capitalismo, el hombre que produce y que necesita el capitalismo, es un hombre fragmentado.
Ahora bien, si la integración social es la esencia del Socialismo, lógico es pensar que la integración es la base de su política.
El Socialismo es integrador en todas las actividades sociales. Sus elecciones son integradoras, se eligen delegados que no pierden contacto con el ámbito que los eligió, se construye un tejido social que siempre está en funcionamiento, la votación es un acto más de este tejido, de ella se emerge con sentido de pertenencia, conectado con los organismos elegidos, acompañado.
Los cargos a elegir no generan privilegios, al ser así, la pelea por ellos tiene más proyectos, ideas, planes, es fraterna, no es una competencia entre mercancías, sino entre conductores.
En el Socialismo el esfuerzo de cada uno beneficia al todo, de esta manera la pugna no es personal, de grupos, de fracciones, en ella no hay derrotados, no puede haberlos, el beneficio de uno es beneficio de todos.
Es claro, entonces, que la búsqueda de la unidad es un combate entre el Socialismo y el capitalismo, es una confrontación política de vital importancia. La pregunta que surge es ¿cómo se da esa batalla en la práctica?
La forma como busquemos la unidad refleja nuestra posición política general: Sostenemos que así como es necesario un Estado Revolucionario de Transición, es necesario un líder en esa transición. O dicho en directas palabras, no es posible Revolución sin Estado Revolucionario, y no es posible Unidad Revolucionaria real sin líder revolucionario. La Unidad tiene que darse alrededor del Líder, Fidel, Lenin, Bolívar, Mao, Torrijos, Allende, el Che, reafirman la idea.
¡Chávez es Unidad Socialista!