21.5.07

LA AMBIGÜEDAD EN RADIO CARACAS ¿VICTORIA TÁCTICA Y DERROTA ESTRATÉGICA?

La ambigüedad, la falta de definición, es fatal para una Revolución, y ese mal nos impregna.

La ambigüedad surge de la ideología pequeño burguesa que hoy es hegemónica en la Revolución. Esta ideología no termina de concretar el cambio revolucionario que reclama la situación, propone medidas revolucionarias, pero al mismo tiempo las matiza, las suaviza, les quita toda su carga rebelde. Expliquemos con un ejemplo: el cese de la concesión a Radio Caracas.

Es, sin dudas, un triunfo táctico de la revolución, pero después de matado el tigre la ambigüedad le tiene miedo al cuero. Veamos.
La ambigüedad se manifiesta en dos planos principales:

Uno, el ideológico. No explicamos con fuerza que Radio Caracas es un foco que irradia conciencia capitalista, valores contrarios al Socialismo y al Pueblo, que es un canal al servicio de los mezquinos intereses capitalistas, y por eso es necesario transformarlo en foco de creación de conciencia socialista, del amor, de la solidaridad, en resumen, de los valores de la nueva sociedad y del Hombre Nuevo.

Dos, la propiedad y el concepto de Estado que de allí se desprende. No acabamos de entender, de precisar, que el Estado Revolucionario es representante de la sociedad, que no puede haber Propiedad Social sino es administrada por el Estado, ni Socialismo sin Propiedad Social.

Entonces, lo que se decide estratégicamente en radio caracas es el problema de la propiedad y del Estado socialista. Decidimos si avanzamos con formas de propiedad socialista, si fortalecemos el Estado revolucionario o, por el contrario, si seguimos chapoteando, “improvisando y errando”, en el peligroso mar de la ambigüedad.

Las vitales percepciones de Estado Revolucionario y Propiedad Socialista, salen debilitadas por la ambigüedad. Ya entre nosotros circula y se fortalece la idea oligarca neoliberal, de que el Estado es una cosa y la sociedad es otra, así minan la posibilidad del Socialismo.

Nosotros le quitamos la señal a radio caracas, y abastecemos el dinero para formar otro canal, que después será patrocinado por los mismos capitalistas que determinaron los contenidos infames de Radio Caracas. Es decir, salimos de Granier, Granielito y la Bicha, pero dejamos las condiciones que le dieron origen, porque el patrocinante es en la práctica el dueño del contenido.

No hay atajos, el nuevo canal debe ser, como es PDVSA o la Radio Nacional: propiedad de toda la sociedad, administrado por el Estado, que es el representante del Pueblo.
No debe tener patrocinantes antisociales, lo debe sostener el Estado revolucionario como garante de que esté al servicio de la sociedad y no de parcialidades. No hacerlo así, es dudar del Estado como representante de la sociedad y de la Revolución, dudar del Socialismo.

La ambigüedad nos hace vulnerables frente al ataque de la oligarquía, que sí sabe lo que quiere, y lo busca a sangre y fuego. Recordemos que en la Revolución no hay atajos, la ambigüedad facilita la derrota.

¡Chávez es Socialismo!

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