27.3.10

NOS HUBIESE GUSTADO HABLAR

Nos hubiese gustado hablar en el Congreso del PSUV. El Congreso merecía oír todos los puntos de vista, las verdades, las creencias de todos los que participan en la polémica que se desarrolla en su exterior. No fuimos invitados… lo comprendemos.
Sin embargo, allí están los Granos de Maíz, son más de mil, reunidos en el blog (http://www.ungranodemaiz.blogspot.com/) a la disposición de todos los delegados al Congreso, los militantes, y del pueblo. También está la respuesta al Ministro Sanz.
Intentaremos fijar algunos puntos que pueden servir de ayuda en la necesaria discusión, a movernos en la maraña de profusión de ideas y palabras que componen el debate.
Primero, creemos que la transición no es una tierra de nadie, donde cabe cualquier acción, es un camino hacia el Socialismo, y éste tiene características, cualidades que lo definen. La principal de ellas es la Conciencia del Deber social, ese es el pilar fundamental del Socialismo, de la transición, y lo que es más importante, de la permanencia del Gobierno Revolucionario, de Chávez.
Y, dicho sea, de los errores por nosotros cometidos, los principales son los que contribuyen a estimular el egoísmo, el individualismo, las soluciones aisladas a los problemas de la existencia.
Entonces, en la transición, los pasos, las medidas que se tomen, deben tener el objetivo de formar Conciencia del Deber Social. Esa será la medida, en última instancia, de su efectividad.
Creemos que la transición es escenario de una feroz lucha de clases: las verdades, opiniones, creencias, acciones, vertidas en las discusiones, forman parte de esa lucha. Y es allí, en el interior de la Revolución, donde se decide su destino.
Segundo, consideramos que la hegemonía de la Propiedad Social de los Medios de Producción administrados por el Estado Nacional, es condición indispensable para la construcción del Socialismo. Esa hegemonía está dada porque se entrelaza con la hegemonía de la Conciencia del Deber Social. Y en ese binomio, repetimos, lo más importante es la Conciencia, la espiritualidad, que algunos llaman fantasía. Dice Fidel que la Conciencia podía formar riqueza, pero la riqueza nunca formaría Conciencia.
Si construimos, estimulamos formas capitalistas, necesariamente formaremos conciencia egoísta, y a la hora de las decisiones importantes yugularán a la Revolución.
Tercero, la discusión que hoy se desarrolla no es un asunto académico, ni es un torneo de retórica, está en juego el destino de esta Revolución, vale decir, del Continente, de la Humanidad. No son tiempos de ventajismos tontos.
Cuarto, la realidad nos reclama un ajuste en todos los campos, desde la organización política, la social, hasta la economía. De la calidad de este ajuste depende el futuro de la Revolución.
Por último, vivimos una etapa estelar en la historia de Venezuela, similar a la vivida en la época de la Independencia. Ahora tenemos la oportunidad y el deber de ser ejemplo para el Continente y para la Humanidad de un Mundo Nuevo, que supere la lógica capitalista, que rescate a la humanidad del camino suicida ¡No podemos fallar!
¡Chávez es Socialismo!
¡Seguiremos escribiendo!

26.3.10

HACE FALTA UNA TAREA SOCIAL

Las sociedades se integran con el trabajo, con la acción social, y se fragmentan con el trabajo individual. De aquí que jornadas que movilicen a toda la sociedad son instrumentos pedagógicos para la educación socialista, para la formación del hombre socialista.
Podemos entonces decir que una de las medidas de la integración de una sociedad será su capacidad de movilizarse alrededor de objetivos altruistas.
La Revolución Bolivariana, que marcha hacia el Socialismo en medio del asedio espiritual y material del capitalismo, debe tener en alta prioridad la movilización social, ésta debe ser permanente, tener espacio, organización.
El trabajo voluntario, mal tratado por nosotros, justo es reconocerlo, lo asumimos frecuentemente como una ocasión para la publicidad, o como oportunidad electoral, debe ser rescatado en su importancia formadora, transformado en institución, en instrumento para la formación de la Conciencia del Deber Social, en ocasión para la movilización de todo el pueblo. Todos deben participar de acuerdo a sus posibilidades, pero siempre con la emoción de estar dando a la sociedad su esfuerzo.
La movilización política es también una elevada escuela de formación socialista en la calle, todos unidos manifestando la voluntad, el sentimiento, la pasión en torno a objetivos políticos humanistas, generosos. Es ejercicio de unión, de fraternidad, allí se estrechan lazos que van fraguando la integración social, razón del Socialismo.
La época electoral está llena de muchos peligros, uno de los principales es la paralización del movimiento de las masas. Así, éstas son atrapadas por la costumbre, la parsimonia, la quietud, y limitan su participación política, en el mejor de los casos, al acto de votación. Se olvidan las acciones en conjunto, de calle, en colectivo, se profundiza el egoísmo que sustenta al capitalismo.
Ahora cuando la sociedad atraviesa época electoral oligarca, llena de extravíos y tentaciones, es necesario profundizar las acciones de la movilización que integra: el trabajo voluntario y las manifestaciones políticas deben ser eje de la actividad de los revolucionarios. De las elecciones debemos salir triunfantes, pero también amolados para los combates que ya se asoman en el horizonte.
Los motivos para movilizar a la sociedad abundan, algunos serían: repudio a las agresiones que todos los días hacen voceros imperiales contra la Patria, contra el Comandante, contra el Socialismo. Reafirmación diaria de la voluntad de defender el derecho a ser soberanos.
En lo internacional, una campaña sistemática, organizada, constante, para exigir la libertad para los Cinco Héroes Cubanos, luchadores antiterroristas que permanecen secuestrados en las cárceles del imperio. Sería muestra concreta de antiimperialismo.
La solidaridad con Cuba es además de un deber fraternal revolucionario, una acción política contra los planes de las oligarquías mundiales, que agreden a la isla de Martí y a Venezuela.
Es necesario mover a la sociedad, es necesario que el motor magnífico de la movilización comience a girar.
No podemos perder de vista que la agresión que desde ya sufrimos se desarrollará a toda plenitud después de septiembre. Sea cual sea el resultado los oligarcas atacarán con fuerza.
¡Chávez es Socialismo!

25.3.10

EDUCAR SOCIALISTAS

La educación de los revolucionarios es apasionante y vital. De la manera como se resuelva depende el destino de una Revolución, o mejor, la educación es la Revolución. Podríamos decir parafraseando a Lenin: sin Educación Revolucionaria no hay Revolución.
La preocupación por la educación es constante en los Revolucionarios. Bolívar rápidamente entendió su importancia y nos dejó su “Moral y Luces”. Simón Rodríguez, el Maestro, dedicó su vida a reflexionar, a pensar la educación y a educar, toda su existencia es una cátedra de pedagogía revolucionaria… Decía: "Sin educación popular no habrá verdadera sociedad". Afirmamos hoy: “Sin educación Socialista no habrá Socialismo”.
Y aquí surgen unas preguntas y unos problemas: ¿Cómo educar en Socialismo, cómo formar el Hombre Nuevo Socialista a partir de lo viejo?
A las interrogantes se les han dado varias respuestas: unos, de forma dogmática, postulan que el cambiar las condiciones materiales de existencia, es decir, las relaciones de propiedad, es suficiente para que surja el Hombre Nuevo.
Algunos, a pesar de diagnosticar bien el problema, se abruman frente a su magnitud y retroceden. Asustados, proponen desarrollar el capitalismo para que se forme un proletariado vigoroso, y a partir de allí surgirá el Hombre Nuevo. Lo que hacen es escurrir el bulto.
Las revoluciones deben dar respuestas a las preguntas, partiendo de la idea de que el hombre al transformar la realidad se transforma a sí mismo. Entonces, al hacer Socialismo, el hombre se hará socialista. De aquí que la tarea principal de la educación socialista es hacer Socialismo, defender la posibilidad socialista.
Las masas, la sociedad, deben participar en la construcción y en la defensa del Socialismo. No es pensable una educación socialista sin esa participación, sin esa construcción, las dos deben entrelazarse estrechamente.
He allí la principal tarea de la Clase Obrera: pasar de ser una clase que resiste la explotación desde la trinchera del economicismo, a ser una clase que libera a la sociedad, la educa, la transforma desde la colina luminosa de la construcción del Socialismo.
Ahora la responsabilidad de la Clase Obrera, de sus líderes, no es simplemente conseguir amortiguar los pesares del capitalismo, sino crear territorios socialistas, que sean cátedras de formación del Hombre Nuevo.
El reto es inmenso, pero es imprescindible en estos momentos de definiciones de la Revolución, de lucha ideológica intensa, de pugna por precisar el carácter del Socialismo. Será la práctica la que decidirá el rumbo, y esa práctica Revolucionaria indispensable para avanzar, sólo es posible si tiene como eje la actividad de la Clase Obrera. Los territorios socialistas, las Zonas Socialistas por ella fundada, se reflejarán como ejemplo maravilloso sobre el resto de la sociedad, educándola, guiándola hacia una nueva existencia y una nueva conciencia.
Esas Zonas Socialistas serán, deben ser, pilar fundamental que sostenga el liderazgo del Comandante Chávez, lo acompañen en el rumbo al Socialismo.
Es hora de que la Clase Obrera entre en la batalla por el Socialismo, su concurso es indispensable.
¡Chávez y la Clase Obrera son Socialismo!

24.3.10

LA VERDAD

Primero queremos dejar sentado que el hecho de que una persona sea pedante, fea, no nos guste, etc., no confirma que las tesis que expone sean equivocadas. Quien no rebata esas tesis, y sólo impugne al hombre, está incurriendo en sofismas, eficaces para ganar torneos de retórica, pero inútiles en la búsqueda de una Revolución. Veamos.
Todo hombre lleva una verdad en el alma, a veces la sembró allí la clase explotadora, entonces, ese hombre es víctima o es victimario.
A veces la verdad la depositó allí el viento de la emancipación, y ese hombre necesariamente navega el río de la Revolución.
Cuando la verdad que el hombre porta es respaldada por acciones que conquistan multitudes, cuando se hace fe de las masas, en ese momento estamos en presencia de un líder. Pero, puede ser que la mayoría no lo acompañe, entonces esa verdad esperará nuevos tiempos en busca de reconocimiento.
Tal es el caso del Libertador, de Martí, de Marx, Fidel, el Che, y de Chávez, pero también de Fabricio, que murió por defender su verdad, o de Rosa Luxemburgo. O de Trotsky, siempre fiel a sus creencias, en un momento el hombre más solitario del planeta, repudiado por sus enemigos y execrado por los que debían ser sus hermanos.
Similar ejemplo dio Galileo, que defendió sus creencias hasta lo último, y su grito ¡sin embargo se mueve! aún retumba en oídos incautos.
Y, por encima de todos, está Cristo, que luchando con su prédica contra un imperio supo dar a la batalla un alto contenido espiritual, y lo refrendó en la Cruz.
A través de la historia, las armas del rebaño contra la verdad incómoda son siempre las mismas: la mentira, la descalificación, la burla, la agresión, la trampita mezquina, son tan poderosas que consiguen que los pueblos yugulen a sus líderes y favorezcan a sus verdugos.
El ejemplo más triste se encuentra en los mismos orígenes de nuestra civilización: cuando Pilatos somete a votación del populacho la vida de Cristo, éste es derrotado y condenado a la Cruz. Fue tan vergonzosa aquella reacción, que el delegado imperial se lavó las manos.
Nosotros tenemos una verdad, en ella creemos, con ella hemos vivido por más de cincuenta años. El colectivo Un Grano de Maíz resume todos los combates revolucionarios librados por esta sociedad en más de medio siglo, desde la lucha contra Pérez Jiménez hasta el 4 de Febrero, pasando por las batallas heroicas que lo precedieron. En esa lucha nada nos es ajeno.
Hemos acertado y también errado, sufrido muchas derrotas y pocas victorias, pero siempre perseveramos. A esta Revolución no le pedimos nada, al contrario, agradecemos profundamente la oportunidad que nos dio de seguir luchando por el sueño, por la utopía que heredamos del Libertador, de los precursores. Agradecemos al Comandante Chávez que emergiera del desierto y nos trajera la Esperanza.
Tenemos nuestra Verdad, siempre la proclamaremos, por ella luchamos y sólo pedimos coraje para morir por ella, si es necesario.
¡Chávez es Socialismo!

23.3.10

EMOCIONAR

El paisaje político venezolano se mueve aceleradamente. Del campo revolucionario se desprenden elementos políticos, que como dijo el Comandante, ya no daban más, se quedaron en el camino. Debemos estudiar la situación.
El deslinde que se precipita, que se manifiesta primero en lo político, es reflejo y va acompañado de deslindes en otros campos de la vida social: la economía, el imaginario, el espíritu, allí también se producen definiciones, que lentamente se hacen visibles.
Las posturas políticas que aparecen en el escenario tienen su correspondiente en la esfera económica, ésta las agrupará en última instancia. La definición será dada por la posición en relación a la hegemonía de la propiedad de los medios de producción.
Nosotros sostenemos que la hegemonía socialista de la propiedad de los medios de producción es aquella que produce hegemonía en la Conciencia del Deber Social. Es decir, y esto es muy importante en un país rentista como Venezuela, que no es un asunto meramente económico, no es la hegemonía económica simplemente, se trata de la hegemonía de la propiedad sustentadora de conciencia. En otras palabras, no es suficiente la propiedad social de la Petrolera y de las empresas de Guayana, es indispensable que esa riqueza se invierta en el resto del país, en propiedad social capaz de entrelazarse con la Conciencia del Deber Social.
Si invertimos la renta en formas de propiedad nosocial, capitalista, ésta sostendrá conciencia egoísta, esa será la hegemónica y buscará sus correspondientes políticos y espirituales.
La Petrolera y las empresas de Guayana son fundamentales para el Socialismo en lo político y lo espiritual. Es desde allí, con la participación activa de los obreros, que se debe y se puede irradiar la emoción social al resto del país.
Lo primero es que los obreros asuman su papel histórico, abandonen el campo economicista, y asuman su papel de clase fundamental en la Revolución. Se transformen en obreros socialistas, simultáneamente con la construcción del Socialismo.
Los tiempos que corren, de desprendimientos, dudas, indefiniciones, exigen que la Revolución se agrupe, que de un salto, que se defina y emocione a la sociedad. Y allí los obreros tienen papel principal. Veamos.
Una revolución cabalga sobre la emoción social, no puede entrar en la parsimonia de la costumbre, no puede perder su capacidad de asombrar, debe ir de milagro en milagro, de utopía realizada en sueño de una nueva utopía.
Una Revolución, su vigor, se puede medir por su capacidad de emocionar a las masas con el maravilloso rencuentro del espíritu social. En otras palabras, la Revolución debe movilizar alrededor de objetivos altruistas y sociales. Todas las acciones revolucionarias deben tener a la emoción como objetivo, esa es su fuerza.
Las soluciones individuales no educan en el Socialismo, sólo las soluciones sociales son formadoras de la conciencia social. Entonces, las Zonas Socialistas, la movilización que en ellas se genere, su irradiación sobre el resto de la sociedad combativa, su ejemplo, son imprescindibles para impulsar la emoción revolucionaria.
¡Chávez es Socialismo!
¡Revolución es Emoción!

22.3.10

CHÁVEZ DEFINE

A medida que la Revolución avanza, las aguas toman su cauce, el espacio para la maniobra oportunista se reduce, las posiciones se definen, las caretas caen, muchos se estacionan en el hombrillo, otros, simplemente saltan la talanquera.
Las revoluciones tienen un punto que las define, las caracteriza, y podemos decir, las sostiene, las hace posible.
Se trata de un punto sin el cual la Revolución pierde el alma, se desnaturaliza, se desvanece, en ese punto, o por medio de ese punto los pueblos en rebeldía se expresan, ese punto los resume.
Si ese punto desaparece, las sociedades se dispersan en muchas manifestaciones sin sentido, sin propósito, se comportan como una gallina despescuezada, hasta que al fin es atrapada por la quietud del sepulcro.
Este punto, que llamaremos núcleo generador es rápidamente detectado por el imperio, y hacia él enfilan sus más crueles esfuerzos, necesitan extirparlo con crueldad, dejar sentado un precedente que disuada: así lo hacen desde los días de Espartaco, de Cristo, en la independencia lo hicieron con los patriotas, y al Libertador lo asesinaron, sino físicamente, algo que está por dilucidarse todavía, con seguridad lo hicieron espiritualmente.
La lista de esos puntos es larga, tan larga como la historia de los intentos libertarios: Malcon X, Luther King, Mahatma Ghandi, Ho Chi Min, Torrijos, Allende, Fabricio, Jorge Rodríguez.
Hoy vivimos una Revolución que avanza firme hacia el Socialismo, transitando su propio camino, con contradicciones, con una feroz lucha de clases en su interior, pero siempre marchando hacia delante, en ella el núcleo generador, el punto de que hablamos, es el Comandante Chávez. Esto hay que reconocerlo sin mezquindad. Él resume el aliento vital de la Revolución , sin él la Revolución se esfuma.
Eso lo sabe el imperio y contra él enfilan sus armas. Esa es una buena medida del valor del Comandante.
En la práctica Chávez define. Eso significa que hoy en Venezuela no es posible ser Revolucionario y no estar con Chávez. O dicho de otra forma, si contra Chávez es, entonces es contrarrevolucionario.
Esa Revolución si se queda sin Chávez pierde su punto principal, su núcleo generador, se desvanece en mil contradicciones.
A Chávez hay que apoyarlo sin reservas. Las Revoluciones tienen como ley, el agruparse alrededor del líder, del núcleo generador.
Ese fue el éxito de la Revolución Cubana, que se congrega alrededor de Fidel, fue la clave de la Revolución Soviética, concentrada alrededor de Lenin.
Fue el error principal de lo más avanzado de la Revolución Chilena, del MIR. Tenía un excelente nivel de acierto en sus propuestas políticas, pero no supo entender que era Allende el aliento de aquella Revolución, sin Allende todo se derrumbaría.
Aquí en Venezuela la principal estrategia de la ofensiva imperial es asesinar a Chávez, ya sea físicamente o moralmente. La defensa de Chávez es el más importante objetivo para los revolucionarios. Debemos estar con el Comandante, eso significa estar con lo que Chávez decida, discutir todo con irreverencia, pero lealtad en la acción, secundarlo con disciplina.
¡Chávez!

21.3.10

LA OLIGARQUÍA ESTÁ CONSPIRANDO, Y CUENTA CON LOS INCAUTOS

Si estudiamos las declaraciones de voceros oligarcas, entenderemos rápidamente que están conspirando. No es necesaria ninguna labor de inteligencia, sus intenciones están a cielo abierto. Oigamos las voces del enemigo.
Salas Romer, responde así a la pregunta ¿Por qué no habrá 2010?
…“Porque hay muchos elementos en juego en estos momentos. Hay armamentos que han llegado para la guerrilla. Hay centros de entrenamiento guerrillero en Venezuela. La llegada reciente de Ramirito alguna motivación tiene. El pacto Farc y ELN firmado aquí en Venezuela. La ubicación de las bases norteamericanas casi en la frontera venezolana, tiene implicaciones. Los movimientos que uno observa geopolíticamente llaman la atención”...
Con los cuidados del caso, Salas anuncia un golpe con la participación de las bases militares gringas, y de pasada lanza algunas mentiras que apuntalan el susurro oligarca en la Fuerza Armada.
En un foro organizado por el Frente Institucional Militar, el General Enrique Ochoa Antich expone con claridad su estrategia golpista. Veamos:
La noticia la tomamos de El Universal:
“Ochoa Antich explicó que históricamente los golpes militares se registran cuando convergen tres factores: descontento en la FAN, constitución de una logia militar reconocida y una crisis política nacional. De acuerdo al General, en el país aún falta que cobre fuerza la última condición.”
Ochoa Antich, suelta, con las precauciones del caso, el plan, lo que llevan adelantado, y el análisis político que los conspiradores hacen. Todo está puesto sobre la mesa: hay descontento, la logia militar existe, la que Ochoa llama cautamente “grupo de amigos”. Sólo esperan que se de la crisis política nacional.
La crisis política no es otra que el resultado de las elecciones parlamentarias. Trabajan para que el resultado, sea cual fuere, se transforme en una crisis política. Ellos seguramente ayudarán con algunas acciones.
Esta es la fracción que conspira, los encargados del trabajo militar. La otra fracción es la encargada de influenciar incautos, aquellos que creen en el carácter y planes democráticos de los oligarcas, los que ven en las elecciones, sólo eso, elecciones, y no ven el tremendo plan conspirador que ya asoma. Faltan los planes de exterminio que acompañan a los golpes fascistas, cuyos detalles vienen del pinochetismo chileno, en estrecha alianza con la oposición oligarca, recordemos el viaje de Ledezma.
Ahora la Revolución, el PSUV, escoge los candidatos para esta batalla contra la oligarquía, esos serán los candidatos nuestros, por ellos debemos votar, no hay ninguna excusa para no hacerlo, nada debe estar por encima de un buen resultado en las parlamentarias, valga decir, por encima de preservar a Chávez y el rumbo al Socialismo.
Ya en este país no hay lugar para incautos, que nadie se chupe el dedo, en las elecciones parlamentarias los bolivarianos debemos arrasar, esa es la única forma de derrotar los planes de las oligarquías internacionales, que tienen como objetivo enterrar con crueldad el ejemplo que la Revolución Bolivariana es para el continente.
¡Chávez es Socialismo!
¡La Esperanza debe vivir!