NUESTRA CANDIDATURA AL CONSEJO DE SEGURIDAD de la ONU, y la batalla que allí se desarrolla, traen grandes enseñanzas y alertas para nosotros. Veamos.
El imperio más poderoso en la historia de la humanidad, nos declaró la guerra abierta. Estuvieron participando activamente en el golpe de abril, pero siempre lo negaron, intervinieron en el sabotaje petrolero, pero de forma oblicua. Los personeros del gobierno de bush declaran con frecuencia en contra del Comandante Chávez y la Revolución venezolana. Sin embargo, es en esta batalla por el puesto en el Consejo de Seguridad, que el imperio abiertamente nos enfrenta. La candidatura de Guatemala quedó evidenciada como una mampara que cubre la ofensiva de los gringos contra nosotros. La campaña no la hace Guatemala, la hace de forma descarada Estados Unidos. El resultado final no cambiará el hecho de que los gringos se pusieron franca y abiertamente en contra nuestra, este es el dato importante en este ángulo del análisis.
Los gringos declararon una ofensiva abierta contra nosotros en la ONU. De allí podemos deducir que están actuando con la misma intensidad en los demás países, ya vemos las declaraciones de Alan García, Noboa, la posición desleal de Uribe y la “neutralidad” de la inefable Bachelet. También se detectan presiones para impedir la compra de armas. En resumen, el imperio actúa malicioso en nuestro entorno internacional. Si esto es así, es tonto no suponer que esta campaña internacional, tiene su correspondiente nacional.
Los gringos están aquí, y están actuando para derrocar a Chávez. Ahora bien, si sabemos que la candidatura de rosalito, su lacayo, les falló, la pregunta lógica es ¿cuál es el plan para salir de Chávez?
La respuesta es que existen varios planes y múltiples variantes. Exploremos:
Existe un plan para desconocer los resultados de diciembre, desestabilizar, y dar un zarpazo que recomponga el cuadro político y permita salir de Chávez. Existen planes de magnicidio, también planes secesionistas. Asimismo, con alta exquisitez, buscan un pacto entre sectores de la oposición y del gobierno.
Debemos entender que el imperio tiene una ofensiva contra nosotros, y que esa ofensiva adquiere diversas formas, pero que frente a todas ellas, la respuesta de los bolivarianos debe ser la misma:
Colocar la lucha en su real escenario: Estamos peleando contra el imperio más poderoso que haya existido jamás. Es necesario saber que el imperio no cesará hasta ver yugulada a la Revolución Bolivariana. Aquí no hay otro camino que profundizar la Revolución, sembrarla en el corazón de los humildes, darle al pueblo razones sagradas e insustituibles por las cuales valga la pena pelear. Eso nos permitirá combatir y triunfar en cualquier terreno en que los gringos nos planteen la faena.
Es necesario tensar los mecanismos de defensa de la Revolución, no es posible que los oligarcas conspiren en nuestras propias narices, hablen de golpe, de pactos, y esa impunidad la confundamos con democracia.
¡No entregaremos el sueño de Bolívar!
¡Chávez es Chávez… amor y sangre de su pueblo!
¡Rodilla en tierra con Chávez y el Socialismo!
El imperio más poderoso en la historia de la humanidad, nos declaró la guerra abierta. Estuvieron participando activamente en el golpe de abril, pero siempre lo negaron, intervinieron en el sabotaje petrolero, pero de forma oblicua. Los personeros del gobierno de bush declaran con frecuencia en contra del Comandante Chávez y la Revolución venezolana. Sin embargo, es en esta batalla por el puesto en el Consejo de Seguridad, que el imperio abiertamente nos enfrenta. La candidatura de Guatemala quedó evidenciada como una mampara que cubre la ofensiva de los gringos contra nosotros. La campaña no la hace Guatemala, la hace de forma descarada Estados Unidos. El resultado final no cambiará el hecho de que los gringos se pusieron franca y abiertamente en contra nuestra, este es el dato importante en este ángulo del análisis.
Los gringos declararon una ofensiva abierta contra nosotros en la ONU. De allí podemos deducir que están actuando con la misma intensidad en los demás países, ya vemos las declaraciones de Alan García, Noboa, la posición desleal de Uribe y la “neutralidad” de la inefable Bachelet. También se detectan presiones para impedir la compra de armas. En resumen, el imperio actúa malicioso en nuestro entorno internacional. Si esto es así, es tonto no suponer que esta campaña internacional, tiene su correspondiente nacional.
Los gringos están aquí, y están actuando para derrocar a Chávez. Ahora bien, si sabemos que la candidatura de rosalito, su lacayo, les falló, la pregunta lógica es ¿cuál es el plan para salir de Chávez?
La respuesta es que existen varios planes y múltiples variantes. Exploremos:
Existe un plan para desconocer los resultados de diciembre, desestabilizar, y dar un zarpazo que recomponga el cuadro político y permita salir de Chávez. Existen planes de magnicidio, también planes secesionistas. Asimismo, con alta exquisitez, buscan un pacto entre sectores de la oposición y del gobierno.
Debemos entender que el imperio tiene una ofensiva contra nosotros, y que esa ofensiva adquiere diversas formas, pero que frente a todas ellas, la respuesta de los bolivarianos debe ser la misma:
Colocar la lucha en su real escenario: Estamos peleando contra el imperio más poderoso que haya existido jamás. Es necesario saber que el imperio no cesará hasta ver yugulada a la Revolución Bolivariana. Aquí no hay otro camino que profundizar la Revolución, sembrarla en el corazón de los humildes, darle al pueblo razones sagradas e insustituibles por las cuales valga la pena pelear. Eso nos permitirá combatir y triunfar en cualquier terreno en que los gringos nos planteen la faena.
Es necesario tensar los mecanismos de defensa de la Revolución, no es posible que los oligarcas conspiren en nuestras propias narices, hablen de golpe, de pactos, y esa impunidad la confundamos con democracia.
¡No entregaremos el sueño de Bolívar!
¡Chávez es Chávez… amor y sangre de su pueblo!
¡Rodilla en tierra con Chávez y el Socialismo!
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