22.5.10

LA PLATAFORMA SE HUNDIÓ

La plataforma se hundió con su carga de tuberías, válvulas y taladro inmenso… simultáneamente, irrumpió desde el fondo del Caribe la dignidad del Obrero Petrolero Venezolano. El incidente es aleccionador. Veamos.
La canalla oligarca hizo fiesta, los medios escuálidos estuvieron cual zamuro esperando carroña. No hubo ocasión, la dignidad de los obreros lo iluminó todo, se replegaron con sus acusaciones sin sentido, el hundimiento no facilitaba la infamia.
El suceso tiene varios ángulos, se puede decir que no hubo contaminación, que no hubo víctimas, que la aplicación eficaz del plan de contingencia habla del alto grado de preparación de esos obreros, eso ya cerraría el asunto con méritos para PDVSA, pero dejaría de lado el aspecto más importante, la calidad humana que allí afloró.
Los obreros de la Plataforma Aban Pearl se portaron como gigantes, la moral, la entrega, el pundonor en la emergencia hablan del nacimiento de un hombre nuevo, del amor a la faena encomendada, del sentimiento de responsabilidad. Todos se portaron con altura patriótica y revolucionaria.
Tomemos como ejemplo de ese comportamiento heroico a la ingeniera petrolera, María Machuca: Salió de la plataforma en último lugar sólo dejando atrás al Capitán y a otro heroico operario. Al llegar a Carúpano se lamentaba hasta la lágrima de la pérdida que sentía allá en el fondo donde sienten los buenos hijos cuando la patria sufre.
Aquello fue una batalla por la dignidad y la soberanía, similar a las batallas de la independencia, a las jornadas de abril, o diciembre. No es un hecho aislado, es muestra del espíritu que renace en la Revolución.
La Revolución Bolivariana ha rescatado el amor, como sólo puede hacerlo una Revolución verdadera. Ya el pueblo humilde se ha encontrado con lo mejor de su esencia humana. Ahora estamos preparados para los retos del camino de construir futuro.
Episodios como el de la plataforma van escribiendo la épica de esta Revolución que muestra al Hombre Nuevo que se fragua en la construcción del Mundo Nuevo, del Socialismo.
La sociedad, la Revolución deben reconocer las hazañas de sus mejores hijos, debe darle mérito al desprendimiento, a la fraternidad, al esfuerzo por el bien social. Esta es una invalorable contribución a la formación de los nuevos valores, a la derrota de los valores capitalistas del tener, del ostentar, sustituyéndolos por el valor supremo que es el bien a la sociedad, o mejor, el bien al individuo en tanto ser social.
Ese Hombre Nuevo que ya no es una teoría, que ya está aquí entre nosotros, es el mayor logro de la Revolución Bolivariana. Todo el esfuerzo de estos años del proceso, todas las Misiones, todas las medidas revolucionarias se materializan en él.
El imperio y sus agentes oligarcas apuran sus planes contra la Revolución saben que cada día que pasa surge un Hombre Nuevo que es una inmensa barrera a sus planes de dominación, eso los aterra.
¡Honor a los héroes de la Plataforma!
¡Sin Chávez no hay Socialismo!

21.5.10

LA BATALLA DECISIVA

¿Cuál es la preocupación de las clases sociales en Venezuela?
Si revisamos las declaraciones y acciones de sus voceros tendremos una aproximación aceptable a las preocupaciones de las diversas clases sociales. Veamos.
Los oligarcas, en lo económico, se importan por el control de cambio y por las expropiaciones, rechazan estas medidas, les irrita cualquier control del Estado, así demuestran su ideología, sus verdaderas intenciones: un Estado permisivo, cuya única función sería protegerlos, y que mantenga abiertos los canales por donde fluya la renta petrolera directamente a sus bolsillos.
En lo político conspiran para truncar a la Revolución , para salir de Chávez, todos sus movimientos tienen esta meta.
Los oligarcas son una clase con sus objetivos claros: la hegemonía no tiene discusión, es el capitalismo. Y aquellos partidos y personalidades, que con vergüenza se les acercan, tienen que aceptar sus principios.
La pequeña burguesía, en todas sus variantes opositoras, no tiene proposición económica propia, clara, se pliega a las premisas burguesas. Su mayor actividad es en la política, allí pujan por ser voceros de los intereses capitalistas, ese es el centro de su lucha.
En el interior de la Revolución la lucha es fuerte y decisiva: se busca el camino del Socialismo. La discusión y la práctica han sido abundantes, de todo se ha dicho y de todo se ha hecho. Sin dudas se ha avanzado, y ahora que somos más maduros, conocemos más, los fracasos nos han enseñado, los aciertos nos han reforzado.
Tenemos el mérito de no haber perdido la posibilidad de seguir en el camino, de enmendar entuertos, no hemos castrado la posibilidad socialista.
Las posiciones se han despejado, los campos se han definido, la batalla decisiva sucede en el interior de la Clase Obrera. Allí se perfilan dos posiciones principales.
Una, que con su práctica y acción mantiene a la Clase Obrera sumergida en la lógica capitalista, no se percatan del cambio de los tiempos, de la oportunidad histórica de redención que significa la Revolución Bolivariana y el liderazgo del Comandante Chávez. Sus acciones se limitan a la negociación, más o menos exitosa, de su mercancía: su fuerza de trabajo.
Cuando se trata de “negociar” con el gobierno revolucionario, llegan a exigencias absurdas. Así construyen la paradoja de que los principales enemigos del proceso de redención de la clase obrera, del Socialismo…sean estos obreros. De esta manera el Sistema Capitalista no corre peligro, al contrario tiene garantizada su perpetuidad.
La otra posición obrera, es la que entiende que está destinada a dirigir con su ejemplo el gran cambio social que liberará a la Sociedad del capitalismo y traerá la redención de los obreros. Rompe con la lógica del capitalismo, construye una nueva forma de relación entre ellos, y de ellos con la sociedad. Trasciende el ámbito de la fábrica y adquiere visión universal. Sabe que la tarea de autotransformación de la Clase Obrera, zafarse de la lógica capitalista, es indispensable para la fundación de la nueva sociedad.
¡Sin Chávez no hay Socialismo!
¡Sin Socialismo no hay Patria!

20.5.10

TIENE LA PALABRA LA VIOLENCIA

Independiente de la voluntad de los actores políticos, la violencia, que nunca había desaparecido completamente de la escena, irrumpe en medio de la crisis que produce la disputa de la hegemonía de dos sistemas incompatibles: el Capitalismo y el Socialismo.
No podía ser de otra manera, el capitalismo no se suicida, lucha por mantener su hegemonía, y apela para su perpetuación a la violencia. En la historia siempre fue así, el capitalismo impone su hegemonía con la violencia.
Los argumentos que corroboran la afirmación abundan. Es suficiente ver cómo se han apropiado de mercados, de fuentes de energía, recordar la depredación de la América, las invasiones expoliadoras por parte de los gringos, la extracción de riquezas de África, la reapropiación de China y Rusia, el sometimiento del mundo.
Entre nosotros la agresión es historia fresca, nunca han dejado de usarla contra la Revolución Bolivariana. Al sentirse en peligro, todas sus fuerzas se confabularon contra la Esperanza.
No dan sosiego a la Revolución, de una agresión salen a preparar otra agresión, siempre giran alrededor de la violencia: Abril, Diciembre, magnicidio, paramilitares, guarimbas, negación de las elecciones, acusaciones de fraude.
Hoy es evidentísimo que están preparando una nueva carga, ya sus cobardones cantan como gallos, los oportunistas construyen puentes, el susurro a los militares es estridente. Nos aproximamos a definiciones que son impostergables.
Ya los oligarcas nacionales, en complicidad con el capitalismo mundial, nos dictan el terreno de la confrontación: escogieron una vez más el camino de la violencia.
La confrontación que se avecina es definitoria, el triunfo estará determinado por la capacidad de imponer la hegemonía clara de uno de los dos sistemas. Ya no hay lugar para ficciones de equilibrio, quedó demostrado que las formas económicas capitalistas (egoístas, fragmentadoras) producen una conciencia egoísta, atomizadora, que debilita grandemente a la Revolución, que intentan fagocitarla, comérsela.
La defensa de la Revolución y del Comandante Chávez debe ser en todos los campos, el principal es el ideológico, la conciencia, el espíritu. Sólo un pueblo conciente es capaz de defender el camino de su redención.
Es imprescindible afinar la organización y disciplina, el combate que se avecina no puede ser exitoso sin una fuerte organización y una férrea disciplina que permita a la dirección de la Revolución planificar los movimientos ofensivos y defensivos.
Voluntarismo cargado de desespero siempre trabajará para el enemigo oligarca. Las acciones espontáneas, aisladas, corren riesgo de caer en terrorismo, alejar a las masas, tranzar un combate de aparatos que no beneficia a la Revolución. Debilidades en las formas económicas, estimular el egoísmo económico, conducen al fracaso.
Es hora de activar dentro del partido los Destacamentos de Vanguardia, vale decir, organizar la vanguardia de la vanguardia. Estos destacamentos deben estar formados por los cuadros más concientes, los últimos a la hora de los privilegios, los primeros a la hora de los sacrificios.
Estos Destacamentos de Vanguardia serán referencia en todo combate por la defensa y la construcción del Socialismo.
¡Sin Chávez no hay Socialismo!
¡Sin Socialismo no hay Patria!

19.5.10

DEFENDER LA HUMANIDAD ES DEFENDER LA PATRIA

Ya el Libertador entendía que la liberación aislada era inviable, su lucha nunca fue local. Sentía que la Patria es la América y la América llegaba hasta España, allá iría si era necesario. Su visión era planetaria.
Hoy el imperio y sus agentes en el país apelan a lo más innoble para tratar de yugular la Revolución Bolivariana, los revolucionarios debemos alzar la mira y buscar en los sentimientos más hermosos de la humanidad las armas morales para enfrentar la agresión gringa.
Para liberarnos de la infamia imperial es necesaria la unidad de los pueblos del mundo y principalmente de los del continente, sólo así construiremos la fortaleza material y espiritual para enfrentarlo.
El Che también entendió que la batalla debía ser en todo el continente, que la Cordillera Andina debía ser la columna vertebral de la emancipación, que el Caribe y Centroamérica serían importantes baluartes de la lucha. Para él la Patria es la Humanidad, temblaba de indignación ante cualquier injusticia en cualquier parte del mundo: lo mismo fue a pelear a Cuba que a África, y Bolivia conoció el concurso de sus modestos esfuerzos.
Hoy las condiciones son las mismas, sólo el continente unido puede acumular la fortaleza para enfrentar el poderío de los gringos en cualquier terreno, económico o militar. Y la unidad solo es posible si es en el Socialismo, sólo así será estratégica, duradera. Al contrario, uniones con capitalistas son egoístas en su esencia, son efímeras, nunca trascienden lo táctico. Tarde o temprano se rinden a la voluntad imperial.
Entonces, es indispensable la unidad con Cuba Socialista, fortalecer la ALBA, ese será el núcleo generador del nuevo continente. Sólo así construiremos Patrias.
La hermandad con Cuba, con la ALBA, no es un capricho, es un requerimiento geopolítico estratégico que hunde sus raíces en lo más elevado del pensamiento del Libertador.
Esta Revolución, o es internacionalista, se importa por la suerte de los pueblos del mundo, por la humanidad, o esta Revolución perece. Ese es el reto. No es posible ser egoísta en lo internacional y espléndido en lo nacional.
De allí que los oligarcas y sus alquilados, como carlos blanco, teodoro, bobolongo el del nazional, pregonan el aislamiento del país, dan la espalda a los hermanos del continente y agreden la hermandad con Cuba. Lo que buscan es sembrar egoísmo, que es la base para el retorno de su sistema de explotación.
Un pueblo egoísta es necesariamente un pueblo explotado, no puede liberarse, está condenado a la esclavitud.
Es necesaria una campaña vigorosa de defensa de la unión con los pueblos del mundo, derrotar las infamias de los egoístas. Entendamos que la solidaridad, la unión, es un asunto de formación en el amor que servirá de base a la nueva sociedad.
No es posible liberarse sin ese sentimiento de amor, no es posible construir el nuevo mundo ni al Hombre Nuevo, si no está basado en el amor.
¡Sin Chávez no hay Socialismo!
¡Sin Socialismo no hay Patria!

18.5.10

CUBA

El objetivo del imperio gringo está bien definido: es necesario aplastar el Socialismo que rejuvenece con fuerza en el Continente, es un “mal ejemplo” para el mundo.
No pueden tolerar que los pueblos de la América demuestren que los ricos no son necesarios, que el imperio no es preciso. Les aterra que Bolívar y el Che unidos en un solo pensamiento recorran a la América liberando mentes y corazones, fundando el nuevo mundo y al Hombre Nuevo.
Toda la estrategia imperial tiene como fin degollar esa esperanza que nace. Han estudiado con detenimiento el plan de ataque. Podemos definir el centro de la campaña antisocialista con la palabra “aislar”, separar a los países de la ALBA, enclaustrar a Cuba y derribar a la Revolución Bolivariana. Piensan de esa manera frustrar el impulso socialista.
Saben que la hermandad reencontrada de Cuba y Venezuela, después de siglos de separación artificial, inicia en el Continente un camino de unión que nos hará, tal como decía Bolívar, un polo de equilibrio. Es la Unión de los Socialistas, de los pueblos que buscan con pasión su liberación, es la concreción del sueño de los Libertadores, por el que dieron su vida: una América Grande en todos los sentidos, viable, ejemplo para el resto del planeta.
Es en este paisaje que debemos ubicar la campaña de ataques que hoy hacen a Cuba los plumíferos, filosofastros y demás alquilados. Son parte de la guerra que el imperio decretó contra el brote Socialista.
La Campaña contra Cuba Socialista busca debilitar al Gobierno Revolucionario Bolivariano, es preparación para un zarpazo. Contra Cuba apelan a un nacionalismo egoísta que ya asesinó al Libertador.
El Libertador fue víctima del nacionalismo mezquino de Santander y Páez. Fue así, fragmentando a los países de la América pudieron esclavizarla.
El nacionalismo excluyente es una formidable arma para inocular en los pueblos las pasiones más infames para esclavizarlos con eficacia y para conducirlos a las peores crueldades que conoce la historia. Al contrario, el sentimiento universal siempre ha acompañado las mejores empresas del humano, ha suscitado los mejores pensamientos del hombre, sus mejores creaciones.
Los pueblos deben comprender, es tarea principal de los revolucionarios, que sólo la fraternidad, la alianza estrecha entre ellos, puede preservar a lo nacional, que sólo en la medida en que seamos más universales protegeremos a lo nacional. Que los dos sentimientos, lo universal y lo nacional, sólo pueden ser grandes si se potencian. Sólo se puede amar a la nación, al terruño, si amamos a la humanidad toda.
Bolívar luchaba por liberar al Perú porque sabía que esa era la única manera de liberar a Caracas, su amada Caracas. Nadie será verdaderamente libre, si la humanidad no es libre.
Los gringos siempre han apelado al egoísmo para implantar su dominación. Los ataques que hoy sufrimos deben ser enfrentados en el alma de los pueblos sembrando la nueva relación amorosa entre ellos, difundiendo el pensamiento universal, nacionalista, del Libertador.
¡Sin Chávez no hay Socialismo!
¡Sin Socialismo no hay Patria!

17.5.10

LAS PUERTAS DEL INFIERNO OLIGARCA

Para los renegados de la Revolución las puertas del infierno oligarca se abren con tres requisitos, son golpes de aldaba que exige el imperio para aceptar a los que saltan la talanquera, son una prueba de lealtad. Veamos.
El primer aldabonazo, es renegar de Chávez: comienzan por decir que “Chávez no se reúne”, lo acusan de “hiperliderazgo” o de “totalitario”, de “mal rodeado”, para terminar enfilando veneno directo contra él. Repiten al calco las mismas quejas de los voceros imperiales.
El segundo golpe a la puerta del infierno oligarca, es enfilar la artillería contra Cuba Socialista: muchas son las maneras, los más discretos cuando comienzan su salto de talanquera la atacan oblicuamente, embisten al Socialismo Soviético, y de esta manera construyen una imagen deformada de Cuba Socialista. Después, cuando ya están definidos, sin caretas, califican a los internacionalistas cubanos como “fuerza invasora”, y al que hable con ellos de “traidor a la patria”.
No tragan al Che, la sola mención de su nombre los destartala.
Otros apoyan las declaraciones de los voceros imperiales, repiten a coro las acusaciones sobre los derechos humanos que emiten los gringos. Se cuidan de no aparecer apoyando la libertad para los Cinco Héroes Cubanos, luchadores contra el terrorismo, de no hablar contra el criminal bloqueo, de no mencionar a posada carriles.
El tercer requisito para ser aceptado en el infierno oligarca, es proteger a la propiedad no social de los medios de producción: esto es, proteger la base del capitalismo, su esencia.
Es el requisito más importante, difícil de ocultar durante mucho tiempo, porque define la posición oligarca en la práctica. Tiene muchas versiones, todas aceptadas por el imperio, negadoras de la Propiedad Social de los Medios de Producción Administrados por el Estado, que es la única forma de propiedad que sustenta a la Conciencia del Deber Social, esencia del Socialismo.
Las maneras de cumplir este requisito fundamental van desde la aceptación capitalista directa, como los “Empresarios Socialistas”, disfraces extraños, como los híbridos Capital-Socialismo, cogestión, Empresas de Producción Social, hasta un extraño “socialismo productivo”, que es capitalismo tapado.
Los toques a la puerta, los aldabonazos, se complementan, se condicionan mutuamente, pero la posición frente a la propiedad es la que define. De allí surgen las demás, y es la que precipita el pase al enemigo.
Hay otra manera de abrir las puertas del infierno oligarca que resume todos los golpes anteriores, es más expedita, no requiere tanta retórica. Esta manera es propia de partidos renegados… pero avergonzados. Consiste en dar militancia a los saltadores de talanquera, mientras más rastreros, mejor. Así se definen, tocan la puerta del infierno sin ser explícitos. Resumen en un solo gesto todos los golpes exigidos por el imperio.
Al final, cuando los renegados ya cumplieron los requisitos, cuando dieron los golpes exigidos, se abre lentamente la puerta por donde entran al mundo oligarca. Esta puerta es bajita, para pasarla es menester agacharse, y así, con la cerviz doblada, permanecen para siempre.
¡Chávez es Socialismo!

16.5.10

EL VERDADERO OBJETIVO DE LA AGRESIÓN

Si nos preguntamos el por qué de la agresión del imperio y de las oligarquías mundiales cómplices, la respuesta es una sola: porque la Revolución Bolivariana cambió y cambia la Relación de Propiedad de la riqueza. Esa es la razón única, aunque se enmascara con miles de ficciones, para darle credibilidad y generar aceptación de la siempre incauta opinión pública mundial. Veamos.
Se nos acusa de todo, pero el verdadero objetivo es tomar de nuevo el control de la riqueza petrolera.
Venezuela es un país rentista, eso significa que la mayor riqueza proviene del petróleo, por tanto lo que se haga con ella determinará el rumbo de la sociedad.
Los oligarcas, que mandaron aquí desde que el petróleo es petróleo, lo que hicieron fue transferir esa riqueza al norte y quedarse ellos con las migajas, que no eran pequeñas. Así, la burguesía nacional no es productora, es esencialmente importadora, comerciante, dependía de la renta que se robaba de mil maneras, y de los negocios turbios con casas matrices en el exterior. Las divisas eran su botín.
Cuando se rescata PDVSA y el Gobierno Revolucionario toma control de la renta, ésta toma otro rumbo, y comienza la verdadera batalla.
Se cubre la inmensa deuda social, se enseña a leer y a escribir, se lleva salud a los barrios, se invierte esa renta en formar una red de producción y distribución en manos de la sociedad, y no de los privados. Esto profundizó la ira de la oligarquía.
Cuando se cortaron los drenajes de la renta que desembocaban en bolsillos capitalistas, cuando se nacionalizaron las compañías que hacían negocios con la petrolera, se socializaron los latifundios y las haciendas mal habidas, fue que la oligarquía entendió la intención del Gobierno de construir con la renta una nueva economía, fue entonces que decretaron guerra a muerte, y el centro de la disputa quedó descarnado. Oigamos algunas declaraciones de los oligarcas internacionales y nacionales.
Comencemos por el inefable Uribe:
…“cuestionó a los gobiernos de la región que han expropiado empresas privadas. Para el Mandatario colombiano estas actuaciones ponen entredicho el desarrollo de las iniciativas de investigación y contagian de “pereza” a los pueblos”.
Julio Borges, oligarca de corazón gringo, hace idénticas declaraciones:
…“Te quiero demostrar hoy una realidad muy dura: mientras más expropia el Gobierno, más empleo y producción venezolana se destruye.”
El Presidente de Fedecamaras, Noel Álvarez, golpista confeso, da similares declaraciones en una rueda de prensa donde se refiere “a la defensa del derecho a la propiedad, al empleo y el derecho a la libre producción nacional”…
Esta claro cuál es la preocupación central de la oligarquía, cuál es el verdadero objetivo de la agresión: proteger la propiedad capitalista, apropiarse de la renta, continuar con la economía dependiente del imperio, en la que importar es sinónimo de producir.
El reto es elevar la Conciencia del Deber Social, profundizar la economía de Propiedad Social administrada por el Estado. Y demostrar alta eficacia en la producción.
¡Sin Chávez no hay Socialismo!