EL HUMANO SE DIFERENCIA DEL RESTO DE LOS ANIMALES, en que construye un mundo mezcla de ficción y de realidad, un mundo donde lo imaginado es tan real como lo real.
Es manipulando esta característica humana que a través de la historia unos pocos hombres han conseguido dominar a las grandes mayorías. Fue sustentada en esta característica que se le impuso a la humanidad la idea de que unos hombres adquieren derecho de mando por ser herederos de los dioses. Es manipulando la ficción que se ha logrado que millones libren guerras que no les pertenecen, que los perjudican. En definitiva, es manipulando el mundo de la ficción que se ha conseguido esclavizar al ser humano.
Siempre se ha dominado por la ficción, sin embargo, la capacidad de engaño, la capacidad de que ese engaño sustituya a la realidad y sea aceptado por grandes mayorías, nunca había alcanzado la perfección de hoy. La televisión, la radio, los periódicos, el cine, pueden construir una “realidad ficticia” en horas, al punto de que hoy la vida se decide casi exclusivamente en el mundo de la ficción. La realidad se ha subordinado a la ficción como nunca antes.
El imperio está desarrollando en Venezuela una gran operación hipnótica, similar a la que desarrollaron en Irak y Afganistán, en ese empeño no tiene escrúpulos. Primero nos colocaron en el eje del mal, aliados de “países terroristas” y narcotraficantes. Después avanzan en la construcción del engaño y nos acusan de albergar terroristas. Luego, dan otro paso y nos señalan como productores de uranio, asociados a la fabricación de armas nucleares… Todo, pura fábula, manipulación del mundo de la ficción, todo para justificar una agresión.
La agresión tiene varias formas de presentarse, pero, siempre necesitarán que una gran parte de nuestra población y del resto del mundo esté bajo engaño: una, para que se movilice, la otra, para que acepte. Por eso manipulan la candidatura de rosalito, le construyen un apoyo que sólo existe en los medios, hacen manifestaciones de pantalla o de papel, le inventan emboscadas, se escurren en nuestras debilidades y nuestras ambigüedades, crean una ficción de dictadura, engañan de mil maneras. Después, cuando se acerquen las elecciones, cuando maduren las condiciones, podrán hacer acciones cruentas.
Los revolucionarios debemos estar alertas. Nuestra mejor arma contra la manipulación es la movilización alrededor de objetivos políticos más allá de lo electoral. Sólo la realidad del pueblo en la calle los disuadirá de pasar a acciones más violentas.
Debemos recordar las palabras del Libertador: “por el engaño nos han dominado más que por la fuerza”. De allí que nuestros medios de comunicación deben ser ejércitos que enfrenten la manipulación mediática. Cada uno de los bolivarianos debe ser un dirigente, un oficial en la batalla contra la deformación de la realidad. La verdad debe imponerse, la ficción debe ser derrotada.
¡Sólo el Socialismo salva al Pueblo!
¡Movilización o Muerte!
¡Chávez, Fidel, el ALBA, son Socialismo!
Es manipulando esta característica humana que a través de la historia unos pocos hombres han conseguido dominar a las grandes mayorías. Fue sustentada en esta característica que se le impuso a la humanidad la idea de que unos hombres adquieren derecho de mando por ser herederos de los dioses. Es manipulando la ficción que se ha logrado que millones libren guerras que no les pertenecen, que los perjudican. En definitiva, es manipulando el mundo de la ficción que se ha conseguido esclavizar al ser humano.
Siempre se ha dominado por la ficción, sin embargo, la capacidad de engaño, la capacidad de que ese engaño sustituya a la realidad y sea aceptado por grandes mayorías, nunca había alcanzado la perfección de hoy. La televisión, la radio, los periódicos, el cine, pueden construir una “realidad ficticia” en horas, al punto de que hoy la vida se decide casi exclusivamente en el mundo de la ficción. La realidad se ha subordinado a la ficción como nunca antes.
El imperio está desarrollando en Venezuela una gran operación hipnótica, similar a la que desarrollaron en Irak y Afganistán, en ese empeño no tiene escrúpulos. Primero nos colocaron en el eje del mal, aliados de “países terroristas” y narcotraficantes. Después avanzan en la construcción del engaño y nos acusan de albergar terroristas. Luego, dan otro paso y nos señalan como productores de uranio, asociados a la fabricación de armas nucleares… Todo, pura fábula, manipulación del mundo de la ficción, todo para justificar una agresión.
La agresión tiene varias formas de presentarse, pero, siempre necesitarán que una gran parte de nuestra población y del resto del mundo esté bajo engaño: una, para que se movilice, la otra, para que acepte. Por eso manipulan la candidatura de rosalito, le construyen un apoyo que sólo existe en los medios, hacen manifestaciones de pantalla o de papel, le inventan emboscadas, se escurren en nuestras debilidades y nuestras ambigüedades, crean una ficción de dictadura, engañan de mil maneras. Después, cuando se acerquen las elecciones, cuando maduren las condiciones, podrán hacer acciones cruentas.
Los revolucionarios debemos estar alertas. Nuestra mejor arma contra la manipulación es la movilización alrededor de objetivos políticos más allá de lo electoral. Sólo la realidad del pueblo en la calle los disuadirá de pasar a acciones más violentas.
Debemos recordar las palabras del Libertador: “por el engaño nos han dominado más que por la fuerza”. De allí que nuestros medios de comunicación deben ser ejércitos que enfrenten la manipulación mediática. Cada uno de los bolivarianos debe ser un dirigente, un oficial en la batalla contra la deformación de la realidad. La verdad debe imponerse, la ficción debe ser derrotada.
¡Sólo el Socialismo salva al Pueblo!
¡Movilización o Muerte!
¡Chávez, Fidel, el ALBA, son Socialismo!
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