30.12.08

CUBA DEFINE

En 1989, el mundo asistió perplejo a la caída sin combate del campo socialista. Inmediatamente florecieron teorías para explicar al nuevo mundo que se estructuró sobre los escombros del muro de Berlín. Se llegó hasta vaticinar el fin de la historia, absurdo que aún sobrevive.
En Venezuela la situación fue similar. Salieron nuevas interpretaciones del mundo y se produjo un cataclismo en la teoría revolucionaria. El escepticismo cundió, pasarse al campo contrarevolucionario era tolerado, bajaron las tensiones entre los revolucionarios y los dirigentes del status.
Muchos líderes revolucionarios pasaron a formar parte de los gabinetes de los gobiernos de la dominación. Se vendieron los libros de Marx y de Lenin a las librerías de usados, que los compraban a precio de papel de envolver. Era mal visto hablar de la época de la guerrilla, o se mencionaba con desprecio.
Todo parecía definido, el mundo se había reconstruido, el asunto era insertarse, conseguir ubicación en aquella arquitectura social que duraría por los siglos de los siglos.
Un hecho perturbaba a estos exrevolucionarios, ahora renegados: Cuba estaba allí, permanecía, resistía… ¿Por qué? ¿Por qué? Ninguna de sus neoteorías daba explicación a este hecho. Todas se estrellaban frente a la fortaleza moral cubana.
Las explicaciones llovieron con desespero: “está allí, pero tiene problemas, no hay jabón”. “Está allí, pero no hacen elecciones”. “Esta allí, pero no cumplen con los derechos humanos”. Explicaciones y justificaciones que se derretían al acercarse a los hechos: estaba allí, bloqueada, sin ayuda, sola en el mar del capitalismo, y no caía.
La lección era una: el Socialismo es viable y es el futuro de la humanidad.
Sólo un pueblo Socialista es capaz de la hazaña de la Cuba de aquellos días: ¡resistir a la caída del campo socialista, y al embate del imperio más poderoso que ha conocido la historia!
Ella preservó la esperanza.
Nos decía con su ejemplo que un mundo mejor es posible, que la historia no terminaba con el capitalismo, que la enfermedad era superable. Poco a poco, la humanidad volvió sus ojos a Cuba. Su llama heroica aún alumbra el camino de salida del infierno capitalista.
La posición frente a Cuba define a los revolucionarios. A ella nos une algo más que intereses materiales o afinidades ligeras: nos une la hermandad de remar juntos en el mismo barco, el de la redención del humano, el del Socialismo.
¡Chávez es Socialismo!
¡ La Enmienda es defensa de la Revolución !

29.12.08

¿CONTRA QUE LUCHAMOS?

Los Revolucionarios luchamos contra nuestra época, no hay sendas milagrosas.
Si la batalla es contra la época, es contra nosotros mismos.
Se trata de desarraigarnos, cortar las raíces que nos atan a la realidad, al sentido común, y fundar nuevas realidades, nuevas raíces, nuevos sentidos.
Sólo los dioses y los humanos son capaces de esta hazaña.
Es este atributo del humano el que transforma al simple animal que somos, en creador y a la vez destructor de mundos.
Capaz de construir la bomba atómica, y también de crear Unicornios Azules.
De construir Babilonias, y también desaparecer Hiroshimas.
Las épocas fundacionales se presentan poquísimas veces en la vida de los pueblos escogidos.
La mayoría de las naciones no conocen la oportunidad y se extinguen poco a poco en una vida fastidiada, sin más emociones que la que se desprenden de lo habitual.
Nosotros estamos en oportunidad de cortar raíces y fundar realidades, los signos de la Era son claros:
¡Los próceres han regresado!
A esculpir la roca que impidió el camino. Ya es hora de acudir al llamado profundo que nos llega desde siglos de extravío.
Que nadie se ate a anclas herrumbrosas,
Alcemos vuelo buscando el horizonte amplio de los grandes, dejemos atrás la nimiedad que construyeron en nosotros espíritus dolientes de mezquindad, de inmediatez.
Vamos a lo grande, que sólo es grande cuando dejamos la seguridad de lo conocido, cuando nos lanzamos sin red.
Marchemos a fundar la vida, no nos conformemos con lo poco, con pulir el pasado.
No nos regodeemos con triunfo de bufón. Intentemos lo inmenso, rasguemos el presente para ir al futuro.
¡El Pueblo de Bolívar ha regresado! Ahora cabalga junto a su espada para cumplir con el Monte Sacro y el Samán.
El espíritu de la Marcha a Oriente está de nuevo aquí, protejámoslo del interés mezquino que perdió a la Gran Colombia.
Allí en el amanecer, están esperando los pueblos por nosotros.
El Che nos aguarda, con su adarga al brazo.
Rocinante relincha por volver al camino.
Fabricio y Américo Silva se yerguen desde el campamento Venus, por todas partes sentimos el resplandor de la hoguera revolucionaria.
Los signos son claros, estamos en Era de milagros,
saltemos a las nubes, atrapemos la estrella.
Seamos humanos.
Hagamos la Revolución Socialista.

28.12.08

LOS CUADROS

La escasez de cuadros, de dirigentes, es común a muchas Revoluciones, estas arriban al poder emergiendo abruptamente desde las entrañas del pasado, en estas condiciones no han formado los cuadros que necesitan para la construcción revolucionaria. Esta carencia merece toda la atención, de cómo se resuelva depende en gran medida el éxito revolucionario.
La Revolución Bolivariana es un caso típico de Revolución con escasez de cuadros, de dirigentes revolucionarios. Siendo así cabe la pregunta:
¿De dónde surgen los cuadros?
Lo primero que debemos precisar es que la formación de cuadros es un fenómeno social que depende del espíritu revolucionario que impregne a la época.
Al principio, sólo hay un pequeño núcleo revolucionario, muy reducido, a veces es de sólo una persona, pero si las ideas son correctas, es suficiente. Las ideas se expanden por toda la sociedad sirviendo de referencia moral, construyendo la ética revolucionaria, creando el ambiente social para la formación y la actividad de los cuadros.
Podemos afirmar, que la falta de cuadros revolucionarios, manifiesta debilidad de ideas revolucionarias. De allí que, si queremos analizar la carencia de cuadros, un primer paso es analizar la debilidad en las ideas. Veamos algunas causas de esa debilidad:
De los regates tácticos se han construido teorías estratégicas que nos alejan del Socialismo. Es así, que hemos transformado a la necesidad coyuntural de que el Socialismo conviva con el capitalismo nacional ya existente, en una teoría de un híbrido Socialismo-capitalismo que justifica el crecimiento del capitalismo.
De las experiencias de intentos socialistas hemos sacado conclusiones sin asidero, distorsiones, que nos llevan a generalizar los errores allí cometidos, a deformar las causas de sus fracasos atribuyéndoselos al Socialismo. Tal es el caso de la Unión Soviética , que el Che sostiene y demuestra que caería por capitalista y no por socialista.
Nos hemos dejado intimidar con la patraña del capitalismo de estado, y hemos construido un “Estado avergonzado de ser Estado”, un Estado arrinconado, temeroso de cumplir su papel de representante del Pueblo.
No conseguimos aclarar el problema de la propiedad, confundimos Propiedad Social, con propiedad colectiva, comunal, privada, y esa confusión se refleja en la conciencia. No le damos al problema de la Propiedad Social de los medios de producción la importancia vital que tiene para la construcción del Socialismo.
Soterradamente satanizamos al Socialismo como un sistema que no es democrático, cuando es el ¡único sistema democrático! ¡En el capitalismo no hay democracia! Y esta falta de fe nos hace ser vacilantes en la construcción del Socialismo.
No conseguimos instalar la conciencia de pertenencia a la sociedad, aún nos movemos en los criterios de éxito individual propios del capitalismo, lo individual egoísta predomina en la actividad de los ciudadanos.
¡Chávez es Socialismo!
¡ La Enmienda es defensa de la Revolución !

27.12.08

¡CRISTO ES SOCIALISTA!

Cuando el Comandante explicó por qué Cristo fue el primer socialista de la historia, las fuerzas retardatrices oligarcas se pusieron en alerta, se desesperaron, gritaron, activaron a sus plumíferos para difundir engaños.
La reacción es comprensible, el Comandante les develó, frustró una ofensiva ideológica. Veamos.
La ofensiva ideológica oligarca consiste en negar la historia. Según esto, el pasado no tiene nada que ver con el presente, lo que hoy pasa no es influido ni influirá en la vida de la humanidad.
Así Bolívar es un fenómeno del 1800, sólo lo recordamos, pero allí quedó confinado. Cristo vivió hace dos mil años y hoy puede hacer uno que otro milagro, pero nunca su prédica podrá dirigir una transformación social que ponga en peligro los privilegios de los oligarcas. Oligarcas que son los mismos que crucificaron a Cristo, los mismos que llevaron a Bolívar a San Pedro Alejandrino, y los mismos que asesinaron al Che en la Higuera.
Se niega la historia de la rebeldía, la que sirve para despertar a los Pueblos, para guiarlos en sus luchas, la que nos dice que la batalla es milenaria, que formamos parte de un torrente libertario, que no estamos solos, que nos acompañan las ideas y las acciones de un ejército de mártires y héroes.
Cuando el Comandante revela que Cristo es el primer socialista de la humanidad, está colocando a la Revolución Bolivariana en la corriente histórica de la redención humana que comienza con Cristo, y en la que se inscriben los innúmeros intentos por construir un mundo, una base material y una conciencia, donde impere su primigenio mandato de amarnos los unos a los otros, que no es otra cosa que el Socialismo.
Cuando el Comandante dice que Bolívar es presocialista, y que esta Revolución es Bolivariana, que nuestro Socialismo es Bolivariano, está colocando a la Revolución en la corriente de los mejores pensamientos y las heroicas acciones por construir en la América un sistema que le de al hombre la mayor suma de felicidad posible, que no es otra cosa que el Socialismo.
Cuando niegan la carga humana del planteamiento bolivariano, cuando esconden y deforman la imagen del Bolívar liberador de esclavos, lo que están intentando ocultar es lo que el Comandante ha puesto a la vista de todos: La traición que sufrió el Libertador, lo mucho que todavía tiene por hacer en esta América.
Al negar la historia guillotinan la continuidad de las luchas por la redención del humano, niegan la posibilidad de cambios, le dan perennidad al sistema que hoy padecemos. Al negar la continuidad y evolución histórica de las ideas nos dicen que todo comenzó en el capitalismo y que todo finaliza aquí.
Por eso arremeten contra la historia, no pueden aceptar que el Pueblo vea hacia atrás y descubra de dónde viene, y así comprenda para dónde va.
¡Chávez es Socialismo!
¡ La Enmienda es defensa de la Revolución !

23.12.08

CÓMO ES UNA ESCUELA DE CUADROS

Comencemos diciendo que un cuadro es un revolucionario armónico, un hombre que lucha por la Revolución en los puestos de vanguardia. Combatiente en la batalla contra el capitalismo, siempre y en todos los niveles. Guerrero del Socialismo, siempre y en todos los niveles.
Conciente de sus limitaciones y defectos, lucha contra sí mismo para corregirlos y ser cada vez mejor humano, que es lo mismo que decir mejor revolucionario. Siempre en perfeccionamiento para dar más y mejor de sí.
La principal Escuela de Revolucionarios es la vida, la práctica, la acción. Siendo así:
¿Cuál es el objetivo de la Escuela ?
Se deduce que su función es unir, relacionar la teoría revolucionaria con la práctica revolucionaria. A partir de la teoría enriquecer la práctica, y a partir de la práctica nutrir la teoría. Y en ese afán construir hombres nuevos, luchadores, ese es su objetivo.
Entonces la primera condición para el funcionamiento exitoso de una Escuela de revolucionarios,
es la existencia de una práctica revolucionaria. No es un estudio que se pueda hacer en abstracto, no son unas islas formadoras de eruditos, las Escuelas están integradas a la realidad revolucionaria, a ella aplican la teoría, de ella aprenden.
La Escuela debe preparar a sus alumnos en y para la lucha revolucionaria, y eso no hay otra forma de hacerlo que participando en la lucha revolucionaria. Por eso las Escuelas son también Destacamentos de Vanguardia, el éxito de su labor debe traducirse en éxito revolucionario. No hay Escuela Revolucionaria sin práctica revolucionaria.
Las Escuelas se nutren de un Núcleo Coordinador de su actividad, éste le da sentido nacional y universal a las Escuelas. Estudia la realidad nacional, la historia, la economía, investiga temas, produce informes, investiga situaciones, sugiere soluciones, prepara materiales, coordina charlas, sugiere temas, actividades, evalúa.
Las Escuelas no son átomos solitarios, forman una gran red nacional donde cada uno de sus miembros se comunica, intercambia conocimientos, realizan actividades conjuntas, se emulan.
La Escuelas son un paso hacia la construcción de una nueva pedagogía, la pedagogía revolucionaria, distinta a la oligarca formadora de egoísmos aparentemente eficaces, pero en últimas cuentas dañino para la sociedad.
Es necesario, la Revolución lo necesita, devolver al estudio su carácter divertido, gozoso, pero también riguroso, acabar con la improvisación.
Que el estudio sea formador de mejores humanos, y no de mejores mercancías que van a padecer en el mercado de trabajo su deshumanización. Es necesario devolver al “talento la probidad” y al estudio su condición social.
Las Escuelas deben devolver a la sociedad el goce del conocimiento adquirido para el bien de la misma sociedad, el placer de prepararse para cumplir el deber social, la felicidad de ayudar a construir un mejor mundo.
Las Escuelas son murallas de contención a las falsificaciones y a los dogmas. Trincheras en la batalla de ideas, impulsores de la teoría revolucionaria, territorios de discusión.
Primeras en el combate donde quiera que la oligarquía y el imperio planteen la batalla. Reservas morales e intelectuales de la Revolución.
¡Chávez es Socialismo!
¡ La Enmienda es defensa de la Revolución !

22.12.08

¿QUÉ ES EL PUEBLO?

Los conceptos son pilares de una ideología, la reflejan, la expresan. Es por eso que los revolucionarios deben estar atentos a los conceptos propios de la ideología revolucionaria, pensarlos, analizarlos, ponerlos a prueba en la práctica.
La oligarquía mantiene asedio a los conceptos revolucionarios, los desvirtúa, los decolora, así confunde y crea terreno propicio para los extravíos.
A medida que la Revolución avanza, las exigencias de rigurosidad teórica se van haciendo más perentorias, una equivocación puede traer graves consecuencias y hasta la derrota.
Siendo así, muchos son los conceptos que debíamos afinar:
Es necesario analizar el concepto de propiedad, deformado por la oligarquía, utilizado en sus campañas, estimulador del miedo al despojo. La Revolución no ha podido dar respuesta a esta embestida ideológica y hemos cosechado debilidades.
Otros conceptos importantes de estudiar son los conceptos del poder, qué significa poder para el pueblo, cuál es el concepto de Estado, de clases, de ideología de las clases, cómo esos conceptos, que son patrimonio de la Revolución universal, se adaptan a nuestras condiciones.
La tarea es urgente, no podemos seguir avanzando sino al impulso de conceptos esclarecedores.
Hablemos del concepto de pueblo: hasta ahora se ha usado de manera poética, sublimado, con contornos poco precisos, con contenido ideológico difuso. En la primera fase de la Revolución , mientras el enfrentamiento era entre cuerpos sociales bien definidos, nos fue útil. En la fase actual, cuando los campos en pugna son difusos, se muestra inoperante, es necesaria mayor precisión, los oligarcas construyen una ofensiva ideológica que exige mayor definición, ellos se cuelan por las grietas que dejan nuestras debilidades teóricas.
Es necesario asimilar el concepto Pueblo a la Lucha de Clases, de esta manera le daremos precisión, ya no será difuso, el pueblo para nosotros serán los humildes, los desposeídos de toda propiedad de los medios de producción, agrupados alrededor de la ideología del proletariado, de los trabajadores.
Ideología que plantea la hegemonía de la Propiedad Social de los medios de producción como soporte de la hegemonía de la Conciencia del Deber Social. Única manera de construir el Socialismo, de hacer propietaria de los medios de producción a toda la sociedad, de liberar al trabajo.
Con este contenido, el concepto adquiere carácter revolucionario y será útil en el enfrentamiento contra los oligarcas, que con sus nuevas posiciones andan por allí envalentonados tratando de medrar de nuestras imprecisiones ideológicas.
Ellos representan a los oligarcas creadores de miseria, que vienen desde la independencia chupando la sangre y el sudor de este Pueblo (recuerden el concepto). Nosotros, la Revolución Bolivariana , representamos al pueblo (recuerden el concepto).

Delimitados los campos: oligarcas en una trinchera, Pueblo en la otra trinchera, tendremos claras las características del enfrentamiento. Haremos conciente la necesidad de un cambio profundo en la estructura económica oligarca, en la cultura que sustenta a esa economía, en las relaciones entre los humanos, en resumen, entenderemos la necesidad de fundar un nuevo mundo y un hombre nuevo.
¡Chávez es Socialismo!
¡ La Enmienda es defensa de la Revolución !

21.12.08

LA PEQUEÑA BURGUESÍA

Es una clase intermedia, una franja de amortiguación entre la clase capitalista y las clases depauperadas.
Es una clase que aspira y teme: aspira al ascenso individual, y tiene terror al empobrecimiento que la amenaza todos los días. De allí surgen sus principales características:
Es una clase individualista, muy egoísta, que aunque físicamente permanece en esa franja intermedia, entre empresario y pobreza, su alma, su corazón, se eleva a la situación que aspira: a la clase alta capitalista. Su realidad es, de aplastada por la losa capitalista, pero su espíritu es de magnate.
El fundamental componente de su ideología, es la creencia en la solución de los problemas sociales de manera individual. Envidia el llamado “sueño americano”, y de esa ilusión apaciguadora impregna a toda las capas expropiadas.
Difunden por todos sus medios de deformación, la falsa idea de que en el sistema capitalista quien no asciende es porque no se esforzó, que es posible mediante “la magia” del trabajo individual salir de una situación de miseria y llegar a ser hasta gerente exitoso de una transnacional. Prestigian esa vía de ascenso de muy poquísimos individuos, como una solución a los problemas sociales.
Viven la contradicción de no tener para pagar el condominio y la obligación de pagar un carro para aparentar éxito ejecutivo. Entre la creencia en el ascenso social y la realidad de estar encadenado a un puesto, sometidos a los sadismos de un jefe incapaz, tan frustrado como ellos. Todos angustiados, todos simulando un éxito huidizo.
La pequeña burguesía es la principal clase defensora del sistema capitalista:
Desvanece la necesidad Socialista, porque si se puede ascender individualmente, entonces el sistema capitalista no es malo, malo son los individuos que no luchan.
Al propugnar la lucha individual, siembra dispersión y egoísmo en las clases motoras del cambio revolucionario, impidiendo la necesaria unión para el salto revolucionario.
Pero el mayor daño que hace esta clase a la posibilidad revolucionaria lo hace por vía de sus intelectuales. Éstos producen teorías de apariencia revolucionaria, con lenguaje y aroma de cambio, pero que esconden una profunda deformación de la teoría revolucionaria y, por tanto, un inmenso obstáculo a la Revolución.
Las teorías pseudos revolucionarias de la pequeña burguesía son expresión de su realidad contradictoria:
Por un lado, sus teorías plantean la superación del capitalismo, esta faceta emana de la realidad que los oprime.
Pero, por otro lado, sus teorías plantean formas y vías impracticables. Este componente de su teoría emana del profundo terror que sienten a superar el campo capitalista donde mora su corazón.
En resumen, son capitalistas de corazón pretendiendo hacer Revolución.
En lo político, plantean la desorganización anarcoide, por eso no van más allá de una maquinaria electoral, o de un motín.
En lo económico, plantean formas nosociales de propiedad teñidas de populismo, por eso combaten la Propiedad Social administrada por el Estado.
En lo social, una fragmentación de la sociedad en egoístas, en grupos aislados.
Su acción va preñada de deslealtad.
¡Chávez es Socialismo!
¡ La Enmienda es defensa de la Revolución !

20.12.08

LAS IDEOLOGÍAS

Es complicado el mundo de las ideologías, son vivas, se resisten a una definición simple. Podríamos decir que ideología es “la visión, las ideas que del mundo tenga un grupo humano, una clase social”, y estaríamos en lo cierto, pero esta definición sería mecánica, en la vida las ideologías se presentan de manera más dinámica. Veamos.
La ideología tiene estrecha relación con la existencia: la existencia determina la conciencia. Ahora bien, nos dice el psicólogo Wilhelm Reich que:
…“el hombre está sometido a sus condiciones de existencia por vía doble, directamente por el influjo inmediato de su condición económica y social, e indirectamente por la estructura ideológica de la sociedad”.
De esta manera, las clases dominadas viven una contradicción entre la ideología que emana de su existencia y la ideología de los dominantes, que las coloniza mentalmente, que es hegemónica, que conduce a la sociedad.
Así se explica que el alma de los dominados sea el principal soporte de la dominación, que los pobres de la tierra sostengan a sus verdugos, se mantengan sumisos frente a la dominación, se explica que sean los humildes los que libren las grandes guerras de las clases dominadas, y que los depauperados hayan votado durante medio siglo por el pacto de punto fijo.
La Revolución es la liberación de la ideología que emana de la existencia de los trabajadores, de los humildes, que pasa entonces a ser hegemónica, a ser dominante, a conducir a la sociedad.
La gran virtud de la Revolución Bolivariana , del Comandante Chávez, fue hacer que entrara en la batalla social, con altas posibilidades de éxito, la ideología proletaria, el Socialismo, la única que puede liberar a la humanidad del camino infernal del capitalismo. Expliquemos.
El capitalismo se sustenta en la propiedad nosocial de los medios de producción, que hace posible la condición de que unos trabajen y otros se apropien de ese trabajo. De allí emana la ideología dominante, la ideología capitalista, y también emana la ideología dominada, la de los trabajadores.
La contradicción que se expresa en la economía, se presenta también en el mundo de las ideologías.
Esta contradicción sólo es posible resolverla, sólo es posible liberar a la ideología dominada, si la sociedad trabaja para ella misma, si el trabajo deja de ser apropiado por los nosociales y pasa a ser propiedad de toda la sociedad, de cada uno de los individuos que la constituyen, haciendo posible el precepto cristiano: “de cada uno según su capacidad, a cada uno según su necesidad”.
La liberación del trabajo sólo pueden hacerla los que trabajan, los trabajadores.La pequeña burguesía, que es una clase que existe guindando entre la capitalista y la trabajadora, tiene también una ideología oscilante: está contra el capitalismo, pero tiene terror al Socialismo, por eso inventa diez mil fórmulas para mantener el fundamento capitalista: la propiedad nosocial. De allí el fracaso para conducirnos al Socialismo, de la cogestión, de las eps, etc.
¡Chávez es Socialismo!
¡ La Enmienda es defensa de la Revolución !

19.12.08

¡QUE CON NOSOTROS NO CUENTEN!

Nosotros somos creyentes que la crítica y la autocrítica es motor de esta Revolución, y la ejercemos con irreverencia, es decir, criticamos siguiendo las enseñanzas del Che que explicaba:
“Nos hemos hecho el firme propósito de no ocultar una sola opinión por motivos tácticos”…
El mismo Che estimulaba la crítica diciéndole a sus compañeros de trabajo:
“prefiero mil veces un tipo que me dice: mire yo no creo todo lo que usted dice, usted es un animal”…
Ejercemos la crítica desde el Socialismo y desde esta Revolución Bolivariana, Socialista y Chavista. Eso somos: Bolivarianos, Socialistas y Chavistas, y no nos molesta si nos tildan de extremistas, al contrario de herirnos, nos honra.
Somos Bolivarianos, porque creemos que esta gesta que hoy libramos es continuidad de la Revolución de la Independencia , que estamos dando concreción y cumplimiento a la obra que El Libertador dejó inconclusa.
Somos Socialistas, porque creemos que el futuro de la humanidad depende de la construcción del Socialismo, y que este país, tal como en la época de la independencia fue pionero en la faena libertaria, hoy está llamado a ser vanguardia en esta nueva y más profunda guerra de independencia de toda la humanidad.
Y somos Chavistas, porque creemos que la conexión Líder-Pueblo es imprescindible para adelantar las tareas revolucionarias, y esa conexión se ha establecido entre el Comandante y el Pueblo, de manera tal que hoy no es posible pensar en la Revolución , en la construcción del Socialismo, sin ser chavista.
En resumen, no se puede ser Revolucionario auténtico, Bolivariano auténtico, Socialista auténtico, sin ser Chavista auténtico.
No es posible pensar en avanzar hacia el Socialismo sin Chávez, esta Revolución triunfa o es derrotada con Chávez.
Es propicio reafirmar las ideas anteriores, porque andan por allí unos pseudorevolucionarios, pregonando la especie mezquina de una supuesta corriente revolucionaria que se desprendería del chavismo para unirse en un supuesto frente antichávez.
¡Que con nosotros no cuenten!
Nosotros peleamos nuestras ideas adentro, con lealtad en la acción, e irreverencia en la discusión, pero adentro, como lo hemos hecho toda la vida.
Pensamos que es la Revolución Bolivariana , la oportunidad más importante que se le ha presentado a este Pueblo para avanzar hacia su redención, desde la época del Libertador, y temprano aceptamos el reto de contribuir a que se perfeccionara, que no se desviara.
En ese empeño no pedimos nada que no fuera la oportunidad de luchar por lo que siempre hemos luchado, por la Revolución y el Socialismo.
Y estamos agradecidos “a la vida por habernos dado tanto”: la oportunidad de participar en el más hermoso intento de hacer realidad el milagro de la construcción de un mundo mejor para nuestro Pueblo.
¡Que con nosotros no cuenten! los mezquinos, que por razones subalternas no se sumaron a la gran causa de la Revolución Bolivariana y han pasado todos estos años puliendo sus egos, refunfuñando, y accionando junto a la derecha fascista. Nosotros somos revolucionarios y somos chavistas.
¡Con Chávez todo, sin Chávez nada!
¡Es la hora de la Lealtad !
!Irreverencia en la discusión, Lealtad en la acción!
¡ La Enmienda es defensa de la Revolución !

18.12.08

LAS MISIONES, CAPRILES Y LEDEZMA

El Comandante acostumbra citar una frase de Trotsky, que recuerdamos así: “toda Revolución necesita del látigo de la contrarrevolución para avanzar”. Sentencia de la que apreciamos su sabiduría a medida que avanzamos en la Revolución Bolivariana. Veamos.
Los oligarcas que tomaron posiciones en las pasadas elecciones regionales, despliegan su plan: Están en la fase de acumulación mediante el engaño y el temor, luego pasarán a la fase de asalto a la Revolución. Esta nueva postura, diferente a la del enfrentamiento directo, merece estudio.
En esta primera fase, de engaño y uso del temor para forzar al pueblo a decisiones contra natura, como esa de elegir a sus propios verdugos, se presentan como aliados de Las Misiones y ofrecen colaborar con el gobierno.
Primero, se ve que tienen dificultades para ocultar su condición de fascistas, en todas partes muestran su colmillo, odian al pueblo humilde, no han podido impedir que de sus filas salgan hordas vengativas a ensañarse contra las misiones, el ataque es generalizado, el odio inocultable.
Pero esa no es la sustancia del problema, el asunto se debe plantear así: los oligarcas nos ofrecen colaboración y aceptan las misiones, ¿cómo responder a eso?
Las Misiones no son un hecho aislado, forman parte de un camino, el camino hacia el socialismo, hacia la redención del humano. Por tanto es el camino de la sustitución del capitalismo.
Entonces, las Misiones que ellos quieren apoyar no son las mismas nuestras, el apoyo de ellos es maniobra para apuntalar al capitalismo, derrocar a la Revolución , yugular a Chávez, y finalmente acabarán con las misiones.
¿Cómo descaretarlos?
Se debe profundizar en el Socialismo para afirmar el verdadero carácter de las Misiones: son un paso en la sustitución del capitalismo que ellos defienden, entonces defender a las Misiones será defender al Socialismo. De esa forma se les caerá la careta, veremos sus verdaderas intenciones.
El sistema nacional de salud pasó a ser un frente de batalla, por eso ellos piden administrar los hospitales. Nosotros debemos afinar al Sistema de Salud, hacerlo más eficiente, y al mismo tiempo socializar las grandes clínicas, acabar con la práctica de los seguros privados.
Debemos ir con fuerza hacia la hegemonía de la Propiedad Social de los medios de producción, que ya lo hemos dicho, es la que se entrelaza con la Conciencia del Deber Social, no es un asunto de renta es un asunto de conciencia.
Debemos lanzar ¡ya! la Revolución en la conciencia, dar rigor a la teoría revolucionaria que sustenta la Revolución Bolivariana. Todos los instrumentos revolucionarios al servicio del estudio y de la formación revolucionaria.
Repensar la organización política y social, hacer los ajustes que sean necesarios, convertir a esa organización en modelo de disciplina y de conducta revolucionaria. Sólo en ese ambiente las “Escuelas de Cuadros” rendirán sus mejores frutos.
Si no avanzamos, si nos quedamos dando vueltas, ellos conseguirán aislar a las Misiones, desvirtuarlas, convertirlas en mera filantropía, y seguirán su marcha en contra de la Revolución.
¡Chávez es Socialismo!
¡ La Enmienda es defensa de la Revolución !

17.12.08

VENCERSE A SÍ MISMO

El individuo es un compendio de la sociedad en que vive, en él se resume el drama social de su época. Es imposible escaparse a esta ley. Siendo así, el individuo es el escenario de la contienda de clases de su tiempo. O, lo que es lo mismo, la parte más importante de la cruenta batalla de la lucha de clases se da en el interior de los individuos.
Es en las praderas del alma individual donde se decide la lucha de clases. Los revolucionarios, para tener éxito en su tarea, deben estudiar este punto fundamental, porque no hay Revolución sin revolucionarios, y no hay revolucionario si antes no se ha vencido a sí mismo.
Las conductas de los revolucionarios, son reflejo de esta lucha de clases que ocurre en la entraña individual. Allí se opone la ideología de las clases dominantes, los valores dominantes, las costumbres, la ética, toda una espiritualidad sembrada en la temprana niñez, con la ideología revolucionaria que se adquiere con la educación y la imaginación. En otras palabras, la lucha revolucionaria es principalmente una lucha entre la niñez, que se enfrenta a la espiritualidad que se van adquiriendo con la comprensión adulta.
Esta batalla, entre lo que fuimos y lo que queremos ser, se desnuda en la toma de decisiones. Veamos.
Cuando la sociedad se reconoce en un individuo y lo hace líder, sean del nivel que sean, la pugna de clases dentro de estos escogidos adquiere características sociales. Las decisiones del conductor afectan a la sociedad, pero están determinadas por la pugna que sucede en el individuo convertido en líder. Expliquemos con un ejemplo.
Bolívar liberó a los esclavos, y esa fue una decisión que afectó profundamente a la sociedad de su época. Pero, esa decisión nace de una lucha en el alma atormentada del Libertador, allí se enfrentaron la enseñanza de su niñez, quinientos años de cultura colonial, de aceptación y justificación de la esclavitud, con los conocimientos y la conciencia que había adquirido Bolívar en su vida de adulto. En el caso de bolívar, triunfó la idea libertaria adquirida durante su vida adulta, sobre la espiritualidad esclavista sembrada en su niñez. Por eso, él es un gran revolucionario. Páez, por el contrario, sucumbe a los valores de la oligarquía, traiciona las ideas adquiridas en su adultez, al lado del Libertador, y se entrega a los valores de las clases hegemónicas que le sembraron en la niñez.
Podemos decir, entonces, que para hacerse revolucionario, para hacer la Revolución , es vital derrotar, todos los días y en cada decisión, a la ideología de la dominación que llevamos aferrada a nosotros con los poderosos hilos del inconsciente infantil. El revolucionario debe vencerse a sí mismo.
¡Chávez!
¡ La Enmienda es defensa de la Revolución!

16.12.08

LA PROPIEDAD EN LA LUCHA POR EL SOCIALISMO

La esencia del Socialismo es restituir las relaciones amorosas entre los humanos, y de éstos con su entorno. Es integrar la sociedad que ha sido fragmentada.
La descomposición de la sociedad se debe a siglos de sistemas que permiten la apropiación del trabajo, que es de todos, que es de la sociedad, por parte de una fracción de la misma. Este robo social se realiza usando como fundamento, como “pistola económica”, la propiedad nosocial de los medios de producción, y una espiritualidad, una conciencia egoísta, fragmentadora, que justifica el atraco y lo perpetúa.
Entonces:
La lucha por el Socialismo es en esencia la lucha por restituir la hegemonía de la Propiedad Social de los medios de producción, junto a la hegemonía de la Conciencia del Deber Social. Es decir, los medios de producción deben volver a ser propiedad de toda la sociedad, y los individuos deben adquirir conciencia de que su suerte esta ligada, se realiza, a través de la suerte de la sociedad.
Podemos afirmar, rotundamente, que no es posible construir el Socialismo sin la hegemonía de la propiedad social de los medios de producción.
Se comprende que los oligarcas centren aquí sus ataques contra el Socialismo.
La lucha contra la formación de la Conciencia del Deber Social, la desarrollan a través del estímulo a valores individuales, egoístas. Los siembran desde la infancia, y se valen de los más variados medios, desde la escuela hasta la televisión. Todo el día estamos sometidos a una lluvia de valores morales que apuntalan la fragmentación social y justifican la guerra de todos contra todos.
La lucha contra la hegemonía de la Propiedad Social de los medios de producción, la hacen de manera más solapada. Ellos saben que es allí, en la economía, donde en última instancia se decide el rumbo del proceso, y es allí donde ponen en juego todas sus artimañas y habilidades.
La necesidad de la hegemonía de la Propiedad Social de los medios de producción, no es un capricho de ultraizquierdistas, se trata de que el Socialismo no es posible sin esa forma de propiedad.
Se deduce, que el debate que se avecina tenga como fundamento la definición de la forma de propiedad hegemónica. La tarea no es fácil, existen muchos atajos para extraviarse.
Procesos revolucionarios han sucumbido a la tentación de buscar formas que falsifican a la propiedad social, para terminar en un eterno ritornello al capitalismo.
Ahora, después que el Comandante decreta profundización del camino al Socialismo, se revolvieron todos los argumentos, afeites y disfraces, para tratar de atrapar la economía dentro de la camisa de fuerza de la propiedad nosocial, capitalista, de los medios de producción. Es así que abundan las declaraciones proponiéndonos mil y un extravíos, menos avanzar hacia la Propiedad Social.
¡Chávez!
¡ La Enmienda es defensa de la Revolución !

15.12.08

REVOLUCIÓN REBELDE

El título parece una repetición innecesaria: ¿cómo puede haber una Revolución que no sea rebelde? Pero, uno de los peligros de la Revolución es caer en la parsimonia burocrática, en la pérdida de la rebeldía. Veamos.
La Revolución nace de un acto de extrema rebeldía que enciende el alma del Pueblo y lo lleva a cuestionar, a sustituir, a derrumbar todo lo existente. Las masas despiertan del letargo y se disponen a fundar universos.
Los primeros tiempos son de embriaguez espiritual, un viento vivo recorre el corazón de la nación. Un Pueblo así está preparado para lo grande, es capaz de la hazaña histórica más elevada: es capaz de cambiar y cambiarse.
Luego, la Revolución debe pasar a la etapa de la madurez, es necesario organizar, fundar instituciones, producir, asentar, construir. En ese momento aparecen dos peligros: la parsimonia burocrática y el anarquismo, es necesario avanzar por un filo rodeado de estos dos riesgos.
El anarquismo desintegra, relaja la necesaria disciplina, estimula el egoísmo, cada factor actúa por su cuenta, toma la Revolución en sus manos, no ve más allá de su mundito.
El anarquismo es una enfermedad que prospera cuando la Revolución deja vacíos políticos, cuando faltan las explicaciones y abundan las incomprensiones. Siempre termina desconociendo la autoridad del líder, y eso es fatal para el proceso.
La burocratización es el otro peligro. Cuando una Revolución se burocratiza, la política se vuelve un ejercicio sin alma, se castra la pasión que impulsa el proceso, las acciones políticas se vuelven un asunto de “orden superior”, y no de conciencia y fuego. De esta manera se forma el espejismo de que avanzamos, de que se va en el camino correcto.
La dirección se siente cómoda, se cumplen las metas, pero sólo en los papeles, se aprueban documentos y se cumplen directrices, pero sin conquistar corazones.
La burocratización de la política castra la rebeldía, el fervor del inicio de la Revolución , ya lo moral no impulsa, sólo lo hace lo material, la capacidad de sacrificio se merma, aparece el viático que decapita la entrega.
La dirección revolucionaria, que al principio cabalgaba sobre un huracán, porque así son las masas, rebeldes, cuestionadoras, discutidoras, difíciles de convencer, pero una vez convencidas dan la vida por sus creencias, ahora navega sobre las aguas plácidas pero estériles de la conformidad, la masa asiste distante a todo lo que pasa, su mirada es fría, inexpresiva, se mueve sin la llama interna.
La Revolución Bolivariana debe luchar contra esos dos peligros, por eso hoy más que nunca es necesaria “irreverencia en la discusión y lealtad en la acción”.
Discutir con rigor, todo y de todo, nada debe ser callado por motivos tácticos, perseguir la discusión es criminal, no convencer es caer en el abismo de la burocratización.
Debemos tener lealtad en la acción, actuar aisladamente nos debilita, actuar sin dirección le hace el juego a la oligarquía. Y, por sobre todo, debemos lealtad al líder que es garantía de Socialismo.
¡Aquí no cabe ni sucesión ni restauración, sólo Chávez!
¡Aquí no se rinde nadie!

14.12.08

CARACAS Y MAGALLANES

¿En qué se diferencian dos equipos de béisbol? Digamos que las diferencias son de grados, no son diferencias de fondo, se diferencian en la superficie pero se igualan en la estructura, uno no refuta al otro, forman parte del mismo esquema, están en el mismo juego, son iguales.
Esta reflexión nos vino a la mente cuando intentábamos buscar las diferencias entre Bolivarianos y la oposición capitalista. El punto es muy importante, de la profundidad de las diferencias que tengamos depende la marcha de esta Revolución. Veamos.
Si decimos que no tenemos diferencias, que somos como Caracas y Magallanes, diferentes pero iguales, rivales pero unidos por la pelota y, por supuesto, todos jugando el mismo juego, entonces la Revolución es una “cuestión de estilo”, de “puntos de vista diferentes”, de “matices”, pero nada de fondo.
Así podríamos coincidir, ponernos de acuerdo en un término medio, ni chicha ni limonada, ni Socialismo maximalista ni capitalismo salvaje, debemos buscar una especie de socialcapitalismo “aceptado por todos”. El resultado de esta atenuación de las diferencias es la inexorable debilidad del camino revolucionario, si somos tan iguales ¿para qué luchar?
El resultado de ese debilitamiento de la Revolución es el triunfo de la restauración y el recrudecimiento de los problemas sociales que el capitalismo no puede resolver, al contrario los potencia. Y aquí caben las palabras del Comandante, no habrá paz porque no habrá justicia.
En contraste, si reconocemos las profundas diferencias que tenemos con los oligarcas y los neoligarcas, estaremos dotándonos de razones sagradas por las cuales luchar. Veamos.
Los revolucionarios postulamos la integración de la sociedad, que el individuo recupere su conciencia de pertenencia a la sociedad, el convencimiento de que su suerte está ligada a la suerte de la sociedad, y la sociedad se ocupa de la suerte de cada uno de sus miembros.
Ellos postulan que la suerte del individuo no depende de la suerte de la sociedad, sino de su esfuerzo egoísta, que cada individuo debe procurarse su propio bienestar sin importarle la suerte de la sociedad. Los revolucionarios postulamos que el centro de nuestra actividad es el hombre en sociedad. Ellos postulan que el centro es el lucro del hombre individual.
Los revolucionarios postulamos que la medida de todo es el bienestar social, si beneficia a la sociedad, entonces beneficia a sus miembros y es ético. Ellos postulan que la medida de todas las cosas es el lucro, si da lucro es ético, aun perjudicando a la sociedad.
Nosotros postulamos la hegemonía de la Propiedad Social de los medios de producción, administrada por un Estado que vele por la integración de la sociedad y el individuo. Ellos postulan la hegemonía de la propiedad nosocial de los medios de producción, con un Estado débil que únicamente se ocupe de la vigilancia de sus intereses.
No creamos en pajaritos, no somos Caracas y Magallanes, los capitalistas siempre verán a los Socialistas como enemigos a muerte, y con su fascismo nos seguirán atacando.
¡Ellos son capitalistas, nosotros somos Socialistas!
¡Sin Chávez no hay Socialismo y sin Socialismo no hay Chávez!
¡Socialismo no es capitalismo!

13.12.08

EL CÓDIGO

Sin pretender un trabajo acabado, aportamos algunas ideas para ir construyendo El Código de Ética de los Destacamentos de Vanguardia. Nos apoyamos en la experiencia revolucionaria universal, en el pensamiento de Fidel. Veamos.
El Destacamento de Vanguardia:
· Garantizará la continuidad del Socialismo y la Revolución.
· Apoyará la formación de la conciencia revolucionaria del pueblo, educándolo en las ideas del Socialismo, exhortando al trabajo voluntario, a la defensa de la Revolución , de la propiedad y conciencia social.
· Definirá los campos en pugna: el campesino, el obrero, el trabajador modesto, la familia pobre, el ciudadano humilde, versus los oligarcas.
· Conservará el entusiasmo de las masas, a través de la movilización tras acciones altruistas.
· Los Destacamentos orientan en todos los niveles, más no gobiernan en ninguno de ellos. Engranan la revolución con la masa.
· Será un aparato de dirección y control de las actividades de la Revolución. Dirige y trabaja fundamentalmente a través de todas las organizaciones de masas (sindicatos, jóvenes, reserva, misiones, etc.).
· Supervisa, controla, vigila, informa, discute lo que tenga que discutir. Las discrepancias, cuando sean honestas y estén dentro del Socialismo, son provechosas y transitorias. Se mantendrá cualquier discrepancia dentro de las normas del respeto por las opiniones. Los problemas pasan, los pueblos duran y las revoluciones persisten.
· Lucha incansablemente por el cumplimiento de los planes y programas revolucionarios.
· Allí se encuentran los mejores elementos revolucionarios del país, los más eficientes, los mejores trabajadores. Allí no interesa el número sino la calidad. Pertenecer a un Destacamento exigirá responsabilidad, sacrificios, abnegación, menos privilegios, ya que adonde hay trabajo y esfuerzo no van los oportunistas.
· Es el vehículo de la vocación, de la inteligencia revolucionaria, cohesiona el valor de todos los heroísmos, del espíritu de sacrificio de miles, del espíritu de combate, del amor a la Revolución. Se dará la oportunidad de desarrollar las mejores cualidades de cada individuo que quiera trabajar para la sociedad
· Pertenecer al Destacamento no comporta privilegios de ninguna clase, ni económicos, ni sociales. Para ello se evitarán cualquier tipo de condiciones que propicien la formación de cohortes de aduladores, y el tareísmo sin objetivos a mediano y largo alcance. Nadie podrá usar los destacamentos como trampolín personal.
· La función del Destacamento nunca será dar puestos, ya que está en capacidad de diferenciar entre el poder real (el de la idea verdadera), del poder formal (el del cargo y la capacidad de castigar a otros). Desprecia la vanidad de mandar y gobernar.
¡Chávez es Vanguardia Socialista!

12.12.08

LAS FORMAS

Así como las formas geométricas son pocas y se repiten con pasmosa regularidad, las formas políticas y sus luchas se repiten insistentes a lo largo de la historia de los pueblos. Veamos.
Circunferencias, hexágonos, triángulos, paralelepípedos se repiten en la naturaleza, igual que a través de las diferentes etapas históricas encontramos reformistas, revolucionarios, derechistas, capitalistas, socialistas.
Por eso el estudio de la historia es fundamental para entender el presente y su devenir. La historia se repite porque los espectros del pasado, las obras inconclusas, aun que se creían enterradas regresan reclamando su puesto en el presente, soluciones definitivas.
Hoy vivimos, sentimos, la presencia de la independencia entre nosotros, no es por azar que esta Revolución se llama Bolivariana, Bolívar regresó a hacer lo que la oligarquía mantuana le impidió concluir en el 1800.
Las formas políticas se repiten:
Los mantuanos viven aquí entre nosotros, basta ver a nuestro alrededor para encontrarlos, ya no montan hermosos corceles, los cambiaron por Mercedes, Lexus y BMW.
Los campesinos de la América Bolivariana , se vinieron a los cerros de Caracas, allí están los Centauros de Apure, y los guerreros de Ayacucho.
El espíritu de La Junta Patriótica habita en los corazones insurgentes, irreverentes de los desposeídos que ven en la Revolución la concreción de la Esperanza.
La primera república, la boba, toca la puerta de la quinta república, reclamando la gloria que las manipulaciones mantuanas le negaron.
Miranda deambula entre nosotros como un espíritu que alerta que no hay capitulación triunfante, que nunca hay que desfallecer, que es más glorioso morir en Carabobo que en la Carraca.
Es así, la lucha es la misma, asombrosamente la misma. La experiencia está allí, es la misma piedra en el camino. El 23 de Enero del 58 no la vimos. Nos volvieron a derrotar. Bolívar que cabalgaba por las colinas del siete machos, tuvo que regresar a San Pedro Alejandrino, Zamora que vino con sus valientes llaneros, encontró su San Carlos en el Cuartel, no ya con forma de bala, sino de ahorcamiento simulado.
Es así, la lucha es la misma, asombrosamente la misma. Ahora, con la Revolución Bolivariana , aparecen idénticas formas, proponen las mismas desviaciones y extravíos.
Frenan la liberación de los esclavos, se olvidan de Ocumare y Carúpano, sí lo harán pero más tarde, son buenos los desposeídos, pero no tanto para tener poder del grande, mejor es ir por parte, ahora es conveniente un híbrido con el capitalismo, una junta protectora de los derechos de los capitalistas, es mejor que la independencia socialista.
Es hora de repetir los gritos: “Trescientos años de calma no bastan”… “Si la oligarquía mantuana se opone lucharemos contra ella y haremos que nos obedezca”.
Es así, regresó la batalla por la independencia, y esta vez Bolívar se quedará entre nosotros, no regresará a las riberas del Magdalena, su lugar es aquí en esta patria que volverá a ser faro de la redención americana y guía de la humanidad en su lucha por sobrevivir a los designios de muerte del monárquico capitalismo.
¡Chávez!

11.12.08

¿QUÉ ES EL PUEBLO?

Los conceptos son pilares de una ideología, la reflejan, la expresan. Es por eso que los revolucionarios deben estar atentos a los conceptos propios de la ideología revolucionaria, pensarlos, analizarlos, ponerlos a prueba en la práctica.
La oligarquía mantiene asedio a los conceptos revolucionarios, los desvirtúa, los decolora, así confunde y crea terreno propicio para los extravíos.
A medida que la Revolución avanza, las exigencias de rigurosidad teórica se van haciendo más perentorias, una equivocación puede traer graves consecuencias y hasta la derrota.
Siendo así, muchos son los conceptos que debíamos afinar:
Es necesario analizar el concepto de propiedad, deformado por la oligarquía, utilizado en sus campañas, estimulador del miedo al despojo. La Revolución no ha podido dar respuesta a esta embestida ideológica y hemos cosechado debilidades.
Otros conceptos importantes de estudiar son los conceptos del poder, qué significa poder para el pueblo, cuál es el concepto de Estado, de clases, de ideología de las clases, cómo esos conceptos, que son patrimonio de la Revolución universal, se adaptan a nuestras condiciones.
La tarea es urgente, no podemos seguir avanzando sino al impulso de conceptos esclarecedores.
Hablemos del concepto de pueblo: hasta ahora se ha usado de manera poética, sublimado, con contornos poco precisos, con contenido ideológico difuso. En la primera fase de la Revolución, mientras el enfrentamiento era entre cuerpos sociales bien definidos, nos fue útil. En la fase actual, cuando los campos en pugna son difusos, se muestra inoperante, es necesaria mayor precisión, los oligarcas construyen una ofensiva ideológica que exige mayor definición, ellos se cuelan por las grietas que dejan nuestras debilidades teóricas.
Es necesario asimilar el concepto Pueblo a la Lucha de Clases, de esta manera le daremos precisión, ya no será difuso, el pueblo para nosotros serán los humildes, los desposeídos de toda propiedad de los medios de producción, agrupados alrededor de la ideología del proletariado, de los trabajadores.
Ideología que plantea la hegemonía de la Propiedad Social de los medios de producción como soporte de la hegemonía de la Conciencia del Deber Social. Única manera de construir el Socialismo, de hacer propietaria de los medios de producción a toda la sociedad, de liberar al trabajo.
Con este contenido, el concepto adquiere carácter revolucionario y será útil en el enfrentamiento contra los oligarcas, que con sus nuevas posiciones andan por allí envalentonados tratando de medrar de nuestras imprecisiones ideológicas.
Ellos representan a los oligarcas creadores de miseria, que vienen desde la independencia chupando la sangre y el sudor de este Pueblo (recuerden el concepto). Nosotros, la Revolución Bolivariana, representamos al pueblo (recuerden el concepto).
Delimitados los campos: oligarcas en una trinchera, Pueblo en la otra trinchera, tendremos claras las características del enfrentamiento. Haremos conciente la necesidad de un cambio profundo en la estructura económica oligarca, en la cultura que sustenta a esa economía, en las relaciones entre los humanos, en resumen, entenderemos la necesidad de fundar un nuevo mundo y un hombre nuevo.
¡Chávez es Socialismo!
¡La Enmienda es defensa de la Revolución!

10.12.08

LA CARTA DE CAPRILES

El domingo 7 de diciembre apareció en la prensa nacional una carta que Capriles Radonsky le envía al Comandante Chávez, es una carta que merece la atención de los revolucionarios porque es parte de un plan que la oligarquía despliega desde las posiciones que conquistó en noviembre.
Lo primero que salta a la vista es el cinismo y la hipocresía de quien sabemos es nuestro enemigo mortal. Él se dirige al Comandante con una cortesía y familiaridad que no corresponde a quien durante estos diez años de Revolución ha estado involucrado en lo más infame de los intentos por derrocar al gobierno revolucionario.
Pero dejemos de lado la forma y vayamos al fondo del asunto:
Busca Radonsky, una entrevista con el Comandante para:
“trazar en conjunción con el Poder Nacional, aquellas líneas estratégicas que permitan concertar los esfuerzos necesarios para obtener un progreso substancial en materia social, cultural y económica”.
Es un truco de baja estofa, porque el objetivo estratégico de capriles es la defensa del capitalismo, causante de la miseria material y espiritual del pueblo de Venezuela y responsable directo del desastre ecológico que hoy atravesamos y que pone en peligro la sobrevivencia de la especie y de la vida planetaria.
Y el objetivo estratégico del Comandante y la Revolución es el Socialismo, único sistema capaz de garantizar la felicidad y la sobrevivencia de la especie humana.
Entre él y nosotros no hay “conjunción” posible de objetivos estratégicos.
Siendo así, la estrategia de capriles es debilitar al Gobierno Revolucionario para facilitar un zarpazo que yugule la esperanza socialista. Todo lo que haga, todo lo que proponga está cubierto con el manto de la truculencia y por ese objetivo infame.
Sólo podríamos creer en las buenas intenciones de capriles si se pliega al Socialismo y a su líder el Comandante Chávez. Es la única manera de creer en las buenas intenciones, del que en abril perpetró un asedio contra niños y mujeres en la Embajada de Cuba.
No lo hará, esa no es su intención, entonces, por lo menos que tenga la hidalguía de defender al sistema capitalista.
El programa Misión Conciencia, que se transmite por Radio Nacional de Venezuela, Canal Clásico, a las cinco de la tarde, le propuso un debate donde él defienda abiertamente al capitalismo y ellos defiendan al Socialismo.
Nos parece una necesidad, allí estaremos. Sería interesante oír a capriles despojado de trucos publicitarios, discutiendo con seriedad su propuesta capitalista.
Es hora de que la contradicción importante de esta etapa histórica, que es sin duda entre Socialismo y capitalismo, entre Socialismo y barbarie, tome la calle, se socialice, se discuta por toda la sociedad.
La Revolución Bolivariana ha llegado a una encrucijada donde o avanza o perece, las ambigüedades no tienen cabida. La oligarquía se nutre de nuestras vacilaciones. Los híbridos económicos, las conciliaciones políticas, las concesiones organizativas al anarquismo, nos debilitan y abren grietas que facilitan el discurso fraudulento de la reacción. Sólo un Socialismo sólido, con rigor, puede hacer frente a la oligarquía.
¡Chávez es Socialismo!
¡La Enmienda es defensa de la Revolución!

9.12.08

¿CUÁL ES LA DIFERENCIA ?

Las autoridades regionales oligarcas electas en noviembre ya despliegan su plan, prometen que serán más eficaces que las autoridades bolivarianas, cacarean expandir la experiencia de Chacao. Esto ya lo intentó Irene y se estrelló contra la realidad nacional. El Este es una torre de marfil, algo así como las fantasías de los cuentos de Cabot, afuera las acecha el monstruo capitalista.
En el capitalismo, existen los Chacaos y simultáneamente tienen que existir los barrios pobres. Por cada Chacao deben existir mil Petares, porque la esencia del sistema capitalista es la desigualdad. El capitalismo es el sistema de la desigualdad, unos pocos son propietarios, viven en la opulencia, se apropian de las riquezas, del trabajo, de la vida de las grandes mayorías desposeídas, y las condenan a vivir en la miseria.
Esta desigualdad, donde unos son propietarios de los medios de producción y otros son desposeídos de los medios de producción, origina necesariamente desigualdad en la distribución de los bienes, en la calidad de la vida, en el acceso a los medios de vida.
Además, crea una cultura basada en el egoísmo que justifica, reproduce y perpetúa las desigualdades. Así la clase poseedora desprecia a las clases desposeídas, las clases desposeídas son sumisas.
Entonces, resolver la miseria, la pobreza, no es un asunto de buena voluntad o de mayor eficacia parcial, es un problema de sistema.
La Revolución es un movimiento profundo, radical, que busca ir a la raíz de la desigualdad, al cambio de las relaciones entre los humanos, las económicas y las espirituales. Esta es la única manera de acabar con la miseria, con la pobreza.
La Revolución siempre es más eficaz porque es una respuesta global, verdadera a la pobreza, basada en el amor, la fraternidad, en la solidaridad, pero también en profundos cambios en las relaciones económicas.
La respuesta capitalista es parcial, toca sólo la superficie, pueden acabar con la miseria en un área pequeña, y por un tiempo históricamente corto.
Debemos enfrentar a los oligarcas desde el planteamiento del Sistema. Demostrar que no pueden cumplir sus promesas, es imposible que el capitalismo resuelva los problemas de exclusión que le son inmanentes.
Demostrar que no es posible la felicidad de sólo segmentos de la sociedad, de zonas aisladas, que la suerte de los humildes depende de la suerte de la sociedad toda, los grandes problemas sociales sólo tienen soluciones sociales, nunca individuales o zonales.
Las autoridades revolucionarias regionales, deben ser eficaces, y esto sólo es posible en la medida que lo nacional impulse al Socialismo. En otras palabras, la eficacia regional está íntimamente ligada a la eficacia nacional que no es otra cosa que impulsar el Socialismo.
Allí otras serán las metas, otra la manera de medir la eficacia, otra la cultura de producción y de consumo, otra la conciencia, sólo con estos cambios podremos derrotar la inseguridad, elevaremos los niveles de educación, de alimentación, en resumen de felicidad de todos.
Esa es la diferencia: los oligarcas plantean engaños, los revolucionarios soluciones radicales.
¡Chávez es Socialismo!
¡La Enmienda es defensa de la Revolución!

8.12.08

¡NO SOMOS IGUALES!

En los sistemas sociales anteriores al capitalismo, las clases dominantes basaron su dominación en la idea de su superioridad intelectual, cultural, genética, biológica… De esta manera, las clases explotadas eran inferiores y su destino era ser explotadas, no estaban aptas para otras funciones.
Con la llegada del capitalismo, la dominación se basó en la idea de igualdad, de “que todos somos iguales”, así el hijo de un proletario puede llegar a ser general y hasta presidente, o doctor. Así escamotearon la lucha de clases y convirtieron la lucha contra la dominación en un problema individual.
La dominación ganaba así una justificación y una simulación casi perfecta, que la protege de cualquier intento Revolucionario. Claro, si todos somos iguales, si todos tenemos las mismas oportunidades, el ser obrero o el ser doctor depende de la dedicación al trabajo y al estudio de cada uno, el sistema no está mal, el que está mal es el individuo. Se vive en la miseria y se es culpable de vivir en esa miseria.
Ocultada la existencia de las clases, armonizada, reconciliada así la lucha de clases, el sistema capitalista podía dormir tranquilo, las mismas clases expropiadas se encargarían de su defensa, el egoísmo en la batalla que se escenifica en la base de la estrecha escalera del ascenso social es su mejor blindaje.
Quién podría estar en contra de ese discurso de armonía, de reconciliación, de igualdad de oportunidades, quién podría oponerse a la paz que proponían los dominantes.
En el papel todo va muy bien, pero la realidad, siempre la realidad, se encarga de desmentir la convivencia. La armonía propuesta por los oligarcas: Los índices de miserias en las ciudades, las cárceles llenas de hijos de los barrios y las fábricas, las universidades llenas de los hijos de los dominantes, la delincuencia desatada en los barrios y controlada en las zonas de los dominantes, la desnutrición en unos, las epidemias en unos y no en otros, la mortalidad infantil en unos y no en otros, el analfabetismo de unos y no de los dominantes, todo esto es una evidencia de que existen clases sociales y están en pugna. ¡No somos iguales!
La igualdad en el capitalismo es un invento de los dominantes para someter al dominado, invento que sólo existe en la teoría de sus plumíferos.
Hoy los oligarcas vuelven por sus fueros y arrecian una campaña que ellos llaman de reconciliación, con el engaño piensan adormitarnos, derrotar a la esperanza revolucionaria y perpetuar a su sistema capitalista.
Las masas deben estar atentas al engaño, debemos entender:
Primero, no es posible soluciones individuales a los problemas sociales, las soluciones son, tienen, deben ser en sociedad.
Segundo, no es posible armonía, reconciliación, paz, o como quiera llamarse dentro del capitalismo, eso sólo es posible en el Socialismo, cuando ya se acabe la apropiación delictiva de la riqueza social.
Tercero, no somos iguales, no seremos iguales hasta el día en que la riqueza socialmente producida sea de propiedad social.
¡Aquí no cabe ni sucesión ni restauración, sólo Chávez!
¡Aquí no se rinde nadie!
¡La Enmienda es defensa de la Revolución!

7.12.08

LOS GRANDES OBJETIVOS

Una Revolución debe en cada etapa fijarse sus grandes objetivos, de no hacerlo corre el peligro de perderse en ejercicios fallidos, en brazadas sin rumbo.
Intentemos algunos posibles objetivos para la Revolución Bolivariana en este trimestre que se avecina.
El primero y vital, se desprende de la necesidad primera de una Revolución: existir, permanecer, ser.
Es la aprobación de la enmienda que nos permita la permanencia del Comandante. Una Revolución tiene componentes vitales, que pueden variar de acuerdo a las condiciones propias de la sociedad donde ocurra. En los países del Sur, la historia así lo indica, la presencia de un líder enclavado en lo más noble del alma popular es imprescindible. Pensemos en la Revolución Soviética sin Lenin, o la China sin Mao, o la Cubana sin Fidel, y nos daremos cuenta de lo imprescindible del líder.
Entonces, la permanencia del Comandante es condición primera para la marcha del Socialismo en Venezuela. Quien no entienda esto, quien regatee el apoyo al Comandante, está haciendo contorsiones mentales, haciendo política como quien pelea con el vecino que pone la música a mucho volumen.
Por encima de todo hay que tener irreverencia en la discusión, pero, óigase bien, fidelidad en la acción, no hacerlo así es correr el riesgo de asesinar a la Revolución, y quedarnos criticando con las manos y la esperanza vacía.
El segundo grupo de objetivos fortalecen a la Revolución. El primero de este segundo grupo es el fortalecimiento ideológico, el rigor teórico.
La Revolución necesita con urgencia que la ideología revolucionaria entre en combate político. Hasta ahora la hegemonía ideológica, la ha llevado la ideología pequeño burguesa, que es incapaz de superar al capitalismo y de construir el Socialismo, por eso da vueltas y vueltas, despilfarra el tiempo revolucionario en ensayos organizativos, económicos, políticos, que tienen como fondo entregar la Revolución a la oligarquía.
Sólo la Revolución avanzará si construye un poderoso núcleo teórico que sea capaz, por varios canales, de socializar la teoría revolucionaria, de sembrarla en el corazón de las masas, sólo así estaremos preparados para tomar las decisiones correctas y necesarias en los tiempos que vendrán.
El segundo objetivo, es la organización: Sin organización política y social es impensable la Revolución , o mejor, la calidad de la organización nos dará la calidad de la Revolución.
Por eso es imprescindible transformar a la organización política que tenemos, que más es una maquinaria electoral, muy eficaz es verdad, por una verdadera organización revolucionaria, que prefigure a la sociedad del futuro, que sea capaz de guiar al pueblo en las elecciones, pero también en las grandes turbulencias que trae consigo una Revolución.
El tercer objetivo que proponemos es volcarse sobre las masas, con el ejemplo, en una gran ofensiva de acercamiento, de comunicación, que permita establecer nexos distintos a los meramente electorales, entre la base y su dirigencia, establecer territorios para el combate a las manipulaciones del enemigo.
¡Chávez es Socialismo!
¡ La Enmienda es defensa de la Revolución !

6.12.08

NO HAY LUGAR PARA LA MEZQUINDAD

El Comandante activó la enmienda constitucional que posibilita que se presente como candidato en las próximas elecciones presidenciales. Inmediatamente saltaron los oligarcas y, también en eso no hay sorpresa, los partidos supuestamente aliados regatearon su apoyo a la proposición de Chávez.
Es otro error que se suma a los muchos que ya han cometido estos “aliados”, es que no entienden la dinámica de esta Revolución, distinta a la de los manuales, que se resiste a ser llevada por el camino de la restauración. Entonces, desde el dogmatismo, el reformismo y el oportunismo es difícil entender lo que está pasando y tomar posiciones consecuentes con la historia.
Pero sigamos, y que los muertos entierren a los muertos.
La enmienda que nos conduce a la reelección de Chávez, es vital para la marcha al Socialismo. Se trata de refrendar en su puesto de combate al Comandante en jefe del ejército socialista. Siempre es vital para un ejército tener su Comandante en jefe en el puesto de comando, pero mucho más importante, vital, es hacerlo en situación de asedio.
Internacionalmente, la “esperanza” de obama se esfumó temprano con el nombramiento de Hilary y de Gates: ambos guerreristas, recordemos que Hilari amenazó a Irán en la campaña, Gates es el jefe de los militares, cerebro de la guerra de Irak.
Nacionalmente, las fuerzas del fascismo agarraron un airecito y rápidamente armaron trincheras para atacar a la Revolución. Ahora desde esa cabeza de puente preparan su próxima ofensiva.
Y si todo esto fuera poco, los vientos económicos presagian una profunda crisis, las bolsas de todas las naciones, que son indicativos de la actividad económica, se hunden y no se sabe con certeza donde está el fondo. Todo indica una recesión que sin duda nos afectará con rudeza.
Nosotros obtuvimos una importante votación y casi toda la representación popular en alcaldías y gobernaciones, esto requiere que hagamos una buenísima gestión, debemos demostrar a la sociedad que somos mejores administradores que el capitalismo.
Esta situación nos plantea fuertes tareas, que deben ser emprendidas con la mano firme en el mando. Es necesario avanzar en la economía, en la organización social y política, en la teoría.
Pero principalmente la reafirmación de Chávez es imprescindible para seguir avanzando, y seguir avanzando en la construcción del Socialismo que es la única manera de estar en condiciones de hacer frente a la nueva situación que se acerca.
Debemos explicar al pueblo que la enmienda lo que hace es devolver a Chávez el derecho de ser candidato en las elecciones, es necesario derrotar la conseja de que se trata de una reelección indefinida.
Chávez es el único venezolano que reuniendo todos los requisitos para ser candidato, no puede, tiene su derecho conculcado. La enmienda es además de todo un acto de justicia. La sociedad no puede ser ingrata con quien tanto la ha servido, no puede pagar así a sus mejores hijos.
¡Chávez es Socialismo!
¡La Enmienda es defensa de la Revolución !

5.12.08

ES URGENTE UNA REVOLUCIÓN IDEOLÓGICA

Con la misma premura que construimos PDVAL, con el mismo ímpetu que dimos la batalla de diciembre, con el mismo vigor que defendimos a la Revolución y al Comandante en abril, debemos ir a la batalla ideológica. No es un asunto menor que se puede arreglar con uno o dos pañitos calientes, es necesario revolucionar al pueblo, todos en la campaña por el estudio, todos en la discusión.
Todo el país, guiado por el partido, debe ser revolucionado. El estudio y la discusión deben ocupar lugar privilegiado, que broten círculos de estudio, boletines, polémicas, críticas, irreverencias, construcción de la disciplina consciente. No es un proceso espontáneo, debe ser guiado por el partido, esa es una de sus más importantes funciones.
Es necesario construir tanques pensantes, cuya función sea, a la luz del pensamiento universal y las experiencias nacionales, producir nuestras ideas, que sean adaptación a nuestra Revolución Socialista, que tiene rasgos autóctonos, pero que conserven la esencia del Socialismo mundial. Al igual que el capitalismo tiene rasgos autóctonos pero conserva las características del capitalismo mundial.
Estos tanques pensantes alimentarán con teoría a los medios, las escuelas de cuadros, a las direcciones, tanques capaces de estudiar el planteamiento enemigo y elaborar respuestas.
Debemos aclarar nuestro pensamiento frente a la Propiedad Social de los medios de producción, explicar por qué la necesidad de esta hegemonía en la economía para construir el Socialismo, explicar que esta hegemonía sólo existe si es capaz de sustentar la Conciencia del Deber Social.
Instalar en la población la Conciencia del Deber Social, construir una organización social y política que permita que la masa dé un salto desde los abismos del anarquismo que no construye ni defiende, hasta la elevación de pueblo organizado capaz de enfrentarse con éxito a las tareas de construcción y defensa de su Revolución.
Debemos revisar la organización política y social, el funcionamiento de los consejos comunales, mesas, bancos comunales, partido, batallones, su comportamiento electoral.
Los medios nuestros (televisión) deben ser revisados en su contenido, deben ponerse de forma decidida, clara y sin ambigüedades, al servicio del avance del Socialismo, de la formación moral de la masa, en muro contra la penetración oligarca.
Debemos reforzar a los medios, a las radios nacionales, crear un “Instituto de la Radio ” que alimente a las radios comunitarias, que les facilite programación revolucionaria.
Esta Revolución ideológica es y será también escenario de una profunda lucha de clases, por demás necesaria e inevitable, no debemos temerla, bien encauzada, sin cacerías de brujas, convertida en “batalla de ideas”, será fortaleza de la Revolución.
La Revolución tiene su principal pilar en la conexión Chávez- Pueblo, por eso es imprescindible protegerla. Hoy más que nunca tiene vigencia nuestra consigna: ¡Con Chávez todo, sin Chávez nada!
La enmienda es una necesidad para la defensa de la Revolución , no podemos descabezar al proceso, privarlo de su alma. Debemos apoyarla sin la mezquindad propia del calculador. ¡Es la hora de la lealtad!
¡Chávez es Socialismo!
¡ La Enmienda es defensa de la Revolución !

4.12.08

CÓMO ES UNA ESCUELA DE CUADROS

Comencemos diciendo que un cuadro es un revolucionario armónico, un hombre que lucha por la Revolución en los puestos de vanguardia. Combatiente en la batalla contra el capitalismo, siempre y en todos los niveles. Guerrero del Socialismo, siempre y en todos los niveles.
Conciente de sus limitaciones y defectos, lucha contra sí mismo para corregirlos y ser cada vez mejor humano, que es lo mismo que decir mejor revolucionario. Siempre en perfeccionamiento para dar más y mejor de sí.
La principal Escuela de Revolucionarios es la vida, la práctica, la acción. Siendo así:
¿Cuál es el objetivo de la Escuela?
Se deduce que su función es unir, relacionar la teoría revolucionaria con la práctica revolucionaria. A partir de la teoría enriquecer la práctica, y a partir de la práctica nutrir la teoría. Y en ese afán construir hombres nuevos, luchadores, ese es su objetivo.
Entonces la primera condición para el funcionamiento exitoso de una Escuela de revolucionarios, es la existencia de una práctica revolucionaria. No es un estudio que se pueda hacer en abstracto, no son unas islas formadoras de eruditos, las Escuelas están integradas a la realidad revolucionaria, a ella aplican la teoría, de ella aprenden.
La Escuela debe preparar a sus alumnos en y para la lucha revolucionaria, y eso no hay otra forma de hacerlo que participando en la lucha revolucionaria. Por eso las Escuelas son también Destacamentos de Vanguardia, el éxito de su labor debe traducirse en éxito revolucionario. No hay Escuela Revolucionaria sin práctica revolucionaria.
Las Escuelas se nutren de un Núcleo Coordinador de su actividad, éste le da sentido nacional y universal a las Escuelas. Estudia la realidad nacional, la historia, la economía, investiga temas, produce informes, investiga situaciones, sugiere soluciones, prepara materiales, coordina charlas, sugiere temas, actividades, evalúa.
Las Escuelas no son átomos solitarios, forman una gran red nacional donde cada uno de sus miembros se comunica, intercambia conocimientos, realizan actividades conjuntas, se emulan.
La Escuelas son un paso hacia la construcción de una nueva pedagogía, la pedagogía revolucionaria, distinta a la oligarca formadora de egoísmos aparentemente eficaces, pero en últimas cuentas dañino para la sociedad.
Es necesario, la Revolución lo necesita, devolver al estudio su carácter divertido, gozoso, pero también riguroso, acabar con la improvisación.
Que el estudio sea formador de mejores humanos, y no de mejores mercancías que van a padecer en el mercado de trabajo su deshumanización. Es necesario devolver al “talento la probidad” y al estudio su condición social.
Las Escuelas deben devolver a la sociedad el goce del conocimiento adquirido para el bien de la misma sociedad, el placer de prepararse para cumplir el deber social, la felicidad de ayudar a construir un mejor mundo.
Las Escuelas son murallas de contención a las falsificaciones y a los dogmas. Trincheras en la batalla de ideas, impulsores de la teoría revolucionaria, territorios de discusión.
Primeras en el combate donde quiera que la oligarquía y el imperio planteen la batalla. Reservas morales e intelectuales de la Revolución.
¡Chávez es Socialismo!
¡ La Enmienda es defensa de la Revolución!

3.12.08

NINGUNA REVOLUCIÓN ENTREGA A SUS LÍDERES

Tal como se vaticinaba, al dar espacio a los oligarcas la amenaza se activó. Las posiciones que conquistaron en las elecciones, fueron suficientes para que mostraran el colmillo fascista.
No transcurrió una semana para que los engañados que les dieron su voto entendieran las verdaderas intenciones de los sifrinos oligarcas y el fraude de sus afiches abrazando a gente del pueblo. Los oligarcas nuevamente se ensañaron con las conquistas populares.
Los que creían que con las elecciones se podrían resolver las contradicciones sociales, los ingenuos que pensaban que ya la época de abril y diciembre había pasado, los cándidos que los invitaban a sus programas, en aras de un supuesto equilibrio democrático, amanecieron el mismo 24, un día después de las elecciones, espeluznados con las noticias, en todo el territorio la baba de la fiera se sintió sobre las Misiones.
Bien dice el Comandante: “si eso lo hacen con esa pequeña victoria, no quiero ni pensar lo que harán si triunfan, si consiguen tumbar al gobierno revolucionario”
Es evidente que estamos sumergidos en un enfrentamiento que sólo se resolverá cuando uno de los contrincantes se retire del campo de batalla. Es el enfrentamiento entre el pueblo humilde y su Revolución, enfrentado a los oligarcas y sus pretensiones de seguir con su sistema de privilegios, el capitalismo que favorece a los poseedores y condena a las grandes mayorías a la miseria espiritual y material.
No hay que llamarse a engaño, la confrontación entre los oligarcas y los humildes, que vienen desde el principio de la nacionalidad, es un enfrentamiento cruento y cruel, violento, así lo muestra la historia, que sólo se resolverá cuando la oligarquía carezca de fuerza, pierda su capacidad de engaño para atacar los anhelos libertarios de los humildes, de sabotear los intentos de redención, de concretar los sueños del Libertador.
Nuestro campo revolucionario es fuerte, muy fuerte: el pueblo consiguió parir un líder que lo resume, con él tenemos una conexión amorosa que es indispensable para hacer Revolución. Contamos con un objetivo claro, el Socialismo, hacia allá afinamos nuestra teoría y práctica.
Ya el pueblo, la Revolución, comienza a diseñar sus formas de organización política y social, las ajusta, las experimenta.
Los oligarcas también tienen fuerza, cuentan con apoyo internacional, con un objetivo claro, el capitalismo. Cuentan con nuestra sumisión a las costumbres y las leyes que han perpetuado su dominación, con nuestro apego a cadenas por nosotros mismos construidas, nuestra ignorancia y nuestro miedo.
Ahora con leguleyismos pretenden que cándidamente, ingenuamente, sin disparar un tiro, entreguemos a Chávez, nos desprendamos de nuestro líder, pieza fundamental de esta Revolución.
Serán derrotados nuevamente, la Revolución, el pueblo, defenderá el derecho a continuar avanzando, entera: líder, pueblo, idea, acción, no cederemos nada, al contrario, profundizaremos la Revolución.
A los oligarcas no le entregaremos al Comandante, que es entregar a la Revolución. Defenderemos a la Revolución con la Enmienda, no entregaremos el sueño.
¡Chávez es Socialismo!
¡La Enmienda es defensa de la Revolución!