1.8.08

LA LUCHA INTERNA

A medida que las revoluciones avanzan, que consolidan la posibilidad de cambios, en esa misma medida se elevan las tensiones de la lucha interna. Ya el enemigo externo, que era principal en los primeros días de la Revolución, pasa a segundo orden y la batalla entre los adeversarios que ocupan la misma trinchera se hace vital.
Así pasó en la Revolución de Independencia. Después de Ayacucho, derrotados los españoles, la lucha interna recrudece, lo que ya despuntaba se hizo evidente, santander hinca sus garras en la espalda del Libertador, páez comete traición con el mismo ímpetu que antes ganó batallas.
Bolívar termina en San Pedro Alejandrino asesinado, no por lo españoles a los que derrotó en mil batallas, sino por los próceres que le debían toda su gloria.
El 23 de enero de 1958 la posibilidad revolucionaria es truncada, no por los perezjimenistas, la esperanza es yugulada por los "demócratas" que llegaban del exilio. El pacto de punto fijo retoñó de las entrañas de la posibilidad revolucionaria.
En la Unión Soviética, Stalin, Bujarin, comenzaron la desviación que culminaría con Gorbachov, no fueron los estados unidos quienes llevaron al patíbulo a la Revolución de Octubre, fue la derrota en la lucha interna.
Fidel lanza una alerta a la Revolución Cubana en un discurso en el Aula Magna de La Universidad de La Habana, el 17 de noviembre de 2005. Dirigiéndose a los estudiantes les dice:
Esta Revolución puede destruirse, los que no pueden destruirla hoy son ellos; nosotros sí, nosotros podemos destruirla, y sería culpa nuestra.
De todas estas experiencias históricas brota una pregunta:
¿Cómo la Revolución Bolivariana puede derrotar las desviaciones que llevan a la restauración?
Lo primero es reconocer que en la Revolución Bolivariana hay lucha interna, y que ésta corresponde a diferentes ideologías que se enfrentan, entender la importancia de la lucha interna, no subestimarla y mucho menos ignorarla.
Después es vital abrir la discusión, respetar la batalla de ideas, guiarse por el principio de que la peor crítica es la que no se hace, evitar por todos los medios caer en la tentación de aplastar la discusión con medidas físicas.
Por último, la Revolución es un proceso histórico, hay que estudiar a profundidad las experiencias revolucionarias universales, desechar las consejas de la improvisación teórica, la humanidad a través de siglos de lucha ha construido un pensamiento revolucionario indispensable para avanzar.
No es posible elevarse en la Revolución si no es apoyados en los hombros de los precursores. Hay que estudiar a Bolívar y a Martí, pero también a Marx, a Trostky y al Che, a Mariátegui y a Mella, a Maceo y a Zamora, a Fabricio.
Convencernos de que la calidad de la lucha interna será la calidad de la Revolución. De allí que la garantía de éxito está dada por la participación de las grandes masas en la discusión interna, la discusión debe llegar al pueblo, de manera libre, sin deformaciones. Se deben tomar medidas para elevar el nivel de comprensión del pueblo.
Criticar es Amar
José Martí

31.7.08

FECHAS PARA LA REFLEXIÓN

La historia tiene fechas que compendian procesos, los marcan, son su inicio o su culminación, del análisis certero de estas fechas depende la comprensión del momento que se vive.
Son muchas, por ejemplo, sin comprender el 1810 como una insurrección mantuana, no se puede entender las vicisitudes de la Revolución de la Independencia , la caída de la primera república, los decretos de liberación de los esclavos.
Hay dos fechas que es importantísimo revisar si queremos entender la batalla que hoy se libra en la Revolución Bolivariana : el 26 de julio cubano y el 23 de Enero venezolano.
26 de julio de 1953: unos jóvenes asaltan uno de los principales cuarteles de la Isla de Cuba, estaban guiados por Fidel Castro y seguían las enseñanzas de Martí. El Asalto al Cuartel Moncada tenía como objetivo usar un motor pequeño: la acción, para activar un motor grande: la conciencia del pueblo de Cuba, incorporarlo en la lucha por derrocar la dictadura de Batista, y emprender la construcción del Socialismo. El asalto fue un éxito, las revoluciones tiene extraños caminos.
Los móviles del asalto se resumen en la defensa que Fidel hace en el juicio que le siguen a él y a sus compañeros, que termina con la frase “Condenadme, no importa, la Historia me Absolverá”.
El 23 de Enero de 1958: una insurrección civil-militar derribó la dictadura de Marcos Evangelista Pérez Jiménez, el pueblo fue guiado en esa gesta por la Junta Patriótica presidida por Fabricio Ojeda, oriundo de Boconó.
Una Junta Provisional de Gobierno presidida por Wolfgang Larrazabal da inicio a un período de amplias posibilidades revolucionarias.
Mientras el 26 de julio de 1953 dio origen al desembarco del Granma, a la gesta heroica de la Sierra Maestra , a la entrada triunfante en La Habana del Ejército Rebelde el 1 de Enero de 1959, que fue el inicio de la experiencia revolucionaria y Socialista más importante de la humanidad.
La energía popular del 23 de Enero, la posibilidad revolucionaria de aquellos días fue torcida por el dogmatismo y el reformismo, y el país desembocó en medio siglo de un lúgubre pacto de punto fijo que conduce a la sociedad a los bordes de la desintegración.
Una fecha, el 26 de julio, marca el camino hacia la esperanza Socialista redención de la humanidad.
La otra, el 23 de Enero, fue la puerta de un fraude “democrático” que nos llevó a medio siglo de oscuridad.
Reflexionando estas fechas aprendemos que no basta la acción popular desatada, el pueblo triunfante es aquel que produce líderes extraordinarios, concientes del momento histórico, que sepan adaptar a sus circunstancias el pensamiento revolucionario universal, que eviten los zarpazos del reformismo y el dogmatismo que en las entrañas de la Revolución siempre se incuban.
Se precisó medio siglo para arribar al 4 de febrero del 1992, para que la patria de Bolívar retomara el rumbo perdido el 23 de Enero.
Ahora tenemos un líder, Chávez, un pueblo digno heredero de los Libertadores, y tenemos la experiencia de los extravíos, de los errores.
¡Las condiciones están dadas para triunfar!
Criticar es Amar
José Martí

30.7.08

LOS DIRIGENTES

Es impensable una sociedad sin dirigentes, la vida de las grandes masas supone conducción. Es así que entre pueblo y conductores se establece una relación, una correspondencia, se reflejan mutuamente.
Cuando esta conexión se pierde, cuando el reflejo se nubla, es presagio de dificultades, la sociedad entra en turbulencia, en tiempos de cambio.
Los dirigentes, en la sociedad dividida en clases, y todas lo están, obedecen a los intereses de una clase, reflejan su ideología. La pugna entre estos, la lucha de esas clases, de esos intereses, es lucha de clases.
En el capitalismo, los gobernantes obedecen a los intereses de las clases capitalistas, por medio de ellos estas clases conducen a la sociedad, ejercen su hegemonía.
Los conductores contrarios al capitalismo, partidarios del Socialismo, representan a las clases expropiadas, por medio de ellos estas clases irrumpen en la disputa del poder político, en la pugna por la hegemonía en la sociedad.
Es impensable que una clase dispute la hegemonía de la sociedad, que entre en la lucha por imponer su proyecto, su ideología, sin guías, sin una organización que conduzca esa lucha.
El triunfo de una clase lo determina la calidad de sus líderes que a su vez son reflejo de la calidad de la organización política del pueblo y de la ideología que los impulsa. Podemos decir que una clase no puede ir más allá de sus guías y de sus organizaciones dirigentes.
Los que proponen lucha revolucionaria sin dirigentes, sin organización revolucionaria, están proponiendo derrotas. Es imposible que un pueblo triunfe sin estar organizado, así como es imposible construir el Socialismo, sin socialistas, sin organización dirigente Socialista. Sin ellos los esfuerzos son vanos, se disipan en fantasías sin sentido.
Los líderes, las organizaciones no son pasivos, meros intérpretes o gestores de las masas, son educadores, conductores. A las masas llevan la ideología y guían las acciones políticas, le dan sentido a las luchas.
De allí que la calidad de la lucha por instaurar el Socialismo dependerá de la calidad de sus dirigentes, de las organizaciones, de la ideología y de su capacidad para guiar al pueblo en la construcción Socialista. Si uno de estos pilares falla, el éxito se alejará.
La Revolución Bolivariana, empeñada en transitar el camino hacia el Socialismo, ya cuenta con un líder, debe ahora afinar la formación de dirigentes socialistas, fortalecer la organización, la ideología Socialista y la conexión con el pueblo.
Todas las acciones revolucionarias deben buscar este objetivo, ninguna tarea será exitosa sino cubre esta meta. De toda faena se debe salir con más organización, con la ideología mas clara, con una fuerte relación con el pueblo, con dirigentes que sean ejemplo de revolucionarios, diferenciados en conducta y pensamiento de los agentes del capitalismo.
Y se debe salir con un pueblo más identificado con sus representantes, más identificado con la ideología revolucionaria, más conciente de su papel histórico, decidido en la construcción del Socialismo.
Criticar es Amar
José Martí

29.7.08

¿A QUIÉN FAVORECE LA DISPERSIÓN ?

La dispersión de los revolucionarios es fundamentalmente ideológica, la falta de cohesión en las ideas trae consigo laxitud organizativa y flojedad en la acción.
La Revolución es un milagro, es como si las aguas de un río cambiaran su curso y ahora corrieran ascendiendo las montañas, como si el sol saliera de noche. Es un cambio profundo, no espontáneo. Necesita de la mayor atención y esfuerzo del humano.
Podemos decir que la Revolución es la obra más excelsa que puede realizar la humanidad, es un milagro que la eleva a condiciones de beatitud, es algo pocas veces visto en la historia. Las probabilidades de Revolución son mínimas, las causas de frustración son abundantísimas, contra ella conspiran milenios de costumbres.
Las sociedades en Revolución emprenden un camino muy cuesta arriba, y en esa aventura requieren un líder, un núcleo dirigente, de una organización y de un sólido cuerpo ideológico, de un pueblo dispuesto a la hazaña, y por qué no decirlo, de una ración de “buena suerte”. Solo así estarán en condiciones de dar los pasos correctos en ese camino, y de corregir los errores.
La contrarrevolución, el capitalismo, tiene con su ideología, su espiritualidad, colonizada el alma de la sociedad. El capitalismo no es un camino cuesta arriba, no es un milagro, es una miasma, es la costumbre, todo lo impregna, esta allí presto a defenderse y a perpetuarse, al menor descuido retoña.
Tiene sus centros y métodos de manipulación ideológica formados y actuando a nivel mundial: la educación, las propagandas, universidades, centros de investigación, televisión, libros, religiones, ídolos mediáticos, los ejemplos, la ciencia, la cultura, todo, ¡todo! está al servicio de la expansión del capitalismo.
El capitalismo no necesita preocuparse por la cohesión ideológica ¡ya la tiene!
En conclusión, la dispersión ideológica perjudica al Socialismo, a la Revolución y favorece al capitalismo.
Ahora bien, si es la discusión la condición previa para adquirir la coherencia ideológica revolucionaria, es lógico pensar que la mentalidad capitalista bombardea la discusión dentro de nosotros, no necesita discutir nada, afinar nada, lo que le interesa es avanzar en la práctica.
No discute, ya sabe lo que hay que hacer, por eso evita la discusión, la deforma, la desprecia, la desvirtúa, la trivializa.
La formación ideológica es fundamental para los revolucionarios, la crítica, la discusión, deben ser pilares sagrados del campo revolucionario.
Razón la del Che cuando dijo que el imperialismo tenía mejor olfato que los revolucionarios para detectar sus peligros. Eso es verdad para los revolucionarios y más aún para las ideas revolucionarias.
Los oligarcas persiguen con mayor saña a las ideas revolucionarias que a los revolucionarios. Basta que aparezca una idea revolucionaria para que los oligarcas de todos los pelajes se confabulen contra ella.
Las oligarquías buscan la monotonía, las ideas inocuas, los pensamientos vacíos, los diletantes. Soportan los dogmatismos que no hacen peligrar al sistema, pero les aterran las innovaciones, las ideas que guían la acción.
Los revolucionarios debemos construir el ideario que nos una.
Criticar es Amar
José Martí

28.7.08

LA PASIÓN

La pasión es indispensable e insustituible en la Revolución. Cuando un Pueblo adquiere la pasión revolucionaria, es decir, cuando la Revolución se transforma en un asunto vital, entonces se pueden superar todas las carencias. Por el contrario, cuando un Pueblo pierde la pasión revolucionaria, cuando el fervor popular es ahogado por otros sentimientos, valores y pasiones, entonces, la Revolución se pierde, se extingue.
La pasión de la gente tiene que ver con la actividad de los dirigentes revolucionarios, o mejor, la actividad de los dirigentes revolucionarios, su responsabilidad, es estimular la pasión revolucionaria en la población. Y de allí depende el éxito de la Revolución.
¿Cómo saber por donde anda la pasión del Pueblo?
Una buena medida de la pasión popular es oír de qué habla el Pueblo, qué lo preocupa, qué lo llena. Y sobre todo qué lo moviliza. Veamos.
Nosotros no vamos a decir lo que hemos oído en la conversación del Pueblo, siempre sería parcial. Nos limitaremos a plantear lo que creemos sería la pasión revolucionaria, de lo que debería hablar el Pueblo revolucionario, de las cosas por las que estuviera dispuesto a dar su esfuerzo diario y hasta su vida si fuese necesario. Por lo tanto, es deber del gobierno revolucionario, de sus motores y de todos los revolucionarios, estimular esa pasión.
Recomponer la sociedad como una sociedad del amor.
Sustentar esa sociedad del amor en una economía de Propiedad Social.
Luchar contra el capitalismo como el mayor obstáculo a las dos pasiones primeras.
Luchar por la construcción del Socialismo como única manera de conquistar las dos pasiones primeras.
El internacionalismo: entender que si no ayudamos a la humanidad donde quiera que esté, no podremos construir una sociedad amorosa, por el contrario, seremos una sociedad comida por el egoísmo.
El antiimperialismo: la pasión de la lucha antiimperialista como la lucha internacional contra el capitalismo.
Defender la Patria como el territorio grande que Bolívar nos enseñó a amar, con su ejemplo de guerrero mundial, territorio que alcanza cualquier territorio donde el hombre aún sea lobo del hombre. Repetir con Bolívar, Martí y el Che: La Patria es América, Patria es Humanidad, Patria es Revolución, y repetir junto al Comandante Chávez: Patria Socialismo o Muerte.
Defender al Comandante Chávez como el símbolo de las mejores luchas de este Pueblo, y de las posibilidades reales de ir hacia el Socialismo.
Si el Pueblo es capaz de vibrar por estas pasiones la Revolución está garantizada, pero en la medida que estas pasiones son sustituidas por valores egoístas, capitalistas, la Revolución se nos escapará de las manos.
Criticar es Amar
José Martí

27.7.08

IRREVERENCIA Y LEALTAD

En una Revolución hay momentos de irreverencia, son los propicios para la discusión. La irreverencia es fundamental para que la discusión florezca y de frutos. No es posible avanzar sin irreverencia, la Revolución es un gran acto de irreverencia.
Lo anterior es verdad, pero también es verdad que toda irreverencia en la discusión debe hacerse con absoluta lealtad.
Sin lealtad en la acción, todo se pierde, se fragmenta la Revolución , se lesionan los instrumentos organizativos, se desvirtúa la acción, se sientan precedentes de restauración, se le infringen golpes tan fuertes a la revolución que la ponen en peligro. Veamos.
Con motivo de las elecciones regionales, estamos asistiendo a una muestra de profunda deslealtad y falta de comprensión revolucionaria.
Los partidos de la Revolución , ¡todos!, no han entendido el momento histórico, ni el papel grande que deben cumplir. Y esto lo decimos con responsabilidad, a riesgo de que mañana nos acusen de cualquier disparate, nos tomen de pretexto para no verse a ellos mismos, para evitar la necesaria rectificación.
Se ha reducido las elecciones a un problema de contabilidad: apoyan en unos estados a los candidatos del PSUV, y en otros a los disidentes o a los enemigos del PSUV.
¿Cómo se explica esta incoherencia con el objetivo estratégico de preservar a la Revolución , cómo se justifica estas matemáticas utilitarias, este cálculo egoísta, este sumar y simultáneamente restar?
¿Qué intereses motivan el no llegar a la unidad, darle ese duro golpe a la imagen diferente que la Revolución debe reflejar en la sociedad?
Nos estamos comportando de manera idéntica a la oposición oligarca, ellos también discuten por estado, de acuerdo a sus apetencias burocráticas.
Los votos, la voluntad popular, se conquista por lo local, por lo táctico, y también, principalmente, por lo estratégico.
Es necesario que la gente vaya con emoción a votar, motivada por razones sagradas, altruistas, que nos perciban como algo diferente, como una ruta hacia otra sociedad, hacia la búsqueda de la felicidad.
Lo peor que nos puede pasar es ser percibidos como más de lo mismo, entonces la apatía y el escepticismo cundirán y aumentará la abstención.
Es necesario, a toda costa conseguir la unidad completa, absoluta, fuerte, que nos sirva para presentarnos al país como partidos revolucionarios serios, que están por encima de cualquier cálculo que perjudique la Esperanza Revolucionaria.
Que renuncien los que tienen que renunciar, que se ceda donde se tenga que ceder para conseguir la unidad. Aún hay tiempo.
Vayan a la unidad bajo protesta, produzcan un documento discutiendo con irreverencia, y sean leales en la práctica ¡únanse! Eso los engrandecerá ante el corazón popular.
Desgraciadamente esta no parece ser la tendencia.
Ahora bien, en caso de que no se concrete la unidad, hay que votar con decisión por los candidatos de Chávez, que son los candidatos del PSUV, bajo protesta, discutiendo, pero con lealtad con el Comandante, que hoy más que nunca es imprescindible para mantener al pueblo en las anchas alamedas.
Criticar es Amar
José Martí

26.7.08

VOTANTES Y ACTUANTES

La oligarquía, sabia en su dominación, ha instaurado un método de elecciones que separa al hombre actuante del hombre votante, de esta manera intenta reducir toda acción política a la mera acción electoral.
Si la actuación política se reduce sólo a lo electoral, entonces carece de peligro para el sistema oligarca, es controlable. Veamos.
El voto en el sistema oligarca es un hecho individual aislado, anónimo, se ejerce en la soledad, no genera vínculo con nadie ni con nada, es fugaz, al salir de la cabina de votación el acto se disipa. Es un hecho pasivo que nada exige al votante, a lo sumo hacer una colita, no hay riesgo, no hay participación activa, no hay actuación, no organiza para otra cosa que no sea el voto.
Así, las “maquinarias electorales” sustituyen a los partidos o, mejor, los partidos se transforman en simples maquinarias electorales.
Se intenta constreñir a las fuerzas sociales en pugna sólo a este escenario que las obliga a conducirse de acuerdo con los valores egoístas. Los candidatos y los electos obtienen grandes privilegios, de allí que las disputas por los cargos cultivan el egoísmo y las bajas pasiones. Confina a los dirigentes a este torneo, que sólo convoca para una acción individual y es terreno propicio para la ambición personal.
Después de las elecciones oligarcas no queda pueblo organizado, sólo la sensación de que la fiesta acabó y, triste, la masa sale de escena y espera otra elección, que la convoque a otra fiesta, que le de ilusión de participación.
Se comprende bien que buscar la unidad revolucionaria en las elecciones oligarcas es difícil, el terreno está tallado para la dispersión, para el individualismo, esa es su principal función.
La unidad de los revolucionarios, del pueblo y de sus dirigentes, no se conseguirá alrededor de las elecciones oligarcas, es necesario darles otro contenido.
¿Cómo hacerlo?
La clave está en romper el maleficio de separar la votación prestigiadora del individualismo egoísta, de la actuación social integradora, de la movilización.
Comprender que un votante es pasivo, que no construye. En contraste, un actuante es activo, en la formación de sociedad y en la construcción de Revolución.
Por tanto debemos unir votación con actuación, y así darle otro carácter a las elecciones.
En la medida que formemos y organicemos actuantes-votantes, en esa medida estaremos construyendo una fuerza realmente revolucionaria, que servirá para hacer Revolución y también para ganar elecciones oligarcas.
Debemos organizar la actuación social alrededor del voto, darle otra visión, transformarlo en acción, en actuación.
Formar comités de acción y votación que voten y que además actúen en la construcción de la Revolución , que le hagan seguimiento a la gestión y comportamiento de los electos, que hagan vigilancia revolucionaria.
Estos comités deben formar un poderoso tejido de actuación, en lo municipal, lo regional, hasta lo nacional. Deben tener como función unir el voto con la acción de las masas, deben servir para la votación, pero también para la movilización que construye y defiende a la Revolución.
Criticar es Amar
José Martí

25.7.08

PAPEL DE LA CONCIENCIA SOCIAL

La conciencia social requiere estudio fundamental, de su comprensión depende el destino de la Revolución. Veamos.
La conciencia social es el reconocimiento del individuo, o la clase, de su ubicación, sus relaciones en el mundo, la responsabilidad y acciones que de esa ubicación se desprenden.
La Conciencia del Deber Social es propia de la existencia proletaria, que emana de su trabajo en cooperación. Es la conciencia de pertenencia a la sociedad.
La conciencia egoísta es propia de la existencia oligarca, emana del trabajo egoísta, genera una guerra de todos contra todos.
Mucho dogmatismo y malas interpretaciones han sustentado el estudio de la conciencia social.
Algunos piensan que la conciencia social está ligada mecánicamente a la clase social. Otros piensan que no es posible adquirirla, que surge mecánicamente de las condiciones de existencia, que es un proceso espontáneo, que no es conciente. Otros simplemente ignoran su importancia.
Todas estas desviaciones son obstáculos formidables para la Revolución. Veamos.
Los que piensan que la conciencia social está ligada mecánicamente a la clase que representa, niegan el fundamento principal de la dominación de la clase oligarca sobre el resto de la sociedad.
Esta dominación se basa en la posibilidad de que la conciencia oligarca se irradie al resto de la sociedad, así la visión del mundo propia de la oligarquía se refleja a las otras clases, sus valores se instalan en el resto de la sociedad. Esto hace posible que se acepte el sistema de apropiación capitalista como algo natural, inamovible, a lo sumo perfeccionable.
Podemos resumir diciendo que la ideología dominante (la que adopta toda la sociedad) es la ideología de la clase dominante (que ha migrado al resto de la sociedad)
Con el mismo razonamiento, los que piensan que la conciencia social está ligada mecánicamente a la clase, niegan que la Conciencia del Deber Social, que emana de la clase proletaria, se refleje, se mueva al resto de la sociedad y haga posible la Revolución.
Los que piensan que la conciencia social surge mecánicamente de forma espontánea de la existencia, que la materialidad origina de forma mecánica a la espiritualidad, están negando la posibilidad revolucionaria en los países de poco desarrollo capitalista de escaso proletariado, están confinando la Revolución a los países altamente desarrollados, están negando la historia.
Basta revisar la historia para refutar esta idea simplista. Las revoluciones, sobre todo la cubana, han demostrado que la conciencia social es una fuerza capaz de incidir y dirigir la existencia.
La materialidad y la espiritualidad forman un complejo donde la espiritualidad es lo más importante, lo determinante. En otras palabras, es la conciencia social una fuerza objetiva, o mejor, parafraseando a Gramcsi, la conciencia social, la subjetividad, es la más poderosa de las fuerzas objetivas.
Se desprende que a la par de las modificaciones en las relaciones materiales, se deben estimular Formadores Activos de Conciencia del Deber Social: radio, prensa, televisión, artes, escuelas, y Trabajo Colectivo Voluntario, que se afincarán, se entrelazarán con la nueva materialidad.
Criticar es Amar
José Martí

24.7.08

LENIN

Difícilmente se encuentra en la historia un caso de odio tan fuerte por parte de las clases dominantes, como el odio a Lenin y al Partido Comunista de la Unión Soviética, al Partido Bolchevique. Recordemos que la oligarquía, los capitalistas, tienen un agudo olfato para detectar y odiar a sus verdaderos enemigos. Veamos.
¿Qué hizo Lenin? ¿Por qué ese odio?
Lenin le dio concreción al sueño de tomar el cielo por asalto: antes de Lenin la posibilidad revolucionaria era remota. Existía la teoría, el Marxismo, y se sabía que el capitalismo era un robo: la apropiación por parte de una pequeña elite del trabajo de toda la sociedad.
Además se pensaba que eran los obreros quienes serían los sepultureros del capitalismo. Se tenía una idea mecánica de la evolución de la sociedad, esta sería por etapas inviolables.
De esta manera los países poco desarrollados deberían evolucionar hasta un capitalismo fuerte, desarrollado, con un proletariado abundante, y sólo cumplida esta etapa se podía pensar en hacer la Revolución.
Se justificaba así el apoyo y estímulo a la burguesía como motor de ese desarrollo indispensable y previo a la Revolución Socialista.
La Revolución estaba reservada a un área muy pequeña del planeta, a los países desarrollados, a Europa, el resto, el noventa por ciento del mundo, estaba destinado a permanecer bajo la tutela capitalista ¡lo dictaba la teoría revolucionaria!
Es decir, el Marxismo devino, y esto es paradójico, en un dogma reaccionario.
Lenin construyó la teoría del eslabón más débil, decía que el capitalismo es uno solo, y es posible que la Revolución estalle en el eslabón más débil. Rompía así el cepo ideológico, le devolvió el vigor revolucionario al Marxismo.
Ya esto era razón suficiente para ganarse el odio de las clases apropiadoras. Pero hizo más Lenin, construyó el instrumento necesario para dirigir ese estallido, para dirigir la Revolución, construyó al Partido en la práctica y en la teoría, instrumento indispensable de la Revolución.
Ya estos dos aportes a la Revolución, teoría y organización, son razones suficientes para ganarse el odio de las clases apropiadoras, para ganarse el rechazo del capitalismo.
Pero hizo más Lenin: ¡hizo una Revolución! Demostró que es posible hacerla, él es el padre de la primera Revolución triunfante contra el capitalismo, del primer intento serio de construir el nuevo mundo, de construir el Socialismo. Dirigió la Revolución Soviética, le dictó rumbos, derrotó a los reformistas internos y a las agresiones de todas las naciones capitalistas de la época que se unieron contra el ensayo revolucionario.
Por eso el odio visceral que Lenin y el Partido Bolchevique suscitan a los oligarcas, a los contrarrevolucionarios, a los reformistas. Lo atacan con saña, lo han convertido en un anatema, en algo que descalifica, en una grosería.
Cuando el imperio, los capitalistas, los reformistas, los contrarrevolucionarios, acusan a algo o a alguien de Leninista, o de seguidor del Partido Bolchevique, indudablemente esa acusación indica que allí hay posibilidades revolucionarias, que ellos le temen.
Criticar es Amar
José Martí

23.7.08

TOLERANCIA

Cómo se explica que alguien diga que Marx estaba de acuerdo con el capitalismo, y eso no produzca reacción. Cómo se explica que alguien tenga pataleta por no ser candidato y no pase nada, no sea objeto de crítica; que se proponga alianza con los capitalistas para construir el Socialismo y sea considerada una sesuda propuesta a estudiar; que se propongan y se ensayen mil variantes de la propiedad capitalista.
Cómo se explica que unos propongan la Propiedad Social de los medios de producción y la Conciencia del Deber Social como pilares fundamentales, imprescindibles, del Socialismo, y eso produzca un revuelo de acusaciones y persecuciones.
Cómo se explica la intolerancia de un lado y la tolerancia de otro. Por qué una cosa los deja serenos y la otra los enfurece, al punto de perder la compostura y las buenas costumbres. ¿Qué es lo que pasa?
Esta situación no debe extrañarnos, se explica si entendemos que la Revolución lleva en su interior una profunda lucha de clases. Y cuando esa Revolución avanza, la lucha en su interior se agudiza y se hace cada vez más cruenta. Veamos.
La lucha de clases siempre es entre los poseedores y los desposeídos de los medios de producción, eso está en el fondo de toda lucha de clase. Mientras los medios de producción no sean de propiedad social, o mejor, no vuelvan a ser de propiedad social, mientras los expropiadores de los medios de producción no sean expropiados, habrá lucha de clases.
Muchas armas usan las oligarquías en este combate de clases.
Lo primero que hacen es tratar de ocultar la existencia de la lucha de clases, en ese empeño fabrican diversas teorías, unas más descabelladas que otras. Los más audaces postulan que no hay clases, por tanto no hay lucha de clases, todos somos iguales, todo es de todos.
Otros un poco más sensatos plantean que sí existen clases, cómo negar lo que está a la vista, pero la salida que ven es la colaboración de clases ¡sólo con los explotadores y los esclavizados agarraditos de la mano es que se puede avanzar! Acusan que “la lucha de clases es un invento de quienes postulan tal barbaridad”.
Otros afirman que si hay lucha de clases, pero que eso es inherente al hombre, que el humano es por naturaleza diferente, que unos nacen con cualidades que le permiten apropiarse de la riqueza social y otros nacen para ser pobres. De allí que la solución es dar a los pobres algunas migajas, no se puede hacer nada más.
Todos siempre guardan la carta de la violencia para “convencer” que la lucha de clases no existe, que sólo existen inadaptados que no entienden el orden social.
A los que planteen que sí existe la lucha de clases, que es posible superar la apropiación de la riqueza social, que otro mundo es posible, que la base del entuerto es la propiedad de los medios de producción, se les persigue, se les acusa, contra ellos se esgrimen las mismas infamias y deformaciones que ya son históricas.
Criticar es Amar
José Martí

22.7.08

CRÍTICA Y REVOLUCIÓN

El vigor de una Revolución se puede medir por su capacidad de crítica, por la actitud que ella tenga frente a la crítica, su calidad.
Revolución que no se critica se desgasta, se estanca. Revolución con una calidad baja en la crítica se desvirtúa, y si se cae en la tentación de buscar el consenso persiguiendo y descalificando la crítica, entonces se construirá el silencio que acompaña a la muerte.
La ideología capitalista ha reducido la crítica a un ataque perjudicial. Así, quien critica es enemigo, y quien asiente es considerado un partidario. Es comprensible esta característica: el sistema dominante no se basa en la cooperación sino en la competencia, donde cada factor, cada individuo, actúa solo, todos son enemigos entre sí. En este ambiente la crítica tiene que ser considerada un ataque encubierto.
En la Sociedad Socialista es distinto: allí la suerte de cada uno de sus miembros depende de la suerte de la sociedad toda. Por lo tanto quien perjudique a la sociedad se está perjudicando a sí mismo, quien perjudique a un individuo está privando a la sociedad de uno de sus hijos y perjudicando a todos. En ese ambiente la crítica toma otras características, otros objetivos: es instrumento para perfeccionar la acción.
Nosotros ejercemos la crítica dentro de la Revolución , guiados por la consigna “irreverencia en la discusión lealtad en la acción”, y tratamos de acercarnos al ideal de “Criticar es amar”. En ese empeño cometemos errores y excesos, corremos ese riesgo porque entendemos la importancia de la crítica, de ejercerla y de aprender construyendo una nueva cultura de la crítica.
Últimamente se nos ha atacado con frecuencia, bienvenida esa crítica aun teniendo mala intención, por el camino se irán acomodando las cargas.
Con ánimo de subir el debate y la calidad de la crítica, queremos precisar algunos de los principios en los que creemos y defendemos.
Uno. Toda sociedad desde la aparición de la propiedad privada está dividida en clases, y la historia de la humanidad es la historia de la lucha de clases. Venezuela no escapa a esta afirmación, la vida y la política venezolana están cruzadas por una profunda lucha de clases, los partidos políticos son reflejo de esta lucha.
Dos, el Socialismo, cualquiera sea su particularidad, no se puede construir sin la hegemonía de la Propiedad Social de los medios de producción. Y esta hegemonía no es simplemente económica, es la hegemonía que sustenta la formación de la Conciencia del Deber Social.
Tres, en una sociedad con poco desarrollo del capitalismo, la Revolución Socialista , la construcción del Socialismo, no es posible sin un Partido Socialista y sin el Trabajo Colectivo Voluntario, sobre los cuales se construye la Conciencia del Deber Social, columna principal del Socialismo.
Cuatro, la construcción de la conciencia es un acto conciente, no es espontáneo.
Cinco, sin el Comandante Chávez no es posible el Socialismo hoy en Venezuela.
A estos principios, entre otros, los defendemos, desde ellos criticamos, y a ellos dedicamos nuestros modestos esfuerzos.
Criticar es Amar
José Martí

21.7.08

LA ARENA

Había una vez una institución que necesitaba saber cuantos granos de arena contenía una playa. La información se usaría en la propaganda turística. Las altas autoridades encomendaron la misión a cuatro funcionarios.
El primero, muy hacendoso, se trasladó de inmediato a la playa, se tiró al suelo y comenzó, con la ayuda de una lupa, a contar granito, por granito. En ese menester anda. Esta es la actitud del pragmático.
El segundo, se fue para su oficina y desde allí imaginó la playa, elaboró poemas, escribió tesis sobre la relación anfibológica del sexo de los ángeles y el sexo de los granitos, dictó conferencias, participó en congresos, fue jurado en eventos, todo relacionado con la arena, se convirtió en arenólogo. Ahora está tan ocupado con estas actividades que le queda poco tiempo para contar los granitos. Este es el modo del intelectual idealista.
El tercero, nombró una comisión encargada de elaborar un proyecto para contar los granos con la mayor eficiencia posible. Esta comisión pidió oficinas para desplegar sus planos y diseñar equipos de medición de granos, solicitó las consabidas lap top y los infaltables teléfonos celulares. Después luchó para que a la comisión la pasaran a Dirección, luego a Gerencia, lo último que se supo es que plantean su pase a Ministerio. Estamos esperando que tengan tiempo para contar los granitos, ellos dicen que no pueden arrancar hasta que se defina en el alto gobierno a cuál ministerio estarán adscritos. Este es el esplendor burocrático.
El cuarto, fue a la playa, contó los granos que caben en un milímetro cúbico, calculó con ayuda de la matemática el volumen total de la playa, multiplicó una cosa por la otra, y obtuvo, con un tolerable error, el número de granitos. Hizo un informe de una página y pidió otra tarea. Este es el camino revolucionario-científico.
La historia es útil. Viéndonos reflejados en estos ejemplos, comprenderemos mejor nuestra labor y diagnosticaremos las desviaciones en el trabajo. Repasemos las posturas.
Pragmáticos, son los que piensan que el conocimiento sólo se adquiere en la práctica, no son capaces de resolver estrategias, sólo tareas muy simples. Desprecian la teoría, esa es su desgracia.
Los idealistas, desechan la realidad y ven como única fuente de conocimiento al intelecto. No resuelven problemas reales, son fatuos.
Los burócratas, les interesa sólo la forma, nunca el contenido, el trámite es lo fundamental, las consecuencias no importan.
El científico revolucionario, busca el conocimiento en una sabia combinación de la práctica con la teoría. Sabe que el conocimiento práctico sin el complemento de la teoría es inútil, por eso, prestigia la lectura y el pensamiento tanto como ir a la realidad.
Criticar es Amar
José Martí

20.7.08

¿Cómo hacerlo?

El trabajo del revolucionario, desde la etapa conspirativa antes de la toma del poder, es un trabajo voluntario. El trabajo del partido revolucionario es en esencia trabajo voluntario, colectivo, conciente, prefigura la nueva relación con el trabajo de la sociedad Socialista.
No es pensable el camino hacia el Socialismo en Venezuela, un país rentista con poca clase obrera, sin una poderosa red, un movimiento de Trabajo Colectivo Voluntario. Sólo así podremos construir las condiciones materiales necesarias para superar la conciencia egoísta y sustituirla por la Conciencia del Deber Social.
¿Cómo hacerlo?
La tarea no es fácil, pero es indispensable, somos un país con una fuerte tendencia al facilismo, al clientelismo, cien años de explotación petrolera nos han tallado así. No obstante hemos dado muestras de una gran vocación altruista, lo hicimos en abril y diciembre cuando el pueblo salió a la calle guiados por profundos sentimientos de amor, esos días nadie pidió nada material, esos días la Conciencia del Deber Social afloró en las calles.
Entonces, el espíritu necesario para la construcción revolucionaria está allí en el pueblo. Este pueblo está llamado, como en el pasado, a grandes obras histórica, a renovar las hazañas de los próceres.
Además tenemos un fuerte liderazgo, con una fuerte conexión amorosa con la masa, capaz de dirigirla, de ser su paradigma.
Estás condiciones son inmejorables para solventar las carencias de una clase proletaria fuerte y emprender con brío el camino de establecer una nueva relación con el trabajo, entre los hombres, y de estos con la naturaleza, de ir hacia el Socialismo.
El Trabajo Colectivo Voluntario debe dejar de ser manifestación espasmódica, un espectáculo, y ser organizado de tal manera que conmocione a la sociedad.
Podría planificarse un día nacional de lanzamiento del Trabajo Colectivo Voluntario, quizá el domingo o el sábado, ese día deben participar los altos dirigentes, es con el ejemplo que se moviliza al pueblo.
Ese día debe haber explicación de la necesidad del Trabajo Colectivo Voluntario para avanzar en la construcción de la Conciencia del Deber Social, indispensable para construir las nuevas relaciones humanas amorosas propias del Socialismo.
Ese día se debe crear una coordinación nacional de Trabajo Colectivo Voluntario, se deben formar las Brigadas Especiales de Trabajo Colectivo Voluntario, crear las oficinas de estadísticas para contabilizar las horas de Trabajo Colectivo Voluntario y evaluar la actividad, para premiar a las más destacadas, por supuesto, con estímulos morales.
El Trabajo Colectivo Voluntario es una actividad antiburocrática pero organizada, debe ser una fiesta, tener la alegría de quien se encuentra con el futuro y recibe la buena nueva de que la humanidad es salvable, y que él está participando en esa sanación.
Cada ministerio, cada fábrica de la sociedad administrada por el Estado, las empresas básicas, PDVSA, la CANTV , la Petroquímica , SIDOR, el sector eléctrico, los Ministerios, Miraflores, las Gobernaciones, los estudiantes, los campesinos, los Consejos Comunales, todos deben hacer Trabajo Colectivo Voluntario, los partidos de la Revolución , los Consejos Comunales, las Mesas Técnicas, todos deben formar Brigadas.
Criticar es Amar
José Martí

19.7.08

LA MADEJA SE DESENROLLA POR LA PUNTA EQUIVOCADA

Los clásicos pensaban que la Revolución Socialista se daría primero en países con alto desarrollo de las fuerzas productivas. Así, se esperaba la Revolución en Alemania, Inglaterra, Francia. Allá había grandes contingentes de obreros y era natural que prosperara la ideología de la clase obrera.
Pero la realidad, siempre testaruda, juega con el humano, y la Revolución se dio primero en un país con gran atraso de las fuerzas productivas, en el eslabón más débil, en Rusia, lo que hizo decir a un teórico que “la madeja de la historia se estaba desenrollando por la punta equivocada”.
La Revolución Soviética añadió un nuevo período a la teoría revolucionaria, el período de transición hacia el Socialismo, este período presentaba nuevos retos. Uno de ellos es el del desarrollo de la conciencia en situación de escasa masa obrera. La pregunta era:
¿Si no hay masa obrera suficiente, cómo irradiar la conciencia de la fraternidad, de la colaboración al resto de la sociedad? ¿Cómo llevar la conciencia que emana de la existencia obrera, al resto de la sociedad que no tiene esa existencia?
Los reformistas se apresuran a afirmar que eso no es posible, que la solución es desarrollar al capitalismo y así formar la masa obrera crítica necesaria para emprender el camino Socialista. Así condenan a los países de poco desarrollo de las fuerzas productivas a permanecer en la órbita capitalista.
Se ha avanzado en la búsqueda de la respuesta, uno de los grandes adelantos surge allá mismo en la Unión Soviética , y adquiere su máximo desarrollo en Cuba Socialista, es el Trabajo Colectivo Voluntario.
“El trabajo voluntario es el que se realiza fuera de las horas normales de trabajo, de forma organizada y sin percibir remuneración económica adicional. El mismo puede realizarse dentro o fuera de su centro de trabajo” .
El trabajo voluntario tiene la característica de unir al hombre en trabajo fraternal, conciente, sin necesidad de tener las fábricas, suple su carencia. Es un ejercicio de trabajo libre, no enajenado, trabajo para la sociedad. Crea las condiciones materiales para asentar la Conciencia del Deber Social. Es un recurso para conseguir los beneficios para la conciencia de una existencia proletaria, sin las fábricas.
Es desarrollar las condiciones para la formación de la Conciencia del Deber Social en situación de poco desarrollo, la masa va aprendiendo a medida que se va produciendo la elevación de las fuerzas productivas.
El Trabajo Colectivo Voluntario, podría llamarse también Trabajo Voluntario Proletarizante, tiene la virtud de crear las circunstancias para la difusión de la Conciencia del Deber Social.
El hombre hace Trabajo Colectivo Voluntario llevado por la conciencia, de manera libre, en el se expresa lo mejor del humano, la entrega desinteresada al bien de la humanidad. Así el trabajo deja de ser un trabajo forzado, para convertirse en un medio de realización, de elevación del humano, en trabajo liberador, constructor. Prefigura la condición del trabajo del futuro.
Criticar es Amar
José Martí

18.7.08

LA SALVACIÓN

No es necesario argumentar mucho para demostrar que el capitalismo nos conduce a la extinción de la humanidad y de la vida planetaria, es suficiente ver a nuestro alrededor con ojo honesto.
Encontraremos especies extinguidas y en peligro de extinción, los polos derretidos, el calentamiento global reconocido por todos, la desertización, la contaminación de los océanos, de la atmósfera, y un largo etcétera.
Los responsables de la tragedia, los países desarrollados, ahora reconocen el peligro, la urgencia de su solución, pero lo asumen con cinismo suicida: se proponen mejorar las causas del desequilibrio ¡para dentro de cuarenta años!
No hay dudas que el hombre del mundo desarrollado es víctima de la enfermedad de la alienación, está atrapado en las ruedas de un desarrollismo que avanza hacia la extinción, y en esa marcha es incapaz de cambiar el rumbo macabro, es incapaz de percibirlo en toda su magnitud, en él no está la solución.
Es en el mundo poco desarrollado, en el Sur, donde aún hay posibilidades de salvación para la humanidad. Paradójicamente la solución está en las sociedades que llamamos atrasadas, las que tienen poco desarrollo.
Es así, la humanidad está atrapada en el llamado desarrollo, es el concepto de desarrollo el que debe ser cambiado, el planeta no soporta la carrera desenfrenada de consumo que llevamos.
Los clásicos basaron el movimiento de la sociedad en el desarrollo de las fuerzas productivas que entrarían en contradicción con las relaciones de producción, y la solución de esta contradicción produciría un nuevo orden social, cada vez más avanzado.
Se basaban para su tesis en la historia, esa había sido la historia de la humanidad, el hombre estaba atrapado en esa especie de escalera cuyos peldaños son el aumento de las fuerzas productivas.
La misma historia nos está demostrando que es una escalera que desciende al infierno. Los clásicos no previeron el daño ambiental incontrolable que el aumento desmedido de las fuerzas productivas ocasiona al planeta.
Es necesario revertir la escalera, darle la vuelta, que sirva para escapar del abismo, en lugar de ser vía para el hundimiento.
¿Cómo hacerlo?
El desarrollo debe ser reformulado, el hombre debe escapar de la fatalidad del crecimiento de las fuerzas productivas, el motor del desarrollo debe ser cambiado, de aumento de las fuerzas productivas, por el de aumento de la ARMONÍA.
Lo que equivale a decir, el movimiento de la humanidad debe ser conciente, dependiente de la voluntad, en lugar del inconciente, dependiente del desarrollo desmedido y desarmónico de las fuerzas productivas.
La conciencia debe surgir de una existencia concientemente armónica. Capaz de modificar el consumo y la producción de la humanidad que fagocita al planeta.
Ese cambio drástico de la humanidad, su salvación, es posible.
El hombre tiene recursos espirituales para zafarse, no está destinado a la extinción. El Trabajo Colectivo Voluntario, es muestra de que el hombre no es una pasión inútil, allí está la esperanza de que se puede construir un mundo sobre bases de ARMONÍA CONCIENTE.
Criticar es Amar
José Martí

17.7.08

EN CUBA EL SOCIALISMO VIVE

A pesar de las infamias de las agencia noticiosas internacionales, que se empeñan en decir que en Cuba el Socialismo es cosa del pasado. A pesar de las dificultades propias del mundo capitalista de hoy y del bloqueo criminal a que está sometida, en Cuba el Socialismo vive. Y es con más Socialismo que Cuba está resolviendo sus dificultades y enfrentando los problemas que hoy azotan al mundo.
Estudiemos el discurso pronunciado por Raúl Castro en las conclusiones de la primera sesión ordinaria de la VII Legislatura de la Asamblea Nacional del Poder Popular el 11 de julio de 2008 .
Al discurso vale la pena consultarlo, es una clase de Socialismo práctico, nos muestra cómo una sociedad Socialista, reúne a su cuerpo dirigente, la Asamblea Nacional del Poder Popular, y después de estudiar la realidad, detectar errores, verificar éxitos, planifica el rumbo a seguir, racionaliza los recursos, dispone medidas para corregir entuertos.
Revisemos algunas de las palabras de Raúl:
“La armonía en la planificación y la organización es esencial en el Socialismo. Su ausencia puede conducir a un caos más peligroso que el característico del capitalismo, donde las leyes del mercado terminan por establecer cierto orden y equilibrio, aunque sea a costa del sacrificio de miles de millones de seres humanos a escala mundial”.
“En el socialismo es indispensable que en los planes económicos la asignación de recursos se ajuste estrictamente a los ingresos disponibles. No podemos aspirar a que 2 y 2 son 5; 2 y 2 son 4; más bien a veces en el socialismo 2 y 2 da 3.”
“Socialismo significa justicia social e igualdad, pero igualdad de derechos, de oportunidades, no de ingresos. Igualdad no es igualitarismo. Este, en última instancia, es también una forma de explotación: la del buen trabajador por el que no lo es, o peor aún por el vago.
“También es un concepto de validez permanente que mientras menos recursos existan, mayor disciplina se requiere y más hay que prever, planificar, organizar, exigir y ahorrar. Así lo impone con urgencia la actual coyuntura económica internacional y, por lo tanto, la nuestra.
“Ahora se impone como nunca invertir con racionalidad nuestros limitados recursos, esencialmente en la obtención de utilidades que permitan costear los ya elevados gastos sociales del país. La producción de alimentos, la sustitución de importaciones y el incremento de las exportaciones, continúan siendo líneas fundamentales.
“Además el ahorro, que como ha orientado el compañero Fidel, es hoy nuestra fuente de recursos más inmediata y factible. En primer lugar, el combustible.
“Establecer prioridades y cumplirlas estrictamente. Postergar las inversiones que no sea imprescindible acometer de inmediato.”
Sólo en el Socialismo se puede planificar e informar de esta manera al pueblo de las dificultades, los errores y la manera de afrontarlos.
En el capitalismo la anarquía en la economía condena a los humildes a más miseria, la sociedad no es dueña de su destino.
En Cuba el Socialismo vive y sigue señalando el rumbo.
Criticar es Amar
José Martí

16.7.08

INFORMAR PARA CONVENCER

En la Revolución es importante informar al pueblo. Pueblo que no está informado no discute, y cuando no hay discusión no hay convencimiento, y sin convencimiento no hay acompañamiento, y cuando la Revolución se aparta de la masa corre peligro. Veamos.
Últimamente en Venezuela estamos fallando en la información y el convencimiento. Estudiemos algunos casos, detectemos las fallas y corrijamos.
Un caso, el 11 de junio se toman medidas económicas que producen reacciones contrarias en el campo bolivariano, sin entrar en análisis mayores, podemos decir que gran parte de los problemas son imputables a fallas de información y convencimiento.
De este caso se desprende que la dirección de la Revolución , los partidos de la Revolución , sobre todo el PSUV, no están cumpliendo su papel. En el caso del 11 de junio, mucho después que se levantó la polémica, esa dirección produjo un comunicado apoyando a las medidas, lo que evidencia que no comprende sus funciones.
En el comunicado escueto, apoyan las medidas, por supuesto que tienen que apoyarlas, pero su deber era explicar el por qué se tomaban, convencer, no simplemente apoyarlas.
El deber de un partido revolucionario, es servir de correaje entre la masa y la dirección de la Revolución. Y ese papel lo abandonan todas las direcciones de los partidos de la Revolución.
Otro caso, la visita del inefable uribe, que por supuesto no es santo de nuestra devoción. Había que explicarla, se dijo que era conveniente la unidad de los pueblos hermanos. De acuerdo que los pueblos vecinos debían entenderse, de acuerdo, pero las razones, la práctica así lo indica, fueron insuficientes: no se comprendió a las marchas, y los marchistas no comprendieron al gobierno revolucionario, se separaron.
Otro caso, está vez más evidente e incomprensible, es la búsqueda de la unidad indispensable en las elecciones regionales. Allí el desajuste es total, las direcciones se pierden en el mundo de la contabilidad: apoyan en 12 Estados pero en otros no, avanzan en tres, pero se trancan en dos, no apoyan a uno porque es antipático. Y así van, sin justificaciones de la dispersión.
Cómo es posible, por ejemplo, que la gobernación de un Estado pequeño impida la unidad, eso es inexplicable en el mundo de la sensatez revolucionaria. Cómo se explica que no se logre la unidad en el Municipio Libertador de Caracas, pero si en Sucre y en la Alcaldía Mayor. Qué clase de cálculo sustenta esa decisión, que es un crimen de lesa Revolución. Cómo convence, a quién educa esa actitud.
Por qué no hay unidad, eso no se informa al pueblo, no convencen, y recordemos que sin convencer no hay acompañamiento.
La sensación que queda, la imagen que recibimos, es que las direcciones están atrapadas en la vieja política, que hay mezquindad, soberbia, cálculo egoísta, falta de visión estratégica grande.
La Revolución corre el peligro de apartarse, por su soberbia, de la masa que la sustenta, y eso tiene consecuencias fatales.
Criticar es Amar
José Martí

15.7.08

GOLPE AVISADO

En la oposición existen los bocones, son muy útiles para los análisis políticos, ellos develan los planes secretos, no resisten, salen de sus reuniones clandestinas a buscar prensa para aparecer como pitonisos, el oportunismo los delata, las ansías de un cargo en la transición los desequilibra.
Uno de estos bocones aparece en el Universal del lunes 14 de julio y en un artículo de opinión titulado, “A mis compañeros de Armas” nos obsequia la siguiente información:
“El camino insurreccional no es, en este momento, recomendable. Los venezolanos nos preparamos para asistir a unas elecciones de suma importancia. Hugo Chávez será derrotado. La oposición se presentará unida en la mayoría de las gobernaciones y alcaldías. El deterioro del gobierno es una realidad. La posición de la Fuerza Armada debe ser sólo una: hacer respetar el resultado electoral. Ese resultado se defiende al cumplir cabalmente sus funciones dentro del Plan República, generar la confianza necesaria en los votantes e impedir las posibles triquiñuelas del gobierno durante los escrutinios. Esa es una posición institucional que no puede ser criticada por nadie. Después de la derrota, las circunstancias serán diferentes. El exagerado poder que tiene actualmente Hugo Chávez dejará de existir. Los mandos militares empezarán a entender que su gobierno tiene los días contados y, además, recordarán que el ejercicio del mando genera responsabilidades personales si se realiza fuera del marco establecido en la Constitución y leyes de la República.”
Este artículo evidencia la actividad conspirativa de estos opositores, ese es el plan de esta fracción, cuando Chávez se desgaste es el momento para el camino insurreccional que ahora no es recomendable. Está claro que le manda un mensaje a otra fracción que activa para antes de las elecciones.
El bocón, un General del ejército, fernando ochoa antich, ex ministro de la Defensa , nos hace un gran favor, nos ahorra trabajo en inteligencia y nos aporta datos para ubicar a los enemigos y ajustar nuestro comportamiento político.
Está claro que el enemigo oligarca trabaja en la legalidad y simultáneamente conspira.
Que las fuerzas bolivarianas piensen lo contrario, bajen la guardia, se apoltronen en el remanso de una legalidad que los oligarcas no respetan, actúen como si la paz reina en la Revolución , es una candidez imperdonable.
Las elecciones regionales no son unas elecciones comunes para elegir a un gobernador que va a dirigir a su Estado en sana paz, a mejorar los servicios, a recoger la basura, a construir aceras y brocales.
¡No! Quien así piense se engaña, en las elecciones se decide si los oligarcas crean condiciones para un golpe, para yugular a la Revolución , al Comandante, y también a los tontos que actúan sacando cuentas, haciendo cálculos mezquinos que impiden la unidad y la fortaleza de la Revolución.
Las circunstancias están claras, los oligarcas nos amenazan. Es necesario, urgente, la unidad completa, que evita debilitarnos, que derrote los planes golpistas oligarcas, con ese criterio deben trabajar los dirigentes chavistas. Nada justifica dispersar la fuerza popular, la entrega de la Revolución , del Comandante.
Criticar es Amar
José Martí

14.7.08

CAMARADA GUSTAVO

Hace pocos días se celebró el natalicio del Camarada Gustavo Machado, fundador del Partido Comunista de Venezuela y destacadísimo luchador revolucionario, ejemplo para todo el que participe en las luchas sociales. Estudiando la vida de Gustavo, estudiamos la vida de un revolucionario cabal. Veamos.
Dejó las comodidades de una vida burguesa que le proponía muchos placeres y comodidades, para adoptar la hermosa aventura del revolucionario internacional. Temprano conoció las cárceles de Gómez y, huyendo de la represión, viajó por el continente llevando el espíritu solidario e internacionalista que los venezolanos heredamos del Libertador. Donde quiera que se encontrara, siempre participó en las luchas antiimperialistas: fue oficial del Estado Mayor de Sandino, allí estuvo junto a Carlos Aponte, viajó a Cuba y, hombro a hombro con Julio Antonio Mella, participa en la construcción del glorioso Partido Comunista de la isla. Sin embargo, su corazón no se apartó de la lucha por la Revolución venezolana, participó en la preparación de varias invasiones contra el General Gómez y, en ese ánimo, toma la isla de Curazao como paso previo para venir a luchar contra la dictadura que azotaba al país.
Siempre fue un luchador revolucionario, el pacto de punto fijo no le perdonó su consecuencia al lado del pueblo, no podía tolerar su ejemplo de rectitud, de consecuencia revolucionaria, y lo persigue, le allana la inmunidad parlamentaria (fue electo diputado con los votos y el amor de Caracas) y nuevamente va a la carcel, ahora el cuartel San Carlos es el que conoce de la dignidad de este luchador.
En esta Revolución hace falta Gustavo Machado, cuando su sueño de toda la vida tiene posibilidades de concretarse, cuando el pueblo que tanto amó ha tomado conciencia de que es el Socialismo la vía de redención. Gustavo estaría en la primera fila de combate contra el imperio, estaría, con su experiencia y su ejemplo colaborando para desentrañar las incógnitas de la agresión imperialista.
Hace mucha falta Gustavo, un hombre generoso, altruista, para que contribuya a la construcción de un verdadero partido revolucionario. Hace falta su llamado a la unidad de los revolucionarios, y su grito de lucha contra las desviaciones reformistas. Hace falta, su ejemplo de fidelidad con sus principios y sus creencias, y al mismo tiempo su vocación rebelde frente a los dogmas.
Hoy nosotros queremos recordar con amor al Camarada Gustavo Machado, y decirle que aquí estamos, guiados por su ejemplo, sus enseñanzas, su valentía, y luchando siempre por ser fieles a su legado.
Criticar es Amar
José Martí

13.7.08

EL SOCIALISMO SE FUNDA DESDE LA ZONA SOCIALISTA

Es una realidad incuestionable que en el interior de la Revolución Bolivariana ocurre una feroz lucha de clases, una lucha entre dos proyectos enfrentados a muerte: el capitalismo y el Socialismo, que por las características de la Revolución se ven obligados a convivir en un híbrido capital-Socialismo, que es transitorio y escenario de una feroz batalla donde uno de los dos terminará por desaparecer.
Ya hemos dicho que en estas circunstancias el deber de los revolucionarios, de los socialistas, es impulsar el Socialismo, fortalecer la Zona Socialista del híbrido. El Socialismo dentro de la Revolución debe acumular fuerza política, económica y moral.
Es necesario agrupar en una Zona a los logros Socialistas de la Revolución , los económicos, los sociales: los centros de producción, las fábricas socialistas, los fundos, los centros de mejoramiento agrícolas y pecuarios. Los canales de distribución, PDVAL, MERCAL, las Misiones.
La Zona Socialista económica debe ser territorio para la Planificación Central , para el control de la producción, allí se deben hacer ensayos de transacción no mercantil, de relación laboral diferente, de control y participación en la elaboración del plan por parte de los trabajadores. La Zona debe ser territorio para el Trabajo Colectivo Voluntario, o mejor, sólo la Zona Socialista puede ser lugar para el verdadero Trabajo Colectivo Voluntario, el que contribuye a la construcción del Socialismo.
En la Zona Socialista social se deben agrupar las Misiones, profundizar su carácter Socialista. Ellas son componente espiritual del Socialismo, se deben dinamizar, relanzar, retomar su núcleo Socialista, zafarlas de la parsimonia burocrática que le inyecta el ambiente capitalista, evitar que se conviertan en un elemento más del Estado paquidérmico heredado.
Esta Zona Socialista debe convertirse en bastión del Socialismo, allí deben orbitar la acción de los consejos comunales, la de los batallones, la de los Partidos Socialistas, de los medios de difusión del Estado.
Sólo afincados en la Zona Socialista podemos derrotar al capitalismo, defender al Socialismo, construirlo, incorporar al pueblo a su construcción y defensa, mostrarle al pueblo que vale la pena luchar por construir ese mundo Socialista, darle razones sagradas por las cuales luchar.
La Zona Socialista necesita una dirección, un Concejo de Planificación Socialista, que la dirija, planifique, controle.
La existencia del híbrido capital-Socialista no debe asustar ni decepcionar a nadie, es una manera propia de la Revolución Bolivariana de manifestarse el enfrentamiento de clases.
La lucha ha adquirido un nuevo nivel, ya la restauración, que pensaba que el híbrido era el escenario para derrotar a un Socialismo inerme, disgregado, distraído, se encontró con resistencia, sus pasos son detectados y enfrentados.
La lucha cada vez más evidencia su carácter de clase, por eso mismo adquiere una condición cada vez más cruenta, los capitalistas se desesperan y ensayarán represalias, primero con sordina y luego abiertamente.
El deber de los revolucionarios es enfrentarlos de la única manera que eso hoy es posible: construyendo Socialismo, difundiendo Socialismo, peleando por el Socialismo, construyendo la Zona Socialista.
El deber de los Socialistas es hacer el Socialismo.
Criticar es Amar
José Martí