Estamos en guerra contra el imperio, y en la guerra la sorpresa es vital, y la verdad hay que buscarla debajo de las piedras. En la guerra el engaño es una virtud, y la desinformación ocupa lugar de honor. Veamos.
En el campo Bolivariano existe la idea de que el enfrentamiento será con la votación masiva a favor del "SI", o después del dos, cuando los oligarcas desconozcan el resultado.
Las dos hipótesis tienen evidencias de peso, y para ellas debemos prepararnos: ir a votar, a ganar con gruesa ventaja, y también estar listos para enfrentar la reacción que les ordene el imperio. Sin embargo, existe otra hipótesis cuyos indicios aparecen en las últimas horas. Veamos.
Hay insistencia en que el TSJ puede evitar un supuesto conflicto si anula la convocatoria a la consulta de la Reforma. Sobre el Tribunal se ejerce presión, todos los días, cada hora, sale un vocero a pedir la suspensión de las elecciones.
Los estudiantes sifrinos, baduel y teodoro tienen esta petición como central en sus planteamientos. Hasta aquí, todo dentro del juego legal, nada para alarmarse.
Pero si a esto unimos las “marchas sin retorno”, las amenazas de ir hasta Miraflores, la concentración en la Avenida Bolívar , las declaraciones insistentes de que la propuesta de Reforma “es un golpe de Estado”, que es “anticonstitucional”, entonces podemos concluir que existen posibilidades de que intenten algo antes del dos.
Los revolucionarios chavistas debemos estar ojo pelao, listos, alertas para enfrentar cualquier intento oligarca en el momento que se dé, antes o después.
Todas nuestras acciones, desde la búsqueda del "SI", hasta el enfrentamiento a cualquier imprevisto, deben tener como objetivo la defensa de la Revolución , del Comandante, del Socialismo, del derecho a decidir nuestro destino.
No hay que bajar la guardia, cada mentira enemiga debe ser respondida con la verdad revolucionaria, con la fe en nuestro líder y en el camino emprendido. Ahora nada debe estar por sobre la unidad, todos los esfuerzos, por pequeños que sean, deben ser sumados, todos.
No hay que bajar la guardia, cada acción oligarca debe ser respondida con la movilización popular, a cada grito de ellos, el rugido de la Revolución , a cada marcha de ellos, la marea roja presente.
Ahora bien, si se lanzan, si el imperio decide sacrificarlos, si aquí hay tontos que secunden la demencia, entonces nuestra respuesta debe ser terminante.
Si ellos declaran guerra, si rechazan todos nuestros intentos de convivencia democrática, en ese caso vamos a la batalla con leyes revolucionarias extraordinarias, que nos libren de la hipócrita legalidad oligarca, legalidad que les permite agredir al Pueblo y a la Revolución.
Si siguen conspirando, como no han cesado de hacerlo desde el primer día de esta Revolución, es hora de inhabilitarlos, política, social y económicamente. Debemos decretar la emergencia revolucionaria, y profundizar la Revolución de tal manera que ya no puedan construir nuevas agresiones. La Revolución tiene que defenderse, defender el sueño del Pueblo.
¡Chávez es la Reforma !
!Irreverencia en la discusión, Lealtad en la acción!
!A la Reforma, SÍ!
!Orden del Libertador para los Cinco Héroes Defensores de la Humanidad!
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