12.9.09

SOCIALISMO Y PAZ

El capitalismo mundial tiene como objetivo acabar con la Revolución Bolivariana, terminar con Chávez, enterrar el ejemplo. En este empeño es capaz de cualquier tropelía. Cuando de solventar una amenaza se trata, nada es demasiado para el imperio.
El imperio no puede tolerar que esta sociedad busque su propio camino, nuestra independencia los alarma, eso ya justifica su agresión, pero si además emprendemos la construcción de una relación alternativa al capitalismo, entonces nos convertimos en un peligro que necesita extirpación urgente.
No aceptan que postulemos una humanidad basada en la fraternidad, la colaboración, en el amor y la paz, en resumen, en el Socialismo.
La evolución de nuestras ideas, la propagación del mensaje socialista, nuestras acciones internacionales, encienden todas sus alarmas.
Hoy estamos sufriendo una ofensiva del capitalismo mundial, una más. Todos los medios, las agencias de seguridad, los gobernantes, se enfilan contra nosotros. La “marcha mundial” contra Chávez es muestra del carácter global de la agresión.
En las ofensivas imperiales no hay piezas sueltas, todo encaja en un plan bien pensado y bien ejecutado, el éxito de la Revolución depende de la inteligencia con la que descifremos sus intenciones.
Lo primero es entender que ellos no desechan ninguna forma de lucha en sus agresiones, al contrario, las combinan.
Lo segundo es entender que necesitan movilizar su base social y anestesiar la base social de la Revolución. En ese momento activarán el desenlace.
¿Cómo conseguirán este objetivo?
Su campaña la basan en el miedo, activan temores instalados en el fondo del inconsciente. Con este fin hacen investigaciones: por ejemplo, una encuesta del periódico El Universal pregunta directamente “Cuál es tu principal temor”.
Construyen una amenaza creíble, generadora del miedo, en este caso la posible guerra con Colombia y sus bases, la potencian con otros miedos: a las leyes, al despojo de los hijos, de los bienes, a la inseguridad. Al lado de eso convierten al Comandante en fuente de todos los terrores, de todos los males.
Hecho esto, aislado el Comandante, tienen las condiciones para concretar la agresión en cualquier terreno: en las elecciones cosecharán votos con el miedo, y con el miedo justificarán un golpe.
Los revolucionarios debemos responder a esta maniobra. Es necesario demostrar que sólo el Socialismo y Chávez son la paz, porque sólo el Socialismo es justicia. De allí que los guerreristas son los capitalistas internacionales y nacionales.
La ofensiva en esta etapa tiene un alto componente de manipulación del alma, es allí donde debemos dar la batalla. Recordemos el éxito oligarca en la reforma: consiguieron una respuesta irracional de sectores de nuestra base social, lograron que las víctimas votaran por sus verdugos, o se inhibieran en la defensa de sus conquistas.
No debemos tener dudas, somos sus enemigos irreconciliables, no descansarán hasta ver al pueblo de nuevo esclavo, hasta yugular la esperanza. No hay que creerles a estos lobos aunque se vistan de ovejas.
¡El Socialismo y Chávez son la Paz !
¡El Capitalismo es inseguridad y Guerra!

11.9.09

OCTUBRE: SEÑALES Y LADRILLOS

En octubre ya las clases estarán firmes, el ambiente de vacaciones se disipará, los balnearios estarán tranquilos, el tráfico intenso volverá, las luncheras, las levantadas temprano, regresarán. Todo sería bien bonito a no ser por las amenazas de la oligarquía.
Las señales son claras: los oligarcas intentarán calentar la calle, desconocer las leyes por mandato de los gringos, ejecutarán protestas en los colegios. Es parte de un plan golpista bien estructurado:
La agresión tiene un componente internacional que se evidencia con las declaraciones de personeros gringos militares y civiles, la acusación de construir aquí armas prohibidas, la instalación de las bases en Colombia, la complicidad con grupos terroristas internacionales y un largo etc.
Aquí adentro los agentes de los gringos anuncian golpe de Estado y divulgan sus planes. Están envalentonados. No hay dudas, Octubre es un mes de recrudecimiento de la ofensiva oligarca.
¿Qué debemos hacer los Revolucionarios?
Es necesario, urgente, construir un muro de contención a la ofensiva imperial, este muro debe construirse con estos ladrillos:
Primer ladrillo. Quizá el más importante, elevación de la espiritualidad revolucionaria: dar al pueblo razones sagradas por las cuales luchar, aquellas que sin el Socialismo, sin el Comandante Chávez no serían posible, y que son, sin duda, el camino para la redención definitiva de los humildes. Por ejemplo, el rescate de la fraternidad, del amor entre gobernantes y pueblo humilde, de allí, de ese sentimiento se desprenden acciones que son la esencia de la Revolución : la dignificación de los pobres, la atención a sus necesidades, el camino a perfeccionar las relaciones humanas en la sociedad.
Sólo elevando la espiritualidad encenderemos la pasión que nos lleva a la defensa decidida de la Revolución.
Segundo ladrillo. Reafirmar el amor del pueblo por el Comandante, combatir la campaña que busca satanizarlo. Chávez encarna el proceso revolucionario que vivimos. Debemos reforzar la unidad alrededor de su liderazgo, reconocerlo sin mezquindades.
Tercer ladrillo. La organización de las masas y del partido. El pueblo sin organización, sin dirección no puede contener la amenaza oligarca que se avecina. La organización popular debe trascender el papel y mostrarse vigorosa en la movilización política. Cada unidad organizativa debe ser una prefiguración de la sociedad socialista, foco de fraternidad y de combatividad, ladrillo del muro de contención de los planes oligarcas.
Cuarto ladrillo. Ya es momento para consolidar la doctrina, la ideología revolucionaria, la que da continuidad al movimiento revolucionario de la humanidad, aquel que para nosotros se origina en Cristo, en Espartaco, y sigue con José Leonardo, Bolívar, Martí, Zamora, La Comuna de París, Lenin, Rosa, Mariátegui, Mella, Fidel, Che, Miguel Enríquez, entre muchos otros. Esas experiencias que dieron origen a lo que hoy es el pensamiento revolucionario universal deben ser enriquecidas y adaptadas a nuestra realidad.
Sólo un muro construido con el amor al Comandante, al Socialismo, a la teoría y a la organización revolucionaria, y una alta pasión por defender esta Revolución, podrá contener el intento del imperio de truncar nuestra esperanza.
¡Si se atreven profundizaremos el Socialismo!
¡Chávez es Socialismo!

10.9.09

LAS MIL CARAS DEL IMPERIO FASCISTA

El imperio tiene mil caras para la agresión, todas con un mismo objetivo: la protección del imperio y el ataque despiadado a sus enemigos. Van desde la agresión abierta, bombardeos, invasiones, hasta los infiltrados.
Contra nosotros sus caras se suceden con celeridad.
Unas preparan a su opinión pública interna y a la opinión mundial, el libreto que usan es el mismo de Irak: con mentiras construyen un peligro para los Estados Unidos, un demonio, en el caso de Irak fueron las armas químicas de destrucción masiva, después confesaron que era mentira.
Las declaraciones del Fiscal de New York son una muestra de esta cara de la ofensiva. Veamos.
“El Fiscal del Distrito de New York, Robert Mogenthau, aseguró este martes que la presencia cada vez mayor de Irán en América Latina constituye una amenaza para la seguridad de los Estados Unidos y demanda un escrutinio mayor por parte de los vecinos de Venezuela. El Fiscal indicó que las relaciones con Venezuela le han permitido a Irán escaparse de las sanciones económicas diseñadas por la comunidad internacional para prevenir el desarrollo de armas nucleares en ese país. Indicó además que la presencia de fábricas con tecnología iraní ubicadas en partes remotas y de difícil acceso dentro de Venezuela son un sitio ideal para la producción de armas prohibidas.”
No se necesita ser ningún genio para percibir el aroma de Irak en estas declaraciones del alto personero.
En el campo interno tienen otras caras, unas más evidentes, otras más boconas, unas discretas, otras exhibicionistas. Estudiemos a Ronny Padrón, vocero socialcristiano y columnista de Noticiero Digital y de El Universal.
Cuidando un poco las apariencias, es abogado y sabe lo que hace, Padrón devela el plan golpista en un artículo: “El posible día después, para este régimen socialista”, publicado en El Universal el 9 de septiembre, a dos días del aniversario del derrocamiento de Allende por métodos de similar infamia.
Nos dice Padrón en su artículo: “Dando por descontado, en primer lugar la estricta observancia constitucional, única garantía de convivencia pacífica a lo interno de Venezuela, una vez restaurado el régimen democrático de libertades, estimo pertinente referir los pasos consecuentes al logro de lo que no se pudo el 11 de abril.”
Habla de el exilio de Chávez de forma similar a Aristide, o a Zelaya, y después adelanta las medidas a tomar para corregir las fallas de abril, dice Padrón, ya declarado golpista: “es necesario el mantenimiento del orden público y la paz social, aparte de su importancia resulta de particular interés teniendo como referente los fallos en la transición del 2002, en comparación al reciente ejercicio gubernativo en la República de Honduras (…) Micheleti una vez que asume el poder por vía constitucional, decreta un toque de queda como medida indispensable para el mantenimiento del orden público.”
Las caras fascistas del imperio son evidentes, la Revolución está en el deber y el derecho de defenderse, que nadie dude, que nadie se llame a engaño.
¡Chávez es Socialismo!

9.9.09

LA SUPERFICIE, LO INMEDIATO, EL ENTORNO

La oligarquía dominante basa su dominio en la instalación en la mente del oprimido de formas y estructuras que le impidan percibir su esclavitud y construir respuestas contra ella.
Unas de esas estructuras mentales para la dominación es confinar el razonamiento a la superficie, a lo inmediato, al entorno. De esta manera el individuo es incapaz de elaborar y comprender conceptos, sólo puede, en el mejor de los casos, percibir a la realidad, nunca interpretarla.
Otra de estas estructuras mentales es ejercitar la mente, acostumbrarla a sensaciones que luego de instaladas pueden ser activada por asociación. Por ejemplo, el color rojo produce rechazo, es asociado a lo malo, y se activa cuando aparece en pancartas o manifestaciones. La masa oligarca lo rechaza hasta en el vestir. Otro caso, las películas de terror que abundan en los medios oligarcas nos acostumbran al miedo, y este es activado asociando las acciones del gobierno a detonantes del miedo. Así, la Ley de Educación es asociada a la pérdida de los hijos, y eso dispara el miedo que ya tiene sus rutas mentales establecidas.
Otra de estas estructuras mentales para la dominación es confundir la realidad con el show. La oligarquía creó una zona donde la realidad y el show se confunden, pierden nitidez, lo llaman los “Reality Show”. Convirtieron a la televisión en realidad y a la realidad en televisión, es una especie de esquizofrenia cibernética.
Desmontar esas estructuras es un paso previo en la liberación de la sociedad. La Revolución no puede avanzar, el cambio cultural no puede darse mientras estos pilares estén en pie, mientras esa sea nuestra manera de pensar. Con esas estructuras la oligarquía dirige a la sociedad, controla la política, las protestas, las aceptaciones, las necesidades, el consumo.
La Revolución, que es una radical sustitución cultural, tiene que zafarse de esta trampa, romper las estructuras mentales de dominación.
Debemos relacionar la superficie con el fondo, la imagen con la realidad, el entorno con lo universal, la táctica con la estrategia, la historia con el momento. El discurso de nuestros líderes, que son formadores de opinión en la masa bolivariana, debe tener este objetivo pedagógico.
Los revolucionarios no podemos caer en la lógica de la oligarquía, allí podríamos obtener victorias superficiales, pero la base de la dominación estaría intacta, así reforzaríamos las estructuras mentales de la dominación, estaríamos cavando nuestra derrota.
Por ejemplo, una marcha oligarca, violenta o “pacífica”, debemos relacionarla siempre con sus intentos de restaurar sus privilegios, relacionarla con el plan golpista que ellos desarrollan, explicar los matices de su táctica, y la persistencia de su estrategia. Explicar la relación con las bases gringas en Colombia, con los planes del imperio. Exponer que nos atacan por querer construir un país donde todos vivamos como hermanos, un país socialista.
Una victoria nuestra no será victoria sino sirve para desmontar estas estructuras, y reforzar las nuevas estructuras mentales liberadoras que sustenten a la Revolución.
¡Chávez es Socialismo!

8.9.09

PATRULLAS Y SOCIALISMO

Con frecuencia surgen las preguntas: ¿Qué es una patrulla, para qué sirve, cuál es su función? Es un buen tema para discutir, la respuesta nos colocará en una corriente ideológica.
Una de las características más importantes del proceso Revolucionario Bolivariano es su capacidad de evolución. Allí, sin duda, reside su fortaleza y la superación de todos los procesos revolucionarios anteriores. Veamos.
Los movimientos revolucionarios nuestros no fueron más allá de las metas democráticas burguesas. Así fue cuando el derrocamiento de la dictadura de Pérez Jiménez, por esa debilidad se pierde el 23 de Enero.
El movimiento guerrillero del sesenta tenía, en esencia, las mismas metas democráticas burguesas.
La Revolución Bolivariana ha evolucionado desde los objetivos democráticos burgueses de sus inicios, hacia posiciones antiimperialistas, luego anticapitalistas, y finalmente socialistas.
No es una historia lineal: una vanguardia avanza junto al Comandante Chávez, abre caminos de ideas, supera atrasos, aprende del Libertador y tal como él hizo en su época busca lo más desarrollado del pensamiento revolucionario universal para adaptarlo a nuestra realidad. Atrás deja sectores aún aferrados a metas del pasado.
Esta es la importancia de la Revolución Bolivariana , la que la diferencia de todos los procesos anteriores: consiguió zafarse del paisaje, de la lógica burguesa y plantear la superación del sistema capitalista.
En ese camino, la realidad así lo demandaba, se funda el PSUV, como instrumento, como Partido para el Socialismo.
Inmediatamente comienza la lucha por definir su papel histórico: unos se quedan en la costumbre democrática burguesa, e intentan que sea una vieja maquinaria electoral con nuevo ropaje.
Otros, influidos por aires anarcoides, sugieren que sea un partido sin organización, etéreo, sin responsabilidades, una especie de masa amorfa, donde nadie sabe, nadie dirige. En resumen, un espectro.
Otros plantean la necesidad de crear un instrumento político para la lucha por el Socialismo.
Las patrullas serán imagen y semejanza de la idea que se tenga del partido. Nosotros creemos que el PSUV debe ser un instrumento para el Socialismo. Y de allí se desprenden las características de las patrullas. Veamos.
Las relaciones entre sus militantes deben ser prefiguración de las relaciones que proponemos para el Socialismo. Debe ser una trinchera en la lucha contra los vicios de conducta propios del capitalismo: el egoísmo, la zancadilla, la competencia, las relaciones allí deben ser fraternas, amorosas, de ayuda mutua, el triunfo de uno debe ser el triunfo de todos. Debe ser ejemplo y asombro de su entorno, constituirse en referencia por su conducta diferente. Ser miembro de una patrulla debe ser un honor y un compromiso. El militante debe ser el último a la hora de los privilegios, y el primero a la hora de los compromisos.
Las patrullas deben estar en la primera línea en el enfrentamiento con el enemigo antisocialista, contra el oligarca, su tarea principal es ligarse al pueblo para guiarlo en el combate por la defensa y la construcción del Socialismo.
¡Las Patrullas Socialistas son pueblo organizado y conciente!
¡Chávez es Socialismo!

7.9.09

EQUILIBRIO

Se nos presenta el equilibrio como sinónimo de democracia. Con la excusa del reconocimiento del otro se evade la lucha de clases. Las diferencias se falsifican como simple diferencias de estilo. La consigna reina es: “todos”. Así, Venezuela somos “todos”, Socialismo somos “todos”, la cultura somos “todos”, “todos” somos científicos, “todos” somos poetas, “todos” somos “todos”, “todos” somos iguales.
De esta manera conseguimos sembrar en la sociedad la sensación de una falsa unanimidad que esconde el pacto oligarca. Veamos.
Tomando como excusa esta búsqueda del equilibrio, se justifica que el enemigo oligarca vaya a las televisoras de la Revolución, también que los dirigentes revolucionarios vayan a los canales golpistas. Tomando como excusa el equilibrio se justifica que no se ataque a los valores oligarcas, sino a lo sumo a algún oligarca trasnochado por allí.
Y así, poquito a poquito, han sembrado la idea de que la democracia es esta convivencia de “todos”, que ahora “somos iguales”: tanto el oligarca que se apodera de las riquezas sociales, como el excluido de siempre ¿Y si todos somos iguales, por qué pelean los humildes, los excluidos? ¿Si todos buscamos el bien de la sociedad, entonces, contra quién pelean los humildes?
Siendo así, no hay razón para luchar por una nueva sociedad, lo que se impone es el pacto. De esta forma consiguen castrar al Socialismo y lo convierten en una retórica, o en un buen gobierno, que hace cosas, obras, pero no cambia a la sociedad.
¿De dónde sale la propuesta de equilibrio, a qué realidad responde, qué intereses refleja?
Este equilibrio que se nos propone todos los días, es hijo directo del híbrido que se ha venido desarrollando en lo económico. Se nos dice que el capitalismo no es malo, lo que hay son malos capitalistas, que los nuestros, los existentes, como Lorenzo el de la Polar, y los que ahora formamos, como los “empresarios socialistas” o las empresas de producción social, son buenos. Que la Propiedad Social de los medios de producción sólo es importante (por ahora) en las empresas básicas.
Esta realidad económica reclama sus correspondientes:
En lo social, una colaboración de clases que sea una manera de controlar los conflictos, de morigerar la lucha.
Y en lo político, un gobierno que se limite a administrar los intereses de la oligarquía, a transferir la Propiedad Social al campo capitalista, que se alinee con el capitalismo globalizado, en resumen, que de la espalda a los humildes y las facilidades a los oligarcas, los nuevos y los viejos.
Concluimos entonces, que el llamado equilibrio, que por lo demás es inviable porque no puede haber equilibrio entre los desposeídos y los apropiadores de la riqueza social, ese equilibrio es una inteligentísima trampa para castrar el ímpetu revolucionario.
La Revolución debe sacudirse de esta emboscada, seguir su profundización, desechar la ilusión de falsos equilibrios y falsas democracias, convencida de que la verdadera democracia, la verdadera paz y el verdadero equilibrio, sólo son posibles con la justicia Socialista.
¡Chávez es Socialismo!

6.9.09

LEJOS, MUY LEJOS

“Una importante especie biológica está en riesgo de desaparecer por la rápida y progresiva liquidación de sus condiciones naturales de vida: el hombre.
Ahora tomamos conciencia de este problema cuando casi es tarde para impedirlo.
Es necesario señalar que las sociedades de consumo son las responsables fundamentales de la atroz destrucción del medio ambiente.”
Así iniciaba Fidel su intervención en la Conferencia de Naciones Unidas sobre Medio Ambiente y Desarrollo, el 12 de Junio de 1992.
Y concluía con un llamado angustioso: “Cesen los egoísmos, cesen los hegemonismos, cesen la insensibilidad, la irresponsabilidad y el engaño. Mañana será demasiado tarde para hacer lo que debimos haber hecho hace mucho tiempo”.
Ese era el desafío dramático hace ya casi veinte años. Hoy cada vez se acerca el día del “demasiado tarde”, las condiciones adversas a la vida en el planeta aumentan cada minuto, y nos acercamos al punto de no retorno, las señales son incuestionables.
La humanidad necesita un cambio cultural de gran magnitud, la cultura capitalista no es viable, en esto coinciden casi unánimes los científicos.
Oigamos lo que dice Claus Leggewie, Director del Instituto de Estudios Culturales (Kulturwissenschaftliches Institut, KWI), de Essen, y uno de los nueve integrantes del Consejo Científico del Gobierno Federal de Alemania:
“El Norte rico no puede seguir como antes, los países industriales en ascenso deben abandonar la antigua vía a la prosperidad basada en la industria, y el resto del mundo tal vez ni siquiera pueda internarse por ella.(…) No hay indicios de que vaya a haber un cambio tan radical.”
Hoy, nadie hace nada importante, la especie humana está paralizada ante su inminente extinción, sigue imperturbable su camino a la extinción.
Para los revolucionarios, para los socialistas este es el reto principal, no hay nada más allá de la existencia de la especie. No hay mucho tiempo para salvarla. Es necesario construir, con urgencia de vida o muerte, el ejemplo que guíe al mundo.
Es aquí en Venezuela que está la posibilidad de dar ese ejemplo, esa es nuestra responsabilidad.
Pero estamos lejos, muy lejos de estar a la altura del compromiso. Pasamos los días contemplándonos el ombligo, absortos en nuestros problemas aldeanos: las elecciones, las bases, el dólar. Pasamos la vida sosteniendo la vida que nos lleva al abismo.
No somos capaces de controlar nuestro consumo, de disminuir nuestras inconciencias ni siquiera en una partícula minúscula. El despilfarro de todo nos lleva a la tumba, nos comportamos igual a casi todas las naciones, contaminamos sin medida y sin conciencia. No somos el ejemplo que necesita el mundo.
El Socialismo, cambio radical del rumbo, es vital, no se trata de una opción más, no se trata de ir poco a poco, es urgente para salvar a la humanidad.
No podemos perdernos en metas subalternas, tenemos que fundar caminos, asombrar al mundo por nuestra ética, nuestra relación armoniosa, entre nosotros y con la naturaleza. Ese es el reto: salvar a la humanidad, “lo demás no importa nada”.
¡El Socialismo es la vida!
¡Chávez es Socialismo!

5.9.09

EL SOCIALISMO DE VÍCTOR ÁLVAREZ Y EL CIM

Víctor Álvarez, Coordinador de Investigación del Centro Internacional Miranda, nos da su visión del Socialismo y desde allí despliega un análisis de la Revolución Bolivariana.
Víctor Álvarez define al Socialismo como: “un proyecto que redistribuya la renta petrolera con justicia y promueva el crecimiento de la economía real”.
Y de esta definición, propia de la ideología pequeño burguesa (y esto no es ofensa, es una ubicación política) arranca su análisis de la Revolución , no vamos a desplegar sus números, las quinientas palabras de esta columna son insuficientes, nos limitaremos a tratar sus ideas principales.
Partiendo de su definición que confina el Socialismo a lo puramente económico, a la mera distribución de la renta, solo podría salir un análisis economicista de la situación: Víctor nos habla del control de cambio, el tratamiento a los exportadores, las medidas para transformar una economía rentista en una exportadora, asegurando la ganancia razonable de los exportadores, etc.
Más adelante habla de la necesidad del híbrido capital-socialista, y postula que sólo las Empresas Básicas deben estar en manos del Estado, y aguas abajo se pueden desarrollar otras formas dudosas de “propiedad social”.
De esta manera define Víctor su Socialismo: Manejo del control de cambio y un híbrido CapitalSocialismo, que siempre han impulsado y que ahora adornan con propiedades sociales al margen del Estado.
Reduce el problema del Socialismo a un mero asunto de manejo de las variables económicas, de índices de rendimiento. No se puede esperar otra cosa de la ideología pequeño burguesa, ellos no entienden al Socialismo, no pueden entenderlo.
El Socialismo es un cambio profundo en la cultura, en la conciencia, en la espiritualidad, que reclama cambios profundos en todas las áreas de la actividad social, y sobre todo en la economía.
Ahora bien, el cambio que reclama el Socialismo en la economía es su transformación en soporte de la Conciencia del Deber Social, para así, entrelazadas, hacer posible la formación del Hombre Nuevo. De aquí que las evaluaciones económicas deben partir del beneficio a la Conciencia del Deber Social, ese es el principal parámetro del Socialismo. Recordemos que la Conciencia Revolucionaria puede crear riqueza, crear Revolución, pero la riqueza no puede crear Conciencia Revolucionaria.
Si nos entrampamos en la vía de crear “riqueza con las armas melladas del capitalismo”, si olvidamos la conciencia, en el mejor de los casos obtendremos buenos índices económicos, pero la Revolución será yugulada.
La tragedia de Víctor es que ahora le da susto los resultados económicos de la política que ellos desarrollaron desde sus puestos directivos de la economía: el Híbrido capitalsocialismo propuesto por el CIM, por Victor y por Haiman, entre otros, da como resultado esos números de avance del capitalismo que ahora, de forma deshonesta blande Víctor.
En resumen, los problemas que hoy confrontamos son imputables a la ideología pequeño burguesa que desarrolló los planes de convivencia con el capitalismo.
La batalla de los revolucionarios es por impulsar el Socialismo Verdadero, el que propone el Comandante: Propiedad Social y Conciencia Social.
¡Chávez es Socialismo!

4.9.09

IDEOLOGÍA Y RAZONES SAGRADAS

Todos los enfrentamientos que hoy vemos en la calle, en la prensa, las televisoras, etc, son en última instancia enfrentamientos de ideologías, toda batalla es reflejo de la gran contienda ideológica. Es allí en las ideologías que se decide la contienda.
La ideología, la conciencia deben ser los fundamentales armamentos de las filas revolucionarias. Sin la ideología acertada no hay victoria posible. Veamos.
El núcleo de la ideología revolucionaria es la Conciencia del Deber Social, la relación amorosa, el amor. Y este núcleo no se materializa sino es entrelazado a la Propiedad Social de los medios de producción. Del binomio conciencia y propiedad se desprende todo el entramado ideológico.
No es casual entonces que la lucha revolucionaria se escenifique en este terreno, en la propiedad y la conciencia. Sin percatarnos de esto, sin entender que es allí la batalla principal, estamos caminando inexorablemente hacia la derrota.
La Revolución debe fortalecer su núcleo ideológico, definir claramente su posición, su idea frente a la propiedad generadora de conciencia. Según como sea ese núcleo, así será la construcción de la respuesta a la ofensiva oligarca.
Si ese núcleo de ideas es confuso, con señales contradictorias, ambiguo, entonces la única respuesta que sobre él se puede construir será también confusa, contradictoria, ambigua, será débil y derrotable por la oligarquía.
Ellos acumulan sobre esa debilidad.
Al contrario, si el núcleo de ideas es claro, si ese núcleo propone la Propiedad Social de los medios generadores de conciencia, con fuerza, claridad, sin ambages, entonces se estará dando un paso importante para construir el gran cambio cultural que una Revolución supone.
El papel de la ideología es vital, ya nos decía Martí que “una idea justa desde el fondo de una cueva es capaz de derrotar a un ejército”.
La historia nos ilustra esta realidad. La Unión Soviética, perece por haber usado las armas melladas del capitalismo para construir el Socialismo, y esta confusión ya denunciada por el Che, produjo la debacle de ese Socialismo.
Cuba implantó el Sistema Presupuestario de Financiamiento, un sistema económico que tenía como centro la formación de la Conciencia del Deber Social, y sobre él pudo formar un pueblo con un alto nivel de Conciencia Revolucionaria, capaz de superar la caída del campo socialista y el asedio del imperio.
La lección es clara para nosotros, debemos afinar y reafirmar la ideología, el núcleo de ideas revolucionarias: prestigiar la Propiedad Social de los medios de producción y la Conciencia del Deber Social, sólo de allí emergerán las medidas correctas para enfrentar la ofensiva oligarca.
Esta ideología debe ser el objetivo de la formación dentro del PSUV, y debe difundirse con claridad a todo el pueblo, sólo así podremos explicarle las bases de la sociedad que queremos construir. Las nuevas relaciones amorosas, la sociedad del amor que proponemos tendrán fundamento real, dejarán de ser una ilusión, una utopía. Así, dotaremos a la masa de razones sagradas por las cuales luchar.
¡Chávez es Socialismo!

3.9.09

LA PESTE OLIGARCA

Estamos sumergidos en una guerra implacable, que sin duda es planetaria, contra nosotros el imperio mueve sus tentáculos en cualquier lugar, aparece con facilidad en Bariloche, pero también en España, planifica marchas mundiales, y construye bases en Colombia.
Esta guerra es especial, se trata de una guerra de cuarta generación, donde la información, la manipulación mediática, la mentira, son armas de primer orden, más que la disputa de territorio se disputa el alma de los pueblos.
Toda guerra necesita organismos de dirección, es más, su éxito depende en gran medida de la capacidad de esas direcciones, nacionales y regionales.
No es pensable el éxito sin direcciones imbuidas de una causa justa, y con ideas certeras. En la confrontación la iniciativa estratégica dependerá de la buena acción de esas direcciones.
Podemos decir que pueblo sin dirección no se libera.
En Venezuela, el campo revolucionario ha padecido una peste egoísta oligarca, una infiltración de ideas distraccionistas difusoras de la inutilidad de una dirección, la combaten. Nos inocularon la idea de: “pueblo sin dirección tiene poder, pueblo con dirección no tiene poder” de esta manera condenan a la masa a la derrota inevitable.
La historia es clara, cuando un pueblo se levanta sin dirección irremediablemente es derrotado. La iniciativa del combate la lleva el bando que tenga dirección, puede planificar acciones ofensivas y defensivas, puede retirarse en orden, tener paciencia, etc.
Así pasó el 27 de febrero: aquel pueblo salió a la calle y fue derrotado, las causas las encontramos en la deserción de sus direcciones políticas infectadas con la peste egoísta oligarca, el pueblo a la deriva no supo construir objetivos políticos, no supo replegarse, toda aquella energía social se perdió en derrota.
La guerra nos exige construir direcciones nacionales y regionales capaces de ser identificadas por la masa, de seguirlas con confianza. Direcciones conductoras en el combate contra el enemigo oligarca.
Tenemos una gran ventaja: las direcciones se forman alrededor de un líder, nosotros ya tenemos ese líder, alrededor de él formemos las direcciones que hacen falta, reforcemos las que tenemos.
El peligro mayor, el enemigo a derrotar en esta etapa es la peste egoísta oligarca, obstáculo para comprender la necesidad de la dirección, la niega a todos los niveles.
Es necesario estudiar a fondo las raíces de esta peste oligarca para combatirla.
Esta peste tiene su origen en la ideología de las clases individualistas, las que se ganan la vida de manera aislada, individualista, egoísta. Por razones de su existencia solitaria no entienden la necesidad de la organización, de la dirección. Su contabilidad personal es muy precaria, se limita a su entorno, a su pequeño mundo.
Por supuesto que esta ideología es enemiga del Socialismo, de todo lo que intente sacar al hombre de su condena a vivir en su rincón miserable.
Es necesario derrotar la peste egoísta oligarca, a las ideas antiorganización y antidirección, esto es imprescindible para construir un pueblo capaz de las grandes batallas que se avecinan.
¡Socialismo es organización y dirección!
¡Chávez es Socialismo!

2.9.09

¡SOCIALISTAS DEL SUR UNÍOS!

Las oligarquías del continente presentan divergencias internas, siempre será así, recordemos la esencia de egoísmo y competencia del sistema, pero esas divergencias se desvanecerán cuando vean al sistema capitalista en peligro, en ese momento se impondrán sus intereses estratégicos y todos se unirán en contra del peligro que las acecha.
Están bien los esfuerzos unitarios que se hacen en el continente, es correcto moverse en las grietas de las pugnas inter oligárquicas.
La independencia siempre buscó esas grietas, las trabajó con maestría, los ingleses jugaron con astucia en la geopolítica de aquellos tiempos, la Legión Británica es muestra de esas diligencias, pero también la Guayana Británica y Trinidad.
No obstante, la estrategia principal de los socialistas debe ser la unidad de los socialistas, ella debe ser el principal apoyo internacional de cualquier movimiento revolucionario en el continente. La posibilidad de esa unidad debe preservarse siempre. Las oligarquías saben de la fuerza de los pueblos unidos, por eso se espantan frente a ella, tratan de impedirla, la sabotean.
Las oligarquías preparan manifestaciones mundiales en contra de la Revolución Bolivariana , todos sus medios de deformación se confabulan contra ella, prueba de su entendimiento de la calidad internacional de la lucha contra los intentos socialistas. Nosotros debemos también darle carácter internacional a la tarea revolucionaria.
Debemos trabajar con intensidad la unidad de UNASUR, pero también con igual o mayor intensidad la unidad de los movimientos socialistas y progresistas del continente, construir ámbitos de encuentro.
Podríamos convocar un encuentro de amistad y de discusión de los trabajadores socialistas petroleros del continente, de los educadores, los campesinos, también convocar un encuentro de amistad y de discusión de los movimientos socialistas de la ALBA. Serían los primeros pasos hacia los ámbitos de encuentro más permanentes.
Quizá a un tribunal socialista de los pueblos, que juzgue la permanencia de las bases gringas.
La reunión de Bariloche es el primer paso de un enfrentamiento que tiene tendencia a profundizarse, a definir los campos. Las oligarquías harán una Entente en contra del Socialismo, de eso no debe dudar nadie, su cinismo y su crueldad llegará a niveles comparables con las mayores atrocidades cometidas en el mundo.
Ahora construyen la justificación a la infamia, las interpretaciones que hacen de Bariloche dan idea de su enajenación, hay voceros oligarcas que escriben en los editoriales de sus periódicos: “fuera de toda duda, las bases son colombianas, no norteamericanas”. De estos se puede esperar cualquier cosa.
En Bariloche quedó claro que el Socialismo o es internacional o no es viable. O enciende los corazones de los pueblos humildes de la América , o no es viable.
En Bariloche quedó claro que esta Revolución tiene un gran compromiso con la humanidad, no podemos fallar, la pérdida de esta esperanza significa el triunfo de lo más abyecto de la humanidad. Vendrán días de profundización de la miseria espiritual y material. En esa reunión se asomó una pequeña muestra de la bestialidad oligarca cuando de defender sus intereses se trata.
¡Chávez es Socialismo!

1.9.09

¡YANQUIS GO HOME! ¡BIENVENIDO SOCIALISMO!

Las dos consignas del título se entrelazan, se complementan, resumen una estrategia revolucionaria para el continente.
¡Yanquis go home! De manera aislada es una política de Liberación Nacional, supone la existencia de una burguesía nacionalista, o la formación de ella. En esta época de alto desarrollo del capitalismo es una pretensión absurda.
¡Bienvenido Socialismo! De manera aislada condensa una política de Socialismo, ignorante de la geopolítica. En esta fase de reacomodo capitalista mundial, de deslizamiento de los centros de poder económico, no reconocer los peligros internacionales de la construcción socialista es una ingenuidad, un camino cierto a la derrota.
En los días que corren no hay manera de ser antiimperialista sin ser Socialista, y no hay forma de ser Socialista sin enfrentarse tarde o temprano con el imperio capitalista mundial.
Con estas ideas analizaremos la Reunión de Presidentes en Bariloche para estudiar las bases militares en Colombia.
Lo primero que debemos destacar son las palabras del Comandante Chávez: “La discusión fue franca y cruda –por momentos crispada- porque existen inocultables divergencias ideológicas que son de fondo. Y con esas divergencias tenemos que lidiar en función del mantenimiento y la consolidación de la unidad latino americana.”
Los detalles de la reunión todos los conocemos: Uribe cínico, Correa dirigiendo la discusión, el Comandante inmenso en su autocontrol y duro en su denuncia, Lula guabina, Evo durísimo y filoso, Cristina tan bella cuanto inteligente, Bachelet gris, Alan García taimado, Tavaré aburrido, Lugo lejano.
Ahora bien, esa es la superficie del fenómeno. Tratemos de ahondar en las ideologías que se enfrentaban en Bariloche, de esa manera nos explicaremos los sucesos de ese día y podremos sacar conclusiones de las tareas internacionales de los revolucionarios.
Lo que allí se discutía, en el fondo es un enfrentamiento entre el capitalismo y el Socialismo. Las bases son parte de una ofensiva contra el Socialismo, es alrededor de este eje que se agrupan las diversas posiciones. Veamos.
Uribe cumple su papel de ariete de la embestida imperial, defiende los intereses de la oligarquía colombiana fuertemente ligada a la suerte del imperio, aterrorizada por el avance de un planteamiento antioligarca en el continente capaz de proporcionar un rumbo exitoso a su disidencia.
Los presidentes de la ALBA , jugando cuadro cerrado en defensa de la posibilidad socialista que asoma en la América.
Cristina llegando lo más lejos que le permite la tradición oligarca nacionalista heredada y su terror a los cambios profundos, su necesidad de no avanzar hacia reformas sociales de fondo.
Lula, siempre ambiguo, disfrazado de sesudo, de izquierda sensata, defendiendo los intereses de los capitalistas brasileños, y aprovechando la disidencia continental para presentarse, frente al imperio, como el gran morigerador del continente.
Chávez, develando las intenciones imperiales, defendiendo la esperanza.
Entre estas corrientes transcurrió el evento, fue un primer escarceo, no se tocó fondo, tarde o temprano el conflicto principal, Socialismo enfrentado al Capitalismo, se agudizará, entonces habrá nuevos reagrupamientos. Desde ahora debemos afinar nuestra estrategia: ¡Socialistas del Continente Uníos!
¡Chávez es Socialismo!

31.8.09

CARACAS Y MAGALLANES

¿En qué se diferencian dos equipos de béisbol? Digamos que las diferencias son de grados, no son diferencias de fondo, se diferencian en la superficie pero se igualan en la estructura, uno no refuta al otro, forman parte del mismo esquema, están en el mismo juego, son iguales.
Esta reflexión nos vino a la mente cuando intentábamos buscar las diferencias entre Bolivarianos y la oposición capitalista. El punto es muy importante, de la profundidad de las diferencias que tengamos depende la marcha de esta Revolución. Veamos.
Si decimos que no tenemos diferencias, que somos como Caracas y Magallanes, diferentes pero iguales, rivales pero unidos por la pelota y, por supuesto, todos jugando el mismo juego, entonces la Revolución es una “cuestión de estilo”, de “puntos de vista diferentes”, de “matices”, pero nada de fondo.
Así podríamos coincidir, ponernos de acuerdo en un término medio, ni chicha ni limonada, ni Socialismo maximalista ni capitalismo salvaje, debemos buscar una especie de socialcapitalismo “aceptado por todos”. El resultado de esta atenuación de las diferencias es la inexorable debilidad del camino revolucionario, si somos tan iguales ¿para qué luchar?
El resultado de ese debilitamiento de la Revolución es el triunfo de la restauración y el recrudecimiento de los problemas sociales que el capitalismo no puede resolver, al contrario, los potencia. Y aquí caben las palabras del Comandante, no habrá paz porque no habrá justicia.
En contraste, si reconocemos las profundas diferencias que tenemos con los oligarcas y los neoligarcas, estaremos dotándonos de razones sagradas por las cuales luchar. Veamos.
Los revolucionarios postulamos la integración de la sociedad, que el individuo recupere su conciencia de pertenencia a la sociedad, el convencimiento de que su suerte está ligada a la suerte de la sociedad, y la sociedad se ocupa de la suerte de cada uno de sus miembros.
Ellos postulan que la suerte del individuo no depende de la suerte de la sociedad, sino de su esfuerzo egoísta, que cada individuo debe procurarse su propio bienestar sin importarle la suerte de la sociedad. Los revolucionarios postulamos que el centro de nuestra actividad es el hombre en sociedad. Ellos postulan que el centro es el lucro del hombre individual.
Los revolucionarios postulamos que la medida de todo es el bienestar social, si beneficia a la sociedad, entonces beneficia a sus miembros y es ético. Ellos postulan que la medida de todas las cosas es el lucro, si da lucro es ético, aun perjudicando a la sociedad.
Nosotros postulamos la hegemonía de la Propiedad Social de los medios de producción, administrada por un Estado que vele por la integración de la sociedad y el individuo. Ellos postulan la hegemonía de la propiedad nosocial de los medios de producción, con un Estado débil que únicamente se ocupe de la vigilancia de sus intereses.
No creamos en pajaritos, no somos Caracas y Magallanes, los capitalistas siempre verán a los Socialistas como enemigos a muerte, y con su fascismo nos seguirán atacando.
¡Ellos son capitalistas, nosotros somos Socialistas!
¡Socialismo no es capitalismo!
¡Chávez es Socialismo!

30.8.09

EL DÍA DEL REGRESO

Imaginamos una madrugada cuando el sol salga más temprano para acompañar el regreso del Libertador. Vendrá a caballo, blanco como el del Escudo, cubierto con una capa roja, alegre. Se detendrá en una colina y allí, en lo alto, con el frío de la mañana esperará la respuesta de su pueblo.
Es así: son tiempos cuando los grandes hombres regresan y esperan las decisiones de su gente.
Vivimos tiempos de crisis y las crisis son revolucionarias, y también son reaccionarias. Momentos para el avance luminoso, o para el retroceso tenebroso. El rumbo ya depende de los pueblos, ahora los grandes hombres lo han dicho todo, lo han hecho todo, sólo les queda esperar.
De nosotros depende si El Libertador regresa a su lamento colombiano, o vuelve a los caminos del corazón y la acción de su Continente. El espera en lo alto la señal de su cuna.
Es aquí en Caracas, en Venezuela, donde está la esperanza. El enemigo lo sabe y mueve sus fuerzas contra la posibilidad de rebelión de los dominados. Las bases militares son prueba del miedo imperial y de nuestros pasos justos. El desasosiego de la oligarquía vendepatria es indicio de nuestro buen camino.
Ellos son energúmenos cuando sienten luz, y hoy salen a la calle poseídos por el demonio, el odio los habita, es señal de su disposición definitoria.
Vivimos tiempos de crisis, de definición, de bienvenida a los próceres o de volver a las selvas.
El enemigo es sabio, astuto, embaucador, nos hace espejismos, nos extravía en la ciénaga de las mil excusas, nos debilita para dar el zarpazo. Evitemos repetir el engaño, no podemos permitir el abuso de nuestra credulidad. Los tiempos de longaniza no pueden repetirse, no retrocederemos a San Pedro Alejandrino.
En esta batalla final, definitoria, donde se decide el futuro, no tiene cabida la duda. Los indecisos son carne de oligarca, los del medio no tienen aliento cuando se disputa el futuro humano.
Se disputa el alma de los pueblos, todos los esfuerzos llevan ese signo. Las televisoras, periódicos enemigos, están decididos en su trinchera, allí ni una letra es inocente, todo es fuego infame contra la Revolución y el Comandante de la camisa roja.
El enemigo oligarca no nos da paz ni cuartel, no pierde oportunidad de lanzar piedras, ni los foros explicativos son dispensados, allá van los oligarcas, contra todo rayo de redención, bien vestidos, pero insatisfechos, movidos por el odio, grises en la uniformidad del tinte y de las gafas.
Nosotros, todas las palabras, el verbo, nuestras televisoras, periódicos, deben estar firmes en la trinchera correcta, sin dudas, sin darle a la oligarquía ni “tantico así”.
El pueblo espera por la guía de los líderes, nuestros programas, mensajes, señales, deben armar al pueblo para la decisión, presagio de amanecer temprano. No hay cabida para la conciliación porque trae confusión, y la confusión en época de guerra es suicidio.
¡Chávez es Socialismo!

29.8.09

CONCIENCIA Y ECONOMÍA

La relación conciencia y economía es vital para una Revolución. De la solución dependerá el destino del proceso. Es importantísimo discutir esta relación, una equivocación aquí es fatal. Estudiemos el asunto.
Cuando alguien de aquí adentro quiere hablar mal del Socialismo, se refiere a la experiencia Soviética y desde allí descalifica a todo el Socialismo, y a todos los intentos por construirlo. De esta manera privan a la humanidad de la experiencia del camino de la construcción del único mundo viable, el mundo socialista. En el fondo no son socialistas pero no se atreven a decirlo, lo atacan sinuosamente.
Nunca se preguntan ¿por qué Cuba resistió aquella debacle, por qué en Cuba a pesar de todas las dificultades el Socialismo existe?
La respuesta está en una correcta solución de la relación Conciencia-Economía. Veamos.
Los soviéticos plantearon la hegemonía de la economía sobre la conciencia, así una buena economía era suficiente para garantizar la marcha de aquel proceso. La economía formaría espontáneamente la conciencia revolucionaria.
Guiados por esta idea crearon el llamado Cálculo Económico, denominado por el Che autogestión. En este sistema cada fábrica era una unidad económica de funcionamiento aislado, con su presupuesto, capacidad de crédito, etc. En este Cálculo Económico el estímulo material era la palanca principal, y la mercancía su centro.
De esta manera, cada fábrica se constituyó en un foco de egoísmo, el intercambio entre estas fábricas socialistas era intercambio de mercancías, cada una pujaba para el beneficio de su unidad.
Ya sabemos como terminó la Unión Soviética.
El Che se enfrentó temprano a esta concepción soviética de la economía, y los cubanos plantearon la conciencia revolucionaria como lo fundamental en un proceso revolucionario. La conciencia revolucionaria puede producir riquezas, pero a partir de las riquezas no se puede formar conciencia revolucionaria.
Los cubanos implantaron el Sistema Presupuestario de Financiamiento: más allá de un concepto económico es una visión global de la Revolución. Postula la transición de capitalismo a Socialismo como un hecho conciente, es la Conciencia del Deber Social el pilar fundamental del Socialismo. Por tanto, todas las acciones económicas deben tener como objetivo crear condiciones a la formación de esta conciencia.
En este Sistema Presupuestario, las fábricas, según su rama, forman parte de un gran consolidado, entre ellas no hay intercambio de mercancías, funcionan como una sola empresa cuyas unidades intercambian productos. El estímulo moral es lo principal, y el estímulo material tiende a extinguirse.
El Sistema Presupuestario de Financiamiento, defendido con extraordinaria valentía intelectual por el Che, y a pesar de los obstáculos para su implementación, tuvo y tiene gran importancia en la formación de la asombrosa Conciencia Revolucionaria del pueblo de Cuba, un factor determinante en la resistencia de la humanidad frente al imperio capitalista.
La polémica entre las dos maneras de organizar la economía socialista, y sus consecuencias prácticas son una valiosa experiencia a ser aprovechada por la Revolución Bolivariana. Allí hay un rumbo para resolver la vital relación Conciencia-Economía.
¡Chávez es Socialismo!

28.8.09

GUERRA Y MISILES MEDIÁTICOS

La potencia de los misiles mediáticos, la capacidad destructora en un enfrentamiento, difícilmente se puede exagerar.
Han llegado a tal grado de perfección que son capaces de construir una realidad paralela que modelan y conducen a su conveniencia. Con pequeñas excepciones controlan la vida política del planeta. Veamos.
En USA los mediáticos de guerra manipulan a la opinión pública, convirtiendo al Presidente Obama en objetivo de fanáticos y lunáticos: No le perdonan ser negro y que en muchas ocasiones no marche con la suficiente celeridad al lado de las águilas y sus crueldades. Mucha gente importante en el mundo teme que se esté caminando hacia un magnicidio en ese país.
Ya sabemos de las quejas del mismo Obama por las campañas deformadoras de ciertas cadenas mediáticas de su país. El perro mordiendo al amo, los medios se erigen como un poder diabólico.
Aquí los medios de deformación se han transformado en verdaderos Misiles Mediáticos, son auténticas Armas de Guerra.
Ahora mismo, en estos días, están desplegando una campaña militar de guerra de cuarta generación contra nuestra Revolución, la ofensiva merece estudio.
La campaña tiene varías vertientes:
Vertiente uno: Transformar en “realidad” la ficción de la pérdida de popularidad del Comandante, esta vertiente cuenta con la ayuda de columnistas, noticias de televisión, mensajes subliminales, etc.
Vertiente dos: Que se desprende de la primera, se intenta crear la idea del desespero del gobierno, de que ya está caído, que hay estampida, que los días están contados.
Vertiente tres: Es continuidad de las dos primeras, se acaricia la idea del magnicidio, ésta se difunde por variados medios.
Vertiente cuatro: Se imputa al Gobierno Revolucionario de estar provocando una guerra con Colombia, cuando el agresor es el gobierno gringo y el instrumento es Colombia. Venezuela lo único que hace es intentar defenderse de la agresión que reconocen la mayoría de los países del continente.
Esto sin nombrar la campaña sistemática contra todos los pasos que da el gobierno: toda ley es impugnada, todo movimiento obstaculizado, se difunde miedo, se alarma constantemente. El fuego mediático es cruzado.
No hay dudas: los medios son ariete, misiles y fuerza principal en la guerra de cuarta generación que hoy sufrimos.
Están creando una ficción que justifique la fabricación de un zarpazo contra la Revolución, son, sin duda, artillería en la ofensiva contra la Revolución Bolivariana.
Ante esta agresión que ya alcanza niveles de desenlace…
¿Qué hacer?
A la par de tomar las medidas directas a los medios que infringen la ley, debemos afinar la acción de nuestros medios de información, es necesario participar con brío en la batalla mediática, transmitir el mensaje de la Revolución, refutar las mentiras, y sobre todo formar a la población, darle instrumentos y argumentos para que pueda descifrar la manipulación.
Todos debemos asumir la labor de nuestros medios como una participación en la batalla mediática, los trabajadores de esos medios son guerreros de primera fila, y así se deben comportar y sentir.
¡Chávez es Socialismo!

27.8.09

LOS PRIVILEGIOS QUE DEFIENDEN

Un sistema social de explotación se sustenta en una fuerte diferenciación de clases, y esta separación de clases tendrá su soporte principal en la valorización espiritual de los dominadores y la desvalorización de los dominados.
De esta manera, los dominadores serán los elegidos para conducir, los que tienen la capacidad, el conocimiento, pero sobre todo la textura espiritual superior.
Y los dominados, serán inferiores, no aptos para gobernar, no aprenden, no tienen conocimientos, ni la pinta, ni la genética necesaria para superarse, tienen una textura espiritual inferior, el cielo no está destinado para ellos, y aquí en la tierra deben ser sumisos, se justifica explotarlos, eso es natural.
Así están organizados todos los sistemas de explotación: los esclavos eran considerados un poco más que animales, se discutía si tenían alma. Los siervos lo mismo. A los indios se les podía matar, se exterminaron sin ningún sentimiento de culpa, eran algo similar a un animal, a un búfalo.
En nuestra era, aunque con una gran dosis de hipocresía, existe este mismo esquema: hay unos “superiores” que vienen desde la colonia siendo “superiores”, son los que alguien con acierto llamó los “amos del valle”, son los oligarcas, sus apellidos son conocidos, sus privilegios exquisitos, su sangre es azul. Son aquellos que se justifican diciendo: “especulamos pero creamos empleo”, lo que equivale a decir “Sin nosotros esto no funciona”.
Frente a estos oligarcas existen unos que sufren el despojo de esta “casta superior”, que para defender sus privilegios asesinó a Bolívar, a Zamora, Fabricio, son los excluidos, los obreros y trabajadores, los campesinos.
En el medio, la clase media, con vanidad de oligarcas y la tragedia de no serlo.
Con la llegada de la Revolución Bolivariana cambió el paisaje, la Revolución devolvió la dignidad, el amor a los despojados, les dijo: “ustedes son seres humanos con las mismas capacidades que cualquiera, la Revolución les dará las mismas posibilidades de desarrollar esas capacidades”.
Esa es la esencia de una Revolución, acabar con los privilegios y dar igual oportunidad de desarrollo a todos.
Pero al hacer esto choca con el principal pilar de la dominación, con su espiritualidad, derrumba el mito de que la existencia de amos y esclavos es natural.
Al chocar con la espiritualidad de la dominación, activa mecanismos inconcientes, es allí en el alma donde se arraiga la justificación de la dominación. Por eso, más tolera un dominador que le quiten sus bienes materiales a que lo priven de su estructura psíquica de “ser superior”. Es así que los monárquicos desplazados de Europa vivían en buhardillas, pero conservando los mismos modales del castillo, con el mismo desprecio por los humildes.
Así se explica el odio de los oligarcas y sus aliados de la clase media contra Chávez y la Revolución , no toleran la pérdida de sus privilegios espirituales, de su superioridad, no toleran que ahora todos sean amados, no hay desprecio, ahora no se justifica explotar a nadie.
Con la espiritualidad oligarca hemos topado, la batalla es definitiva.
¡Chávez es Socialismo!

26.8.09

IDEOLOGÍA Y RAZONES SAGRADAS

Todos los enfrentamientos que hoy vemos en la calle, en la prensa, las televisoras, etc, son en última instancia enfrentamientos de ideologías, toda batalla es reflejo de la gran contienda ideológica. Es allí en las ideologías que se decide la contienda.
La ideología, la conciencia deben ser los fundamentales armamentos de las filas revolucionarias. Sin la ideología acertada no hay victoria posible. Veamos.
El núcleo de la ideología revolucionaria es la Conciencia del Deber Social, la relación amorosa, el amor. Y este núcleo no se materializa sino es entrelazado a la Propiedad Social de los medios de producción. Del binomio conciencia y propiedad se desprende todo el entramado ideológico.
No es casual entonces que la lucha revolucionaria se escenifique en este terreno, en la propiedad y la conciencia. Sin percatarnos de esto, sin entender que es allí la batalla principal, estamos caminando inexorablemente hacia la derrota.
La Revolución debe fortalecer su núcleo ideológico, definir claramente su posición, su idea frente a la propiedad generadora de conciencia. Según como sea ese núcleo, así será la construcción de la respuesta a la ofensiva oligarca.
Si ese núcleo de ideas es confuso, con señales contradictorias, ambiguo, entonces la única respuesta que sobre él se puede construir será también confusa, contradictoria, ambigua, será débil y derrotable por la oligarquía.
Ellos acumulan sobre esa debilidad.
Al contrario, si el núcleo de ideas es claro, si ese núcleo propone la Propiedad Social de los medios generadores de conciencia, con fuerza, claridad, sin ambages, entonces se estará dando un paso importante para construir el gran cambio cultural que una Revolución supone.
El papel de la ideología es vital, ya nos decía Martí que “una idea justa desde el fondo de una cueva es capaz de derrotar a un ejército”.
La historia nos ilustra esta realidad. La Unión Soviética, perece por haber usado las armas melladas del capitalismo para construir el Socialismo, y esta confusión ya denunciada por el Che, produjo la debacle de ese Socialismo.
Cuba implantó el Sistema Presupuestario de Financiamiento, un sistema económico que tenía como centro la formación de la Conciencia del Deber Social, y sobre él pudo formar un pueblo con un alto nivel de conciencia revolucionaria, capaz de superar la caída del campo socialista y el asedio del imperio.
La lección es clara para nosotros, debemos afinar y reafirmar la ideología, el núcleo de ideas revolucionarias: prestigiar la Propiedad Social de los medios de producción y la Conciencia del Deber Social, sólo de allí emergerán las medidas correctas para enfrentar la ofensiva oligarca.
Esta ideología debe ser el objetivo de la formación dentro del PSUV, y debe difundirse con claridad a todo el pueblo, sólo así podremos explicarle las bases de la sociedad que queremos construir. Las nuevas relaciones amorosas, la sociedad del amor que proponemos tendrán fundamento real, dejarán de ser una ilusión, una utopía. Así, dotaremos a la masa de razones sagradas por las cuales luchar.
¡Chávez es Socialismo!

25.8.09

LA RESPUESTA

El sábado 22 de agosto alrededor de la barrera que cruzaba la avenida Libertador se manifestó con claridad el momento que vivimos.
A los lados de la valla estaban los bandos en pugna. Uno, los seguidores de la oligarquía desarrollando su inteligente plan, del otro, el Estado Revolucionario, y a dos kilómetros la masa bolivariana y sus dirigentes.
Todo ocurrió como si de un libreto se tratara: la valla frágil, fue violada, el Estado respondió con gas, los manifestantes jugaron la candelita, y los medios de deformación desarrollaron su novela, en el exterior se afianza la imagen de dictadura.
Conclusión: todavía la Revolución no encuentra la respuesta, no desata el nudo.
La oligarquía acumula fuerza para un zarpazo, se amparan en la Constitución y las leyes para luego asesinarlas tal como hicieron en abril. Se protegen tras la legalidad para romperla. Y la legalidad hasta ahora ha sido inútil para detenerlos, avanzan con descaro frente a nuestras propias narices.
Los líderes oligarcas prometen a su masa enloquecida, sedienta, hematófaga que llegarán a la Asamblea y a Miraflores, usan un hábil doble sentido: puede ser con elecciones o violando la legalidad. Siguen desarrollando su plan de “desobediencia civil”, de desacato, de creación de un poder paralelo. Y nosotros inermes esperamos, contemplamos.
¿Cuál es la Respuesta de los Revolucionarios?
Lo primero es entender que el centro del enfrentamiento no es la Ley de Educación, esta sólo es un excusa, el verdadero objetivo es el Comandante y la Revolución Bolivariana , la quieren acabar, y para eso despliegan un plan astuto que comprende desde las bases militares en Colombia, hasta los paramilitares infiltrados, y por supuesto acumular gente en la calle con cualquier excusa. Es allí que debemos poner el énfasis de nuestra respuesta política: se trata de la defensa de la Revolución y del Comandante, eso es lo que está en juego. De esto debemos informar bien al pueblo para que no pase lo de la Reforma o las elecciones regionales. Que nadie se confunda.
La respuesta de los revolucionarios debe tener dos vertientes que se complementan y se potencian mutuamente.
Una, la respuesta fuerte del Estado, lo que no significa represión desmedida, debe ser una respuesta inteligente, por ejemplo, activar contra ellos el 350 por violación de la Constitución y claras intenciones de derogarla como en abril, allí en la calle hay mucha declaración que los imputa. La Revolución debe defenderse.
La otra, la respuesta del pueblo bolivariano: debemos decretar emergencia organizativa y formativa de los bolivarianos, no podemos actuar en esto con la parsimonia de la sana paz. Es necesario informar, organizar y movilizar al pueblo, esa es la única manera de dar una respuesta a la ofensiva oligarca.
Movilizar significa, el pueblo en la calle alrededor del objetivo político principal, la defensa del Comandante y de la Revolución. Alegre y combativo, dispuesto, con razones sagradas por las cuales luchar, apasionado en la defensa de su futuro.
Es urgente derrotar las ideologías que impiden movilizarnos, educarnos, organizarnos.
¡Chávez es Socialismo!

24.8.09

LA ZONA SOCIALISTA EN REVOLUCIÓN PACÍFICA

Una Revolución, que es en definitiva una confrontación, una guerra, supone posiciones, territorios, frentes, flancos, retaguardia, líneas de suministro, etc. Cuando la Revolución es violenta, estos elementos son claros, bien definidos, tienen sus leyes, se estudian desde hace milenios.
No es así con la Revolución Pacífica, ésta tiene sus propias características, sus propias leyes, la gran mayoría aún por descubrirse. Podríamos decir que la Revolución Pacífica es inédita: en ella nos movemos, tenemos que avanzar y descubrir simultáneamente sus determinaciones, esto por supuesto requiere pensamiento, estudio, razonamiento, rigor.
Algo avanzamos desde el empeño de averiguar las leyes que rigen a nuestra Revolución pacífica y ponerlas a nuestro favor: sabemos la función de los medios como cañones enemigos, detectamos la existencia de ciclos con una fase “democrática”, que les sirve a los oligarcas para entrar en una fase violenta, presentimos que el ciclo final nos llevará a un enfrentamiento que será muy cruento.
Estamos en un punto de madurez en el que es necesario delimitar los teatros de operaciones, los campos de la confrontación.
Lo primero es entender que la Revolución Pacífica es una guerra, en ella hay dos enemigos irreconciliables, el capitalismo y el Socialismo, que se enfrentan en condiciones especiales. Veamos.
En una primera fase de ese enfrentamiento, se lleva a cabo una guerra no declarada, no convencional, y podemos decir, parafraseando a Von Clausewitz, que en este caso “la política es la guerra expresada por otros medios”. La segunda fase, el desenlace, puede adquirir características más convencionales.
En la nueva expresión de la guerra, los conceptos militares cambian, los frentes, los teatros, las posiciones, flancos, líneas, etc., adquieren otras características, son inéditas.
¿A quién enfrentamos, dónde está el enemigo?
Los campos están poco definidos. Geográficamente la situación es marmorosa, presenta manchas y vetas dispersas. En lo económico la situación es similar, se entremezclan las “colinas”. En lo político se mezclan las posiciones de los dos bandos.
¿Cuál es el objetivo militar-político, cuál es la Zona Socialista?
Se deduce que en la Zona lo determinante, lo decisivo, no es lo geográfico, lo político, lo económico, esos son componentes, pero no la definen.
Lo que determina, lo que da carácter a la Zona Socialista, lo que la hace perdurable, es sin duda la Conciencia del Deber Social, la Conciencia Socialista.
La Zona Socialista está delimitada por el nivel de conciencia, por el espíritu. Entonces sus frentes de batalla van desde el interior individual, hasta la batalla armada abierta, todos estos frentes tienen como objetivo conquistar la Conciencia, el alma de la sociedad y de los individuos.
El objetivo militar, en este caso, es el aniquilamiento del espíritu capitalista y la instauración de la Conciencia Socialista. Las Zonas Capitalistas y Socialistas se delimitan en la Conciencia.
Por supuesto que la Zona Socialista tiene base material, fundamento político, planteamiento militar, forma de organización, etc., pero todo esto se entrelaza con el determinante que es la conciencia.
¡Chávez es Socialismo!