15.12.12

LOS PROYECTOS HISTÓRICOS (Sábado 15-12-2012)


Una correcta apreciación de la historia nos permitirá otear el futuro. Conociendo lo que ya está agotado, lo viejo, percibiremos los brotes de lo nuevo, detectando lo que está por desaparecer podremos percibir lo que está por surgir. Historiemos.
Después de la dictadura de Pérez Jiménez, que podemos catalogar de gobierno  desarrollista, vino un período socialdemócrata: elecciones burguesas, dictadura oligarca que tomó forma de  pseudodemocracia sustentada en el reparto de la poca renta que dejaba el imperio, entrega de las riquezas naturales, vivir de las regalías y sumergirse en la cultura del consumismo. Con bonanza, fiesta, y al bajar los altos precios, fin de la merienda. De esta forma se garantizaban los dos objetivos del imperio. Uno, envilecer a la masa, fragmentarla, neutralizarla, y el otro, disponer de las riquezas, de petróleo barato.
            Esta forma de la dominación les funcionó durante 50 años, hasta que ya no soportó la contradicción entre la exigencia populista de fácil beneficio en ascenso infinito, y el ingreso petrolero menguado. Entonces, el hechizo ya no funcionó y el sistema entró en una turbulencia que aún vivimos. 
Desde el arribo de Chávez entramos en un período de disputa por la hegemonía. Pero ¿cuáles proyectos disputan la conducción de la sociedad?
En la escena hay tres proyectos principales:
Uno, la socialdemocracia populista, repartir la renta hasta que el petróleo aguante. Este proyecto ya dio muestras de inoperancia, crea una masa ávida de bienes materiales y el petróleo no alcanza para satisfacer a los amos del norte, a la oligarquía lacaya, ni a las ansias de los  despojados cuyas metas siempre serán frustraciones. De esta manera se crea una bomba de tiempo que conduce a estallidos sociales inútiles tipo 27F , a gobiernos que no pueden mantener la ilusión democrática.
Dos, el proyecto neoliberal imperial, con un paquetazo, terapia de choque, poner el país al servicio del gran capital internacional, de los gringos, de las trasnacionales. Este plan necesita elevada represión, una política de choque que desactive al pueblo y legitime el saqueo del país.
Tres, el proyecto Socialista que permita el reordenamiento de la sociedad, una nueva visión de las necesidades, de cómo satisfacerlas y una nueva concepción de la producción de acuerdo a estas necesidades, una verdadera Revolución cultural, relaciones humanas fraternas, relación armónica con la naturaleza, que construya un país, una sociedad viable, sustentable, basada en la Propiedad Social de los Medios de Producción, con altos niveles de Conciencia del Deber Social, reducir el egoísmo a niveles ínfimos y usar la renta para construir esta nueva sociedad.
El proyecto socialista convive en el seno de la Revolución con una fracción de la socialdemocracia que en lo político usa el atractivo del pragmatismo para colar pactos y conciliaciones que nos conduzcan a su forma natural de gobierno, es decir, neo pactos de punto fijo justificados con presuntas crisis políticas o económicas
Después del 7 todos los proyectos históricos se enfrentarán, se agruparán en alianzas naturales y el resultado de esa lucha será el futuro de este proceso. 
¡Con Chávez lealtad!

14.12.12

DOS MUJERES (Viernes 14-12-2012)


Haydée Santamaría y Melba Hernández, en la madrugada del Moncada dos mujeres y un sentimiento.
“...y hay ese otro momento en que ni la tortura, ni la humillación, ni la amenaza pueden contra esa pasión que nos trajo al Moncada. El hombre se nos acercó. Sentimos una nueva ráfaga de ametralladora. Corrí a la ventana. Melba corrió tras de mí. Sentí las manos de Melba sobre mis hombros. Vi al hombre que se me acercaba y oí una voz que decía: ‘han matado a tu hermano’. Sentí las manos de Melba. Sentí de nuevo el ruido del plomo acribillando mi memoria. Sentí que decía sin reconocer mi propia voz: ‘¿Ha sido Abel?’ El hombre no respondió. Melba se me acercó. Toda Melba eran aquellas manos que me acompañaban. ‘¿Qué hora es?’ Melba respondió ‘son las nueve’.
“Estos son los hechos que están fijos en mi memoria. No recuerdo ninguna otra cosa con exactitud, pero desde aquel momento ya no pensé en nadie más, entonces pensaba en Fidel. En Fidel que no podía morir. En Fidel que tenía que estar vivo para hacer la Revolución. En la vida de Fidel que era la vida de todos nosotros. Si Fidel estaba vivo, Abel, Boris, y Renato y los demás no habían muerto estarían vivos en Fidel que iba a hacer la Revolución Cubana y que iba a devolverle al pueblo de Cuba su destino.
Lo demás era una nebulosa de sangre y humo, lo demás estaba ganado por la muerte. Fidel ganaría la última batalla, ganaría la Revolución ".
En la batalla, frente a la muerte de su hermano Abel, de sus compañeros, Haydée Santamaría pensaba en Fidel. ¡Fidel debía vivir! El líder debía vivir, un líder es aquel que debe vivir.
Una Revolución no es posible sin un líder, las revoluciones deben contar con la teoría revolucionaria, la organización revolucionaria, pero sobre todo deben contar con un líder, con aquel que debe vivir.
El liderazgo es un milagro, es un fenómeno que sólo se comprende desde el corazón. Es un hecho muy raro en la vida de los pueblos, cuando aparece, quizá una vez cada cien años, los revolucionarios están en el deber de preservarlo. Más allá de las palabras:
¡Con Chávez todo sin Chávez nada!

13.12.12

LA NOCHE DEL NÁUFRAGO (Jueves 13-12-2012)


Una traicionera ola lo lanzó al mar, era el piloto de la nave y ahora estaba allí, en medio de la noche, náufrago, solo. Con terror vio como se alejaba la esperanza, ya no oía el rugir de los motores, se supo perdido en medio del Golfo, era inútil nadar, no tenía destino, se abandonó al vaivén del mar.
Fue una decisión difícil. El viaje tenía un horario rígido, llegar puntual era indispensable para el éxito, el mar picado hacía la travesía lenta, el tiempo apremiaba, regresar por recuperar a un hombre era arriesgarlo todo, encontrarlo era un azar.
El jefe de la expedición, un hombre excepcional, de esos que se crecen en las pequeñas cosas, allí donde se prueba el alma del titán, no vaciló, ordenó que la nave virara, a buscar a Roberto Roque.
Roberto, ya resignado, oyó de nuevo los motores, pensó que alucinaba, sabía que el terror, la oscuridad, el frío, la situación de desamparo del náufrago, es capaz de crear ficciones…
Los gritos de ¡Roberto! ¡Rober! le dieron certeza que aquellos locos, contra toda la lógica, regresaron a buscarlo… Después, un café caliente, una frazada maternal, los abrazos de los compañeros, las palabras reconfortantes de Fidel, el jefe de la expedición del Granma, y se confundieron las lágrimas con el agua del mar que minutos antes amenazaba con ser su sepultura. Es en esos instantes cuando la historia absuelve a los revolucionarios.
El episodio es símbolo de la conducta de los jefes revolucionarios, del desarrollo de una Revolución, ilustra el fundamento de la nueva ética que debe surgir: ¡El humano como centro!
La Revolución no puede abandonar a sus hijos, los revolucionarios. Los que arriesgan todo deben tener fe en que sus jefes nunca los abandonarán. Si esa fe se agrieta, la Revolución es seriamente lesionada, se pierde. Si la fe es reforzada, entonces es capaz de soportarlo todo, será invencible, no habrá fuerza que la haga torcer su rumbo y enturbie su imagen en el alma social.
Esta Revolución nuestra, su líder, gozan de esta fe. Desde el día del "Por Ahora" los humildes sintieron que Chávez es de los que se devuelven para salvar al humano, que sobre todos los errores y extravíos, nunca serán ni seremos abandonados, que la suerte del que naufraga por la causa revolucionaria, será la suerte de todos, ese es el principio y el fin del Socialismo.
Este sentimiento se refuerza en abril, la unión del líder con los que tienen fe se hizo estrecha, infinita. Y en diciembre se reforzó en la lucha común.
Debemos sentirnos orgullosos de tener un líder revolucionario que se entrega a la causa de todos, sin cálculos mezquinos, sin otra consideración ni interés que el bien común, aun poniendo en peligro su salud, ofrendando su vida. Con jefes así vale la pena navegar en las peligrosas aguas de la Revolución.
¡Con Chávez siempre!

12.12.12

UNIDAD Y DISCIPLINA (Miércoles 12-12-2012)


  La unidad y la disciplina son conceptos estrechamente ligados a la ideología y a los objetivos políticos. Hoy en Venezuela su estudio y su aplicación tienen vital importancia para el triunfo de la Revolución.
Con motivo de las elecciones regionales, la oligarquía, serpiente manipuladora, mantiene una ofensiva de confusión sobre las bases bolivarianas, trata de fracturar el apoyo al Comandante y a la Revolución , nos invita a ser desleales.
Dos vertientes principales tienen las elecciones regionales: una, la filosofía profunda del Socialismo enfrentada al capitalismo, y otra, el comportamiento combativo socialista de la base bolivariana. Las dos vertientes confluyen en la unidad y en la disciplina. Veamos.
La esencia del capitalismo es la fragmentación de la sociedad, la divide en tantos fragmentos como individuos existan. Así instaura el reino del egoísmo y de la competencia, la guerra de todos contra todos, el hombre lobo del hombre. La sociedad capitalista padece esta enfermedad que la lleva a la extinción, está contaminada de egoísmo y desamor.
En contraste, el Socialismo busca rescatar la armonía social para que todos vivamos como hermanos y la suerte de toda la sociedad dependa de la suerte de cada individuo, así la suerte del individuo está estrechamente ligada al destino de la sociedad. Tomar conciencia de esta unión es clave para construir un mundo con la mayor suma de felicidad posible.
Con estas reflexiones estamos en condiciones de pensar la Unidad y la Disciplina en las elecciones de diciembre. La Unidad es un concepto que pertenece al Socialismo. La unión del humano es imprescindible para fundar el mundo del futuro, el de Bolívar y el de Argimiro. Es la esencia de ese mundo, es crisol de las mejores voluntades.
Al capitalismo lo une, transitoriamente, el odio contra la causa del amor. La unidad para ellos significa unión de la infamia. Se unen para expoliar, para asesinar la causa noble de la redención de los humildes. Se unieron para asesinar a Cristo, para matar al Libertador, a Martin Luther King, a Fabricio, y para masacrar a los humildes el 27 de febrero.
La unidad socialista es esencial para construir la sociedad de la fraternidad. No es algo circunstancial, por eso no podemos romperla al menor desacuerdo. La unidad es  alrededor de los que nos gusta y, también principalmente, de lo que no nos gusta. Una divergencia táctica, momentánea, no puede poner en peligro la estrategia. Ahora en las regionales no caeremos en la trampa de aislarnos del país, de la sociedad, de fragmentarnos, ni pensar sólo en el Estado regional, en la descentralización. Esa fragmentación ayudaría a los escuálidos, a los capitalistas.  
La estrategia correcta es proteger a Chávez, a la causa de la sociedad integrada, y esos objetivos supremos los ponemos sobre cualquier motivación táctica. Mantendremos la Unidad y la Disciplina. Demostraremos que somos un pueblo consciente y maduro. Después arreglaremos cuentas entre nosotros, pero no daremos ventajas a los enemigos del pueblo humilde.
¡Con Chávez es con sus candidatos, lo demás es traición!

11.12.12

LEALTAD (Martes 11-12-2012)


En Venezuela la Revolución Pacífica se va conociendo a sí misma desentrañando sus leyes inéditas. Somos un laboratorio histórico, todo lo que aquí sucede se convierte en enseñanzas, en lecciones de la vía pacífica para la liberación del humano. Somos una cátedra, es nuestra responsabilidad reflexionarnos.
Estamos sumergidos en unas elecciones regionales que dejan a su paso importante material para su estudio. Veamos.
Las elecciones regionales burguesas son instrumentos formidables para la elevación del soporte fundamental de la dominación capitalista: el egoísmo. En estas elecciones, como en ninguna otra, aflora la ambición personal sobre el sentido de sociedad. La compulsión egoísta dirige las acciones, los grupos mezquinos y las individualidades miserables emergen como parodias desteñidas de emperadores romanos, de Calígulas y Nerones. Son días en los que se expresa lo peor de la condición humana: se disputa lo pequeño, se fragmenta a la sociedad en cascajos de egoísmo.
Sin embargo, también las elecciones regionales son territorio, ocasión, para que aflore el polo opuesto de la condición miserable, son oportunidad para el surgimiento de los grandes hombres que como suele ocurrir emergen desde el miasma, se crecen en las dificultades, superan la degradación del entorno y, desde la oscuridad, su brillo asombra al mundo.
Es así como en las elecciones regionales abundan las zancadillas, las trampitas, los míseros juegos de la pequeña política. Pero sobre todas esas miserias prolifera la deslealtad, ese es el pecado capital de las elecciones regionales.
La oligarquía sabe que mientras impere la ingratitud, la traición, habrá fragmentación social y sobre ella se construirá la dominación burguesa. Es por eso que la lealtad es un arma revolucionaria. Es una lección de esta Revolución Pacífica: la lealtad al líder, al Comandante Chávez es, más allá del sentimiento, una condición política indispensable para la salud revolucionaria, dota de cohesión a la Revolución, es un frente de batalla importantísimo para la supervivencia, para la existencia de la Revolución.
Es en la lealtad donde se miden la fortaleza y el avance ideológico de la sociedad. La lealtad es derrota del egoísmo, de los valores capitalistas.
En estas elecciones regionales aparecen los dos comportamientos: la miseria y también las más excelsas cualidades de la condición humana.  
Dentro de la Revolución, no podía ser de otra manera, se encuentran los que por un plato de lentejas traicionan, los que se dejan seducir por el pasado y no son capaces de renacer, de emprender el camino de transformarse, de construirse hombres nuevos. Pierden la batalla escenificada en su alma, son bajas de la guerra espiritual.
Pero asimismo aparecen los grandes gestos de los revolucionarios que luchan por alcanzar, como decía el Che, "el escalón más alto de la especie humana: ser Revolucionario". En estas elecciones, territorio de enfrentamiento, se mostrará lo que somos como pueblo y también lo que somos como individuos.
¡Con Chávez es con sus candidatos, lo demás es traición!