7.7.11

EL RETO DE LA TEMPESTAD (Jueves 07-07-2011)

Es evidente, se acerca una tempestad social de inmensas proporciones, o mejor, ya estamos hundidos en ella. Las señales son claras, las consecuencias las padecemos, la conclusión es directa: el capitalismo atraviesa una crisis terminal y, necesariamente, arrastra al mundo.


La crisis del capitalismo es la crisis de la humanidad, hoy no se decide la suerte de un sistema, sino el destino de la especie humana y de la vida planetaria. Es deber de los Revolucionarios luchar por la supervivencia de la humanidad, ese es el reto principal. En esta etapa histórica, crisis, tempestad, capitalismo, son sinónimos: definen una situación que pone en peligro la vida misma.


Para la Revolución Bolivariana es indispensable entender las manifestaciones de la agonía del capitalismo, sólo de esta manera podremos asumir nuestro papel histórico, la enorme, pero hermosa responsabilidad que tenemos. Veamos

La dolencia del capitalismo se puede abordar desde diferentes puntos: financiero, político, demográfico, de producción, impacto ecológico, etc. Al estudiar el fenómeno de la crisis nos daremos cuenta que todas sus facetas tienen origen en la manera como el hombre del capitalismo se percibe y en la relaciones económicas que imponen esa visión. Analicemos las manifestaciones del capitalismo mundial y tratemos de determinar su desarrollo.

La economía capitalista se desmorona, la deuda de Estados Unidos es signo de las estructurales dificultades de aquel sistema, lo mismo sucede con Europa, Grecia es patognomónico, en China la realidad diluye el milagro, ya se asoman dificultades, recordándonos que no hay capitalismo sin crisis.


Estados Unidos merece nuestra especial atención, están próximas unas elecciones y la crisis lastra la candidatura y las encuestas de obama. Es lógico pensar que usarán infamias para subirlas, ya lo consiguieron con la “muerte de Bin Laden” pero la elevación fue efímera, los números volvieron a caer arrastrados por la economía. De allí que Chávez puede ser un buen objetivo en la proximidad de sus elecciones.

El desastre ecológico muestra sus consecuencias, en la producción de alimentos se vaticina una fuerte escasez, ya se sufre alza en los precios.

Las migraciones de los hambrientos, a pesar de los esfuerzos por ocultarlas, ya tocan duro las puertas del norte y crean desajustes demográficos.

Podríamos concluir diciendo que la civilización, tal como la conocemos, desaparecerá. En los próximos años todo cambiará, ya la transformación sucede frente a una humanidad ciega. La supervivencia de la especie dependerá de que ese cambio sea una superación de las relaciones humanas capitalistas, lo contrario será la extinción.

No obstante, en el corto plazo la crisis del capitalismo tendrá consecuencias sobre la política continental y mundial. Primero, se radicalizarán las opciones políticas, no habrá lugar para terceras vías, para capitalismos con rostro humano, el dilema será, como nunca, Socialismo o Barbarie, Socialismo o Fascismo. Aquí en el Continente, es deber de los Bolivarianos alertar a los pueblos, ser ejemplo de cómo enfrentar las dificultades, es necesario profundizar a la Revolución, ese es el único modo de vencer la tempestad.

¡Con Chávez más resteaos que nunca!

1 comentario:

Anónimo dijo...

No tenga miedo amigo! La humanidad aflorará lo peor por las necesidades, pero también saldrá a la luz lo mejor de ella. Es un parto necesario, y aunque muchos a lo mejor no estemos o veamos el resultado final, continuamos luchando y pidiendo por que las nuevas generaciones que son nuestros hijos logren verlo.
Yo imagino un mundo maravilloso, donde el individuo se observe como parte de otro, que tenga conciencia de que lo que hace o deje de hacer puede afectarle a si mismo como a sus semejantes. Donde la belleza esté representada por la ética al actuar, al accionar en todos los aspectos de la vida. Reconocer los defectos del ser humano por su condición humana, con el único propósito de superarlos o por lo menos disfrutar en el proceso de ser cada dia mejores individuos. Existe mucha luz a nuestro alrededor, solo hay que abrir los ojos...y el corazón!