15.12.07

ALIMENTACIÓN Y CAPITALISMO

En estos días la alimentación ocupa lugar principal en las discusiones. La oligarquía invoca desabastecimiento, y hacen campaña. Atribuyen a fallas del gobierno las dificultades con los alimentos, y los ministros se apresuran a dar explicaciones. Este es un buen tema para discutir en los Círculos de Estudio, y queremos dar algunas reflexiones.

Si examinamos el problema de los alimentos en su manifestación inmediata, es decir en el desabastecimiento de hoy, sólo obtendremos respuestas simples y superficiales que no nos permitirán darle soluciones de fondo, estructurales, perdurables. Por eso debemos intentar ir a las profundidades del fenómeno, abarcarlo en sus relaciones, en todos sus ángulos y, desde esa comprensión, enfrentarlo.
Muchos son los elementos del problema y varios los niveles, pero siempre al analizarlos nos encontramos en su origen al sistema capitalista. Toquemos algunos:
Nuestros hábitos alimenticios están cincelados por los intereses del lucro capitalista, es así que consumimos trigo en tierra de maíz, gaseosa en lugar del papelón, aguas con colorantes, etc., etc. Nuestra alimentación obedece más a los intereses del lucro empresarial privado, que a las normas de una nutrición sana.
Pero, donde el capitalismo muestra toda su perversidad es en el fenómeno alimentación a nivel mundial. Veamos.
Según datos de la FAO : En los últimos 50 años la producción mundial de alimentos ha aumentado de forma vertiginosa, incluso más que la tasa de la población mundial. Entre 1990 y 1997 la producción per cápita de alimentos creció casi un 25 %. Los datos constatan este crecimiento imparable: tomando como referencia el campo de la alimentación, en 2004 la cosecha de grano en todo el mundo alcanzó por primera vez la cifra de 2.049.000 millones de toneladas (un aumento del 9% respecto al año anterior).Pero a pesar de estos números, el hambre en el mundo también ha crecido hasta los 852 millones de personas. El problema del hambre, como fenómeno grave y generalizado, no se debe a la escasez de alimentos…
Lo que significa que la humanidad tiene la capacidad de producir alimentos para toda la población. Para muestra un ejemplo dramático: ¡La India, con millones de hambrientos, es el tercer productor de cereales del mundo! De estos datos vistos al vuelo, surge la pregunta ¿Si hay suficiente alimento por qué hay hambre?
La respuesta es una sola: el hambre se debe a la distribución capitalista egoísta de la riqueza socialmente producida, en este caso los alimentos. En esta área, como en ninguna otra, queda claramente evidenciado el carácter antisocial del capitalismo.
En Venezuela el problema alimenticio, el desabastecimiento, surge del enfrentamiento entre una economía socialista que pugna por nacer, impulsada por la Revolución Bolivariana , en choque con una distribución y producción capitalista que pugna por seguir con sus privilegios y su obtención de lucro por encima de la vida.
¡Sólo la profundización de la economía y la conciencia socialista resolverán el problema alimenticio nacional!
¡Sin Chávez no hay Socialismo y sin Socialismo no hay Chávez!
!MIERDA! !VIVA CHÁVEZ!

14.12.07

¡TODOS CONTRA EL SOCIALISMO!

Suficiente fue que el Comandante hablara de Socialismo para que una maquinaria infame moviera sus desdentados engranajes en contra de esta hermosa posibilidad. Trabaja con paciencia, sabe lo que hace, es sibilina, no da batalla frontal, toda ella es oblicua. Veamos.
Primero, desvirtuaron la idea, fueron a sus bases conceptuales y contra ellas abrieron fuego:
A la Propiedad Social de los Medios de Producción opusieron una serie de disparates, que no por galimatías fueron menos eficaces en su objetivo de debilitar uno de los pilares del Socialismo.
Se ensañaron contra la Conciencia del Deber Social. Así se prestigiaron todas las formas de solución individual a los problemas de la vida, es decir, estimularon el egoísmo contra las soluciones sociales, que son la base del Socialismo. Se promocionaba la ficción de transformar a los pobres en empresarios, los valores capitalistas se afirmaron como ejemplos de éxito, el consumo suntuario se afirmó como signo de progreso, y los “empresarios socialistas”, las cooperativas, la cogestión, las empresas de producción social, sustituyeron el lugar que correspondía a la sociedad, que de esta manera sigue fragmentada en miles de añicos egoístas.
Mientras esto hacían no descuidaron la acumulación de capital, hoy declaran con desparpajo que el sector privado, que es una manera tímida de decir, el capitalismo, crece vigoroso cada año.
Debilitaron la causa socialista en la economía y en la espiritualidad de la Revolución y del Pueblo. Ahora, cuando se sienten pisando tierra firme, se unen en un artero frente político contra el Socialismo.
Olvidaron que ayer se atacaron a muerte, ahora abril fue un “pecadillo” y el paro petrolero no existió. Con desparpajo buscan unirse en el centro y declaran que los revolucionarios son extremistas y deben ser dejados de lado, porque impiden la marcha hacia el “equilibrio”, hacia el “consenso”.
Mientras los oligarcas atacan al Socialismo y al Comandante Chávez, los neoligarcas callan, inventan diez mil desvaríos para no defender al Socialismo. A lo sumo lo usan como un clisé.

La Revolución está frente a la más peligrosa agresión de toda su corta historia, y es necesario tomar medidas. Veamos.
El Pueblo tiene grandes reservas de altruismo, por lo tanto, tiene grandes reservas socialistas. Además contamos con la sólida conexión Comandante-Pueblo, que nos da una gran oportunidad de corregir el rumbo, de rectificar y enfrentar el pacto restaurador que se fragua en nuestras narices.
Es necesario romper la parsimonia, relanzar al Socialismo con todo su vigor, declararnos en campaña por la educación Socialista , el Pueblo debe estar conciente de la necesidad histórica y humana de construir el Socialismo ya, ahora, sin dilación. Conciente de la necesidad de superar al capitalismo, de que sólo el Socialismo salva a la humanidad, y el capitalismo, por más disfrazado que esté, nos hunde en la miseria espiritual y material. Es necesario dividir los campos.
¡Derrotemos el pacto restaurador!
¡Construyamos el Socialismo!
¡Ni Chávez ni el Socialismo son negociables!
¡Chávez y el Pueblo son Socialismo!

!MIERDA! !VIVA CHÁVEZ!

13.12.07

¡SOCIALISMO!

Después de la derrota del 2 de diciembre la batalla continúa, ya sabemos que el imperio no se detendrá hasta aplastar a la esperanza Bolivariana. Mientras exista imperio existirá la batalla de los pueblos por su emancipación.

Por eso, es importante detectar la forma que toma la lucha en cada etapa, determinar cuál es el escenario principal de la batalla, qué armas usa el enemigo, con quién cuenta. Este diagnóstico es importante, de él depende el triunfo o el fracaso. Veamos.
El objetivo del imperio es presionar hacia un pacto, hacia una reconciliación, de esta manera persiguen debilitar al Socialismo y así debilitar a Chávez. El plan tiene varias etapas. Expliquemos.
Primero, presentan los sucesos de diciembre como el triunfo de la democracia y la derrota de la dictadura, del totalitarismo. Con esta consigna le dan excusas a los que ya no quieren seguir, le dan refugio a su vergüenza de rajarse, porque ya no serían tránsfugas sino “demócratas”.
En la segunda etapa, aíslan a los extremistas, a los maximalistas, que es lo mismo que decir, justifican combatir a los socialistas. Así allanan el camino para un pacto entre todos los “demócratas”.

Cuando el plan esté desplegado, cuando esté tomada la opinión pública por la ideas de que volver a la democracia puntofijista es un triunfo, entonces Chávez estará débil y darán su estocada final, que puede ir desde una constituyente, un gobierno de transición, a un golpe triste.
Es un plan sutil y fino, que necesita una respuesta decidida, comprometida, sin ambigüedades.
Los resultados de diciembre deben imputarse a nuestras debilidades capitalistas, y no a nuestro avance Socialista. La arremetida imperial se combate con Socialismo.
Entender que el objetivo último del Socialismo es la Conciencia del Deber Social, la recomposición de la sociedad, la lucha contra el egoísmo, el rescate de la verdadera democracia perdida en milenios de egoísmo. Y entender que esto no es posible sin la Propiedad Social de los medios de producción administrados por el Estado, no hay otra forma, no hay atajos. Es la Propiedad Social de los medios de producción el territorio para la práctica de la Conciencia del Deber Social, sin esa propiedad todo intento se hace sarcasmo.
Entender que Estado y sociedad son inseparables. Entender que la manera de empoderar al Pueblo es darle una organización nacional en lo político y lo social, que no hay empoderamiento aislado y fragmentador.
Es necesario que la Revolución retome su papel de dirigente, es necesario reconocer las diferencias de conciencia revolucionaria en la sociedad y, sobre esa premisa, construir los instrumentos para guiar la educación, “la ideologización”.
Es necesario mandar señales socialistas a la masa, debemos poner a los aparatos comunicacionales y a los instrumentos culturales en la batalla por el Socialismo, por los valores socialistas, en lucha constante contra los valores capitalistas. El gobierno debe ser generador de esos valores, combatir la difusión de valores egoístas y combatir la práctica capitalista que difunde valores capitalistas.

¡Sin Chávez no hay Socialismo y sin Socialismo no hay Chávez!
!MIERDA! !QUE VIVA CHÁVEZ!

12.12.07

DEBEMOS PEDIR DISCULPAS ¡TODOS!... NOSOTROS LAS PEDIMOS

Después de la derrota del referéndum han llovido entre nosotros las acusaciones y las evasivas. Es importante discutir con seriedad el asunto para poder recomponer nuestras filas y prepararnos para futuros combates. Veamos.

Lo primero que notamos es una gran confusión teórica, que llega hasta el absurdo de que algunos que llamaron a votar “no”, todavía se sienten chavistas y revolucionarios, pero esto es algo anecdótico.
Lo más importante, lo de fondo, es el laberinto teórico que nos llevó a la derrota de diciembre, extravío que debemos corregir so riesgo de ser golpeados nuevamente. Hagamos algunas precisiones.
Estamos en una guerra de cuarta generación, donde las armas son la información y la manipulación mediática, eso no lo entendimos, nadie lo entendió, tanto es así que llegamos al extremo de entregar una televisora potentísima a los devaneos de un “folklore” sin rumbo. Por eso debemos pedir disculpas ¡todos!... nosotros las pedimos.
Postulamos como modelo económico un híbrido, una mezcla absurda entre lo que hiere y lo que cura, entre lo que crea problemas y la solución, entre el capitalismo y el Socialismo.
Por supuesto que este modelo trae desconcierto, se imponen en la sociedad los valores del capitalismo: consumismo, egoísmo, salidas individuales, apego a lo material, miedo de perderlo, todo esto fácilmente manipulable por los medios de desinformación del enemigo, así sentamos las bases para un comportamiento como el del 2 de diciembre. Por eso debemos pedir disculpas ¡todos!... nosotros las pedimos.
Caímos en la trampa oligarca de fragmentar a la sociedad: por un lado los líderes, los conductores, y por otro el llamado “Pueblo”. De esta manera debilitamos a la Revolución.
Al separar a la masa de sus conductores, negamos la posibilidad a esa masa de hacerse conciente, truncamos el proceso de concientización, porque el concepto oligarca de “Pueblo” que adoptamos lleva implícito la ignorancia, el espontaneísmo.
Es así, cuando aparece gente que estudia, que se hace conciente, los llamamos dirigentes y los separamos de la masa, ya no son “Pueblo”.
Es un mecanismo perverso, separar a la masa de sus hijos más concientes, los que nos pueden guiar. Así dejamos la conducción al espontaneísmo, y el espontaneísmo reproduce al sistema imperante, nunca es revolucionario.
Tuvimos vergüenza de construir la dirigencia, y vergüenza de ser dirigentes. Hemos negado a la masa la posibilidad de construir su vanguardia, y que esa vanguardia asuma su papel de dirigente, de educadora, de guía de la masa. La respuesta de la masa el 2 tiene mucho que ver con esta desviación pequeño burguesa. Por eso debemos pedir disculpa ¡todos!... nosotros las pedimos.
Nos olvidamos del conocimiento revolucionario acumulado en siglos, en milenios de lucha. Nos aferramos a un incierto y mal entendido “o inventamos o erramos” que nos está llevando a recapitular la historia revolucionaria de la humanidad, pero no hay tiempo, el enemigo acecha, está aquí esperando nuestros errores para truncar el sueño. Por eso debemos pedir disculpa ¡todos! nosotros las pedimos.
¡MIERDA! ¡VIVA CHÁVEZ!

11.12.07

MONEDERO, DIETERICH Y OTRAS CARETAS

Las derrotas definen, derriban caretas, aceran a unos y derriten a otros, exponen la capacidad revolucionaria de los dirigentes y de las masas, son bautizo combativo para los revolucionarios y réquiem para los falsos.

La derrota del 2 de diciembre nos trajo definiciones. Descubrimos el fraude de los “expertos politólogos” que aparecen en todas las revoluciones, se hacen pasar por revolucionarios, son cazadores de incautos, encargados de minar a las revoluciones desde adentro, confundiendo con sus teorías deformadoras.
Estos “expertos politólogos” se delatan a la primera derrota, en esas ocasiones les saltan las caretas y aparecen los oportunistas, contrarrevolucionarios, agentes de planes imperiales.
Muchas son las maneras de expresarse el verdadero papel de estos agentes. Algunos como dieterich contribuyen a la división de las filas revolucionarias, ya sabemos el papel que tuvo en la compra de baduelito.
Otros al principio confunden con su retórica revolucionaria, dictan cátedra, propagan teorías que impiden el avance de la Revolución, se mantienen bajo el manto revolucionario. Pero, a la primera derrota, saltan la talanquera y aprovechan la crisis para profundizar hacia la derecha, aprovechan el mal momento para intentar acabar con la Revolución.
Tal es el caso de monedero, este ideólogo del Centro Internacional Miranda, que en plena crisis de la derrota de diciembre, cuando la Revolución necesita moralizarse, cerrar filas con Chávez, blindarse para futuros combates, este oportunista, desde España, lanza un artículo y arremete contra Chávez, la Revolución Bolivariana y contra Cuba. Cumple así su papel de infiltrado: minar la ideología revolucionaria, y a la primera debilidad atacar a la revolución.
El artículo publicado en Rebelión es extenso y lleno de odio para la Revolución y el Comandante, aunque pretende disimulo. Por razones de espacio sólo transcribiremos un párrafo donde queda al descubierto toda su ponzoña:
Nos dice monedero después de despotricar contra todos:
…“Conclusión: que el Che Guevara no vuelva a marcharse a Bolivia. Hay un momento en toda revolución donde las promesas incumplidas, la cárcel recurrente que tejen los burócratas, la sustitución de los antiguos privilegiados por otros nuevos (que, además de quedarse con el dinero quieren también la gloria del sacrificio, cuyo discurso monopolizan pero no cumplen), la tentación de negociar con el antiguo régimen a costa de los pobres o, en el otro extremo, la renovación del culto a la personalidad –contra la que alerta el propio Chávez- o la exacerbación de la amenaza hacia propios y ajenos, hacen que los auténticos revolucionarios se vayan con su suerte a otra parte, aunque sea para que les llenen de plomo el pecho en una escuelita en un pueblo perdido”.
Y aquí demuestra lo que se escondía tras su monserga pseudorevolucionaria: su odio a la Revolución Cubana, a la Revolución Bolivariana, su condición de contrarrevolucionario al servicio de las oligarquías internacionales.
La revelación de monedero descubre también al Centro Internacional Miranda, este infiltrado es su fundador y uno de sus principales teóricos.
¡Haremos el Socialismo por encima de cualquier dificultad!
¡Sin Chávez no hay Socialismo, sin Socialismo no hay Chávez!
¡Irreverencia en la discusión, LEALTAD en la acción!
¡Orden del Libertador para los Cinco Héroes Defensores de la Humanidad!

10.12.07

EL 4 DE FEBRERO

¿Fue una derrota el 4 de febrero, lo fue acaso el asalto al Moncada, lo fue Alegría del Pío, lo fueron las primeras expediciones de Los Cayos, lo fue el referéndum del 2 de diciembre del 2007 ?

La respuesta es de dos tipos:
Alguien que razone con la psiquis capitalista nos diría, “todas fueron derrotas”, y añadiría: “no se cubrió la meta”. Estaría así razonando como si la vida, la política, fuese un asunto de contabilidad: cuánto vendí, cuánto me costó, qué ganancia me dejó.
Es comprensible que mucha gente razone de esta manera, son las estructuras mentales capitalitas que nos habitan.
Ahora bien, la política revolucionaria tiene otras estructuras de razonamiento, el revolucionario piensa más con el corazón que con el bolsillo, o con la caja registradora, por eso la manera de evaluar los acontecimientos es totalmente distinta a la forma capitalista.
El objetivo del revolucionario es cambiar el alma de la humanidad, hacer que haga suya la idea de la Revolución , la idea de sustituir la organización del odio por la organización del amor.
Todas las acciones verdaderamente revolucionarias están dirigidas a la esfera espiritual y no a la esfera material de la vida humana. Por eso los capitalistas que son metálicos, no pueden entender ni evaluar las acciones revolucionarias.
Entonces, los revolucionarios tienen otro comportamiento frente a las acciones que realizan, todas, independientemente del resultado, son oportunidades para afianzar la conciencia revolucionaria en los pueblos, lo que cambia es la forma que toma ese afianzamiento.

El 4-F fue un éxito, porque a partir de ese latigazo en el alma del venezolano se pudo cambiar la parsimonia por la combatividad, el odio comenzó a ceder terreno frente al amor, el egoísmo declinar frente al altruismo, y todo ese cambio luminoso en el alma colectiva se materializó en el Comandante Chávez.
El Cuartel Moncada vio, sintió la fibra juvenil dando la mayor prueba de amor: entregar la vida por un objetivo altruista, aquello fue un relámpago amoroso en el cielo caliginoso de cálculo mezquino, de cobardía que cubría a la América.
Nosotros debemos preguntarnos ¿cuál es la actitud que el revolucionario debe tener frente a estos aparentes reveses, cómo transformarlos en acicate para la conciencia revolucionaria?
Lo primero es entender que el fin de la acción revolucionaria, siempre, es preservar y estimular la conciencia revolucionaria en la sociedad, es decir, la conciencia del deber social, de pertenencia a la sociedad.
Después, dar ejemplo de dignidad revolucionaria, de ética, tal como nos enseñó el Comandante frente a los resultados del referéndum, o cuando el golpe de abril, o cuando el “por ahora” del 4 de febrero.
Tercero, revisar las causas profundas del revés, esto es muy importante, gran ventaja de los revolucionarios es saber aprender siempre, y corregir siempre, independientemente de los resultados.
Cuarto, siempre seguir luchando, por sobre todas las adversidades y los triunfos, seguir luchando, como en Alegría del Pío, como el 4 de febrero, como con el referéndum.
¡Ahora más que nunca LEALTAD con Chávez y el Socialismo!
¡Irreverencia en la discusión, Lealtad en la acción!
¡Orden del Libertador para los Cinco Héroes Defensores de la Humanidad!