El camino del
infierno está empedrado de muchos capriles. Es así, la dominación capitalista
adormece a los pueblos fabricando grandes mentiras: capriles es una mentira más
de los oligarcas. Los dominantes cuando sienten el despertar de los pueblos,
cuando presienten liberación, se repliegan y construyen un fraude,
preparan su retorno.
Razón tenía el Libertador
cuando solitario en San Pedro Alejandrino perdonó al pueblo que lo
abandonaba, y con tristeza comprendió que había perdido la batalla más
importante, la del alma, la oligarquía abusando de la credulidad de
los pobres, mintiendo, lo derrotó.
De Bolívar se dijo de todo, engañaron hasta
"hollar su reputación", consiguieron que el pueblo le diera la
espalda a su Libertador. Con esas falsedades consiguieron
estallar el sueño de la Patria Grande y asesinar a su fundador.
Hoy regresa una de esas mentiras, se llama capriles,
pero ha podido llamarse leopoldo, diego, hasta teodoro, el nombre no
importa, siempre será una falsedad, su verdadera denominación es fascismo.
Esa es su verdad.
Es el fascismo el que se mostró el domingo, la
oligarquía, la misma que asesinó a Bolívar, venía disfrazada de
ovejita, es una piedra más del camino al infierno. No muestra su plan, su
discurso no pasa de frases manoseadas, promesas repetidas, es una manera
de volver a abusar de la credulidad del pueblo humilde.
La piedra que es capriles entregará la Patria al
imperio, volverán los días de la colonia gringa, privatizarán hasta el
aíre, se llevarán la riqueza nacional a precios viles. Traerán de
nuevo la miseria, convertirán los cerros en guetos, volverán las
razias. Todos los problemas que hoy tenemos se elevarán a
niveles espeluznantes, alcanzarán cotas de horror. El
capitalismo los creó, son su naturaleza, no podrá resolverlos, sólo
aumentarlos. Quien prometa soluciones dentro del capitalismo es un
engañador, sospéchese de sus intenciones.
La piedra que es capriles convoca a la
traición, a ser desleales con la Patria , con el sueño de Bolívar, con el
Comandante. Intentan sembrar, estimular sentimientos infames,
fragmentarnos, hacernos viles, que cambiemos la Patria por un plato
de lentejas. Saben que transitando el camino del egoísmo, de la inconsecuencia,
seremos débiles, los pueblos fragmentados, manipulados, se convierten en
sus propios verdugos, son incapaces de liberarse, de elevarse por sobre la
mediocridad, no tienen más futuro que la esclavitud.
En contraste, el lunes en la tarde el Comandante
Chávez una vez más vuelve a la calle, se ofrenda al pueblo
bolivariano, se encuentra con la historia, tal como el 4 de
febrero, dispuso la batalla contra los engañadores.
Con Chávez un huracán de amor, de consecuencia,
ilumina al continente, la Esperanza palpita en los corazones de
millones, supimos que es posible concretar el sueño, que los próceres no
lucharon en vano, los humildes despertaron y ya nadie podrá abusar de su
credulidad. San Pedro Alejandrino no se repetirá, triunfará el
amor, seguiremos el camino de la redención.
¡Con Chávez resteaos!
No hay comentarios.:
Publicar un comentario