31.7.10

EL CONTROL OBRERO ES UN ESPEJISMO

El Control Obrero, tal como está planteado en Venezuela, es un espejismo de la emancipación proletaria. Es imposible que los obreros se liberen de la explotación de forma aislada, fragmentada, la liberación o es social o no es. Veamos.
Dentro del sistema capitalista, una fábrica, aun bajo control obrero, debe funcionar de acuerdo a las reglas del capitalismo, esto es, debe explotar, y los obreros seguirán vendiendo su fuerza de trabajo como mercancía, de esto no hay escapatoria.
El Control Obrero, tal como lo proponen, tiene dos caminos principales.
Uno, se forma una casta donde unos obreros se hacen "dueños o accionistas" y explotan a sus hermanos, sólo así la fábrica podría ser rentable de acuerdo a la lógica capitalista que la envuelve.
El otro camino es enmascarar la ineficiencia del modelo con la transferencia de la renta petrolera.
El Control Obrero no pasa de ser una propuesta parcial, inviable, que desemboca necesariamente en más explotación y mina la posibilidad socialista: separa a los obreros de su papel histórico, los confina al egoísmo, e irremediablemente los enfrentará al Estado, al Gobierno Revolucionario.
Es una propuesta que obedece claramente a la ideología pequeño burguesa, incapaz de un planteamiento superador del sistema capitalista, ya que su existencia está estrechamente ligada a la propiedad nosocial, a las salidas individuales, por eso es incapaz de entender la integración de la sociedad, base fundamental del Socialismo.
La propuesta realmente socialista es el Control de la Clase Obrera, que antepone la construcción del Socialismo a todas las reivindicaciones parciales e inmediatas. Procura la eliminación de la explotación de la única manera que se puede hacer, superando el capitalismo, fundando el Socialismo.
El Control de la Clase Obrera se importa primero por el cambio social, sabe que su liberación depende del cambio en las relaciones sociales, y aplica los cambios desde la fábrica, que se rige por la planificación central y sus ganancias pasan a la sociedad a través del Estado, quien las distribuirá de forma equitativa en toda la sociedad.
Por eso su lucha es por engarzar las reivindicaciones focales de los obreros con la gran reivindicación de la clase obrera y de la sociedad, que es el Socialismo. Hacer entender a los obreros que sólo así encontrarán un mundo feliz, la tierra prometida que tienen siglos buscando.
Entonces, la defensa del Socialismo, del Comandante Chávez, es el marco regulador de la actividad de la clase obrera: todo lo que perjudique el camino al Socialismo perjudica a la clase obrera, todo lo que favorezca el camino al Socialismo la beneficia.
Si se pierde la posibilidad socialista, la clase obrera perderá la oportunidad de realmente superar su explotación, la enajenación de la sociedad toda.
Sería criminal que los obreros, seducidos por formas de apariencias revolucionarias pero en el fondo reaccionarias, abandonen su papel histórico y contribuyan a la derrota de la Revolución, que es su propia derrota.
¡Sin Chávez no hay Socialismo!
¡Sin Socialismo no hay emancipación!
¡Sin Control de la Clase Obrera no hay Socialismo!

30.7.10

SOCIALISMO O LA NADA

La Revolución Bolivariana sucede en una especial situación mundial y nacional. El mundo está empantanado en una crisis que involucra a todos los aspectos de la vida. La crisis va más allá del ámbito humano, es una crisis de la vida. Veamos.
Si pensamos en la cantidad de especies que se extinguen cada día, en las aguas dulces que desaparecen y en las alteraciones del clima, entenderemos que la crisis es más profunda y dramática de lo que nuestra cultura antropocéntrica nos permite percibir. Las palabras de Fidel en Río cuando alertó del peligro de extinción de la especie humana, cobran carácter de sentencia mesiánica.
Es el capitalismo el que nos conduce a la extinción, su lógica, sus reglas éticas, estimulan, justifican el camino al desastre. No hay alternativa: o la humanidad supera al capitalismo, o nos envuelve la tenebrosa nada, todo habrá sido en vano.
¿Seremos los sepultureros del milagro de la vida? ¿A eso vinimos a la creación… para ser sus verdugos? ¿Seremos peste o sanación?
La esperanza está en el Socialismo. Pasaron los tiempos en los que el Socialismo era una opción para buscar una mejor manera de vivir, para acabar con la explotación, eran tiempos de discusiones del modelo, de requiebros de la pequeña burguesía, de experimentos fallidos. Ahora la situación es dramática: o conquistamos la esencia del Socialismo, o la vida se extingue. La pregunta que surge es…
¿Cuál es la esencia del Socialismo?
La esencia del Socialismo es la integración de la sociedad, el rescate del sentido de pertenencia a la sociedad, el entender que la suerte del individuo está ligada a la suerte de la sociedad. Esa es la única manera de restablecer la armonía de la especie, de regresarla al concierto universal de la vida. Es la base de la fraternidad de las relaciones entre humanos y del hombre con la naturaleza.
No existe socialismo sin esta esencia, y sólo esta integración puede revertir el camino suicida.
Los inventos que no contemplen esta esencia, además de ser inviables, de que tarde o temprano serán atrapados por el capitalismo demencial, no resuelven el dilema vital de la Humanidad.
Esos modelos no pasarán de producir buenos gobiernos, quizá mejorarán transitoriamente las condiciones de vida de muchos, eso no será malo, pero serán como aquellos remedios que le dan a los pacientes terminales para que sufran menos: ayudarán a la Humanidad a bien morir, pero no resolverán el fondo del asunto, al contrario, lo enmascaran.
Los modelos socialistas hoy deben ser, tienen que ser, inventos para conquistar la esencia del Socialismo, no para evitarla.
Para construir el Socialismo es necesario creer en el Socialismo, éste no se construye pensando que las medidas que se deben tomar equivalen a “tirarnos por un barranco”, teniendo poca fe en la comprensión del pueblo.
El pueblo humilde, el Continente, la Humanidad , merecen, necesitan que nosotros corramos el riesgo de la hermosa aventura de construir el Socialismo.
¡Sin Chávez no hay Socialismo!
¡Corramos los riesgos de su construcción!

29.7.10

EL ESPÍRITU DEL 26

Un fantasma recorre al mundo desde el inicio mismo de la explotación del hombre por el hombre, es el fantasma de la humanidad rebelde que se resiste a la esclavitud que brotó con la propiedad nosocial de los medios de producción.
Este espíritu rebelde se encarna en Don Quijote cuando enfrenta gigantes injustos, inspiró al Libertador en el Paso de los Andes, y lo reconfortó en los momentos tristes de la traición, fue guía para Zamora, aliciente de Fabricio y Américo Silva.
Este espíritu, este fantasma rebelde tiene en el Asalto al Cuartel Moncada una de sus más excelsas manifestaciones. Esa acción iluminó de rebeldía al mundo, y marcó el inicio de la construcción de sólida esperanza que soportó la caída del sueño soviético.
Esa madrugada del 26 de julio un grupo de corazones jóvenes ofrenda su vida en una acción heroica, que más que militar era un ritual de entrega a la causa de la vida, una oración por la humanidad, un canto a la dignidad, al decoro perdido en el jolgorio del facilismo y la sumisión.
Con esa acción sentaron doctrina revolucionaria: el espíritu prevalece sobre lo material. Después el Granma cruzó el mar con su cargamento de Comandantes y su estrategia triunfante. Luego la Sierra Maestra, sus campesinos, sintieron el aire fresco de la buena nueva que anunciaba que era posible la felicidad. Y aquella gesta se convirtió en solidaridad, en médicos, y también en combatientes internacionalistas. Desde entonces el 26 dejó de ser una fecha, para convertirse en monumento de humanidad.
El 4 de febrero regresó el espíritu que liberó medio continente, esa madrugada el cielo de la Patria fue cruzado por un rayo que anunciaba la presencia entre nosotros de los fuegos que impulsaron la audacia de 1810, la Campaña Admirable , el Paso de Los Andes.
Fue el inicio de la hermosa aventura de romper con la calma, de nacer desde el fondo de nosotros mismos, de ser otros fundando otros mundos felices. Muchos se quedaron, no oyeron el llamado que hace la historia, no comprendieron, no supieron leer la realidad, no fueron tocados por el espíritu rebelde.
Hoy el tiempo de la especie se agota y la esperanza se aleja, el planeta se sumerge en crisis terminal: o cambiamos radicalmente, o la vida se extingue aplastada, ahogada por nuestra inconciencia criminal.
La única oportunidad de la especie está en el espíritu rebelde, el esfuerzo de milenios de luchas, de resistencia, no puede haber sido en vano. No podemos caer en la terrible tentación de acomodarnos a la lógica capitalista, satisfacer necesidades artificiales, dejarnos encandilar con el consumismo fatuo.
La batalla por la vida requiere la audacia de condenar el oropel de los atesoradores de fruslerías. La humanidad debe volver a las satisfacciones espirituales. Sólo la fraternidad, el amor, tienen sentido. Ese es el reto del 26 y del 4: darle concreción al mundo rebelde, hacer que el espíritu triunfe.
¡Sin Chávez no hay Socialismo!

28.7.10

LAS ARMAS MELLADAS Y LA ESTRATEGIA REVOLUCIONARIA

El Che escribe en el “Socialismo y el Hombre en Cuba”:
“Persiguiendo la quimera de realizar el socialismo con la ayuda de las armas melladas que nos legara el capitalismo (la mercancía como célula económica, la rentabilidad, el interés material individual como palanca, etcétera), se puede llegar a un callejón sin salida. Y se arriba allí tras de recorrer una larga distancia en la que los caminos se entrecruzan muchas veces y donde es difícil percibir el momento en que se equivocó la ruta. Entre tanto, la base económica adoptada ha hecho su trabajo de zapa sobre el desarrollo de la conciencia”.
En el año 1965, más de veinte años antes del derrumbe de aquel coloso que fue la Unión Soviética, el Che entendió la estrecha relación entre la base económica y el desarrollo de la conciencia: concluyó que una Revolución se sostiene en la Conciencia del Deber Social, sin ella todo estaría perdido.
La historia le dio la razón y hoy el movimiento revolucionario universal aprendió en la dura experiencia que, una Revolución se decide en última instancia por el desarrollo de la Conciencia del Deber Social, de pertenencia a la sociedad, y que esa conciencia está estrechamente entrelazada con la base económica, con la Propiedad Social de los Medios de Producción administrados por el Estado.
De lo anterior se deduce que formas económicas de propiedad nosocial, siempre producirán conciencia egoísta, se enfrentarán a los intereses de la sociedad y serán enemigas del Socialismo. Siempre serán reaccionarias, restauradoras, sólo la Propiedad Social, administrada por el administrador de la sociedad, es decir, el Estado, es la base material para el Socialismo.
En la Revolución Bolivariana siempre se ha discutido la forma de propiedad hegemónica que corresponde a la Revolución, pero nunca como ahora esta discusión había adquirido tanta importancia. Vivimos una feroz embestida de las fuerzas antisocialistas.
Unos atacan al Socialismo desde el capitalismo, tratan de amedrentar al pueblo, reactivan fantasmas, intentan desgastar la fuerte conexión del Comandante con el pueblo. Simultáneamente ensayan magnicidios y golpe de estado.
Otros antisocialistas, mucho más peligrosos porque atacan desde adentro con ropaje revolucionario, plantean desviaciones que minan las entrañas del Socialismo, lo fundamentan en pies de barro, condenan su estrategia, le privan del fuerte soporte de la Propiedad Social y lo debilitan con formas nosociales de clara hechura pequeño burguesa.
Antes propusieron cogestión, Empresas de Producción Social, ahora proponen una suerte de “control obrero” que limita la acción y atención obrera a los mezquinos confines de la fábrica. Así fragmentan a la Clase Obrera, la despojan de su potencial integrador de la sociedad. Y por supuesto, al estimular formas de propiedad y conductas nosociales, al impedir la integración de la economía, impide la formación de la Conciencia del Deber Social, de pertenencia a la sociedad, y le da un golpe definitivo a la causa socialista, a la Revolución.
¡Sin Chávez no hay Socialismo!
¡Sin Economía integradora no hay Socialismo!
¡Sin Conciencia del Deber Social no hay Socialismo!

27.7.10

EL CAMINO A LA PAZ SIEMPRE ES VIOLENTO

Pretender conquistar la paz sin confrontación es una ilusión costosa, el precio es la sumisión, la esclavitud.
La paz sólo es posible con un profundo cambio de sistema social, con la superación del capitalismo. El capitalismo es guerra, es suficiente ver el mapa bélico de la humanidad para soportar esta afirmación: las dos guerras mundiales fueron reacomodos del capitalismo, y la amenaza de la tercera es autoría de este sistema suicida.
Pero además en los periodos de “paz”, cuando todo parece armónico, en el interior de los países se vive una intensa lucha: la lucha de clases. Recordemos que las burguesías de los Estados Unidos, de Europa, viven en constante confrontación con sus inmigrantes y con sus obreros. En todos los países hay manifestaciones de la guerra que supone el capitalismo: en Brasil los sin tierra, en Colombia los campesinos, en México los zapatistas.
No es por gusto que los gringos tienen la mayor fuerza militar del mundo y de la historia, el capitalismo necesita la guerra, la produce, sobre ella se sostiene.
Se entiende que quién quiera conquistar la paz tarde o temprano se topará con el monstruo bélico capitalista.
Aquí en Venezuela se desarrolla uno de los experimentos sociales más hermosos de la humanidad. Hemos decidido una Revolución Pacífica, un sueño, un intento lleno de humanismo. Los obstáculos nos han enseñado que la intención pacífica no es suficiente, siempre seremos asaltados. Es una ley de la vida y de la historia: el imperio capitalista no permite cambios sin confrontación. Lo que está por verse es la naturaleza de la pugna.
Puede ser un golpe como en el Chile de Allende. Puede ser magnicidio, así resolvieron los sueños de Panamá, asesinando a Torrijos. También usan la llamada Revolución de colores. La invasión no está descartada, al contrario: con ella se sienten cómodos, puede ser violenta, así fue en la Guatemala de Arbenz, o silenciosa como en Costa Rica y Colombia. Hay demasiados ejemplos.
Toda agresión del imperio va precedida de una intensa campaña de manipulación de las mentes, anestesiando a los pueblos y a su opinión pública, satanizando al objetivo: le construyen una imagen perversa que justifica el asalto.
Aquí en Venezuela el avance de la Revolución en el rescate de la dignidad y la soberanía es suficiente para desatar el mecanismo de confrontación, el imperio gringo decretó guillotina para la patria del Libertador que despierta de nuevo.
Hoy sufrimos una nueva agresión, esta vez más clara, definida, se trata de un choque directo con el imperio y sus cómplices oligarcas, ya no hay disfraz de una lucha política, o por la libertad de expresión, o el derecho a huelga.
Ya está al descubierto que se decide la soberanía de la patria: o la entregamos sumisa, esclava, a las cadenas de los gringos, o la defendemos como nos enseñaron los Próceres, y nos ganamos nuevamente el derecho de ser libres. No hay otra opción
¡Con Chávez, con la Patria!

26.7.10

SOMOS HERMANOS

La situación de beligerancia con el imperio es grave. El enfrentamiento es inevitable: ellos no toleran que este pueblo dirigido por el Comandante Chávez retome la ruta de los Libertadores. El ejemplo que somos los aterra y contra él enfilan toda su maldad.
Las piezas de la infamia se mueven con precisión: levantan la imagen de país y Presidente narcos. Colaboradores con la FARC. Apoyan a la oligarquía interna, intentan confundir al pueblo, susurran a militares, etc.
Todos esos movimientos son componentes de un plan que tiene como objetivo acabar con la Revolución y con el Comandante Chávez, convertir al pueblo en su propio verdugo.
En este enfrentamiento con el imperio corremos un serio peligro, el imperio sabio en su agresión, intenta que la tarea de debilitarnos se la resuelva Colombia, usan a aquel país para agredirnos, montan no se sabe cuántas bases para provocar reacción defensiva de la Revolución. Ese ya es un peligro grande.
Pero donde está el peligro mayor es en el nacionalismo desbocado, en el chovinismo. Ese virus puede hacernos perder cualquier enfrentamiento aún antes de que se presente. Debemos combatirlo con fuerza.
Los colombianos y los venezolanos somos hermanos, o mejor: los humildes de Colombia, los humildes de Venezuela somos hermanos y el Comandante Chávez, líder de una Revolución de los humildes, es hermano del pueblo humilde de Colombia.
Los oligarcas gringos, los oligarcas colombianos, los oligarcas venezolanos son cómplices, secuaces, en la nefaria causa de la defensa de la muerte y la barbarie.
Siendo así, la batalla de hoy, la confrontación con la que nos amenaza el imperio, no es entre Colombia y Venezuela, es entre las oligarquías que se enfrentan al pueblo humilde de todo el continente.
De esto se desprende que si la oligarquía colombiana nos agrede, nos está agrediendo también la oligarquía gringa y la oligarquía venezolana, esos serán nuestros enemigos y contra ellos debemos reaccionar unidos los pueblos del continente y del mundo.
Debemos plantear la contienda en su justo terreno y dar la respuesta correcta, internacionalista, fraterna, y con los humildes. Evitar caer en la mortífera trampa del nacionalismo, del chovinismo.
Si se atreven la Revolución debe volcarse sobre la América con fuerza de huracán, la respuesta debe ser continental, si se atreven el incendio renovador llegará hasta más allá del Rio Bravo. Nada podrá detener la ira de los pueblos, una vez más condenados por el único delito de soñar con un mundo mejor.
La contienda es definitiva: sabemos que, o construimos el Socialismo, o la especie y la vida planetaria se acaban. Sólo el Socialismo es capaz de salvar al planeta y simultáneamente dar solución verdadera a los problemas cotidianos.
Borremos las fronteras con el amor de los pueblos hermanos, que el internacionalismo de los humildes derrote al internacionalismo oligarca.
¡Colombia y Venezuela un solo pueblo!
¡Si se atreven derrotaremos a las oligarquías y profundizaremos el Socialismo!
¡Crucificaron a Cristo, asesinaron al Libertador, ahora vienen por Chávez… El Gólgota no se repetirá, San Pedro Alejandrino no se repetirá!

25.7.10

LA OLIGARQUÍA ANTIPATRIA Y RACISTA

Los tanques pensantes del imperio continúan su labor en contra del Gobierno Revolucionario, no descansan, trabajan 24 horas. Los forman expertos en manipulación de masas, ya han conseguido éxitos en otros países, y aquí pudieron derrotarnos en la elecciones para aprobar la reforma.
Pelean cuerpo a cuerpo, no dejan terreno libre, su marcación es cerrada. Cada paso que da el gobierno, cada grieta que deja la Revolución, es aprovechada, deformada, para con ella construir un veneno directo al alma popular.
Eso hicieron con PDVAL: una operación heroica a favor del pueblo, pretenden transformarla en un desastre. Lo mismo intentan con el Metro, con la electricidad. Andan buscando fallas para magnificarlas, y justificar ataques al gobierno. Si llueve es culpa de Chávez, pero si no llueve también, si hace calor es la Revolución que falló, si hace frío también.
Tienen plumíferos y periodistas al servicio de sus planes. En el norte fabrican el dardo ponzoñoso y sus agentes locales lo difunden.
La última manipulación es ligar la exhumación de los restos del Libertador con brujerías. Con esa patraña persiguen cuatro objetivos:
Primero, le quitan solemnidad al hecho de que la República cumple, salda una deuda con el Libertador: colocarlo en lugar digno a su grandeza.
Segundo, intentan desprestigiar a la Santería, traída a estas tierras por los africanos esclavos, que es una religión tan respetable como la Católica, traída a estas tierras por los conquistadores como instrumento de dominación.
Tercero, intentan desprestigiar a la Revolución Cubana, ligándola a supuestas prácticas de brujería.
Cuarto, intentan manipular al pueblo con miedos instalados en el inconciente.
En la primera línea de esta empresa de infamia están los columnistas más destacados por su falta de decencia, aquellos capaces de escribir cualquier barbaridad, si de atacar a Chávez y a la Revolución se trata. Veamos.
Asdrúbal Aguíar, plumífero, rancio militante del fascismo larvado, califica la exhumación de “prácticas sincréticas de magia negra, trasplantadas desde Cuba y prometedoras de vida y poder eternos”…
Charito Rojas, hez del Noticiero Digital, habla de “aquelarre en el Panteón Nacional”.
Marianela Salazar, viuda de la cuarta República, sigue las ordenes del norte y miente con destacado descaro, y dice que: “Como era de esperarse, los convidados fueron tres santeros, paleros o espiritistas cubanos vestidos de blanco, que se dedicaron a prácticas absolutamente incompatibles con la religión cristiana.”
Todos siguen el mismo guión que nace en el norte, buscan movilizar miedos instalados en el inconciente de la sociedad. Tal como otras veces, pretenden convertir la fe religiosa, la fe cristiana, en arma para truncar las esperanzas del pueblo y de la humanidad.
La respuesta de la Revolución debe ser constante, masiva, y en el mismo escenario donde se desarrolla la batalla: en el alma. Todos debemos defender con garra los pasos del gobierno. Como dijo Martí: “El vino, de plátano; y si sale agrio ¡es nuestro vino!”
¡Crucificaron a Cristo, asesinaron al Libertador, ahora vienen por Chávez, son los mismos… El Gólgota no se repetirá, San Pedro Alejandrino no se repetirá!