23.7.11

EL MONSTRUO LLEGA AL ATARDECER (Sábado 23-07-2011)

El capitalismo es un sistema instalado en el alma humana desde hace siglos, sus raíces psíquicas se remontan a milenios, el egoísmo es tan antiguo como la historia de la humanidad, Caín es perseverante.

La sustitución de un sistema así no es tarea fácil, se precisa mucha inteligencia y extraordinario coraje, el coraje de decidirse por cambiarlo todo, y a sí mismo.

Muchos han sido los intentos de superar al capitalismo, pero siempre el huevo de la serpiente eclosiona de nuevo para asegurarse que el hombre continúe expulsado del Paraíso.

¿Dónde hemos fallado, dónde se equivocan los intentos de redención?

Cuando el anhelo revolucionario se concretiza, inmediatamente desde los abismos del alma aflora el monstruo de los valores egoístas, mezquinos, antihumanos y antinatura, repta hacia la superficie, viene a luchar por su permanencia, a defender su perpetuidad. Hasta ahora ha tenido éxito y todos los cambios de la humanidad no han sido más que su reacomodo, siempre ha garantizado su existencia.

De muchas maneras actúa la bestia, muchas son las fallas al combatirlo, pero también muchísima es la experiencia de la humanidad en la lucha por construir un mundo donde el humano viva como hermano.

En el intento de regresar al Edén, hemos aprendido que los cambios materiales son importantes, pero los cambios del alma son fundamentales: el hombre se relaciona en el alma, lo material sólo es vehículo para la expresión del espíritu. Si lo material no se traduce en cambio espiritual, la extraordinaria magia que es una revolución se disolverá, aunque las apariencias señalen lo contrario.

Las Revoluciones que han caído en la trampa de sólo hacer cambios que no sustentan transformaciones espirituales, han sucumbido. Ya el Che alertó años antes, que las medidas económicas que nutrían el egoísmo, llevarían a los soviéticos al derrumbe, el monstruo los devoraría. Y así fue.

En el fondo de toda derrota revolucionaria está la deficiente preparación espiritual, el abandono del alma. Y en cada extraordinario ejemplo de Revolución está el espíritu del hombre nuevo, cada hazaña revolucionaria se sustenta en el brillo de la nueva espiritualidad. Las Revoluciones son recordadas más que por sus logros materiales, por su ejemplo moral, ético, de una entrega a la causa de la humanidad que asombra.

La Campaña Admirable, la Independencia, fueron hazañas del alma. La Toma de la Bastilla, el Asalto al Moncada, la renuncia de Fabricio al curul del congreso, el 4 de Febrero, el ejemplo de los Cinco Héroes Cubanos, Leningrado, nos emocionan, los recordamos por ser hazañas del espíritu.

Nosotros, por nuestras condiciones de país rentista, tenemos alto peligro de cometer el error del descuido del alma, de encandilarnos con los cambios materiales grandiosos pero fatuos, porque mantienen la esencia capitalista, los valores egoístas.

Es imprescindible que todos los cambios materiales sean dirigidos a la transformación del alma, de no hacerlo así, serán vanos, y un día, al atardecer, oiremos al monstruo golpeando la puerta y anunciando el fin.

¡Sin Chávez no hay Socialismo, Sin Socialismo no hay Chávez!

22.7.11

CUBA NO ES CUALQUIER COSA (Viernes 22-07-2011)

Cuba no es cualquier cosa, hoy es el centro vital de la lucha más importante que libra la humanidad. Es bastión del enfrentamiento contra el capitalismo y, sobre todo, es esperanza y muestra de que la humanidad es viable, que el hombre no es una "pasión inútil" y la especie humana no es una especie forajida.

El Socialismo quedó confinado al territorio y pueblo cubano. Cayó en la Unión Soviética, se hundió vergonzosamente en China, se desdibujó en el resto del mundo… pero el pueblo heroico de Martí mantiene la llama encendida de la Sociedad Nueva. Todos los días, con el heroísmo de sus hijos, nos demuestra que el Hombre Nuevo no es una quimera, que existe, y campea por el mundo en las misiones de solidaridad. En los calabozos, en las entrañas del imperio, los Cincos Héroes Cubanos nos dicen todos los días que el Hombre Nuevo es posible.

El enemigo imperial no tolera la existencia de Cuba Socialista, le incomoda, le irrita su presencia digna y acusadora, contra ella enfilan sus más infames armas, la atacan desde todos los costados y de todas las formas imaginables.

La Revolución Bolivariana inmediatamente entendió el deber de estar al lado de Cuba, que es santuario del futuro. Temprano supo que no se puede buscar la mayor suma de felicidad posible estando de espalda al ejemplo de Cuba. Para nosotros estar con Cuba es garantía de mantener el rumbo cierto, de estar colocados del lado de la esperanza.

He allí la razón, la explicación del brote fascista que hubo esta semana en la Asamblea
cuando se discutían las relaciones con Cuba: los parlamentarios fascistas, "hijos del pentágono", botaron espuma por la boca, nausearon su odio al Socialismo, que es odio a la humanidad, a la vida, claro está que Cuba para ellos es como crucifijo para Drácula.

Con ellos regresó el Congreso de Santander, que con los mismos argumentos, y la misma rabia que exhiben hoy los "hijos del pentágono", privaron a Bolívar del mando en Ayacucho y prepararon su exilio.

En Venezuela, en Latinoamérica, se escenifica una guerra, que es continuación directa de la gesta de Independencia. Ya El Libertador decía: "La Patria es la América", comprendió que la liberación es continental. Más adelante, Martí amplió a "Patria es Humanidad", sintió que el problema era el hombre todo. Y algún clásico abarcó la idea libertaría en "Patria es Revolución, es Socialismo". Es así, no puede haber patria aislada, no habrá humanidad si está fragmentada, y es el Socialismo el gran integrador.

Las relaciones con Cuba, no son, no pueden ser relaciones comerciales, no son sujetas a la contabilidad, el amor no acepta cálculo. La relación con Cuba es relación entre fraternos, por eso quien nunca ha amado no puede entenderla.

Las relaciones entre Cuba y Venezuela tienen antecedente en las relaciones de Petión y Bolívar, no pueden ser explicadas con números, es un error pretenderlo.

¡Sin Chávez no hay Socialismo, sin Socialismo no hay Chávez!

21.7.11

EL MUNDO CRETINO (Jueves 21-07-2011)

La campaña electoral va intoxicando el ambiente político, todo se ofrenda en el altar de las elecciones, todos los pasos tienen la mira en el 2012. Las elecciones sustituyen a la realidad, crean su propio mundo: un mundo cretino, donde cabe cualquier cosa, nada necesita argumentación, nada precisa raciocinio.

Una especie de humareda esquizofrénica nos envuelve: el micrófono, la cámara, son puertas al universo de la ficción, todo se puede ofrecer, nadie pedirá cuentas después, las promesas actúan como realidad. Los vapores de la ficción construyen seriedades, programas de gobierno, el circo está bien decorado.

Si no fuese por el peligro que encierra, el cretinismo electoral sería gratificante, como un anfiteatro inmenso: todo el país un escenario para la ópera bufa. El problema es que en época electoral, y aunque parezca paradójico, los políticos se apartan de la realidad, se creen el cuento que ellos mismos fabrican para engañar, son víctimas de su propio engendro. La masa se asquea, la capa dirigente, toda, pierde credibilidad, se fertilizan terrenos para el torbellino.

El peligro es real. Es así que las democracias burguesas se desgastan, sucumben en la estulticia de los dirigentes.

Los Bolivarianos, obligados a este tipo de elecciones por las condiciones de la Revolución Pacífica, debemos estar alertas frente al virus del cretinismo. Descubrir formas de actuación que sirvan de antídoto, luchar contra la costumbre.

Lo primero es diferenciarse, en el discurso y en la práctica. Que nuestro mensaje tenga una fuerte dosis de seriedad, argumentos, que desmonten las mentiras de la oposición, y demuestren la imposibilidad del capitalismo de resolver los problemas que él mismo creó.

Hablar en positivo, no caer en el análisis excesivo y facilista de las cretinadas de la oposición, en el ping pong de futilidades.

Mostrar la acción de gobierno es importante, pero no suficiente. Las elecciones burguesas son ante todo una batalla ideológica, llena de artimañas psíquicas, de exacerbación de miedos, de trampas y suciedades. Recordemos cómo manipularon a la opinión en las elecciones de la Reforma. Es necesario desmontar la guerra psicológica, no abandonar este terreno, no hacer campaña viéndonos el ombligo, regodeándonos con los números.

Todo funcionario público, desde los ministros para abajo, tienen una doble función. Deben ser altamente eficaces en su desempeño técnico y también deben ser altísimamente eficaces en su desempeño político
, éste tiene como principal elemento la participación en la batalla psicológica.

Si el gobierno se paraliza actuando sólo en lo técnico, en el cuido de la gestión, entonces el camino para que la derecha consolide una realidad ficticia queda abierto, y sabemos que la batalla se decide en el alma, en la imaginación, en el espíritu. Pero si el gobierno abandona la gestión, la puerta para la crítica con asidero quedará abierta.

La lucha electoral exige doble esfuerzo, sólo así se puede augurar triunfo. Recordemos que en las elecciones, que ya arrancaron, nos va la vida.

¡Sin Socialismo no hay Chávez, sin Chávez no hay Socialismo!

20.7.11

LA PRIMERA REPÚBLICA NOS MIRA (Miércoles 20-07-2011)

Los sucesos de El Rodeo, ya lo dijimos, son una fuente de enseñanzas para los revolucionarios, todos tenemos allí algo que aprender. El Rodeo debe ser materia de estudio en las Universidades.

Los criminólogos pueden estudiar las formas de organización de la masa penitenciaría, el cambio de valores y de ética que debe ser objetivo del tratamiento carcelario.

Los sociólogos tienen material para investigar la evolución de los conglomerados en condiciones extremas. Los psicólogos, el efecto del hacinamiento en el comportamiento humano.

Y los Revolucionarios, en funciones de gobierno, deben estudiar esta experiencia y trasladarla a sus estrategias, a la filosofía que los guía.

Un buen método para aprender de El Rodeo, para sacar experiencias políticas, es estudiarlos a la luz de las enseñanzas históricas. Veamos.

El Libertador en el Manifiesto de Cartagena expone las causas de la caída de la Primera República. Dice el Manifiesto:

…"fundando la Junta su política en los principios de humanidad mal entendida que no autorizan a ningún gobierno para hacer por la fuerza libres a los pueblos estúpidos que desconocen el valor de sus derechos. Los códigos que consultaban nuestros magistrados no eran los que podían enseñarles la ciencia práctica del gobierno, sino los que han formado ciertos buenos visionarios que imaginándose repúblicas aéreas, han procurado alcanzar la perfección política, presuponiendo la perfectibilidad del linaje humano. Por manera que tuvimos filósofos por jefes, filantropía por legislación, dialéctica por táctica, y sofistas por soldados. Con semejante subversión de principios y de cosas, el orden social se sintió extremadamente conmovido, y desde luego, corrió el Estado a pasos agigantados a una disolución universal, que bien pronto se vio realizada (…) porque los gobiernos liberales deben distinguirse por la clemencia. Clemencia criminal, que contribuyó, más que nada, a derribar la máquina que todavía no habíamos enteramente concluido.”

La Primera República y El Rodeo nos indican que cuando dejamos a una sociedad al esponteneísmo, privada de organización, de dirección, de mano firme que la guíe al futuro, esta sociedad reproduce, necesariamente, las formas de organización vieja que lleva en su seno. La recaída en lo viejo, la restauración, lleva la fuerza de la costumbre, de lo conocido. Lo viejo es fácil de imitar, lo nuevo es difícil de imaginar y de concretar.

El aparecimiento de formas de organización social nuevas no es un proceso espontáneo, necesita de la ayuda de una vanguardia que impregne a la sociedad con la teoría y la práctica revolucionaria, que la guíe en la aventura de parirse sociedad nueva y sistematice las enseñanzas de la realidad, nunca es espontánea.

De allí que la Revolución debe prestigiar a la vanguardia de las masas, de los humildes. Y esta vanguardia, por sobre todo, nunca debe renunciar a su papel de dirigentes del pueblo humilde, entenderse parte importantísima del pueblo, estar consciente de su responsabilidad y del honor de ser vanguardia.

La historia lo dice con claridad: sólo los pueblos que han parido una vanguardia fuerte, han conseguido hacer Revolución.

¡Sin Socialismo no hay Chávez, sin Chávez no hay Socialismo!

19.7.11

EL RODEO Y EL ESTADO (Martes 19-07-2011)

Algunos sucesos son experimentos sociales, regidos por las leyes de la evolución, ponen a prueba tesis políticas, doctrinas. Con tal fuerza se aprueban o desechan, que hacen vana cualquier discusión posterior.

Estos sucesos históricos, que son como el palpitar de la vida, asoman leyes sociales inéditas. Estos sucesos, que para la mayoría no pasan de la anécdota, son captados por los líderes políticos, y le dan luces para construir sus estrategias. Podemos decir que el éxito de una estrategia depende de la capacidad de leer estas señales de la realidad. Aquí entre nosotros acaba de ocurrir uno de estos extraordinarios eventos. Veamos.

Lo que pasa en El Rodeo es un laboratorio social que parece diseñado por un científico consumado. Analicemos.

Primero, revisemos los datos:

El Rodeo puede ser considerado como una sociedad en pequeño: miles de presos aislados, con su propia fisiología, dejados a la evolución espontánea. El Estado puede considerarse como limitando con esta sociedad, la encapsula desde la periferia.

Más atractivo no podía ser para un sociólogo, un gran conglomerado social sin estructura, sin organización, para estudiar su evolución en condiciones de aislamiento.

Debía ser atractivo también para los escritores. William Golding, en su libro "El Lord de las Moscas", tuvo que recrear un accidente de aviación y una isla desierta para ubicar allí a unos niños náufragos y estudiar la evolución de aquella pequeña sociedad en condiciones de aislamiento. Aquí en El Rodeo las condiciones se dieron en la realidad, estamos frente a una historia que ya le dio Premio Nobel a Golding.

Pero el mayor interés debe ser para los políticos y para los revolucionarios: la ya centenaria polémica con los anarquistas y anarcoides tiene en El Rodeo su prueba definitiva.

Aquella masa de presos, ante el vacío de organización en que estaban, reprodujeron un "Estado altamente represivo y cruel". El vacío no lo llenó la sociedad del futuro que sueñan los anarquistas, donde todos actúan espontáneamente como hermanos, sin necesidad de Estado, lo llenó una forma social copiada de las más perversas que ha inventado la humanidad.

En lo poco que se sabe, “los pranes”, "los carros", “los principales” y demás nudos de la organización "rodeista", los ajusticiamientos del yoifre, sus códigos de ética, asoma el Estado perverso que allí se engendró.

Está claro, una masa sin dirección, sin organización, sin líderes políticos revolucionarios, dejados a la deriva, llena de manera espontánea ese vacío con una ficción macabra de Estado.

La Sociedad de los hermanos, sólo se puede alcanzar pasando necesariamente por un Estado de transición, el Estado Revolucionario.

La enseñanza política del experimento de El Rodeo es que la estrategia revolucionaria no debe ser fundada, como denunciaba el Libertador en el Manifiesto de Cartagena, en "principios de humanidad mal entendida". La candidez en política, el espontaneísmo, renunciar a la dirección del Estado, deja paso irremediablemente al surgimiento de formas perversas de gobierno.

¡Sin Socialismo no hay Chávez, sin Chávez no hay Socialismo!

18.7.11

HIJO DE PUTA (Lunes 18-07-2011)

Son raros los caminos de la lucha de clases, no se presenta en forma de una batalla de ideas, limpia y clara, al contrario, adquiere formas torcidas. Difícil desentrañar el fondo ideológico de la lucha de clases, a veces se confunde con querellas personales, otras se atribuye la contienda al carácter de los individuos, a directrices de agentes extranjeros, etc.

Hoy asistimos a la demanda de un señor ofendido porque le dijeron hijo de puta, el hecho no sería importante a no ser porque el ofendido es editor de un periódico escuálido, y el "agraviador" tiene un programa de televisión defensor a todo riesgo del Gobierno Revolucionario y de Chávez. Ya eso nos autoriza a pensar que detrás de la “sensibilidad” del editor hay motivaciones ideológicas que merecen atención.

Estamos frente a una acción política, es un cándido quién piense que las razones son las expuestas por el hijo agraviado. Veamos.

Exploremos un poco más el escenario: El programa La Hojilla y Mario Silva son una trinchera de la Revolución, del Socialismo y de Chávez, disgusta a la derecha de afuera y la de adentro, es un programa incómodo, tienen su propio estilo, no da ni pide cuartel. Siempre está bajo fuego cruzado.

En estos días de corrimiento hacia el centro, de gente haciendo maletas, La Hojilla es más inconveniente que nunca, los arrojos conciliatorios tienen allí una muralla difícil de superar. Los intentos golpistas, las intenciones de distorsionar la verdad, de manipular a la opinión pública chocan de frente con La Hojilla. Ese programa defiende a la Revolución y a Chávez de la única manera que se puede hacer en estos días, con exceso, con furia, con pasión y, sobre todo, con un alto tino para detectar contrabando y deshacer puentes.

Además, La Hojilla les hará mucho daño en la campaña electoral que se avecina, es urgente para la oligarquía callarla.

Podemos concluir que La Hojilla, en el fondo de toda la verborrea y la sensibilidad hipócrita del editor, es el escenario de una batalla ideológica, del enfrentamiento de la oligarburguesia y la Revolución. Los bolivarianos estamos en el deber de tomar partido, de no dejarnos confundir.

Es hora de la solidaridad militante, nosotros desde esta tribuna decimos junto a la Hojilla: Miguel, el director del Nacional es un "hijo de puta", Mario tiene razón.

"Hijo de Puta," desde ahora se convierte en un grito de protesta, en ira desbocada frente a tanta injuria de los oligarcas, que con impunidad atacan a la Revolución y a Chávez.

El grito no necesita explicación, no se esconde, es rabia que sale de las entrañas del pueblo humilde, frente a la "finura" a la piel sensible, frente a tanta infamia, tanta impunidad oligarca.

El grito brota del desespero de los que vieron morir al Libertador en Santa Marta, y asistieron al asesinato de Zamora, de Fabricio, de Américo Silva. Ahora gritamos desde lo profundo de la historia humilde ofendida.

¡Hijos de puta temblad!

17.7.11

LA ZAFRA DE LOS DIEZ MILLONES Y LAS GRANDES MISIONES (Domingo 17-07-2011)

Cuba nunca deja de enseñarnos, es una cátedra de Revolución, su experiencia nos enriquece, sus errores nos alertan, sus aciertos nos estimulan.

Allá por el año 1970 la Revolución Cubana decretó la "Zafra de los diez millones de toneladas de azúcar." Toda la sociedad se movilizó para conseguir esta meta. En el empeño se cometieron errores y se cosecharon grandes triunfos.

La sociedad se integró en un solo sentimiento, un único objetivo. Cuba vibró alrededor del liderazgo de Fidel y de la tarea. Fue una gran batalla, comparable a Girón, a la crisis de los misiles, al período especial.

El principal logro de la "Zafra de los diez millones" fue, sin dudas, haber amalgamado a la sociedad en un solo empeño. Aquella sociedad fragmentada por el capitalismo que la condenaba a ser patio lúdico imperial y de las mafias, con la zafra consiguió elevarse. Con la fuerza de la unión, fue ejemplo para el mundo, otra manera de organizarse era posible, vivir como hermanos no era una utopía, el trabajo alcanzó una nueva dimensión, dejó de ser compulsión, para ser alegre realización de las mejores potencialidades del humano.

La sociedad puso a prueba su nueva organización, el tejido social funcionó y se fortaleció, de esa epopeya surgió una nueva sociedad, acerada, organizada, disciplinada, capaz ahora de resistirlo todo, así lo demuestra durante medio siglo.

Surge de esto una reflexión: los pasos que da una Revolución importan por los logros materiales, pero lo fundamental son los logros espirituales, los que en última instancia deciden la contienda.

La meta de los diez millones no se cumplió: ¡Fracaso! gritaron los capitalistas desde su exilio en Miami ¡Fracaso! se oyó en boca de algunos cándidos en las calles de La Habana. Se cometieron errores reconoció Fidel.

La historia, que es la mejor contabilista de la vida, puso las cosas en su lugar: aquella jornada preparó al pueblo para caminar por la senda del Socialismo. Hoy los logros de Cuba, a pesar de medio siglo de hostigamiento y bloqueo, asombran al mundo: alta asistencia médica, elevada educación, uno de los pueblos más cultos y solidarios del planeta, inseguridad mínima, fraternidad máxima, todos estos logros tienen su raíz espiritual en la zafra de los diez millones. No es posible valorar aquella hazaña con el frío cálculo de los kilos de azúcar, habría que inventar una medida para el crecimiento del alma buena.

Se cometieron errores, dijo Fidel. Sí, seguramente se abandonaron otras tareas, es probable que se bajó la guardia en la solución de otros problemas, dificultades de gerencia las hubo sin dudas, alguno que otro "flojo vivo" alteró los números, pero en lo fundamental, que es la movilización del pueblo que crea conciencia socialista, conciencia de pertenencia a la sociedad, se triunfó.

La épica de la Zafra es una enseñanza para todo el que quiera hacer Revolución.

¡Sin Socialismo no hay Chávez, sin Chávez no hay Socialismo!