La noticia recorre al mundo, en Venezuela es ocultada o deformada, comprensible, a los medios escuálidos no les interesa mostrar sus fechorías, las verdades de sus proposiciones. Veamos la noticia.
“El ex presidente de PDVSA, Luis Giusti, ha sido removido de su cargo como miembro de la directiva de la empresa petrolera colombiana Alange. La decisión se produce después que las acciones de Alange se desplomaron una vez que Giusti se retractó sobre las cifras de producción que había anunciado.
La compañia Alange Energy Corp. (ALE.V), es una empresa basada en Canadá orientada hacia la producción petrolera y la exploración de gas natural. El error de Giusti ha levantado sospechas de haber sido deliberado, al informar que la producción para noviembre de 2010 era de 4,300 barriles diarios cuando después aclaró que este era el potencial de producción y no la producción real actual. Se conoció que Giusti u otro director, presuntamente, después de la primera declaración había vendido su importante paquete de acciones en la compañía.
La producción diaria a Noviembre 29 de 2010 era de 2,609 barriles y no como fue reportado de 4,300 b/d”, declaró por comunicado de prensa la empresa Alange. Las acciones de la compañía inmediatamente cayeron en picada en un 35% en un día. El miércoles la compañía señaló que Luis Giusti, cofundador y director ejecutivo de la empresa, quien es una figura muy conocida del sector petrolero, ha sido reemplazado por Gregg Vernon, CEO interino.
Giusti, quien ha sido acusado de mala gerencia, también se vio envuelto en el fraude de Stanford Bank, en el cual aparecía como miembro de su junta asesora."
La noticia no precisa mayores comentarios, son unos pillos, la tan cacareada meritocracia resultó en vulgares traficantes en la bolsa de valores. Inflaron cifras de rendimiento petrolero para subir las acciones de la compañía, prometieron villas y castillos, riquezas fabulosas, se basaron en el odio a Chávez, esa fue su garantía, y después vendieron a ganancia, antes de descubrir que todo era un engaño.
Esta fechoría demuestra claramente los móviles de la derecha capitalista. No se trata de un hecho aislado, o que simplemente giusti es un malhechor, que lo es, se trata de algo más general, es la ética del capitalismo: “todo es aceptado siempre que dé dividendos, lo demás no importa.”
Tres enseñanzas sacamos de esta truculencia:
Primero, gracias a Dios que esta gente dejó de gobernar a Venezuela y a la petrolera. En su afán de acumular riquezas, hubiesen vendido el país completico a los gringos, sin sonrojarse.
Segunda, el capitalismo empolla todo tipo de fraude, él es un fraude, es necesario superarlo, de lo contrario nos sumirá en la miseria. Recordemos la gran crisis financiera de Estados Unidos, los banqueros salieron más ricos y los pobres pagaron los platos rotos. Cabe repetir la frase ya dicha por los clásicos: “todo capitalista es ladrón”.
Tercera enseñanza, gracias a Dios que tenemos petrolera y Gobierno Revolucionario.
¡Chávez es garantía!
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